Partida Rol por web

El Retorno al Templo del Mal Elemental.

Parte 1: Hommlet y sus alrededores.

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21/10/2010, 21:41
Director

A diez leguas al sur de la ciudad de Verbobonc entre las colinas Kron, al este de las montañas Lortmil y justo al oeste del Bosque nudoso existe una pequeña agrupación de casas con una historia larga y oscura. Esta insignificante aldea llamada Hommlet fue testigo del crecimiento del que fuera uno de los mayores centros de corrupción que el mundo haya conocido: el Templo del mal elemental.
Hommlet es una villa pequeña con una población que no llega al millar de habitantes. Doce años atrás no era más que un villorrio con un centenar de habitantes, aunque éstos se referían a él como a una villa. Desde entonces ha experimentado una paz y prosperidad sin precedentes.
A diferencia de otros sitios, no está gobernado por un alcalde o un consejo, sino que lo gobiernan dos aventureros retirados y la verdad es que mucha gente no quiere que nada cambie. La mayoría de los habitantes ven a los dos hombres como los "ancianos" del pueblo, dándoles el respeto que se han ganado con los años. Algunos refunfuñan cuando es el momento de pagar los impuestos, aunque la mayoría aprecian la protección de sus soldados y el papel que tuvieron en la caída del Templo del mal elemental original (y las amenazas que desde entonces han superado para defender el pueblo).
En una villa de este tamaño normalmente no se puede encontrar nada que comprar que cueste más de 800 po. Existen excepciones y por supuesto que, por ejemplo, la iglesia de S. Cuthbert puede tener una armadura completa extra para vender a los valientes héroes que luchan contra el mal, aunque estas excepciones suelen ser raras.
Ante todo hay que decir que Hommlet es un lugar agradable y pacífico. Sus gentes están seguras, bien alimentadas y contentas de su suene. Sin embargo permanecen alerta, porque su bienestar ya ha sido amenazado varias veces en el pasado. Sus habitantes y más concretamente la gente que ya hace muchos años que vive allí ven con interés las idas y venidas de los extranjeros sospechosos y tienen siempre un ojo puesto sobre la Barbacana del foso y el templo de donde el mal se ha alzado no una, sino dos veces a lo largo de los años.

Aquí comienza vuestra aventura, estais a la entrada de la Villa de Hommlet.

 

 

 

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25/10/2010, 01:02
Shafir

Fue un largo viaje, invocados por la carta del familiar de Brannagh. Un grupo de aventureros variopintos llegaba a las puertas de una villa perdida, pero hermosa. Hommlet se mostraba humilde y lozana con sus casas sencillas, pero de no muy antigua construcción, su trasiego de gente y su ambiente provinciano. Parecía una villa cualquiera, aunque agradable, mas sólo era en apariencia así.

Queridos amigos, estamos a las puertas de una pequeña ciudad muy importante. Podéis imaginar el jaleo de los extranjeros deambulando por sus calles hace sólo unas generaciones? Cuando no habíamos ni nacido la mayoría, aquí se pudieron ver a los y las valientes que lucharon en el Templo del Mal Elemental. Esa gente no debía ser consciente de su importancia para la historia, amigos míos. Aaah, no es emocionante? Quizá alguien de aquí recuerde a alguno de esos héroes. Cuantos conocimientos arcanos habrán circulado de mano en mano al son de las monedas? Cuantos magos poderosos aprendieron los secretos más oscuros de la magia, los más ocultos o los más poderosos el alguna habitación de una taberna o en compañía de lugareños para los que la magia no era más que un elemento de los cuentos infantiles? Se siente el sabor, amigos, el olor incluso, de las grandes hazañas y los grandes héroes. Dijo el mago Shafir, mirando hacia arriba, a los muros y murallas cercanos a las puertas de la entrada. De pronto pisó algo más blando que el firme suelo. Una boñiga de mula, caballo o quizá una vaca se encontraba custodiando los maravillosos secretos con los que soñaba aquel hombre de entonación un tanto pedante para las costumbres locales.

Oh, jejeje, creo que también huele a otra cosa, compañeros. Hemos empezado con buen pie.

