Partida Rol por web

El guerrero hizo lo propio que el compañero enano: cargó contra aquel engendro de la naturaleza.

Flame se había librado del baile hipnótico de la criatura, y ahora que el repugnante amigo del repugnante enano había subido, era hora de presentarle a Ayash. Tendrían que conocerse tarde o temprano, así que no había motivo para demorarlo más.

Así que, evitando mirar a Mariana y a cualquier aberración que no fuera Olisk, se lanzó a la carga, espadón en mano, para cercenar el decrépito cuello de Olisk.

Auch.

El Colmillo de Leiath apenas logra un rasguño en el rostro de Olisk. Por supuesto, no sangra. Eso de morir es lo que tiene, que la sangre se te coagula por dentro y se vuelve de horchata.

¡Serás hija de...! No sé lo que piensas de la necrofilia, morena, pero después de matarte voy a voilar tu cadáver. Aaaauch...

Perezoso se hunde profundamente en el brazo y luego en el torso de Olisk.

Tranquilo, hombre... ¿es tu novieta? Jejeje... No quise decir eso... ¿Porqué no lo hablamos como seres racionales? Aaaaaauch...

La cadena de Babras golpea todo el torso, y sus púas quedan clavadas.

Babras, no me jodas. ¿Tú también? El jefe tiene un sitio pa'ti en el Juego. Podíamos volver a ser uña y carne, como en los viejos tiempos. Lo de las montañas Balinok fue divertido. Beljan engañó a la princesa de la ciudad oculta de los enanos. Juasjuas... Cuando se fugaron juntos pudimos asaltarla. Beljan y tú la voilasteis un montonazo de veces. ¡Qué risas! Luego la mataste, que pa'eso era la misión. No tó va a ser folleteo y juerga.

El último corte vino de Flame. Le cortó el cuello. La cabeza de Olisk se fue rodando por el suelo, y se detuvo a los pies de Alice.

Mmmmh... ¡Menuda mierda! ¿Ey? ¡Whooola! Menudas vistas hay aquí abajo, pelirroja.

No pudo seguir mirando durante mucho tiempo, su cabeza y su cuerpo se convirtieron en polvo y desaparecieron para siempre de la vida de los aventureros sin que Fosco tuviese oportunidad de entablar amistad con él. Solo quedó su ropa tirada en el suelo, junto a las escaleras que bajaban.

Los aventureros habían subestimado a las serpientes de nuevo. Nadie se había preocupado de ellas. Y ahora su ritmo sabrosón volvía a encandilarles. Una hasta se acercaba a Flame para morderla.

Le estaba cogiendo gustillo a eso de clavar el pincho allá por donde iba. ¿Es así como se sentiría si tuviera uno entre las piernas? Parecía que estaba dotado para la esgrima. Eso o es que Perezoso era un arma realmente prodigiosa.  El perfumista estaba acostumbrado a concentrarse en olores, perfumes, esencias mágicas, chakras, mudras y asanas, pero en el combate cuerpo a cuerpo no era más que un principiante. Ni siquiera se dio cuenta, con la emoción de atravesar la carne muerta como si fuera mantequilla,  que de nuevo caía en las garras de aquella serpiente y su hipnótico baile.

-¡Soy un geni...!- La boca se le quedó entreabierta y no pudo terminar la frase, sólo emitir un ronco sonido gutural.-Ommmm.

Eso es Engendro Apestoso, muerde el polvo!- pensó la bruja cuando vió desaparecer al zombi.

En ese momento una de las serpientes-esqueleto se le puso al alcance e intentó golpearla, más por reflejos que por voluntad. Su fallo fue estrépitoso, si es que ella no era de usar armas de combate...

La maga no había actuado, el baile de la serpiente, la oscuridad y el posterior ataque al zombi, el embotamiento metal que sufría con el dolor de estómago y la sensación de estar encerrada era suficiente. Solo pudo patear el montón de cenizas que había sido el zombi. ¡Pervertido!

Pero la maga volvió a quedar prendada del movimiento de la serpiente, gira y da vueltas, gira y da vueltas…. El aspecto de la pelirroja era realmente lamentable.

