Partida Rol por web

Conversaciones durante el ascenso a los Picos del Mundo.

Avanzar durante todo el día cargando con los fardos no era tan arduo como los entrenamientos a los que se había sometido los días anteriores, pero caminar portando todo el equipamiento, tampoco era como un paseo. El campo había empezado a perder su estampa invernal, pero allí a donde se dirigían las espesas nieves y los helados vientos les esperaban con los brazos abiertos.

"A partir de aquí vamos a empezar a avanzar más despacio...la nieve se está empezando a espesar y apenas queda luz como para poder asegurar el perímetro."

Nono miró a su alrededor en busca de un lugar idóneo en el que poder acampar al grupo. A medio kilómetro más adelante había dos árboles, uno árbol caido y otro a su lado, aún en pie aunque igualmente muerto.

"Podríamos montar un buen lugar entre esos dos...además es posible que encontremos algo de madera seca en ese árbol muerto."

Nono hizo un gesto a la compañía con las manos para indicarles "acampar", y señaló en la dirección. Un par de horas después la compañía se arrebujaba alrededor de una hoguera de un diámetro de tamaño, que se encontraba resguardada por sendos áboles.

-...Vigilar, mirar, abrir la...marcha cansa, nos cansa a Nono...y a mi, osea...a mi los dos...ambos. Haré la primera guardia y...Necesito...descansar antes...de volver a empezar...todos, pero yo sí.

Nono subío al árbol que aún quedaba en pie. No era una torre de vigía, pero permitia poder mirar alrededor con mayor perspectiva, y la luz de la hoguera no le generaba tanta confusión a la hora de detectar ovimientos en los alrededores. El tronco se curvaba de manera muy atractiva para su espalda, y se podía permitir otear la zona mientras su espalda reposaba, cansada de cargar todo el día.

-Rolan...¿Por...qué es tan importante...son, sí lo son...claro, todos...pero ese...ese...es el que interesa. Tan especial...esos...o ese...árbol?, ¿Qué...hace, que propiedades...contiene?...

Rolan se acercó al árbol y se sentó bajo él, apoyando la espalda en su tronco...

¿El Perennus dices?, Pues verás Nono, la savia de ese árbol tiene propiedades especiales, digamos que propiedades regenerativas para el cuerpo, claro está, que primero debe tratarse correctamente. Aunque  mis conocimientos de alquimia son un poco escasos todavía, espero ir  mejorando a lo largo del viaje. Ojearé el libro mas tarde  por si pone algo  sobre la poción, aunque lo dudo mucho. Por cierto Nono, me gustaría que me hicieses un favor... dice mientras saca de su mochila un bulto envuelto en trapos, al desenvolver el bulto se muestra el craneo del oso contra el que se enfrentarón en su anterior expedición, el craneo había sido limpiado por el propio Rolan durante los días que pasaron en Anaar, de debajo del craneo saca un mechón de pelos cortos y gruesos atados con una cuerda, los pocos que habia podido reunir de lo que quedaba en la cabeza del animal. No entiendo bien a tu "Madre" y sus capacidades, pero me gustaría que también lo protegiese a él, dice tendiendole el mechón de pelo de oso.

 saca un mechón de pelos cortos y gruesos atados con una cuerda, los pocos que habia podido reunir de lo que quedaba en la cabeza del animal. No entiendo bien a tu "Madre" y sus capacidades, pero me gustaría que también lo protegiese a él, dice tendiendole el mechón de pelo de oso.

Toda esta penuria entre la nieve por un árbol y el otro pidiendo que le cuide sabe quien sea esa "Madre" el cráneo de un oso... Yo cada día entiendo menos. Con lo bien que se está en los salones de un castillo por mugriento que sea. Joder, quien me mandaría a mi. Maldice Sigmus entre dientes una vez dejadas sus cosas al lado del árbol caído y alegandose unos metros del improvisado campamento para realizar sus ejercicios de entrenamiento diarios "Como decía el viejo Ben "por mal que haya ido el día, por jodida que este la cosa no hay que perder la practica de entrenar, puede marcar la diferencia al día siguiente entre morir o matar". Casi prefiero morir que este absurdo viaje. En fin, a ver si por lo menos me despaja" Mientras comienza a realizar estiramientos y dar estocadas al aire como si estuviese peleando contra un caballero imaginario

Nono se quedó perplejo y mudo ante el peculiar ofrecimiento de Rolan le hacía. Miraba fijamente el mechón de pelo, con esa característica mirada expectante, como esperando que el mechón empezase a hacer algo por si mismo.