 

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25/10/2010, 11:10
Samuel de Kord

Samuel miró con el interes justo al pueblo. Si habian viajado hasta aqui, era solo por insistencia del erroneamente orientado Brannagh. Pero en fin, ya llevaban un tiempo juntos y le habia pedido ayuda, y no podia negarlo. Ante las palabras emocionadas del mago, el Kordita enarcó una ceja, más no dijo nada. El sureño siempre andaba pensando en sus estudios, algo efimero en el mejor de los casos, mientras ponia en peligro su alma, algo imperecedero, a menos que fueras un falso o un ateo, en cuyo caso podia no ser tan imperecedera.

El clérigo, dejó de tirar de Margarita al ver como Shafir pisaba una buena plasta, y sonrió ligeramente. Animo compañero, eso trae buena suerte, y Kord de suerte sabe mucho. Quizas deberias elevar una plegaria a su voluntad para asegurarte de que su mano no decante la balanza de la suerte en tu contra.

Y despues de la plegaria deberias tomar un baño, y yo - dijo golpeandose el peto con el guantelete - también.

Brannagh hermano, ¿te parece si vas a ver a tu primo y los demas te esperamos tomando algo de comer y un buen baño?

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25/10/2010, 14:41
Aelin

Me colgué nuevamente la mochila a la espalda, en este ultimo tramo de viaje ya no sabía como ponermela, no pensé que esto quedase tan lejos de donde estábamos (realmente no sabía si habían pasado días o solo horas, pero se me había hecho interminable el camino)

"Genial ¡Hemos llegado!" dije con una amplia sonrisa "Por fín podré comprar bojetos, y un caballo, y recargar mis garfios para la ballesta, y mis flechas..." me iba haciendo una lista apuntando con mis dedos cuántas cosas quería comprar...

"Espera espera...¿qué había dicho al principio? ummm ah si caballos...oh no ponis! si eso sería perfecto..." en mis pensamientos me hallaba cuando shafir hizo que un olor subiera a mi nariz.

"Puaj" dije arrugando la nariz "Estoy completamente de acuerdo en que os ducheis..." dije con aire decidico para entrar en la ciudad...

Tanta gente a mi alrededor me impresionaba, debía descubrir todo y mis ojos no paraban de dar vueltas... Era descubrir un nuevo mundo para mí.

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25/10/2010, 19:26
Magnus Siannodell

La incomodidad de la urbe se podia sentir a varias millas antes de llegar. Solo un pensamiento me hacia reacio a entrar en cualquier recinto poblado, abandonar a Fenrir. La ultima vez que entre con el en una ciudad o similar casi pierde una pierna alguien...

Una vez a las puertas, se acercaba la despedida. - Es solo un hasta luego Susurraba al lobo mientras con una mirada triste me respondia "No tardes". El pelaje del animal era suave, frondoso, siempre habia sido una fuente de calor muy apreciada para mi. Con una ligera palmada en el lomo, el lobo salio corriendo seguramente a molestar a cualquer ardilla. Hacia mucho que no jugabamos. Sin embargo verlo alejandose no me hizo ninguna gracia. Aun no lo habia entrenado lo suficiente para que no se metiera en problemas, aunque si para que los demas tuvieran problemas si se encontraban con el.

Rapidamente mi semblante cambio de triste a ligeramente sonriente cuando vi a mi compañero Shafir hundiendo sus pies en una frondosa boñiga. Fue divertido. - Lo tuyo es meter la pata hasta el fondo eh Shafir, jaja Con una sonrisa y una palmada en la espalda amiga reimos la hazaña del dia, mientras lo ayudaba a limpiarse las suelas sin caerse. Me pregunto si nuestras aventuras nos guiarian a todos juntos a nuestro destino. Vi a un mago ansioso de poder, con todo lo que ello conlleve, vi a una elfa mas preocupada por irse de compras; me recordaba a las damas de la corte , para bien y para mal; y a un clerigo intentando convertirnos a primera hora de la mañana. Sin duda no hay mejor grupo que en el que estoy...

 

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26/10/2010, 01:01
Brannagh

Había costado pero al final ahí la teníamos. Hommlet. Las pequeñas casas que habían visto tantas cosas se alzaban en la colina cubierta de árboles para asegurarse la sombra durante el verano, invitándonos a llegar hasta ellas y descansar tras un largo viaje. Y entre ellas debía encontrarse el templo de San Cuthbert donde debía buscar a Tarcil, pero deberíamos entrar a la villa y preguntar por el, dado que desde esta distancia resultaba imposible advinar cual de las construcciónes se encontraba consagrada al dios del justo castigo.

- Ningún problema, recogeré a Tarcil y os veré en la posada.

