Partida Rol por web

Eryn Lasgalen, El bosque de de las Hojas Verdes

Cap. 5: Râd Angalaladh

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09/12/2016, 17:23
Freagulf

Turno 507A.

Si saber como, se intenta poner en pie y lo consigue. El algo rubiales se espereza con sumo cuidado al disponer de poca seguridad en si mismo. Había estado sollozando todos estos días. Ni una palabra había salido de sus labios, y solo había salido de su boca algún suspiro y llantos apagados. Amordazados por la vergüenza y la pena. Pero ahora, ya móvil, tenía que trabajar. Los caballos había estado sin ser atendidos por sus ojos demasiado tiempo, y tenía que recuperar el tiempo perdido. Quitar el barro de los cascos. Repasar clavos y herraduras. Patas y pezuñas en búsqueda de cortes, arañazos o muestras de infecciones. Ya no estaba Ulfer, pero eso no quería decir que se desatendieran en resto de caballos. Era, o por lo menos consideraba que era su responsabilidad. Se lo debía a los caballos, se lo debía a Ulfer. Tenía que cuidar de sus caballos, de sus hermanos, mientras su amigo cabalgaba por la verde colina, en una manada donde no le faltarían ni hembras ni manzanas que degustar.

Le hizo una promesa, y el montón de manzanas que le debía llegaría hasta él, por el estómago de sus hermanos de sangre. Todos estos caballos podrían saborear aquellas deliciosas frutas, pero en realidad sería Ulfer quien la disfrutaría.

Con los que se cruzaba, hacía un gesto con la cabeza, pero no era capaz de pronunciar palabra alguna. No había acumulado aún el valor para pronunciar nada. Una pena aún revoloteaba por su mente, y era un familiar que había perdido. El último familiar que le quedaba. Ahora, sólo podía apoyarse en amistades. Como el oriental; como el resto de compañeros. Compañeros que habían compartido algo más con él que una cerveza y una charla. Habían compartido sangre y lucha, hombro con hombro. Rezaba al Gran Jinete y a su Meara porque albergasen en su seno a Ulfer, y que Erik le mantuviese un respeto; una consideración especial. De acuerdo que era yo quién lo había sacrificado gustoso por ayudar a un Hermano de Armas, pero era Erik quién había sido el destinatario de esa ayuda. - Rezo por ello. Ha muerto por mi culpa.

Otro sollozo se escapó mientras con un palito retiraba la mugre del caso del caballo que había marchado en cabeza con un palito que había tomado del suelo. Tras la sonora muestra de pena quebró el palo, para poder tener una punta más limpia y más predecible, en la función que esta realizando. Se secó las lágrimas con la manga, y siguió con lo que estaba haciendo.

Sorprendido se dio cuenta que ya no eran lágrimas. Había llorado en seco. No sabía lo que eso significaba, pero era un cambio. Una alegría en su alma, pero no lo suficientemente grande como para decidirse a comentar nada. Aún así dejó la pata del animal y se irguió todo lo alto que era, para estirarse alzando los brazos hacia la cúpula verde que les cubría. Buscó con la mirada a Tedmuyin, durante un instante, y luego regresó al trabajo. En su gesto se dio cuenta de que la niebla les rodeaba totalmente. No había forma de pelear contra aquello, pero ... muchas veces la niebla oculta ataques y otros sustos. No le importaba y se centró en el trabajo.

- Hay mucho que hacer y has ganduleado demasiado grandullón. Los cuidaré por ti Ulfer. Por ti.

 

Notas de juego

Sire, necesito ayuda con lo del sistema ese de poner el tiempo que he desaparecido.

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09/12/2016, 18:43
Temudyin

Turno 507

La lluvia pasada y la niebla no ayudaban en nada para saber cual era el camino bueno. Una por la poca distancia que dejaba ver y la otra porque había borrado toda huella que diese algo de luz para el grupo. Temudyin pensaba mirando a ambos caminos. Uno era un poco más ancho y parecía ir más recto. Era muy poca información y confundirse de camino podría retrasarles más aún.

