Partida Rol por web

En lo más alto de los cielos

Escena 3: El interior

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13/11/2019, 10:01
Director

Las rocas lanzadas por los furiosos vientos golpean de nuevo a Alwin, esta vez en la rodilla. A pesar de la protección que ofrece el grueso abrigo, el golpe seco hace que la articulación haga un extraño movimiento y un intenso dolor le haga caer al suelo.

La lluvia de rocas cesa momentáneamente y, aún estando en la parte inferior de la sala, veis como las corrientes de aire comienzan a tambalear las columnas poliédricas que todavía quedan en pie.

Al mismo tiempo, un nuevo temblor comienza a dejarse notar con un leve temblor en el suelo creando un nuevo riesgo de caída de rocas. Arriba, de la única salida de esa trampa de rocas en la que se ha convertido el interior de la montaña, sigue descendiendo algo, de lo que ya apreciáis una forma circular.

Notas de juego

He seguido narrando porque Alwin Romijnsen, que es quien faltaba, no tenía Fichas que apostar.

Esta vez lo he hecho de otra manera, que creo más justa. Los que apuesten más Fichas de las que yo establezco obtienen éxito igualmente. De esta manera se convierte en un metajuego de apostar una mínima cantidad de Fichas para no gastar demasiadas, pero que sean suficientes para pasar la prueba con éxito. De esta manera, ha quedado así:

EXPLORADOR FICHAS POSTADAS FICHAS NECESARIAS RESULTADO
Alwin Romijnsen 0 2 Fallo
Dra. Sharada Srinivasan 2 1 Éxito
Nathaniel Nox 1 1 Éxito
Threkor Ohrin 2 1 Éxito

Alwin Romijnsen necesitaba más Fichas porque estaba ocupado vendándose la mano y dolorido.

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13/11/2019, 15:29
Dra. Sharada Srinivasan

 

-¿Algo circular?   -miró extrañada, cubriendose los ojos de la grava.  ¿Eso explica porqué se ve todo abandonado? ¿Se fueron? 

Algo en Sharada quería abrir esos cristales y dar a los prisioneros otra oportunidad.  Pero mejor se esperó a que llegara la civilización que los había puesto ahí para que pudiera "contar su historia".    Ya luego veremos.

 

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13/11/2019, 15:57
Threkor Ohrin

Logré esquivar la primera lluvia de rocas y ahora estaba absorto mirando aquel objeto circular que bajaba del cielo. Esperaba que dentro de él o junto a él, vinieran los creadores de aquel templo o algo que les ayudara a entender del todo lo que había ocurrido con aquella civilización.

Creía que ya tenían todas las piezas del puzzle, pero no atinaban a colocarlas en la posición adecuada. Una nueva lluvia de rocas se avecinaba.

Esperemos que baje rápido. No sé si podremos resistir una nueva lluvia de piedras. Parece que los no aptos están furiosos y buscan venganza.

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13/11/2019, 16:01
Director

El cristal en la mano de Threkor Ohrin desprende un brillo que cambia de intensidad cada vez que los vientos furiosos amenazan a los exploradores. El fulgor cobra fuerza cuando los vientos se dejan sentir más cerca, y vuelve a la normalidad cuando se alejan.

Una nueva columna poliédrica cae, dejando otra resquebrajada. De la primera sale una especie de tornado que se une a los que ya habitan la sala, y de la segunda columna sale otro más produciendo un agudo silbido al hacerlo por un hueco tan pequeño.

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17/11/2019, 11:08
Alwin Romijnsen

Grité de dolor cuando, por acción de los malditos torbellinos, una roca me impactó en la rodilla. 

Caí al suelo al instante y noté cómo un inmenso dolor nacía de la rodilla y se transmitía por todo el cuerpo. Y mientras estaba tirado en el suelo, chillando de dolor, mi cuerpo actuó por inercia propia. Aunque  mi cabeza estaba anulada por el intenso sufrimiento que nacía de la rodilla, mis manos la buscaron rápidamente y, con un golpe seco, la recolocaron en su sitio.

En ese momento el dolor remitió hasta un punto que al menos lo hacía tolerable, lo que me permitió gritarle a mis compañeros por encima de aquel vendaval.

-¡No os voy a mentir chicos, esto pinta mal! ¡Se me ha salido la rodilla y, aunque he conseguido colocármela, no voy a poder apoyar esta pierna por una temporada!

Las piedras volaban con una fuerza bestial. Si sólo una de ellas nos daba en el cráneo... 

Apartando aquellos pensamientos de mi cabeza vi cómo la piedra que la doctora llevaba en la mochila brillaba al son del viento. No sabía exactamente qué significaba ni las consecuencias que aquello tendría, pero la situación era lo suficientemente desesperada como para intentar cualquier cosa.