"Ha dicho que...cuide de de el...ello...¿ambos?...no se que es o que son, pero por la Madre que son...es.... igual de raro que yo, o Nex...¿y si...la Madre me está diciendo algo...? Quizás es una prueba de la Madre...hay...hay más gente más allá de la hermandad que no tuvieron mi suerte...Quizás...quizás la Madre quiere que este sea mi...¿objetivo...meta...sentido?. Rolan...¿cree en...la Madre? Me ofrece su pelo, entiende el ritual, cree en ella si conocer las palabras del padre... ¿Qué quieres de mi Madre? ¿Quieres que cuide de los descarriados, los olvidados,los parias...como tú lo haces de mi? ¿Así como el padre nos ha enseñado?...Si eso es lo que quieres, así sea, y pagaré mi deuda como hacemos todos. La Madre cuida y el Padre protege.

- Rolan...ella, La Madre...me ha hablado, sin hablarme, pero...así lo...hace ella...bueno, ellos...ambos lo hacen, pero...sin la palabra, pero con palabras...osea...sí. Sí Rolan, La Madre...cuidará... cuidaráde ti y de él...y...de ambos, yo...Nono y yo, osea yo...cuidaré de que la Madre cuide de vosotros, como vosotros...ambos... cuidais de mi y de Nono, de los tres....bueno...dos, yo de ella y vosotros de nosotros...dos...a dos.

Nono coge el mechón de pelo y lo observa, como el joyero observa ensimismado un diamante en bruto al que hay que sacarle todo tu potencial. Se lo acerca mucho a los ojos, para poder evaluar el grosor, el tamaño...lo huele...se relame como concentrado en él. Tras unos largos segundos de silencio y ensimismamiento, Nono vuelve a girar su cabeza y mira fijamente a Rolan...-Así se hará.- Y guarda con mucho cuidado el mechón en su faltriquera.

Más tarde cuando su guardia acabó, como el niño que disfruta de sus regalos en las fiestas, Nono sacó sus herramientas de sastrería para incluir uno de los pelos, elegido y seleccionado de entre todos los pretendientes. El pelo era grueso, más de a lo que estaba acostubrado, pero Nono lo disfrutaba aún más, pues de dejaba entrelazar de forma firme alrededor de su amuleto y sellaba al resto con fuerza alrededor del frío metal.

Aquella noche Nono durmió profundamente. Descansó como no descansaba desde que salió de la hermandad.

Nex llega detrás de Sigmus, caminando con su característico bastón de metal con pomo de cabeza de dragón. Detrás de él llega Klauss, el homúnculo esquelético que había creado Válgueras unas horas atrás. La pequeña criatura llevaba todo el viaje cargando con la mochila de Nex, tarareando y bailando hasta que Nex se para y le indica con el dedo el árbol donde Nono propone acampar.

- ¿Mastah? ...¡Mastah, mastah! - grita excitado Klauss mientras corre hacia el árbol y empieza a dejar con mucho cuidado los bártulos de su maestro.

Nex contempla la escena entre Nono y Rolan, pero escucha a Sigmus y le responde:

- Llevas todo el viaje quejándote, Sigmus... ¿Acaso no disfrutas de nuestra compañía? - dice Nex con un tono bromista - Sé las razones de tu compañero Válgueras para unirse a nuestro viaje, pero ¿cuál es tu motivo para venir?

Klauss deja el equipaje de Nex con cuidado al lado de este y va a reunirse con Pax. Parece que el resto de homúnculos no le tiene mucho afecto al pobre niño esqueleto con espina bífida, pero a Pax le cae bien. Pax se sienta en el suelo, aunque más que sentarse se desparrama, como un hito de rocas de los que se usan para señalizar los caminos de montaña. Al poco, empieza su característico canturreo, parecido al sonido que hace una ocarina de arcilla, pero mucho más profundo. Klauss, feliz, baila al son de la proto-canción de Pax, levantando los brazos y saltando de un pie a otro.