- Creo que debemos arriesgarnos con este. - Dijo por fin el tuerto mientras señalaba con su lanza el camino un poco más ancho y que parecía ser más recto en dirección oeste. - No recuerdo bien los mapas, pero creo que el camino que nos indicaron era casi recto. ¿Por casualidad nadie cogió un mapa, no? - Preguntó sabiendo la respuesta mientras medio sonreía y miraba a sus compañeros. Estaba animado. La noche había sido buena para él y parecía estar mejorando su estado de animo y salud.

No así el gran Haelembor. Tenía mala cara y parecía estar cayendo enfermo seriamente. Como leyéndole la mente, el gigante de las verduras tosió con una fuerza exagerada, pues pareció un ladrido de perro que una tos. - Esa tos no es nada buena, amigo. Envuélvete bien en una o dos mantas y cuando paremos para comer intentaremos hacer una infusión o algo. No se si tenemos hierbas necesarias, si no es así, tendremos que dar una batida más amplia para intentar encontrar algo.

Luego se volvió para mirar los caminos de nuevo. - Bien, Tülak, ¿que decides? - Debían decidirse pronto y no demorar más la marcha.

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09/12/2016, 19:23
Erik Frost

Turno 507

A pesar de recorrer un buen trecho por el camino que giraba hacia el Suroeste, no pudimos sacar nada en claro.

Chakka, parecía encontrarse mejor tras una noche junto al fuego y su animo había crecido en consonancia.

A nuestro regreso, compartimos averiguaciones con TÛlak y llegamos a la conclusión que no existía manera de probar fidelignamente cual era la senda principal, sino era adentrándonos en ella con todas las consecuencias.

El primero en dar su opinión fue Chakka.

Estoy de acuerdo con Chakka... Dije para todos, pero mientras hablaba dirigía mis gestos al Umli.
...yo apostaría por seguir rectos, el Rad Angalaladh discurría hacia el Noroeste de una manera precisa y constante...la desviación que chakka y yo acabamos de tomar parece que retrocede durante un buen tramo...bien podría ser solo un recodo en el camino, pero este otro parece algo más ancho y por lo que cuentas sigue dirección Noroeste durante los primeros Kmetros...yo digo que no perdamos más el tiempo...a menudo lo que parece una veta de piedra no es mas que piedra... y si resulta ser de Oro, compensará el tiempo perdido en retomarla...

A lo lejos el Ailgratha parecía algo más animado que los días previos. Se dejaba ver de cuando en cuando y cuidaba de las Bestias con un permanente gesto de melancolía dibujado en su rostro demacrado.

Kolli se mostraba ausente, pero más animado que de costumbre. Sus gruñidos y quejidos habían dado paso a un espíritu mas curioso y participativo. El hecho de mantener sus manos ocupadas en la confección del refugio sacó a la luz una parte de él que pocos habríamos adivinado. Se mostraba alegre, casi dicharachero, compartía chanzas con el reservado Tûlak e incluso se atrevía a proponer infusiones culinarias al avezado gigante de las verduras.

Por su parte Haelembor no perdía la sonrisa. En los últimos días su resfriado había ido en aumento y a pesar de que se esforzaba por mostrar su debilidad al resto del grupo, resultaba evidente que sufría en silencio.

Cuando llegó la hora de la comida, nos detuvimos en un recodo del camino y descansamos al amparo de un grupo de castaños franqueados por varios troncos caídos.

Practiqué un pequeño fuego para calentarnos y que la digestión no resultase un frio impás en el camino.

Esta noche deberías descansar nuevamente amigo comenté mientras mordisqueaba un trozo de cecina.
Y tal vez prepararte una de esas infusiones que guardas para los demás...si es preciso, Tulak y Chakka pueden dedicar un rato para ayudarte a buscar las hierbas que necesitas mientras el resto montamos el campamento.