-¡No estoy seguro de donde han salido estos vientos ni de si en las piedras de verdad hay presos o no, pero parece que es lo que quieren! ¡Denles la piedra, o rómpanla, o hagan algo, pero dudo que sobrevivamos mucho más tiempo como esto siga así!

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17/11/2019, 15:37
Dra. Sharada Srinivasan

 

Pues aviéntenla y sigamos a cubierta. 

Sharada dudaba que darles el trozo de cristal que Threkor había tomado de su mochila sirviera de algo.  Más se rompían cristales con el temblor, y más presos salían, enfurecidos.   

Siguió tocando esperando que esto llamara a los esfuerzos. 

¡Aguantemos!

 

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18/11/2019, 09:05
Threkor Ohrin

Levanté la pìedra hacia arriba para comprobar que ocurría con los vientos si la mostraba al aire. Parecía que lo que fuera que viajaba con los vientos, hacía reaccionar a la piedra y a lo que había en su interior.

Tal vez estén defendiendo simplemente a lo que habita esta piedra. O puede que por el hecho de tener la piedra con nosotros no puedan acercarse y la única forma que tienen de defenderse es lanzándonos piedras.

Iba caminando en dirección a la cosa que bajaba del cielo que aún no habíamos identificado.

Cuando estemos a salvo la lanzaré.

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18/11/2019, 09:40
Director

Por fin se logra divisar qué es lo que desciende. Es una especie de plataforma circular sujeta son fibras al agujero de arriba. Sobre la plataforma hay un mecanismo con una palanca.

Mientras Threkor Ohrin camina hacia ella, la piedra repele los vientos que intentan acercarse a él para impedírselo, reaccionando con una poderosa luz amarilla. A medida que los vientos del interior de la montaña recorren la sala interior, se iluminan las piedras ubicadas en los ventanales, expulsándolos de nuevo al interior. Sólo la destrucción de la montaña permitiría que saliesen al exterior en libertad.

Debe quedar unos segundos para que la plataforma toque el suelo...

Notas de juego

Threkor Ohrin, súmate 1 Ficha.

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18/11/2019, 15:02
Nathaniel Nox

-Increíble -indiqué, observando que lo que descendía era una especie de plataforma móvil sujeta con fibras y que aparentemente funcionaba utilizando una palanca-. No sé si estaréis pensando lo mismo que yo, pero creo que deberíamos subir a esa plataforma. Podría ser el único modo de salir de este lugar.

Realmente no lo sabía, pero a la vista de las circunstancia, aquella parecía tratarse de la única vía posible de subir.

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18/11/2019, 16:01
Dra. Sharada Srinivasan

 

Sharada asintió y se preparó para correr hacia la plataforma que descendía. 

¿Son cuerdas o una especie de hovercraft?  -dijo, un poco gritando en medio del ruido. 

 

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18/11/2019, 16:28
Threkor Ohrin

Aquella parecía ser la única salida del lugar. Manteniendo el cristal en alto para alejar a los vientos de nosotros, me dirijo hacia la plataforma que bajaba del cielo. Una vez estuviéramos sobre ella, sólo nos quedaría accionar la palanca para, seguramente, comenzar a ascender y salir de allí.

La cosa se estaba poniendo peligrosa y no era buena idea permanecer más tiempo allí abajo. La única duda que tenía en aquel momento era si desprenderme o no del cristal amarillo. Quizás Alma Máter pudiera estudiarlo. Estos vientos y la energía de lo que fuera que contuviera el cristal podría ser útil para la investigación.

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18/11/2019, 23:44
Alwin Romijnsen

Cuando lo comprendí me sentí como un idiota. ¿Tirarlo? ¿Romperlo? Aquella piedra era lo único que nos protegía de aquellos vientos huracanados. De hecho, aquella montaña era lo único que protegía al mundo de aquellos violentos torbellinos. ¿Quién sabe qué harían si eran liberados? 

Me había dejado llevar por el pánico, y si mis compañeros me hubieran hecho caso, ahora mismo estaríamos mucho peor de lo que estábamos ahora, pensamiento que hizo que se me formara un nudo en la garganta.

Es por ello que, cabizbajo y herido como estaba, no tuve más remedio que apoyarme en el Sr. Nox para avanzar cojeando hacia aquella estructura que bajaba. Quién la había activado o dónde nos llevaría eran dos preguntas a las que no tenía respuesta, pero en aquel momento cualquier sitio era mejor que dentro de aquella peligrosa vorágine.

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19/11/2019, 10:17
Director

Al mismo tiempo que os reunís todos en el centro de la plataforma, los remolinos de viento del otro lado de la sala comienzan derrumbar el resto de columnas, rompiéndose en mil pedazos y dejando en libertad más vientos violentos. Poco a poco se va formando un verdadero tornado en el interior de la sala.

