Partida Rol por web

Daño Gael: 7

Daño LAver: 4

Ahora que sienten como llueven las piedras, se dan cuenta de al menos 8 de estas criaturas que, desde los arbustos y bajo los arboles, lanzan piedras desde 2 lados distintos del camino.

A la sombra, y cubiertos del sol por el follaje y la hora del atardecer, se ven armados con sendas hondas de cuero y dagas.

Sin tiempo para estrategias, corro hacia el kobold más cercano Tom en ristre y trato de meterle un mazazo en toda la cara - Aaaaaaaaaa!!!!!

La Aracnea, viendo como estaba todo, mejor se lanzó en la dirección contraria a la del bárbaro.    

Para que no nos flanqueen estos flaquitos.   

Y claro, para ver si podía no ser tan letal en sus tareas.   Si podía. 

Llegó hasta donde pudo en las piedras al noreste de donde estaban.  Desde ahí vería a los ocultos del flanco norte y los llenaría de redes y enrededaderas. 

El barbaro Laver - visiblemente mosqueado- carga contra uno de los enemigos visibles.

El martillo toma inercia, y el barbaro se aprovecha de la misma, golpeando fuertemente en la cabeza del enemigo, destrozando el craneo del kobold brutalmente, haciendolo caer inerte frente a el.

El barbaro toma un poco de aire, fijandose en varios de los otros enemigos...

Vio como el bárbaro salía disparado hacía los reptiloides que les habían atacado a pedradas. Había criaturas de estas a ambos lados del camino así que se movió tras Laver mientras colocaba su bastón a su espalda para liberar su mano derecha y poder realizar los movimientos de sus dedos necesarios para su ataque.

A espaldas de Laver comenzó a susurrar las palabras que activarían una explosión de frío sobre una de aquellas criaturas.

Un grupo numeroso de criaturas les había salido al paso nada más abandonar la ciudad, la guardia había desatendido sus funciones dejando que se aproximaran más de lo que debía permitirse. Podía ver el caballo muerto, el transporte, mas ningún humano lo que le hizo pensar que había huido, Gael recorrió con la mirada todo lo que podía abarcar para confirmar que no había una persona en peligro. Observó que una gran araña salía tras él y corría hacia la izquierda lanzando una gran tela, era la druida y creía que iba a poder controlar la situación mientras que él debía decidir entre posicionarse o realizar una carga hacia los enemigos. Le rodearían pero él era duro, aguantaría.

- ¡Despejaremos este camino de criaturas oportunistas!

La ciudad iba cayendo en el caos por dentro y por fuera, eso le parecía al caballero que echaba de menos una autoridad que garantizara la seguridad de las gentes.

Dejó de pensar en los asuntos de la ciudad centrándose en la lucha, corrió hacia delante superando a Laver y al alcanzar al siguiente kobold recurrió a sus energías para asestarle un martillazo buscando su cabeza.

El guerrero avanza acercandose a un kobold y con su martillo lo hace estrellarse contra los arbustos que estan cerca, el bicharraco no se mueve mas despues del potente golpe de Gael. Adicionalmente se da cuenta de otro kobold, un poco distinto y aparatoso escondido frente a los matorrales.

Mientras, la maga Ylian se acerca y , murmurando unas palabras mágicas, empieza a generar una escarcha en uno de los kobolds. A medida que el kobold intenta moverse, un hálito de frio se genera en su cuerpo, haciendo que caiga congelado al piso.

Se siente unas palabras en algun lenguaje extraño y otros dos Kobold se acercan al guerrero para intentar flanquearlo.

Botan sus arcos y extraen dagas que golpean al guerrero, los golpes son débiles, mas el guerrero siente que ligeramente atraviesan su armadura.

Mientras, en el otro lado del camino, 3 kobolds mas atacan nuevamente con sus piedras.

Un piedrazo cae muy cerca de la Panacea, que ya va tomando vuelo para ir a encontrar a los kobolds.

El siguiente piedrazo, rebota lejos de Ylian, y finalmente el tercero, cae 2 metros mas atras de Shem.

Los Kobolds se ven contrariados y vociferan en un lenguaje muy extraño.

Panacea, mientras, no avanza, pero empieza a transformarse rápidamente en araña, y lanza desde su trasero, un shot de telaraña en contra de uno de los kobolds.

El kobold queda inmovilizado, y empieza a luchar para sacarse la tela que lo mantiene pegado al piso.

Mientras Aracnea avanza, se encuentra a boca de jarro con un Kobold distinto, escondido casi frente a ella. Este levanta una especie de lanza frente a ella.

Viendo como se desarrolla la lucha y sopesando sus opciones, la mediana decide finalmente apoyar a su nueva compañera cambiaformas para equilibrar el número con respecto a los enemigos. 

Mientras corre hacia Aracnea, Shem puede ver como aparece un nuevo enemigo y se lanza a por él para tratar de reducirlo antes de que pueda dañar a la gnoma.

Antes de alcanzar al kobold de la lanza, la halfling prepara el ataque colocando su bastón detrás suya, y en el último momento descarga el golpe dando un saltito. Tras el mismo y recordando su aprendizaje, da una vuelta sobre sí misma e intenta darle una patada para derribarlo.