Si uno de nosotros enferma, el grupo se resiente...de nada nos sirve que te ocupes de nosotros si no te ocupas de ti mismo...

En mi foro interno, estaba seguro que el Beornida se encontraba débil a causa de su precaria alimentación, nadie podía aguantar una travesía a través de aquel infierno de raíces y humedad con solo unas verduras...lo que necesitaba era un buen bocado de jamón y unas costillas rebosantes de magro pasadas al espetón...pero estaba claro que el Norteño no se tomaría a bien mis advertencias al respecto, de modo que no le dije nada.

Cuando llegó la noche, aparte de mis labores habituales, ayudé a Tûlak nuevamente con el fuego. Seguimos el ritual de la noche anterior aplicando el aceite previamente para no ahogar la chispa del yesquero.
La antorcha había sido de gran ayuda para ayudarnos a encender el fuego en medio del infierno de la ventisca. Durante el día la tormenta no había sido tan dura y aunque la humedad y el frió seguían dominándolo todo, teníamos la madera seca que habíamos guardado del día anterior, no sería tan difícil encender fuego esta vez. O eso pensaba.

- Tiradas (1)

Motivo: Fuego

Tirada: 1d100

Resultado: 49

Notas de juego

Edito para ayudar a Tûlak con el fuego, aunque en este turno Nagre no nos dijo que hiciera falta tirar para lograrlo...

Imagino que el anterior fue cosa de la ventisca y en esta ya no es tan grave(?)

Supongo que si le dedicamos un tiempo terminaremos encendiendo fuego, después de todo la Yesca y el pedernal son para eso xD

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09/12/2016, 20:20
Tülak

Turno 507

Con el chapoteo de mis botas sobre los charcos y el barro como únicos compañeros, me interné por el ancho camino que discurría directamente hacia el oeste, buscando cualquier señal de que este era el conocido como Râd Angalaladh, pero, tras diez minutos de husmear autenticas piscinas de aguanieve, hube de darme por vencido:

- Nada, es imposible discernir nada, la ira de Manwë y Ulmo ha borrado todo rastro legible...

Pasé un par de minutos, inmovil, con la cabeza girada hacia la continuación del camino, como si, en un momento, fuese a ser capaz de horadar la pertinaz niebla, y fuese a ver algúna marca realizada por los Hombres del Bosque que se comentaba que vivían en el "Bosque de las Hojas Verdes", y que, sin duda, conservaban el camino transitable.

Recorrí el camino de vuelta en silencio, un silencio que agradecía, lleno de matices, y que, si sabías escucharlo, estaba lleno de conversaciones encubiertas de aves, mamiferos, e incluso los árboles. Recordé, como si hubiese sido ayer, con profunda admiración, la capacidad que tenía Telagon para "entender" las conversaciones de los árboles. Siempre pensé que me tomaba el pelo, pero en ocasiones como esta, en pleno silencio, hubiera jurado por los ainur que algo escuchaba, un poco mas allá de mi capacidad de comprensión. Pensando sobre ello, llegué de nuevo a la bifircación, donde esperaban un mas que maliciento Haelembor, y el maltrecho, aunque con mejor cara esta mañana, Freagulf, protegidos ambos por Kolli, un perfecto ejemplo de la fortaleza de los naugrim. Negué con la cabeza, no queriendo romper ese silencio. Pero cuando llegaron Chakka y Erik, y ellos tambien negaron, cerré los ojos, masajeando mis sienes:

- No podemos siquiera plantearnos esperar, perder mas tiempo nos alejaría demasiado de nuestro objetivo... Tienes razón, Chakka, creo que el ancho que he verificado yo es mejor opción: yo también recuerdo el camino como recto, hacia el oeste, en una pendiente leve al norte.

Despues, mirando con seriedad y preocupación a Haelembor, agregué: - Pero sí pararemos allá donde nos digas para conseguirte las hierbas que necesites para frenar ese constipado, compañero. Esas toses están empeorando... Cuando te parezca que pasemos por un buen lugar para buscar, dilo y Chakka y yo buscaremos esas plantas. Una buena infusion ha de ayudarte, sin duda.