Notas de juego

¿Qué hacéis?

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25/11/2019, 20:53
Dra. Sharada Srinivasan

 

¡Pongámosnos en el centro todos, agarrados para que nadie se caiga!  -gritó la Dra. Srinivasan en medio del estruendo.

Quería ponerse a tocar el basuri, pero necesitaría ambas manos, y el joven Romijnsen estaba herido.  No, habrían de comunicarse los vientos elevados con los que mostraban violencia ahora.  No era su papel. 

¡Por lo pronto, súbanos!, ¡porfavor!, dijo. 

Aun así, ¿la voz es aire, no?  -Comenzó a cantar un mantra de paz.   Era la misma tonada que había pedido que bajara la plataforma por ellos, sólo que con el ritmo al revés. 

Para que nos suban. 

 

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26/11/2019, 09:18
Director

Del otro extremo de la sala, una nueva lluvia de rocas es lanzada con fuerza sobre los exploradores, que ante la urgencia de los gritos de la doctora, accionan la palanca a bordo de la plataforma y el mecanismo comienza a funcionar. Primero, con un fuerte tirón que los hace trastabillar, pero luego, con un ascenso más o menos suave hacia la abertura superior de la montaña por la que podrán salir al exterior. Las piedras lanzadas caen al suelo bajo la plataforma mientras Threkor, Alwin, Nathaniel y Sharada ganan altura sobre la misma. Los segundos parecen estirarse en el tiempo y el ascenso se hace eterno.

Observando abajo, los vientos rebeldes huidos de las prisiones que representaban esas columnas poliédricas rotas se unen para formar una gran masa de aire organizado que empuja con gran violencia la parte inferior de la plataforma de madera haciéndola ascender con mucha rapidez. Los cuatro exploradores se reúnen en el centro de la misma para atravesar la abertura circular del techo como si fueran una bala disparada en el cañón de un arma. El borde de la salida que están a punto de cruzar está salvaguardada por cortantes piedras minerales amarillas, que producen algunos cortes en las ropas de los aventureros, pero una vez fuera es cuando ven la muerte a la cara. La noche, sólo iluminada por la luz lunar que tiñe de un suave fulgor gris todas las alturas nevadas del Himalaya, los recibe con un intenso frío. La plataforma frena en seco al estar unida al mecanismo que la acciona, mientras que los cuatro son lanzados al aire, hacia el abismo donde sólo los esperan, abajo, afiladas rocas tras una caída de varios centenares de metros. La muerte.

Notas de juego

¿Quién lleva la piedra amarilla?

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26/11/2019, 09:46
Threkor Ohrin

Por fin íbamos a salir de allí, aunque el peligro aún no había terminado. La plataforma iba subiendo poco a poco, y veíamos el cielo cada vez más cerca, la salvación.

Los vientos se arremolinaban alrededor nuestro y la piedra que sujetaba en la mano, seguía brillando mientras subíamos. El final. Llegamos.

Fue entonces cuando notamos el golpe. La plataforma frenó de golpe lanzándonos al vacío.

Creo que ahora comprobaré por mi mismo si hay vida tras la muerte.

Notas de juego

Ejem... yo

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26/11/2019, 10:13
Director

Como cuatro gotas de lluvia, los exploradores caen al vacío, pero durante esos breves instantes de los que habla la gente que está a punto de morir en los que pasan mil cosas, Threkor Ohrin comprueba como sus tres compañeros empiezan a caer con menos velocidad mientras él se sume en la oscuridad del fondo. La Dra. Srinivasan, Nathaniel y Alwin toman velicidad angular, girando sobre su propio eje, como si estuviera cada uno de ellos en el centro de un tornado. Un tornado que los mantiene a salvo y los conduce despacio y cierta seguridad a algún lugar, mientras que Threkor esncucha los sibilantes vientos a su alrededor, como si las almas observaran de lejos precipitarse a un triste final.

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26/11/2019, 10:31
Threkor Ohrin

Demasiado tarde me di cuenta de que lo único que le diferenciaba a él del resto del grupo era aquella piedra que mantenía en las manos. El miedo a la muerte iba abandonando mi interior para ser sustituido por una especie de resignación a morir en aquellas montañas.

Cerré los ojos esperando el golpe final que acabara con mi vida. En un último intento de evitar lo inevitable, abro la mano que sostiene la piedra y dejo que se escape de ella, observando como cae junto a mí a más velocidad. Chocaría contra el suelo antes que yo y se rompería en mil añicos.

Mi cerebro se consolaba con la idea de que podría ver el otro lado. Si había algo después de aquella vida, podría verlo, aunque no sería capaz de compartirlo con nadie.

Adiós.

