Fosco recibe un golpe bastante feo, una lagrimita se le escapa de sus ojos No voy a llorar! Todas quietas...este no es mi final se dice a sí mismo mientras sigue agitando su pequeño y corto estoque en el aire, más que para nada para impedir que el el bicho vuelva a enfundar otro brutal ataque como el de antes. Poco a poco retrocede y siente como algo cálido le recorre la pierna, al mirar algo rojo inunda su costado, con fuerza intenta presionar la herida mientras retrocede. No será mi final, no! Su intención es alejarse del malvado bicho que ante sus compañeros e erige, intentando ponerse a una distancia prudencial, pero quien sabe hasta donde llegan esos enormes brazos...
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+5)=11
Editado por el dm: modifico destinatarios.
Motivo: Contraderribo
Tirada: 1d20
Dificultad: 14+
Resultado: 11(+4)=15 (Exito)
Puedo convocar un monstruo escaleras arriba de tal forma que le corte el paso al gnoll o no me daría tiempo.
Creo recordar que convocar monstruo en ravenloft es una lotería.
Puedes. Estás en una zona de influencias de las brumas, así que tienes un 50% de posibilidades de que se comporte como lo haría en un dominio y un 50% de posibilidades de que el conjuro se comporte normalmente. De todas formas, se tarda todo un asalto en conjurarlo (el monstruo aparecería en el turno siguiente).
Cierto, cambio de táctica y volvamos al fiable y preciso proyectil mágico.
En este momento un hechizo de grasa vendría de perlas.
Alice se remango la camisa, era el momento de acabar con el ser peludo y chamuscarle un poco las orejas. Comenzó a murmurar en legua arcana mientras gesticulaba con sus delgados brazos, la punta de sus dedos comenzó brillar en un extraño color rojo y un haz de luz rojo que cambio a verde salió disparado contra la pared revotando varias veces más contra las piedra antes de impactar contra el gnoll, dejando un fuerte olor a pelo quemado.
Motivo: Proyectil
Tirada: 1d4
Resultado: 2(+1)=3
Lanzo proyectil mágico.
Cuando Leiath ve que a la luz de su improvisada antorcha la queda poco para extinguirse, apremia al enano:
Maese Enano, esos barrotes parecen extremadamente fuertes. No dudo que con tiempo vos podais con ellos, pero no tenemos mucho. Ruegos nos acompañeis arriba con los demás antes que la luz se apage.
Leiath no pensaba dejar a ninguno de sus nuevos compañeros atrás, asi que se fue preparando para pedir a su diosa algo de luz si fuera necesario.
Tras recuperar la compostura levanto la mirada y veo al enano tratando de forzar la puerta y a la bruja preparando un conjuro. Entre el mareo y la extraña inquilina de la celda no sé muy bien cómo actuar. Aunque consigamos abrir los barrotes veo difícil que consigamos sacarla de la trampa de picas.
En vista que la improvisada antorcha se comienza a apagar saco un cetro solar por si es necesario.
que va jefe.vuelvo el domingo. estou pudiendo leer pero no se cuando tengo internet con movil.pjnotizame y el domingo escribo
-No voy a dejarla aquí encerrada--afirma el obstinado enano sin cejar en su empeño--Pero tampoco quiero importunaros, mi señora. Si eso, id subiendo vosotros que enseguida os sigo. Sólo... me... falta... un... poquito... más. ¡Mmmmmmmmmmmmmmpf!
Una vez más Flame trató de golpear a su rival. Habían logrado herirle casi de gravedad, pero no parecía haber sido gracias a su ayuda, al menos no a su activa ayuda. Así que trató de dar el espadazo final para poder apuntarse un tanto en la victoria.
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 9(+6)=15
Motivo: Daño
Tirada: 2d6
Resultado: 7(+5)=12
Perdonad el post, pero hoy no tenía mucho tiempo...
El fuego llega hasta los dedos de Leiath, que como reacción suelta el ramillete y cae al suelo. Mientras la llama termina de consumirse, el mediano golpea una única vez su cetro contra los barrotes, iluminando mejor la zona.
Con un poco más de tiempo, los barrotes se empiezan a doblar. El enano no ha conseguido abrir la puerta, pero por el resquicio podría caber alguien delgado y sin armadura, o alguien simplemente pequeño. Azaron se empieza a quitar apresuradamente las protecciones de su armadura y se cuela entre los barrotes hasta el interior de la celda. El guardaespaldas se agacha para abrazar a la prisionera por sus muslos y la alza haciendo que deje de estar sostenida por las lanzas.