La hora de la cena había llegado. Estaban sosas, pero el calor de la hoguera compensaba y con creces sus cuerpos cansados, sus estómagos vaciós y sus frías comidas. Todavía quedaba un rato para que el campamento cerrase el ojo y el primer vijía, Nono, empezase su ronda. uestro pequeño héroe aún no se fiaba del todo de aquellos dos nuevos individuos, pero él sabía que quisiera o no, iba a tener que depositar parte de su confianza en aquellos dos tipos, pues a donde iban no iba a ser fácil sobrevivir de manera independiente. Todos se necesitaban los unos a los otros.

Nono observaba con fascinación a aquellas complejas i deformes criaturas que rodeaban al pintoresco grupo. Rocas cantarinas, cadáveres que bailan, demonios parlantes...todo un espectáculo digno de cualquier gran circo de los horrores. Nono los observaba atentamente a cada uno con mezcla de fascinación y desconfianza. Si se revelaban, más valía estar preparado, pues no sabía de que podían ser capaces aquellos pequeños seres.

-Válgueras...¿Cómo?...¿Cómo es...esto?...Como es...son...pero..."pero qué...pero cómo"...¿Quienes son?

Válgueras había pasado todo el camino en silencio. No estaba acostumbrado a las largas marchas. El frió que le entraba por los pies le incomodaba y le ponía de mal humor.

Válgueras empieza a ser consciente que un grupo así, debe de estar acostumbrado a enfrentarse a peligros los cuales el solo conoce de los libros. Válgueras piensa en que debe hacer cuando la situación se complique, en como como  ser útil en combate con su poca experiencia.

Al llegar a los árboles ordena a los homúnculos que le acomoden un sitio para descansar sin nieve ni humedad, "Necesito quitarme este frío de dentro". Estando en sus pensamientos ve acercarse a Nono. Válgueras no se ha atrevido a cruzar con Nono tres frases seguidas. Su personalidad le incomoda, no sabe cómo actuar. "A ratos se comporta como un niño tímido y a ratos juraría que está imaginando como degollar me". 

Escucha con atención la pregunta de Nono y contesta:

- Bueno, imagino que te refieres a mis homúnculos. Pues verás estos entrañables seres son creaciones mías. Mi magia me permite crear objetos, cosas e incluso seres con vida. Todos ellos tienen su pequeño cometido para servirme a mi... y al grupo claro. No tienes porqué asustarte de ellos no son ninguna amenaza y....., Aunque lo fueran estoy seguro de que no serían rival para ti.

Pero como te digo están aquí para ayudarnos. Podrían hacer turnos para vigilar, eso sí no me fiaría mucho de la percepción de esos dos -señalando a Klauss y Pax- Bensom Valas y Claw son mucho mas prácticos para esta función. -Válgueras llama a los tres un un silbidosilbido- Claw! Valas! Bensom! Quiero que vigileis los alrededores del asentamiento. Y si alguien os pide ayuda debéis dársela!-​​​​​​-Volviendo a mirar a Nono-Asi que ya sabes, los tienes a tu servicio si te hicieran falta. Eso si, me temo que yo soy el único que los entiende... Jejeje

El pequeño lobo y el cuervo están jugando a pillarse cuando Válgueras les llama. Se ve como Bensom lanza dentelladas al aire como con intención de atrapar al cuervo, pero con mucho cuidado de no acertarle. El cuervo por su parte, que podría alcanzar los 50 metros de altura con facilidad, vuela a ras de suelo permitiendo al lobo perseguirle.

Valas por su parte se encuentra volando frente a la hoguera lanzando dentelladas a las lenguas de fuego que sobresalen mas de lo debido de la hoguera. Está comiendo un ratoncillo que ha debido cazar él o alguno de los otros, disfrutando de la piel, las patas y la cola mucho más que con la carne.

Cuando el Creador les llama los tres acuden al instante y se ponen a la tarea de inmediato. Las ordenes de Válgueras parecen ser una especie de Dogma para ellos.