Miro alrededor después de quedarme solo pensando en la emboscada que acabábamos de sufrir.

Mi primer instinto es ir a ayudar a Laver, pero su brutalidad y poder era inversamente proporcional a su agudeza, no iba a necesitar mi ayuda.

La segunda emboscada a la druida me hace centrarme y correr hacia allí en auxilio. Shem corre por delante de mí, si ella no consigue acabar con el de la lanza lo haré yo, y si termina con él, iré a por el inmovilizado, buscando siempre flanquear al objetivo.

Pongo todo mi esfuerzo en correr para ganar terreno y quedar al mismo nivel que mis compañeros.

¡Ay caray!  ¿Yeste quién es?  ¿El chamán local?    Con lo que me caen bien los chamanes koboldses.

mmm- Más que emboscada, parecen dos bandas rivales yendo por los despojos dejados por un bicho mayor, a juzgar por las dentelladas sobre los caballos. 

Claro, en forma de araña, Panacea no iba a poder negociar diplomáticamente un reparto mitad y mitad de la carne de caballo.  Lo ideal era que se retiraran en paz para que el grupo pudieran buscar a los supervivientes bajo la carreta tirada, o los rastros de donde los hubieran llevado. 

El kobold, al ver repentinamente tres personas en frente de el, agarra firme su lanza eligiendo a cual atacar.

Shem va avanzando, haciendo maniobras tácticas, cuando se encuentra a Aracnea, peleando con un Kobold que ella no habia visto. Sin mediar tiempo, Se impulsa en su bastón el cual mueve a una velocidad sorprendente, para luego caer, despues de un pequeño salto, con el bastón encima del kobold.

El pequeño Kobold recibe el golpe de lleno en su costado, y entonces Shem aprovecha para agacharse, y lanzar una patada giratoria, desde el piso, contra el mismo. El kobold esta alerta, y al ver esto, con una agilidad asombrosa, salta y esquiva facilmente el pie de la mediana.

Noma, mientras, ve como sus dos compañeras se lanzan a la acción y las sigue, encontrandose con este Kobold, haciendo gala de su agilidad, pasa entre medio de sus compañeras y con su estoque, intenta atacar por un flanco al kobold.

Aunque el ataque falla, el Kobold mira desafiante a los tres enemigos en frente, especialmente a Shem, que le atacó y dañó.

Su pequeño y maligno rostro se ilumina cuando ve a la mediana agachada, y aprovechando la inercia, clava la lanza en el pie de la mediana, que ahoga un pequeño grito, mientras se rueda para esquivar.

El kobold aprovecha y haciendo un rápido movimiento con la lanza, envia sendo pinchazo a la mediana, gritando algo en un lenguaje muy raro.

El segundo lanzazo impacta a la mediana en un costado, haciendole unos rasguños mas. La mediana se ve medianamente lastimada por estos dos ataques.

Otro de los Kobolds, el cual porta una caja y muchos artilugios colgando de su cuerpo y espalda, murmura unas palabras en un raro lenguaje.

Saca una bolsa y la lanza cerca de los pies del barbaro.

Una gran cantidad de avispas salen de la bolsa, las cuales se quedan cerca del barbaro. Luego se aleja en direccion al norte y desaparece de la vista de Laver y Gael.

Repentinamente Shem y Aracnea sienten algo extraño, y solo ellas 2 ven como 3 rayos de energia intentan impactarlas.

Dos de esos rayos van contra Noma y le impactan de lleno en la espalda. Con el gran impacto, y el dolor lacerante Noma cae al suelo con una voluta de humo saliendo desde su espalda.

En el fragor de la pelea, no alcanzan a determinar desde que criatura salieron los rayos, pero si ven que salieron desde la direccion de los 3 kobolds mas al noreste...

El ultimo rayo golpea a la Aracnea, rozandole el abdomen y quemando levemente su cuerpo.

AH NO, TU NO ME SUELTAS UN PUÑADO DE AVISPAS Y LUEGO TE VAS - bramo al tiempo que genero una poderosa onda de choque contra todo lo que esté a mi alrededor. Completamente iracundo, salgo tras el Kobold huidizo, con intención de aplastarle con mi mazo

Fue hacia donde más enemigos habían pero para su sorpresa fueron surgiendo todavía más en el otro lado de la batalla. Ni creía que tuviera relación con la enfermedad del sueño, eran solo un reto más en el camino, pues el camino que emprendieron no era fácil sino lleno de dificultades, como siempre ocurría cuando unos valientes se lanzaban a la aventura.

"El camino lleno de dificultades."

El pensamiento vino de casualidad o quizás se había estado gestando desde hacía tiempo en su mente. Si su primera aventura antes de conocer a sus compañeros acabó en derrota, ¿lo correcto no era pensar que había sido una dificultad más, como tantas otras que iba a encontrar? Durante unos meses estuvo paralizado por la primera piedra que se le interpuso, craso error.

Sin tiempo para meditar en ello elevó el martillo y al bajarlo golpeó de lleno la cabeza de uno de los kobolds, el que tenía a la derecha. Miró entonces alrededor viendo que Laver buscaba más enemigos y que tenía cerca a Ylian. Él pensaba terminar con los enemigos de esta zona por lo que le pareció muy oportuno que el bárbaro apoyara el lado izquierdo.