Respondo a Samuel ignorando el incidente que había sufrido Shafir a modo de bienvenida, pero se lo tenía bien merecido por divagar en lugar de mirar por donde deja caer sus pies. El detalle de que aún no habíamos elegido ninguna posada era algo también menor que pronto se vería solucionado al igual que los problemas que nos traían a tan lejana aldea.

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26/10/2010, 01:49
Shafir

Sus compañeros, como no, aprovecharon la circunstancia para añadir una muestra de humor a costa del mago.

La solución mágica para todo eran plegarias al cielo, según Samuel. O al menos así creía Shafir que pensaba el clérigo.

Para Bocob, el estudio es la mejor forma de orarle. Pero si me ha bendecido Kord, tiene una forma muy particular de hacerlo.

Jejeje, peores cosas he pisado, pero ninguna tan hospitalaria.

Sonriente su amigo Magnus se ofreció a ayudarle a liberarse del pestazo.

Gracias amigo, no te preocupes, ya me ocupo, Con un palo y el mismo suelo a la orilla del camino podré limpiarme. No quisiera que el aroma de mis pies llegue antes que yo mismo a donde me dirija. Jejeje.

Aelin, si no te molesta mi aroma, te acompañaré. Quizá debería encontrar alguna poción. Aunque si hubiera alguien que venda pergaminos, sería ideal. Preguntaremos por ahí. Maese Samuel tiene razón: deberíamos alojarnos y luego de ahí dejar que suenen las trompetas a desbandada.

Mientras se marchaba Bran, le digo:

Señor Brannagh, búsquenos en la mejor posada. Y si no estamos allí es que no nos llegó la bolsa.

Shafir no solía hablarle así, pero le hacía gracia provocar un poco al grandullón, tan serio y solemne. Hablarle diferente (de usted) era una forma de ironizar de la falta de humor que tenía a veces. Le recordaba un poco a su antiguo maestro. Tan práctico y eficiente, pero tan rígido como si tuviera una funda para su bastón en el trasero. Tenía que mirarse la mano donde lo portaba porque creía que se lo había enfundado su maestro cuando caminaba, que con los años, mostraba un andar particular y anquilosado. Aunque Bran era mucho más osado y tolerante que su maestro, a veces no podía entender su afán por el orden y las normas.

Notas de juego

Bueno, Shafir, es caótico, no se lo tengáis en cuenta. xDD

Magnus no debería de tener un avatar para su lobo?

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26/10/2010, 08:50
Samuel de Kord

El clérigo de Kord, con la maza golpeando contra los costados de su armadura, escudo a la espalda y espadón en mano, se acerca al primer transeunte que se encuentra.

Saludos compadre. Soy Samuel, representante en la tierra de nuestro protector y benefactor el ilustre y grandioso Kord. Estoy seguro de que lo alabas en alguna ocasión de tu dia, cada dia. No lo dudo. Tengo muchisimas ganas de tener una agradable conversación contigo sobre sus virtudes, aunque estoy seguro de que ahora mismo tienes tiempo, y estarás ansioso de departir sobre ello, mis obligaciones religiosas me impelen a tomar un buen baño antes de ello, para no ofender su nombre con mi suciedad. Estoy completamente convencido que sabrás indicarme donde encontrar una buena taberna. O una mala, no importa mientras mis compañeros y yo podamos ducharnos y tomar algo. Y en cuanto este listo, mi compañero Brannagh, sacerdote de Wee Jas, tu, y yo mismo, podremos discutir largo y tendido sobre religión.

El clérigo tomó aire antes de seguir con su perorata, sin dejar hablar al pobre campesino, y seguro de que , con tal de librarse de la charla, les indicaria, e incluso, les guiaria el mismo, hasta la posada.

Aunque entre tu y yo - dijo mientras echaba una mano cubierta de metal por encima del hombro del campesino - no creo que Wee Jas te sea de utilidad hasta dentro de un buen tiempo - rezo por ello - mientras que seguro que ves las posibles ventajas de que Kord te ayude en tu dia a dia, otorgandote sus favores, ayudandote a mantenerte fuerte. ¿No es cierto compadre?. Y conste que no pongo en duda los valores de otros dioses, jamas. ¿A que te dedicas? Asi podremos ir entrando en materia...

Las palabras del clérigo seguian saliendo de su boca. Si era por el, esta noche habria otro converso de Kord, y sobre todo, les llevarian a la posada sin dilaciones.