¿Todo el viaje quejándome Nex? En ningún momento he hecho eso, solo remarco que sois un grupo de lo más variopinto y peculiar. ¡¡Y por Abel!! Que no me lo puedes negar. Contesta Sigmus haciendo un pequeño alto camino del lugar que había elegido a unos metros de la fogata lo suficientemente despejado como para no golpear a nadie, pero no ser privado de la luz de la fogata. Ahora si me disculpas tengo que realizar mis entrenamientos diarios. Mientras prosigue su camino.

Ah ¿Y el motivo de mi viaje Nex? Que nunca abandono a un amigo ante el peligro. Dice volviendo la cabeza hacia Nex con una mirada de desconfianza y una mueca socarrona

Nex saca una pícara sonrisa al escuchar la estúpida respuesta de Sigmus "Sigue haciéndote el valiente, amigo... disfrutaré de tu sangre cuando mueras". Se gira y presta atención a la conversación entre Válgueras y Nono.

Tras la pérdida de Nono, el descubrimiento de que la extraña criatura parece ser una creación de Sol Negro y la incorporación del extraño kurshistaní a la compañía el grupo aprovecha sus descansos nocturnos en territorio hostil para estrechar lazos y tratar de conocerse mejor.

Después de ayudar a montar y ocultar la tienda, Belistar se veía visiblemente cansado y abatido. La muerte de un compañero de viaje y entrenamientos es siempre un mal trago. A pesar de todo la vida sigue y debemos seguir con la rutina. El entrenamiento nos mantendrá con la mente centrada. Belistar incica a Varamyr que es momento de entrenar. Al princípio Varamyr se muestra tacirturno:

- Hoy haremos algo especial. Lo honraremos empleandonos con el mismo afán con el que el lo hacía.

Varamyr con visible esfuerzo siguió a Belistar.

Al acercarse Belistar para setarse alrededor del fuego, observa que Khasim está en el extremo contrário a Nex. No lo puedo culpar. Nex resulta muy inquietante y tratar de firmar el pacto nada mas conocerse no ha ayudado mucho. Que menos que presentarse e invitarle a una fuerte bebida. Jejeje. Belistar se dirige a sentarse al lado de Khasim. Khasim le hace señas para que se siente a su lado. Creo que haremos buenas migas

- Khasim, tengo curiosidad. No logro reconocer tus orígenes y estilo de lucha, pero me resultan familiares. ¿Que nos puedes contar de tí?

Nex ve a Belistar sentarse al lado de Khasim. Sigmus también se encuentra a ese lado, brindando una amenazante mirada al hechicero entre las llamas de la hoguera, el cual responde con una sonrisa mientras corta su ración de comida con la misma daga con la que se autolesionó unas horas atrás.

Se gira hacia Válgueras, que está sentado a su lado:

- Y dime, Válgueras, si encontramos el castillo... ¿Qué crees que encontraremos? O mejor dicho... ¿Qué quieres que encontremos? Según las leyendas, la mansión de Hringham está llena de riquezas de todo tipo...

Valgueras estaba sumido en sus pensamientos "Esta claro que la cosa va en serio. Quizas me precipité a la hora abandonar el taller... En fin, no hay vuelta atrás. Además estas rodeado experimentados aventureros... locos, pero valientes"

La pregunta de Nex pilló a Valgueras por sorpresa. Evidentemente él habia pensado en las posibilidades de encontrar en el castillo algun tesoro que le ayudase a avanzar un su busqueda de poder. Y sabia que si alguien conocia los posibles tesoros que ahi aguardaban... ese era Nex. Él y su preciado libro. Asi que no se andó con rodeos.

-Bueno Nex, siendo honesto estaria agradecido de poder conseguir cualquier objeto mágico que me ayudara a ser mas util. Ya sabes, no todos podemos "sostenernos" con esa facilidad dijo mirando el bastón de Nex Pero quizas tu podrias ilustrarme sobre las posibles recompensas. Si, tu y tu fantastico "diario". Siendo un lugar magico que viaja entre planos temporales... quien sabe quizas sea mi dia de suerte conluyó mientras extendia el brazo y observaba como Slimo salia de dentro de su manga y se paraba en la palma de su mano mirandolo a los ojos