Fosco vio la cabeza de Olisk y le pareció tan increíble una cabeza parlante iba a cogerla para meterla en su mochila y que siempre dijese cosas y siempre fuese con él, cuando se convirtió en polvo Cáspita! pensó triste el mediano, al volverse vio a la serpiente en un genial baile OLÉ! Mirar como se mueve. Vamos Mariana sal a bailar, que tú lo haces fenomenal, tu cuerpo se mueve como una palmera. Suave, suave. Su-su-suave cantaba el mediano mientras disfrutaba del baile de la serpiente... Normalmente las personas se quedaban embobaos mirando a la serpiente, pero claro no contaron con que Fosco ya era bastante bobo de normal. Él por contrario disfrutaba viendo bailar a Mariana. Aplaudía y reía. La animaba con cantos para que no parase.

¿Qué demonios había dicho aquel infecto muerto viviente? ¿En verdad había violado y asesinado a una mujer indefensa? Por un momento, el enano se dijo que no podía ser.

-¡No, no, no! 

No obstante, el deslenguado tipejo sabía su verdadero nombre. ¿Sería cierto todo lo demás también? Sin dejarle tiempo para meditar sobre ello, las dos sierpes volvieron a hacer estragos en el grupo con la danza infernal. Quizás fuera mejor morir así, con el espíritu limpio.

Tras acabar con satisfacción contra el no muerto Azaron se da la vuelta... y comete el tremendo error de mirar directamente a uno de aquellos esqueletos bailarines. 

Me quedé inmóvil, la venda en mis ojos evitaba que mi cerebro colapsase como unos segundos antes, y ahora solo tenía mis oídos para localizar a los enemigos. Pero había demasiado ruido, no conseguía localizar a las serpientes y me quedé en el sitio, con los brazos extendidos empuñando las dagas en espera de poder encontrar un objetivo.

Flame se quedó completamente inmovil en cuanto sintió el mordisco de la serpiente esquelética. Aquella sensación era horrible, y el gozo de haber eliminado al zombi, había sido eliminado de tan solo un bocado de la serpiente.

Ahora no podía moverse, y uno a uno podía comprobar como sus compañeros iban cayendo bajo los sinuosos bailes de la otra. Aquello iba a ser su perdición, ¿cómo era posible que ninguno fuera capaz de quitar la mirada? ¡Parecíamos unos completos ineptos!

¡Vamos Leiath! Pensó la joven ¡Vuelve a apagar la luz y así todo se solucionará de nuevo!

Pero qué les pasaba a todos? Por qué se quedaban embobados mirando al bichejo ese? Solo le quedaba una cosa por intentar.

Al instante en que lo deseó, la luz del guijarro se apagó, quedando todos en penumbras.

Y como si fuese el final de una representación, los focos se apagaron, cayó el telón y se hizo la oscuridad. No hubo aplausos. Salvo los de Fosco, pero esos eran para Mariana.

Y en la sombras es donde el mediano se sentía a gusto. De forma sigilosa intenta acercarse a la serpiente que acosaba a Flame, pero parecía que había muchas cosas en medio que ocasionaban ruidos y golpes.

¡Maldita seas, eunuco descerebrado!- Pensó el perfumista cuando al apagarse la luz vio que había vuelto a quedarse embobado.

- Pensemos con la cabeza y planifiquemos nuestras acciones. Acabemos con la serpiente bailona la primera.- No le gustaba ser el que llevara la voz cantante pero dar órdenes a los demás nunca le había costado demasiado.- Encenderé una luz de nuevo.- Mientras hablaba buscó entre sus cosas una moneda.- Azaron, Fosco y Klasius atacad a la serpiente que baila sin mirarla directamente. Alice, si puedes ayuda a Ulmo tapándole los ojos. Leiath, quédate a mi lado por si me ataca la otra serpiente. Así me dirás si tengo que ocultar la luz de nuevo o mantenerla encendida. ¿De acuerdo?- No esperó respuesta alguna y cerró los ojos.

Que le tape los ojos otro al enano, yo voy a lanzar un conjuro. Acto seguido la maga dio un paso hacia atrás y busco a tientas en uno de los bolsillos de su falda, los siguiente que se hoyo fue una serie de murmullos en una lengua arcana.