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26/10/2010, 21:12
Aelin

 

           Me alegra Shafir que quieras acompañarme en mis compras... La verdad nunca pensé que alguien como tú querría acompañar a una pícara como yo a algo tan imprevisible como ir de compras, porque ¿sabes? tengo mi gran lista de cosas, ¿quieres que te la diga? oh bueno pero de todas formas quizá se me ocurra algo nuevo... ummm te imaginas no se... algo extraño, curioso... um que huela... pero bien eh nada de oler como nosotros, aunque si oliera mal...

Me agarré al brazo de Shafir con toda confianza, como si nos conociésemos de décadas... vamos por esto se podría decir que jamás desconfiaría de mi.

Cuando iba hablando con Shafir me di cuenta de que Samuel nos estaba buscando alojamiento...

          Oh bueno, a poder ser buena eh, lo del precio que no importe dije con una sonrísa propia de una pícara en mi cara siempre le podemos decir a...emmm Magnus por ejemplo que nos invite, le veo con cara de buena persona digo mientras hago un gesto con mis ojos (un guiño).

A todo esto me he soltado del brazo de Shafir con lo que le estaba diciendo para ir a agarrarme al brazo de Samuel

Un poco fresco el contácto con tanto metal, no se para qué lo quiere pienso (he intuido que tienes una armadura puesta)

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26/10/2010, 21:38
Pueblerino

El hombre se queda un poco asustado al ver llegar al clerigo y empezar a largar casi sin coger respiración, empieza Ha asentir a todo lo que Samuel dice aunque practicamente no se ha enterado de nada si de que estaba buscando una lugar para descansar - Estoo.... si tiene usted razon, bueno yo... me dedico al campo señor. - dice con voz entrecortada a todo lo que dice Samuel - La verdad que la posada de la que mejor se habla por Hommlet es La Bienvenida de la moza y no se encuentra muy lejos de aquí - dijo este el cual te explica como llegar la posada.

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26/10/2010, 21:36
Magnus Siannodell

Una pequeña sombra en el horizonte adornaba de una forma tenebrosa la ciudad. Esa por lo menos era mi interpretacion del aura que predominaba. No obstante mis compañeros ya se decidian a encaminarse cada uno a un lugar determinado, y ademas a arrastrarme a mi con ellos. No solo acompañarlos, sino pagar. Agarre rapidamente la bolsa del cinto donde guardaba el oro asegurandome de que los ahorros un seguian donde estaban.

-Me dare una vuelta por ahi, ya sabeis reconocer el terreno es mi oficio. Con un guiño me despedia del grupo con el que posteriormente pretendia encontrarme. Una vez comence a andar mis pasos se movian solos mientras mi mente analizaba y memorizaba los lugares por los que pasaba. Gentes, oficios, rutinas todo la informacion que pudiera recabar sobre aquel lugar.

 

 

 

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27/10/2010, 01:41
Brannagh

Se respiraba demasiada alegría en el ambiente sin justificación alguna a mi parecer, porque ¿tenía algo de divertido pisar un escremento? ¿o ir a tirar el dinero sin motivo alguno? Evidentemente, sólo estaban buscando una forma de escapar de los problemas a los que nos ibamos a enfrentar.

- Gracias.

Agradezco al hombre la indicación pese a que no parezco contribuir a que se relaje, si no más bien al contrario, por lo que decido despedirme del resto para dirigirme a la iglesia en buscar de Tarcil.

- Os veré allí.

Les digo antes de perderme en las calles de la villa en busca de alguien menos asustado al que preguntarle donde exactamente se encuentra el templo de San Cuthbert

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27/10/2010, 02:43
Shafir

Aelin juguetona se acercó al mago alegre como una muchacha inocente. Por un momento, el olor de su accidente dejaba de tener importancia en sus sentidos cuando el brazo arqueado, la cadera cimbreante y el muslo torneado de la pícara se unían brevemente a la piel tras la túnica del Shafir. La respiración se detuvo y tal vez el corazón un momento dejó de latir, justo la eternidad que se le hizo al sabio en conocimientos y novato en experiencias mundanas. Apenas entendió algo de lo que decía la muchacha. Siguió su camino como un baile hipnótico y Aelin se acercó al bueno de Samuel.

