Partida Rol por web

NOCHE ♦ CUATRO

<<Nada se parece tanto a la injusticia como la justicia tardía.>>

Ya todos sabían que se aproximaba la hora de que las votaciones mostraran su resultado. Mientras algunos observan expectantes la pantalla del ordenador, otros observan como poco a poco la conciencia de Arthur se va apagando. Los torniquetes improvisados no fueron suficientes para detener el sangrado. Su piel se había palidecido cada hora, y el piso que le rodeaba se teñía cada vez mas de rojo. Y antes de conocer el resultado de quién caería, Arthur abandonaba el mundo de los vivos. Sus ojos se cerraron, y su rostro mostraba la impotencia de aquel que había sacrificado una parte de su cuerpo para sobrevivir. La ironía de su situación golpeaba la moral de algunos. No fue justo.

No hubo tiempo de lamentar la situación de Arthur, puesto que la pantalla del ordenador ya mostraba un nombre. Parecía también irónico que quien decía haber ajusticiado a los secuaces del psicópata fuera la elegida por la vox populi para caer, tal como lo habían hecho Nick y Hugh.

La chica los miró a todos con un odio enfermizo, conciente de su destino, gritó a viva voz improperios e insultos sobre cada uno de los presente, los maldijo en vida, mientras todos daban un paso hacía atrás cuando el collar comenzó a parpadear y a sonar con un timbre repetitivo. Todos apartaron la mirada cuando el sonido de la explosión dejó sus oídos zumbando. Al volver a mirar, una descabezada Marion yacía en el suelo, inerte.

Todos se miraron sin saber que decir, algunos se abrazaron a si mismos, otros lamentaban la perdida de alguno de los caídos, pero tras el dolor y la angustia que trajó a sus corazones la muerte, un nuevo hecho los sorprendía. Charlotte ya no se encontraba entre ellos. Había desaparecido. Nadie la vió marchar, nadie supo donde estaba. La buscaron en las habitaciones, en el baño, en la sala donde el cuerpo de la ejecutada Jacqueline seguía descansando, pero no la encontraron. Intentaron buscar en las puertas cerradas, pero no abrieron.

Ellos no mienten...dije mirando a Kyle, Charlotte buscaba de todas formas posibles desviar la atención sobre ella...cuando dijiste que era culpa tuya Kyle, Ellos se alteraron y aun te rodean asechando, espectantes...no les ha gustado tu actuar...

Continuaba junto a Arthur, quien yacia muerto ahora...mire a Matt...hay situaciones en que el orgullo se deja de lado...pero son desiciones que cada uno de tomar...gracias...

Despues de buscar a Charlotte por todas las habitaciones, no estaba, sabia que entre nosotros aun habian mas ayudantes del anfitrion, pero Ellos no querian hablar ahora, algunos me susurraban cosas de Robinson, parte de su historia y como se habia convertido en lo que fue...

Ahora jusguen si mentia o no....aun sigo aqui y al parecer a ella la han sacado...

Miro a Arthur y la culpa me invade al momento. Va a morir, va a morir por mi culpa. Temblando me acerco a él y observo que si no hago nada de inmediato su vida se acabará. Por muy mal que me haya tratado tengo que compensar lo que le hice a Ziba. No puedo dejarle morir, sería casi como matarlo...

-NO! Joder... Qué he hecho!-Salgo corriendo con cara de horror de la sala para ir a mi habitación. Mi torpeza hace que me caiga al suelo de bruces, pero me levanto y sigo mi camino con lágrimas en los ojos. Otra vez no, otra vez no por favor.

Vuelvo a la sala con un desfibrilador de mano y con los ojos casi fuera de mis casillas. Si Arthur muere no podré perdonármelo jamás. Me inclino ante él y me doy cuenta de que lo que suponía que iba a pasar ha pasado. El corazón de Athur se ha parado. Las manos me tiemblan mientras intento poner todo punto.-Joder! Aguanta! Aún estás a tiempo!

Se me cae uno de los aparatos al suelo. La vista se me nubla por las lágrimas, pero consigo a duras penas colocar el desfribilador en su sitio. Antes de activarlo.

Un shock. El cuerpo de Arthur sufre una fuerte sacudida, pero nada pasa. Aumento el voltaje y repito la acción. Nada. Aumento el voltaje una segunda vez. -VAMOS!

