Partida Rol por web

Sin duda ahora sí que sentía todas aquellas palabras que me había dicho antes, todo aquello de que quería estar conmigo de que quería pasar cada noche en mi cama y cada día a mi lado y le besé de forma que seguramente no le había besado hasta ahora, pues aunque nunca pensé que fuera así, quizás le había perdido el miedo a que las cosas entre él y yo cambiaran, pues ya lo habían hecho.

Mi cuerpo reaccionó a sus caricias y a sus besos y cuando su lengua llegó a mi sexo gemí, pues ya había probado cómo hacía las cosas, pero ahora lo estaba viendo desde una perspectiva diferente, quizás, al poner algo más que mi cuerpo en aquel encuentro.

No le dejé seguir mucho más pues yo también pesaba participar en todo aquello y usé uno de mis muslos para apartar suavemente su cabeza de mi sexo y mirarlo negando con la cabeza.

Me incorporé y me deshice de su ropa interior, para colocarme sobre él y dejarle al alcance de su boca mi sexo, mientras la mía se encargaba de su miembro.

Oh... Joder... Poniendose en esta postura no me ayuda hacerlo de forma dulce, mas bien me da ganas de dejar salir al animal que tengo dentro...

Igualmente mis pensamientos duraron dos segundos pues mi boca volvio a ella como si necesitara beber su esencia, aunque ahora de forma mas apasionada pues tener su boca sobre mi no ayudaba mucho a que calmara mis ansias.

Salieron unos cuantos sonidos ahogados de mi garganta y continué dándole placer mientras él me lo daba a mí durante un rato, hasta que empecé a sentir la necesidad de sentirlo dentro, pero quería que fuera él quien llevara la iniciativa en ello, así que me aparte, no sin antes pasar por su boca y luego me tumbé sobre la cama mientras tomaba postura para invitarle a hacerme el amor.

Nos pasamos un rato jugando con nuestras lenguas en nuestros sexos, realmente me costaba horrores no cojerla y tomarla alli mismo y cuando se aparto di gracias a ello.

Al ver como se tumbaba negue con la cabeza - Asi no... - Dije sentandome en la cama y sentandola a ella sobre mi, mirandome, con sus piernas rodeandome y mis brazos estrechandola, haciendo que pudiera abrazarla y besarla cuanto quisiera...

La eleve un poco para comenzar a penetrarla de forma lenta, haciendo que notara toda la extension d emi pene entrando en ella Dios...

Sonreí cuando me cambió de postura y mostré el deseo en mis ojos, aunque seguramente pudiera ver algo más en ellos, sobretodo cuando noté sus brazos rodeándome.

- Sí, esto es lo que quería sentir.. - Pensé llevando mis labios a su cuello y después aguantar el aire en mis pulmones para acabar gimiendo cuando estuvo dentro de mí completamente.

Tener mis piernas rodeando su cuerpo dificultaba mis movimientos, pero apoyé los talones de mis pies en la cama para ayudarme en ello. Comencé a moverme suavemente sobre él.

- Abrázame.. abrázame fuerte.. - Pedí antes de buscar sus labios.

No hizo falta que se lo pidieras, no dejo de abrazarte en ningun momento, tampoco paro los movimeintos de sus cadera haciendo que el placer te llenara a una velocidad increible - Eres preciosa... - Te susurraba una y otra vez entre otras palabras.

Consiguio darte una pzrte del sexo que desconocias, hacertelo d euna menra que no pesabas que podrias vivir, y ahora si dejandote ver lo colado qeu habia estado por ti siempre.

Aquello era simplemente perfecto y sin duda, cambiaría la imagen mía encadenada a una mesa, por recordar la calidez con la que me estaba haciendo el amor en aquel momento, con sus brazos rodeándome, haciéndome sentir increíblemente y haciendo que sus palabras y sus mimos dibujaran una sonrisa en mis labios.

Mis manos también le abrazaban, al menos lo inetantaba mientras me apoyaba suavemente en él para seguir moviéndome y por primera vez, notaba como a parte de mi cuerpo, se excitaba mi mente..

No era una mujer de las que soliera hablar mucho mientras hacía estas cosas, pero sus palabras, sus mimos.. Acerqué mi boca a su oreja y entre gemidos le hablé como pude:

- No me lo habías preguntado.. pero.. me gustas Bardas y.. dios.. me siento increíblemente bien entre tus brazos..

Coloqué mis manos en sus hombros para poder moverme más fuerte y busqué sus labios con muchísima pasión. Aquello era simplemente maravilloso.