Ahhgh! Volvió el aire a sus pulmones de golpe y sus sentidos percibieron de nuevo el ruido de los pájaros de la mañana, los niños jugando, el relincho de una mula, el calor del sol y la luz del día. En ese momento pareció que lo que había sido eterno, se esfumaba demasiado rápido en realidad. El corazón se desbocaba, el sudor le cubría la espalda y las manos, y una palabra quería salir pero sólo fue viento.

Shuuuss...

Es.. estaré encantado de acompañarte, compañera Aelin. Podríamos dejar los trastos en la posada que menciona el pueblerino de las vestiduras de noble marqués o conde. Debe ser día de fiesta, que todos van con sus mejores galas. No deberíamos ir con estas ropas de viaje si todos lucen engalanados. Aunque cualquier cosa que te pongas no puede compararse con tu belleza, por supuesto.

Así, cortés y atento, se encaminó hacia la posada en compañía de los que no se desbandaron por Hommlet, por lo que no temía más que encontrárselos al doblar cada esquina porque era una ciudad de pequeñas dimensiones.

Hasta pronto, amigos míos. Echaros de menos es un ejercicio de disciplina para mí. Jejeje.

 

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27/10/2010, 07:45
Samuel de Kord

AAAaaaahhhh. Agricultor.

Samuel asiente y sonrie, buen terreno de cultivo.

Pues bien, razón de mas me das, compadre, para que eleves plegarias a mi santo señor Kord.

Samuel se dirigia hacia la posada, sin soltar el hombro del agricultor, hablando continuamente con el, insistiendole en las bonanzas de Kord.

Dime mi buen amigo, ¿no es cierto que necesitas la fuerza que se consigue trabajando a diaro, para poder seguir dia a dia en el duro trabajo del campo? ¿No es menos cierto, acaso, que siempre necesitas una pizca de suerte para evitar que las plagas o el mal tiempo te arruine las cosechas?

No niego la influencia de la diosa de las cosechas, cuyo nombre no pronuncio por respeto. ¿Pero no crees, hermano campesino, que deberias levantar un pequeño altar a Kord en tus tierras? Yo podria ayudarte a bendecir y consagrar el altar. Creo que con un pequeño sacrificio de caracter ritual cada semana, Kord veria con buenos ojos tus terrenos. Imagina si te mira mal.

Mira, ahi esta la posada. Mi buen amigo, piensate mi oferta. Me podras encontrar aqui si me buscas.

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28/10/2010, 13:53
Magnus Siannodell
Sólo para el director

Mis agiles piernas me proporcionaron esa mañana un paseo agradable por la pequeña ciudad de Homlet. Todo cuanto veia parecia tan tipico de un lugar como ese. Nada en especial. La gente solo presenciaba sus rutinas, solo estaban pendientes de si mismos. Poco o ningun caso era el que me hacian, algo de lo cual estaba bastante agradecido.

Una de las cualidades de mi pueblo es la calidez con la que se recibe a los forasteros, sobre todo si es en tu hogar y sobre todo con una buena conversacion, algo que habia echado en falta desde que permaneci tanto tiempo en la infraoscuridad. La soledad a veces puede ser mas afilada que una espada...

Mis oidos estaban pendientes de los crujidos del suelo, los tintineos de los objetos que colgaban en las tiendas, los cuchicheos de las mujeres que revelaban secretos a la velocidad que un dragon destruye con su aliento, las brabuconadas de los correspondientes maridos que se enaltecian proporcionalmente al numero de elegantes mujeres que se les acercaban. No tardo mucho mi curiosidad y mi capacidad diplomatica, poco frecuente y casi un defecto de mi profesion, en surgir de mis entrañas. Los niños correteaban y jugaban como si fuera lo unico que hacian, y era un sentimiento que recordo la fatalidad en tiempos pasados.

Pronto me acerque a un lugar muy concurrido, una especie de mercado, alli se podia escuchar cualquier cosa, ademas de las noticias que algunos bardos se encargaban de difundir. Poco a poco alli iba recabando lo que podia. Aquello que resultaba extraño se lo preguntaba a los aldeanos que escuchaban y comentaban, salvo por la brusquedad y la falta de modales de algunos.

Termine mi visita en una especie de biblioteca cercana. El conocimiento se hacia patente, pese al moderado y pobre estado del lugar. Alli se presentaba el archivero, con el que entable conversacion rapidamente.