Matt se mueve rápido, quiere salvar la vida de Arthur, quizá aún haya tiempo. Intenta con el desfibrilador, una, dos, tres veces. La perdida de sangre parece ser preocupante, pero los ojos de Arthur comienzan a temblar. Parece que funciona. Pide ayuda al resto, trasladan a Arthur a su habitación.

Matt hace lo posible por salvar su vida, al entrar en la habitación de Matt ven que esta es diferente a la del resto, más parece una sala de operaciones esterilizada que una celda roñosa.

Tras lo que parecieron ser horas de trabajo, Arthur se estabiliza. Despierta en la camilla, con un muñón en el brazo, vendajes limpios, con la camisa rota. Su cuerpo manchado de sangre. Arthur parece mágicamente traído a la vida. Un milagro, sin duda.

-Ho... Hola Arthur.-Le digo a Arthur, avergonzado por mi actitud anterior.-No te levantes... Te he hecho una transfusión sanguínea, pero aún estás muy débil. Cuando se pase el efecto de los calmantes avísme y te pondré más. Por poco mato a aquel hombre, de echo técnicamente ha estado muerto unos segundos.

Intento contener las lágrimas.-Lo siento. Lo siento mucho. Casi no lo consigo. Yo... Desconfiaba de ti. Me acusaste a la primera de cambio y... Lo siento. Yo no soy como ellos, pero todo esto está pudiendo conmigo.

Quedo sorprendido con la vuelta a la vida de Arthur... la verdad es que Matt parece un buen tío...

Le pego unas palmadas en la espalda a Matt y le digo: - buen trabajo zoquete!... te luciste!- giro mi vista a Arthur y le digo: - Seguirás manco, pero al menos vivo... pero cuéntame... de verdad se ve un túnel con luz al final?- le digo entre medio en serio y broma.

Tengo varias cosas que me rondan la cabeza, toda la discusión que ha habido, todas las muertes... pero me centro en el presente, en la vida que se nos va ante nuestra presencia. Matt no había obrado bien en un principio, pero me sorprendió gratamente cuando decidió luchar por la vida de Arthur, aunque tal vez fuera ya demasiado tarde. Me alegré sinceramente de que ambos consiguieran que éste recuperase el aliento de vida: por el que casi la pierde, y porque decidiendo obrar con sus conocimientos, Matt había recuperado una parte de sí mismo que seguramente había estado mermada por las drogas.

Me acerco a Matt y pongo mi mano sobre su hombro a modo reconfortante.

-Lo has hecho muy bien, Matt. Deberías estar orgulloso -le digo sinceramente al muchacho intentando infundirle ánimo.

Luego me acerco a Arthur. El pobre tío iba de guatemala a guatepeor.

-Tienes más vidas que un gato! -digo quitándole algo de hierro a un asunto que tiene de todo menos gracia- Eres realmente un superviviente nato, me alegro que lo hayas conseguido. Luego me aparto y le dejo espacio para que respire tranquilo y se recupere. Seguro que va a estar mal unos días.

Estoy sorprendido. Sólo quiero un tiempo de calma, sin muertos. Necesito asimilar lo que ha pasado antes de hablar, porque hay algo que realmente no comprendo en absoluto.

El anciano se había ido convirtiendo poco a poco en un zombie. Dormía cuando la alarma se lo ordenaba y se levantaba cuando volvía a hacerlo. Se tomaba sus pastillas y comía carne en lata, pero no hablaba, sólo los miraba con ojos ausentes, como fuera de sí mismo. La gente iba, venía, se moría y ahora de repente también resucitaba.

Eso fue lo que lo hizo reaccionar y se acercó a Matt para felicitarlo. Notaba la garganta seca pero le agradaba ver al pobre drogadicto saliendo adelante y haciendo algo bueno por los demás. Al menos ya no tendría que temer que le quitase sus pastillas. Por fin una buena noticia. Bien hecho muchacho. 

Ver como Arthur moría fue un duro golpe, me quedé sin poder reaccionar durante un rato, por suerte Matt actúo rápidamente dejado el orgullo de un lado, desde luego era el mejor momento para hacerlo, pero ¿podría hacer algo por él? Eso parecía, y finalmente el herido volvió entre los vivos en el último segundo. Estuvo cerca, muy cerca de no contarlo. 