Klasius, deja de vomitar y entra aquí. Necesito que tires de las lanzas para sacárselas.
Aún sin las lanzas, la mujer seguiría colgada de los grilletes que las cadenas unen al techo. Necesitan ganzúas. Leiath conjura una luz para correr por el oscuro pasillo. Cuando en la primera planta pregunta por alguien que sepa manipular cerraduras, solo Onfale contesta. Para cuando están de vuelta, la mujer de pelo corto ya no tiene las lanzas, sino una serie de heridas de perforaciones por todo el torso. En total seis, tres de ellas por la espalda.
Está visto que no se os puede dejar solos.
El cuerpo delgado del perfumista se desliza entre los barrotes separados con movimientos fluídos, pero se le nota que no está a gusto aquí. Sus manos tiemblan mientras trabaja con cada una de las cerraduras. Dos minutos después, el brazo izquierdo de la prisionera cae hasta su posición normal. Otros ciento veinte segundos son necesarios para liberarla por completo.
Oh... gracias...
La joven se lleva las manos a las dos heridas de su abdomen, una a cada lado de su ombligo. Tal y como relató minutos antes, hizo gala de su inexpresividad y no gritó durante el doloroso proceso en el que Klasius le retiraba lentamente las lanzas de su cuerpo.
Yo... no tengo ninguna fortuna con la que recompensaros, pero... Pero os puedo contar algo que tal vez os interese. Es sobre la pared tapiada-dice señalando al final del pasillo-. Strahd guardó tras ella un cofre con dinero o joyas... No llegué a ver el contenido, pero escuché el tintineo del interior y alguna conversación de los antiguos guardias. Ese tesoro es una especie de salvaguarda, unos ahorros para emergencias que Strahd ocultó por si los Terg ganaban la guerra y los Von Zarovich tenían que exiliarse.
Sangrando visiblemente, la mujer sale al pasillo que hay entre las celdas escurriéndose entre los barrotes doblados por el enano tal y como hicieron Azaron, Klasius y Onfale. En cualquier caso, ese muro es algo que no pueden atravesar en este momento, y son riquezas que por ahora no están al alcance del grupo de rescatadores.
El enano está fatigado (-2 a fuerza y destreza).
Hay una celda al principio de todo con otro prisionero, que con las prisas Onfale ni vió.
Tras el espadazo de Flame, el cuerpo del gnoll cae escaleras abajo. En ese momento baja desde el tercer piso una segunda figura. Esta vez es un humano desarmado y vestido con ropas de erudito.
¿Qué está pasando aquí? ¿Uzol? Oh... vaya... Menuda sorpresa. Bueno, supongo que lo apropiado será que me presente. Mi nombre es Derinlus Vaek.
Lamento si Uzol os ha causado problemas. No es seguro viajar solo y cuando me encontré casualmente a Uzol le tuve que someter por medio de un encantamiento para que me protegiese de los peligros del camino. No se puede decir que sea una pérdida muy sentida, la verdad es que olía bastante mal. ¿Y a quién tengo el gusto de dirigirme?
¿Qué harán los héroes? ¿Atacarán a Derinlus ahora que han enganchado una buena racha de dados? ¿Guardarán las armas y hablarán amistosamente?
Cuendo el cuerpo peludo y maltrecho del gnoll se precipita sin vida escaleras abajo, Nikeras se agacha junto al ensangrentado Zicko.
- Mi compañeros, no temas, estoy aquí, aguanta.- Dice mientras le acaricia el agudo hocico lobuno. Con una mano sobre su herido lomo, el montaraz pronuncia unas palabras extrañísimas. Pero logrando un efecto recuperador sobre el malherido can. Tras lo cual el perro lama con avidez las manos del anciano. Pero este lo aparta cariñosamente para mirar de atender al mediano, quien también recibiera un hachazo por parte del gnoll.
- Deja que le de un vista...- Sus palabras son interrumpidas por la llegada de un hombre, un tipo bien parecido, de bigote cuidado y mejillas afeitadas. Antes de decirle nada repite sus gestos sobre el menudo Fosco.
Una vez sanado el mediano el barbudo anciano se incorpora.
- Saludos, yo soy Nikeras. Antes de continuar me puedes decir si a parte del gnoll y vos hay alguien más que sepáis.