- Saludos, buen hombre. Soy un joven viajero y he venido a parar a vuestra bella ciudad. Sentia curiosidad y pense que podriais ayudarme en mi curiosidad viajera. Que deberia saber acerca de tan loado paraje? Con unos ojos alegres y ansiosos espere la

- Tiradas (1)
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29/10/2010, 11:33
Elmo

- Saludos viajeros, Soy Elmo, capitán de la milicia y encargado de la seguridad de este pueblo, como habras comprobado o podrás comprobar, este es un pueblo bastante tranquilo, y todo eso es gracias a que siempre estamos vigiliando un sitio y otro para evitar los problemas que puedan provocarse. La verdad es que no me interesa mucho lo que ocurre fuera de estos lares. Aunque es verdad que hay rumores, acerca de la Barbarcana del Foso, de unos ladrones, o un culto que se yo - dice este con aire de no importarle absolutamente nada todo esto - Si quiere descansar la mejor posada es la de "La bienvenida de la Moza,  aunque tambien esta la competencia la posada "Terriga" es de clase baja, mas barata pero no te la recomiendo. En el pueblo también hay sitio importantes, como son el Templo de Pelor, del cual esta al mando Yether el agudo, un pequeño templo de Elhona que lo lleva Jennithar Rhengold, un semielfa con el pelo dorado, la iglesia de San Cunbert, donde la Canonesa Y'dey es la figura mayor, Las figuras de la utoridad de esta filla son Rufus y Burne, si quieres hablar con ellos deberias poder encontrarlo en sus casas o en la posada. A veces se reune allí donde dejan a un lado un poco los asustos de la Villa. Yo suelo unirme a ellos. - Elmo se gira y empieza a darte señales de donde se encuentran las cosas. - Si le puedo ayudar en algo mas? - le pregunta este Magnus.

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29/10/2010, 12:16
Magnus Siannodell
Sólo para el director

Mire de reojo el cielo y el ambiente. -Aun falta para que anochezca, tengo tiempo para una ultima visita. Segui escuchando con atencion. Parecia mentira que un humano de un lugar tan aparentemente mediocre fuese tan amable y de gran conversacion.

- Le agradezco de veras su amabilidad buen hombre, marcho en paz, si tiene problemas, mis hojas le serviran si lo precisa. Es de bien ser agradecido, y tras mi oferta incline levemente como despedida. Toda esa informacion me resultaba de gran ayuda, si es que era cierta...

Mis pasos ahora se veian guiados por algo mas "divino". Me encamine derecho hasta el templo de Elhonna, debia calmar mi conciencia y contemplar con ojos vidriosos una de las casas de La Madre.

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02/11/2010, 22:09
Magnus Siannodell
Sólo para el director

Sali contento, alegre, en paz, dispuesto a reunirme con mis amigos y tomar descanso completo ese dia. No obstante, el paso ligero que alcanzaban mis pasos, graciles, esbeltos, de paso largo, repetitivos y calculados, iban tornandose de un lentos, descoordinados, sin predeterminar. Un pensamiento rondaba mi cabeza. - Es extraño que un capitan de milicia encargado de la seguridad, sepa de rumores acerca de ladrones o de una posible secta y no le importe en absoluto...

Como si de una preocupacion personal se tratara, una pequeña obligacion iba acrecentandose en mi corazon. - Podria investigar. Tomada la decision, incluso antes de darme cuenta, los pasos que antes eran mas lentos giraron de repente para cambiar de direccion. Nada mejor para enterarse de los rumores sobre los bajos fondos, que en los bajos fondos. La taberna de la que me hablo el capitan que no me recomendaba para hospedarme iba a ser un lujoso lugar desde el cual hostigar informacion. De todas formas, pretendia ir con pies de plomo, me encontraba solo y ninguno de mis compañeros sabia donde estaba. No debia exponerme.

 

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04/11/2010, 13:25
Magnus Siannodell
Sólo para el director

Sali casi a hurtadillas dejando caer mi sombra en el entreluz que asomaba por la puerta. Olisquee de nuevo el aire algo mas puro y menos cargado de vomitos y malta que cargaba el ambiente dentro de aaquel putrido lugar. Ahora mi destino se distinguiria por algo mas de ... glamur. O eso esperaba, ademas de echarme algo a la tripa, que comenzaba a rugir de manera violenta, descansar, y ver a mis amigos. La posada de la moza era ahora mi destino.

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08/11/2010, 09:15
Director

Tras salir de la posada, lograis que uno de los pueblerino os indique la situacion de un viejo mercado y disponeis a dirijiros allí.