Limpié con mi mano la gota que delataba la tensión a la estaba sometido, hubiera sido la muerte más injusta de todas las que ha habido en este amasijo de salas llenas de mentiras, sangre y suciedad, y eso que la lista de fallecidos ya era bastante larga. Miré al pequeño Matt, hizo lo que tuvo que hacer en un principio, algo tarde pero funcionó, lo consiguió. Mi gesto hacia fue suave, me faltaban las palabras, pero pudo ver en mi mirada agradecimiento y aprobación hacia su persona. 

Este día en concreto, estaba siendo largo y difícil, muy difícil, nuestra paciencia, nuestra entereza y sobretodo nuestra humanidad estaba siendo puesta a prueba, me preguntaba hasta que punto aguantaríamos, pero a pesar de todo tenía esperanzas. Lucharía hasta el final y saldría de aquí, y no solo precisamente, me llevaría a los restantes conmigo hasta que sea lo último que haga, pero antes de nada, otros asuntos requerían ser atendidos. 

Me acerqué al herido, se que no era el mejor momento pero no tenía opción a retrasarlo, la noche se nos venía encima y el tiempo apremiaba. - Arthur, necesito nombres ¿tienes alguna idea? Marion, Jacqueline y Joseph han caído, ¿qué sabes de Hugh?–  Le miré fijamente, esperando una respuesta, no pensaba dejarle descansar hasta que me respondiera. Todo este juego absurdo y macabro tenía que terminar, solo espero que para bien pese a que a estas alturas me podía esperar cualquier cosa.

Y me quedaba el asunto de Kyle y Charlotte, pero no podía encargarme de todo por ahora, pero no pensaba dejarlo correr, eso seguro.

Arthur abrio los ojos lentamente, confundido con lo que podia ver. En unos segundos a visto a gente muerta y ahora parecia que habia vuelto entre los vivos. "Pero como mierda?" se pregunto mirando interrogante a Matt enfrente suyo.

Lo escucho atento aunque aun no podia creer que le haya resusitado, era demasiado increible y su mente no podia pensar tan rapido como queria. Gracias dijo debilmente mientras sonreia, era lo minimo que podia decirle luego le reclamaria el tiempo que tardo en atenderme.

Miro a los demas cuando empezaron a decirle cosas, le costo darles algo mas que una sonrisa en un principio con la boca seca. Igualmente hizo el esfuerzo para poder hablar de lo que habia descubierto. Vi un pasillos sucio y una puerta de metal desgastada. Pero tambien vi a los demas muertos...junto a la siquica. respondio con seriedad aunque se notaba que seguia incredulo a todo el tema de los muertos. "Talvez lo alucine todo" penso racionalmente. Ante el comentario de Mike solo sonrio con cierto orgullo aunque el cansancio no le permitio que durara mucho tiempo.

Luego vino CJ a mirarme fijo y preguntarle cosas que le habia parecido ya habia respondido. Hugh era inocente. fue lo unico que dijo para que le quedara claro.

Cuando el collar de la rubia está a punto de estallar, una vez más me tapo los oídos y aparto la vista, asustada. Estoy harta de encontrarme en esta situación. Harta de ver cadáveres sin cabeza.

Al empezar a reponerme parece que Arthur ha pasado a mejor vida. Sin embargo, Matt no se da por vencido, y mi mayor sorpresa no es que consiga salvarle, sino ver cómo de diferente es su habitación. Podría haberlo dicho antes....

Entonces todos dan palabras de ánimo a uno o a otro, pero cuando miro alrededor me doy cuenta de lo que sucede. Hay alguien que falta entre nosotros.

- Valiente hija de puta... - Murmuro, antes de dirigirme directamente a Kyle. - ¿La estabas encubriendo, verdad? Era totalmente culpable. Dime, ¿qué hay de Marion? ¿Nos mentiste?

Había buscando a Charlotte por todas partes, con la impresión de que estaría en cualquiera de esas salas, atada a una a máquina esperándo a morir... y yo tendría que verlo, sabía que me obligarían a hacerlo... pero ella no apareció. Aún hay esperanza... 