Cuando gimes esas palabras a su oido un jadeo increible sale de sus labios - Dios... - Su ritmo aumenta muchisimo y sabes qeu no tardara en llegar al maximo y a ti tu orgarmo esta llamandote a tu puerta.

Un cosquileo comienza a recorrerte una ola de calor, pequeños espasmos y tensiones musculares.

Ya estaba notando como iba a estallar, como no iba a poder resistir más aquello y una sonrisa de increíble satisfacción se dibujó en mis labios justo antes de tener que gemir con fuerza y de ahí, dejar que un gemido entrecortado saliera de mis labios, pues estaba estallando sobre su cuerpo, alcanzando aquel increíble orgasmo y aquella vez era uno que me hacía sentir plena, como nunca lo había hecho.

No cerré los ojos mientras el placer recorría todo mi cuerpo, sino que le miré a él a los ojos, para que pudiera ser testigo de todo lo que me estaba haciendo sentir, que no era sólo algo físico y sobretodo, para que supiera que aquel, sin duda, había sido el mejor " polvo " de mi vida y eso que pensaba que ya no podría superar lo que me había hecho en su cama.

Bardas de obseva derretirte en sus manos y sonrie mas que satisfecho, finalmente te pega muchisimo a el y aumente como nunca le ritmo jadeando en tu oido y dejandote claro que estaba alcalzando uno de los mejores orgasmos de su vida gracias a ti.

Cuando terminais simplemente se queda jadeando y abrazandote quieto.

Permanecí quieta entre sus brazos, apoyando un lateral de mi cara en la suya y cerrando los ojos en silencio durante un rato, mientras poco a poco me iba relajando, ahora sí, sintiéndome como si no hubiera pasado nada, como si todo estuviera realmente bien.

Tras un buen rato simplemente así, cosa que agradecí levanté la cabeza y aunque no cambié de postura le miré a los ojos.

- Ya sabía que te gustaba desde hace tiempo, pero.. no quería acercarme demasiado a ti.. supongo que por miedo a que pudieras gustarme más de la cuenta y acabar totalmente enganchada a ti.. Supongo que ahora ya no tiene mucho sentido que te lo diga, pero quería hacerlo..

Me acerqué a besar sus labios dulcemente.

Si ahora no tiene mucho sentido... peor me han llenado mas de loq eu se pueda imaginar esas palabras, sonrei dandole cientos de dulces besos por las mejillas y la boca y finalmente nos recoste en la cama tapandonos con las sabanas, no deje de abrazarla en ningun momento.

Me mordi la lengua para no decir anda mas pues sabia que cualquiera d emis palabras ahora mismo tendria un significado muy grande y preferia no meter la pata.

Me di cuenta de que Bardas se había quedado más callado de lo habitual pero no quise decir nada, porque no sabía qué era lo que estaba pasando por su cabeza y no quería estropear aquel momento, así que me acurruqué a su lado, cerrando los ojos ahora de forma tranquila y relajada, mientras podía sentir como si aquella noche mis sueños fueran a ser velados..

Como un acto reflejo, llevé mi mano a mi vientre, como si fuera a sentir algo distinto en aquel momento, pero tan sólo era mi cabeza la que se sentía de manera diferente, no mi cuerpo, al menos, no por el momento.

Y así, con la mano en mi tripa y sus brazos rodeándome me fui adormilando hasta caer dormida.

Llevo su manos a tu vientre tambein dejandola sobre la tuya, conseguiste dormir de fabula esta vez y cuando despertaste el aun te abrazaba dormido y balbuceando cosas en sueños, aunque no se le entendia apenas.

Por una de las ventanas entra la luz mermada por la polucion.

Sonreí al despertar entre sus brazos y me quedé un poco quieta, con los ojos cerrados, pensando en que sí, sin duda podría despertarme a su lado todas las mañanas así, con una sonrisa en mis labios sabiendo que estaría ahí conmigo.

- ¿ Cómo se puede cambiar de forma de pensar de la noche a la mañana? Jamás pensé que podría estar pensando en sentar la cabeza al lado de alguien así.. y todo por ella.. - Llevé la mano a mi vientre de nuevo y sonreí de nuevo, pensando en que sí, ella ya tendría más de lo que yo tuve que sería el cariño de una familia.

Esta vez fui yo la que se escapó de la cama como si fuera una gatita, sin hacer ningún ruido y puse algo de desayunar par ambos, pues ahora estábamos en mi casa y me tocaba hacer de anfitriona y no sabía por qué, sentía que necesitaba cuidar de él y que a su vez, el cuidara de mí.