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26/11/2019, 11:39
Director

Threkor deja caer la piedra, que se separa de él justo en el mismo instante en que se ve envuelto en una espiral gélida de vientos. Entonces, su caída se detiene mientras aún puede ver cómo el brillo de la piedra se adentra en la oscuridad y rebota unas cuantas veces en las rocas que podrían haber acabado con su vida hasta que el débil brillo amarillo desaparece.

El investigador de lo oculto es reunido junto con sus otros tres compañeros en esta travesía por ell Himalaya y descienden durante algunos minutos hasta una llanura nevada, en la que son depositados en una gruesa capa de nieve. Repentinamente, los vientos desaparecen y la única presencia de la noche es la débil y helada brisa de la noche, y el precioso cielo estrellado. A unos cien metros, una luz anaranjada destaca en medio de la negrura. Por unos segundos fantaseáis con la idea de poder recuperar la piedra amarillenta que mantiene a raya a los vientos, pero al acercaros un poco descubrís que es una cabaña prefabricada que, atendiendo a los carteles exteriores, forma parte de las obras y demoliciones llevadas a cabo en la zona y que dejaron al descubierto la escalinata que llevaba a lo alto de la montaña. En esos momentos, vuestra decepción se torna esperanza. Calor, comida y descanso son tres tesoros que apreciáis, al menos "casi", por encima del extraño mineral amarillo.


Desde aquella pequeña cabaña al lado de un precario camino pudisteis contactar, tras numerosas dificultades, con Alma Máter. A pesar de estar instalada en la zona, Lorena Silva se encontraba a varios kilómetros de allí, en un modesto hotel de una ciudad pequeña apurando un dal bhat cuando recibió la llamada de la central. El aviso hizo que el plato esparciera el arroz por doquier. La expedición había regresado. En cinco minutos tuvo a todo su equipo movilizado y listo para partir a la zona.


Cuando el equipo llega al lugar, Lorena Silva salta de la parte trasera de un camión. Al principio os cuesta reconocerla, pero cuando se acerca y se quita el protector facial, su rostro os devuelve la paz de veros en manos de Alma Máter. Tras un breve intercambio de palabras en el que se presenta a Alwin Romijnsen, os indica que subáis al camión. Se trata de uno de grandes dimensiones, cuya parte trasera es una especie de remolque versátil, tanto como para trasladar personas como mercancía. Ahora está cerrado, climatizado y adaptado para viajar en él. Dentro, tomáis asiento alrededor de una mesa metálica sujeta en el chásis del camión y Lorena Silva se sienta en el otro extremo, mientras los motores arrancan de vuelta. Alguien aparece con una caja térmica blanca y saca cinco paquetes de comida precocinada con una etiqueta sencilla en la que dice "dal bhat". Lorena prueba una cucharada y hace una mueca de asco. Con la mano, aparta el envase y cruzando los brazos, se dirige a vosotros.

- Es horrible, pero vosotros mismos... Bueno, creo que tenéis muchas cosas que contarme.

Notas de juego

Enhorabuena, exploradores. Habéis llegado al final de la aventura. Para ser exactos, Threkor Ohrin casi no llega, pero aceptó desprenderse de la roca desconocida con tal de salvar la vida.

Como veis, falta un punto de Vigilia (hay que alcanzar 8 y ahora mismo está en 7). Esto es porque la última Revelación os la proporciono yo, aunque fue realmente Threkor Ohrin quién lo sugirió hace un tiempo, así que he decidido que se le puede dar el logro de obtenerla. Efectivamente, las almas "no aptas" eran encerradas en las columnas. Una especie de prisión. Quizá fuera por algo que cometieron en vida, o tras ella. No lo sabremos, pero una vez liberadas, sus actos fueron violentos. Por tanto, la Revelación queda así:

Unas columnas de piedra que contienen numerosos vientos: criminales condenados a perpetuidad por sus delitos.

Al llegar, Lorena Silva se presenta a los exploradores pues todos la conocéis a excepción de Alwin Romijsen, que es su primera aventura. Su padre sí la conocía, por lo que ella sí le conoce a él.

Os dejo unas breves intervenciones en la mesa junto con Lorena Silva antes de dar la aventura como finalizada.

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26/11/2019, 12:48
Threkor Ohrin

No me lo creía. Estaba vivo. Seguramente el pueblo del aire pensaba que quería dejar libre a lo que fuera que contenía la piedra. Al dejarla ir me salvaron. Jamás había visto la muerte tan de cerca.

Incluso ahora, calientes alrededor de una mesa, me ronda el hecho de que había estado a punto de morir y me mostraba taciturno.

Dejé que los demás hablaran mientras me recomponía interiormente. Sorbí una taza caliente de café que me recorrió el cuerpo y me calentó. Notaba como mi cara volvía a coger color.