Volví junto a los demás, observándolos, demasiado avergonzado y confuso como para abrir la boca durante un rato, no sabía que cojones hacer ahora... había estado apunto de morir... ¿pero morir para qué?. Para que ella viviera...

-Sí, la estaba encubriendo, Sam. No podía verla morir... antes prefería morir yo si era necesario. Y ahora ha desaparecido. Sobre Marion, no tengo la certeza, pero Charlotte siempre la defendía, yo quería votarla y ella siempre encontraba una excusa para no hacerlo... por eso empecé a pensar que podía haber algo raro con ella. Arthur nos podrá decir si era inocente o no... espero que de verdad la fuera.

Debía inventar una historia creible y simplemente escogí a Marion, no podía acusar a ninguno de los otros sin pruebas, ni siquiera al gilipoyas de Corey...

-Os pido perdón, he sido un puto gilipoyas. Podéis preguntarme lo que queráis, por mi parte no habrá más mentiras. Debe quedar sólo uno de esos cabrones, si lo descubrimos podremos salir de aquí. -Y quizá aún pueda encontrarte... -Revisemos las votaciones... Arthur puede confirmar quienes eran ayudantes de ese chiflado, preguntaros una cosa... De los que estamos aquí... ¿quién no ha votado nunca a alguno de los culpables?

Me quedo mirándo a Matt... había dejado desangrarse a Arthur, y ahora lo reanimaba como si de un milagro se tratáse.

-¿Tenías un puto desfribilador todo este tiempo?...

Ver la expresión y el agradecimiento de los demás me llena de orgullo. Por primera vez en mucho tiempo sonrío de verdad, sin necesidad de ninguna droga. A decir verdad no recuerdo muy bien la última vez que sonreí. Fue antes o después del accidente? Qué más da...

Los ojos se me humedecen de emoción por haber salvado una vida, la verdad es que sienta muy bien.-Gracias.-Digo, visiblemente emocionado y con una sonrisa de absoluta felicidad en la boca.-Gracias, de verdad. No... No creía que fuese capaz. Es... Es genial. Acabo de salvar una vida. Mis ojos reflejan por primera vez emociones positivas. Ilusión, confianza. Todo parece haber cambiado a mejor.

Pero Kyle habla de malas formas, parece como que me esté acusando. Mis ojos pasan de alegría a ira y miro a Kyle con gesto de odio. -Sí. lo he tenido aquí todo este tiempo. Algún problema? Cuando querías que lo usase? Cuando quemaron vivo al gordo? Cuando volaban por las aires las cabezas de la gente? DIME, CUANDO TENÍA QUE DECIRLO?-Mis ojos reflejan un sentimiento más, el miedo.-Por si no te has dado cuenta ellos ahora saben que si alguien consigue pasar la prueba yo podré salvarlo. YO! Dime Kyle, si lo hubiese confesado tú crees que habría podido salvar a Arthur? O habría estado yo en la prueba en vez de él?

-Así que no te atrevas a acusarme. Tú! Precisamente tú, que sabías lo de Charlotte. Maldito mentiroso, como te atreves!?

- ¡Eh! ¡Eh! - intervengo - Calma, chicos. - Les digo, acercándome a ellos.

- Creo que Matt hizo bien en mantenerlo oculto. Tú también nos escondiste lo de los teléfonos, Kyle, mientras pudiste. Todos escondemos algo. Así que vamos a pensar con la cabeza.

- Si no tenemos en cuenta las últimas votaciones, que supongo que esos cabrones ya sabían que Charlotte se largaría, así que les daba igual votarla, los únicos que han votado a los culpables confirmados son Arthur y Mike. Si tenemos las últimas en cuenta también Isabela y Harold. Además, creo que a ella podemos descartarla. Después de todo, fue quien acusó a Charlotte.

-Tienes razón en eso, Sam. Entonces sólo nos queda que Arthur nos confirme si Marion era o no inocente, y podremos seguir atando cabos.

Me encojo de hombros, y después miro con duda a Matt.

-También tú tienes razón. Lo siento. Debemos dejar de atacarnos y encontrar al último de esos cabrones.