Una vez estuvo todo listo me puse mi camiseta, simplemente por no estar totalmente desnuda y dejando la bandeja lejos para que no pudiera tirar nada al despertar me acerqué a él y comencé a dar suaves besos sobre su cara para despertarle.

Comence a notar suaves besos por mi cara y no pude evitar sonreir aun con los ojos cerrados... Al abrirlos vi a Cloe eante mi y negue con la cabeza - No puede haber mejor despertar que este... - Susurre acercandola del todo a mi para besarla.

Al ver el desayuno que habia preparado acaricie su mejilla agradecido.

Se supone que tengo que cuidaros yo a vosotras no vosotras a mi...

Sonreí al ver su sonrisa y luego dejé que me arrastrara hasta meterme entre sus brazos de nuevo, aunque fuera a ser brevemente y responder a aquel fantástico beso.

- Tendrá que ser a medias ¿ no? Tienes que estar bien cuidado para poder cuidar de nosotras, así que..

Me escabullí de entre sus brazos y llevé la bandeja hasta la cama y la coloqué entre ambos.

- Espero que te guste, es todo lo que había por casa.. no esperaba visitas.. - Reí con esta última frase, con el increíble buen humor con el que me había despertado. - Cuando desayunemos vamos a apuntarnos a eso.. ¿ vale?

Desayunais de forma tranquila y os preparais para salir.

Salis del bloque y Bardas te lleva en coche en coche. Hay un edificio enorme en el centro de la ciudad, la central de Existenz. A efectos legales es como un consulado de otro planeta en la tierra.

El ascensor es tremendamente rapido pero en su interior no se nota momiviento alguno. Las puertas se cierran y abren casi al segundo.

Un recibidor mas pequeño se abre ante vuestros ojos. En las paredes decenas de fotos del nuevo mundo decoran las paredes.

Justo en frente hay otras que muestran selvas y montañas nevadas junto a cierta informacion sobre el nuevo planeta.

En Existenz existen 6 estaciones diferentes. Invierno, lluviria, primavera, verano, Ardeas, otoño y Geldar. Cada una dura 3 meses y un año tiene una duracion total de 18 meses.

Te gustaria leer mas pero ya estais frente al mostrador correspondiente. Una chica sonriente os atiende. ¿Buenos dias señores en que puedo ayudarles?

Estaba un poco nerviosa por todo aquello, pero como siempre, no dejé que se me notara. Había vuelto a salir de casa de la misma manera en que lo hacía siempre, armada y segura de mí misma, quizás, porque sabía que ahora tendría que tener incluso más fuerza de voluntad que antes y con que Bardas viera mi " yo " dubitativo y temeroso de vez en cuando ya llegaba, tampoco era una necesidad que lo viera todo el mundo.

- Nos gustaría formar parte de eso.. - Dije a la mujer señalando una de esas idílicas fotos del mar y de delfines, animales que aquí ya se habían extinguido hacía muchísimo tiempo.

- ¿ Encontraremos de verdad algo de eso en aquel lugar? ¿ O simplemente estaran jugando con la esperanza de la gente y debido a esta mierda de mundo en el que vivimos?

Miro a la recepcionista, no es la con la que estuve hablando la cuando viene a buscar informacion. Esta parece una muñeca Moly Love*

- Buenos dias, soy Julius Bardas y ellas es....- Cloe si, pero ¿Cloe que? va a quedar muy raro que diga que es mi pareja y la madre de mi hija cuando no se ni su apellido... de hecho creo que nunca le dije que me llamo Julius..- Es mi pareja y la futura madre de mi hija.- Digo finalmente mirandola con gesto de complicidad.- Nos gustaria presentar una solicitud para formar parte de la colonia.

La mujer se pone muy contenta al oirse eso.- ¡Un bebe!¡Oh, dios eso es maravilloso, permitame felicitarles.- Dice sonriendo muchisimo.- Permitanme decirles que han tomado la decision adecuada. La colinia es el mejor lugar para criar niños.- Se queda un minuto mirandoos como embobada.- Oh, si perdonen por favor pasen a esa sala y rellenen este formulario estandar. Enseguida les atenderan.- Os dice señalando una habitacion contigua.

- Gracias señorita.- Dice Bardas y cuando esta lo suficientemente alejado añade.- Acabo de descubrir que dicen de las rubias es cierto.