Motivo: CHL a Zicko
Tirada: 1d8
Resultado: 3(+2)=5
Tirada oculta
Motivo: Diplomacia
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+7)=26
5 pv para Zicko.
1 pv para Fosco.
El mediano tenía los ojos cerrados, la magia de Alice le había asustado se creyó que iba a impactar sobre él. Fosco nunca había visto magia y lo que había hecho la maga era terrorífico. Había demasiadas cosas que Fosco desconocía. Como aquel monstruo. Fosco parecía esperar el golpe definitivo que le llevase de este mundo, por parte del portentoso enemigo, al abrir los ojos ante sus sorpresa vio como el Gnoll se precipitaba escaleras abajo y a Flame en una pose que bien podía ser la que diese el golpe de gracia, como bien había anticipado. Fosco se sentó en el suelo y vio como un extraño hombre bajaba escaleras abajo. Parecía que el monstruo era una especie de mascota y por lo que deducía Fosco obedecía a este. Al menos parecía simpático. El bueno de Nikeras parecía saber curar, primero atendió a su perro y luego a Fosco "Primeroa los animales, claro..." se decía a sí mismo, cuando fue al mediano la herida parecía igual de mortífera, pero si a Nikeras eso le bastaba, no se le podía rechistar nada, al menos lo había intentado... Muy amable le dijo Fosco a Nikeras, que al menos se había preocupado por su estado. Era un detalle a tener en cuenta. Fosco se hizo a un lado para no interrumpir la conversación, para no ser una molestia como veía en los ojos de Flame. Se quedó en silencio intentando taparse la herida, observándola aterrorizado. Nunca le habían tocado un pelo, siempre había sido más rápido, pero ese monstruo era...tan rápido que no sintió nada. Fue tan extraño.
Vaya, parecía que sus compañeros eran mucho más habilidosos que lo que había calculado. Incluso contaban con objetos mágicos bastante útiles. Quizás deberían hablar entre ellos sobre estos detalles más adelante y así no malgastar recursos innecesariamente.
Viendo que la mujer torturada se encontraba por fin a su alcance, se dirijió hacia ella: Dejadme que os alive en algo vuestro dolor - ofrece la bruja.
Y mirando a Onfale, asombrada de su manejo con aquellas pesadas cerraduras comenta: Al entrar hemos visto otra celda ocupada por un cuerpo, quizás vos podais abrirla y así mirar quién es el desdichado para poder informar a su familia.
Motivo: curar Sandasola
Tirada: 1d8
Resultado: 5(+3)=8
Si Sandasola no lo rechaza le hago el curar heridas leves de dominio, lo tiro por si acaso. Si no lo quiere avisa para no tacharmelo porfa :D
A propósito... el conjuro de luz lo hago sobre una chinita del suelo (si no hay pues una moneda de plata).
La maga se bajo la mangas, Tranquilo pequeñín, todo ha acabado. Dijo poniéndole una mano en el hombro, el mediano era el que más había sufrido en el combate, sin contar el perro del montaraz pero el guardabosques ya se había encargado de él. Lo que más le había sorprendido era Flame, la escuálida mujer rubia se había recuperado totalmente y había demostrado que era mortal, un valor a tener en cuenta.
La maga se iba a lanzar a registrar el cuerpo del gnoll cuando apareció el hombre. ¿Qué hace aquí este tipo? No me huele esto nada bien.
Buenas tenga usted, dijo cordialmente Alice pero sin bajar la guardia, Soy Alice. Disculpe mi curiosidad, pero que trae a un hombre a un lugar tan oscuro como este con una compañía tan singular.
Podría saber que conjuro a podido usar para controlar al gnoll, o saber si el hombre es una ilusión.
Con el mayor cuidado posible que me permiten mis mareos procuro extraer las picas del cuerpo de la mujer y aguanta estoicamente el proceso, lo que facilita la labor.
Cuando vuelve a pronunciar el nombre de su captor mis ideas se encuentran lo suficientemente despiertas para relacionarlo con alguien del grupo.
Es el señor de Victor.
- Ejem - Digo llamando sutilmente a los compañeros presentes y procurando que la recién liberada no lo escuche. - Creo que no será buena idea mencionar el tesoro ahí arriba y menos el dueño del mismo.
Mientras sus compañeros ayudan a la empalada mujer, el viejo enano se recuesta sobre una pared para recobrar el aliento tras el descomunal esfuerzo.
El enano está fatigado (-2 a fuerza y destreza).
¿Y eso? ^^
Mañana no podré escribir. Regreso el sábado.