Yo no puedo confirmar nada, he entregado las herramientas que he conseguido a uno de los presentes.  dijo de a poco recuperando su tono de voz normal. Si al que le di mis herramientas me las devuelve o al menos el aparato identificador entonces podre decirles si Marion era asesina o no.... explico mirando a todo el resto, aunque él que las tenia sabia que le habla a él. Aunque ella misma lo confeso. agrego mirando extrañado al rockero.

El aire era denso, agobiante incluso, se podía palpara la muerte y la tensión  por todos lados, era agobiante. En aquel momento me hubiera gustado tener un cuchillo entre mis manos para poder cortarlo, sería una alivio para todos. Con la desaparición de la rubia más joven la desconfianza entre unos y otros provocaba más tensión.

Era el momento de intervenir, así lo creí, quizás pueda arrojar algo de luz a este turbio asunto, donde cada error uno de nosotros moría de una forma poco agraciada.  Aunque habían mencionado los votos duda que nos pudiera ser de ayuda. Pero primero le dediqué unas palabras de “ánimo” al chico, si es que eso era posible viniendo de mí por culpa de nuestra “relación” tan poco afortunada.

- Matt, has hecho bien en ocultarlo, yo también lo hubiera hecho. Si te hace sentir mejor, no serás el único que tenga una diana dibujada en la espalda. Así que no creo que tus posibilidades de no vivir otro día más hayan disminuido, al menos no demasiado.

Miro a Arthur por un momento, como si hubiera entendido el mensaje, él no las tenía. Las había entregado a uno de los presentes.

- He estado repasando las votaciones, y de todas formas Marion fue votada por Jaqueline, así que no creo que nos sirva de mucho la idea de usar dicha teoría para averiguar la identidad del restante secuaz. Joseph solo pudo votar a Mike, y Jaqueline votó a Kyle y después así misma. Y Charlotte hizo cruzada contra Arthur y después a Kyle. Marion en cambio voto a Alfred, a Robinson, a mí y finalmente a Kyle. Por lo que se puede comprobar que no siguieron un patrón, me imagino que para no ser descubiertos. Además, comparto la teoría de Sam…digo, la señorita Harris. Marion había confesado, no tenía ningún sentido seguir protegiéndola, y votándola, era la mejor defensa que podían tener. Lo único positivo de todo esto, es que solo queda un cómplice, o quizás una.

Apoyé una de mis manos en mi frente, como si eso me facilitara a la hora de pensar en todo este entresijo que parecía no tener fin ni sentido alguno, pero que era real, tan real que podía sentir como nuestras miserables vidas pendían de un hilo realmente fino que en cualquier segundo se rompería acabando así a una historia de desdichas.

- Sobre Charlotte, desconocemos su paradero, así que ya no podemos hacer nada más por ahora. No creo que la alarma tarde mucho en darnos la señal. Habrá que esperar a mañana para continuar reuniendo pistas.

Y así acaba mi exposición de los hechos, guardé silencio por si alguien tenía algo que objetar o añadir, después de todo yo no era el único que se encontraba atrapado en aquel especie de refugio donde a algunos les esperaba la muerte.

Durante la noche y al amanecer, Ellos se comunican conmigo...apenas tenga mas información se las hare saber...

Isabella se acerco a su habitación, sabria que la noche seria una completa pesadilla, que la atormentarian de nuevo..

Arthur, me alegra que estes bien...Matt...gracias...

Si fuimos traidos por nuestros pecados, creo que aun tenemos esperanzas...

Kyle, me alegro que hayas recapacitado, Ellos ahora estan tranquilos y algunos sonrien, Charlotte esta viva, de eso estoy segura, como tambien que buscara venganza...

Harold escucha las palabras de Isabella con un escalofrío. Al principio le daba lástima esa joven que creía que hablaba con los muertos pero ahora le da miedo pensar que pueda ser cierto. Él nunca ha sido supersticioso, claro que no. En Vietnam se veían demasiados horrores reales como para preocuparse de fantasías. Y Harold siempre ha tenido los pies en la tierra, era la única manera de salir cuerdo de allí.

Mira nervioso a su alrededor, llevándose una mano al bolsillo donde tiene las pastillas y toca la caja con alivio. Al menos si el corazón decidía fallarle tendría su medicación a mano. Falta poco para que suene la alarma. Creo que me voy a retirar a mi habitación. Su voz suena temblorosa. Están siendo demasiadas emociones para un señor mayor como él.