Tras eso, me giré hacia el camino, agarrando las riendas de Zanahoria, que chapoteaba levemente en un charco, monté, e inicié la marcha: - Que Oromë nos guie..., murmuré, mientras iniciabamos la prueba por ese camino.

Horas despues, la salud de Haelembor empeoró, y tras consultar con la mirada al resto, levanté el puño en señal de alto. Comí con rapidez una tira de carne seca, y un trozo de pan del camino, y mirando a Chakka primero, consulté a Haelembor: - Que necesitas que busquemos, beornida?? Alargaremos la parada para que descanses un poco. Si la fiebre sube, y te caes del caballo, desmayado, habremos dado un gran paso atrás...

Cuando el hombretón contestó, hice una señal a Chakka, y tras señalar lo obvio a mis compañeros para que protegieran su posición salimos en busca de las hierbas que nos había descrito*, unas hierbas cuyas raices que, segun nos comentó Haelembor, muchos animistas y sanadores, usaban para potenciar las defensas naturales y depurar los pulmones. A ello nos pusimos el bosquimano y yo durante una hora, esperando encontrar al menos lo suficiente para que el beornida pudiese comenzar su tratamiento.

Nada, de nuevo, frustrado, volví hacia el campamento con las manos vacías, esperando que el bosquimano hubiese tenido mejor suerte. 

Tras el largo descanso, un doblemente forrado beornida se recostó sobre su caballo, tratando de descansar, mientras continuabamos camino, deseosos de ver algo que nos confirmara que la corazonada de Chakka había sido correcta: - Al menos no nos hemos encontrado con un fondo de saco..., pensé, aunque la frustración por lo poco preciso de mis busquedas me hizo valorarlo con cierto amargor.

Cuando la noche caía en el viejo bosque, con los animales agotados por el esfuerzo extra contra el barro, paramos en un pequeño claro a unos 50 metros del camino. No era especialmente bueno, pero al menos, al estar en ligera pendiente, no había acumulado charcos, así que, con una breve preparación por nuestra parte, conseguimos un pequeño terreno en el que aposentar nuestros cansados cuerpos.

- Erik, ayudame con el fuego, anoche nos salió bien. Kolli, empieza a montar el campamento mientras Chakka hace una batida para asegurar que no tendremos sorpresas durante la noche. En el momento en que consigamos la llama, te ayudaremos a preparar todo. Me muero de hambre, y Haelembor necesita recuperar energía.

Despues, mirando a los impedidos, les dije: -Aprovechad a descansar lo que podais, compañeros. Quieran los Valar que mañana sea un dia favorable para todos... Se que podía sonar a palabras huecas, pero realmente creía en la influencia de los enviados de Ilúvatar sobre nuestro devenir. Haelembor, en cuanto tengamos el fuego, dinos como ayudarte a preparar tu brevaje, y nos ponemos con ello...

Mas tarde, durante la cena, barruntando sobre las distintas opciones, dije: - En cuanto a las guardias, Freagulf y Haelembor descansaran toda la noche. El resto, haremos guardias de 3 horas cada uno, salvo yo, que doblaré, haciendo la primera solo y la última, con Chakka. Erik y Kolli, repartíos la segunda y la tercera. Vuestra visión en la oscuridad es necesaria en las horas centrales de la madrugada...

Tras eso, y despues de aliviar un poco la vejiga, me dispuse a realizar mi primera guardia, con la armadura puesta, salvo el yelmo, no quería perderme ningun ruido o movimiento mientras mis compañeros descansaban...

- Tiradas (5)

Motivo: Forrajear (hierbas para Haelembor)

Tirada: 1d100

Resultado: 24(+35)=59

Motivo: Campamento nocturno

Tirada: 1d100

Resultado: 48

Motivo: Fuego

Tirada: 1d100

Resultado: 46

Tirada oculta

Motivo: Percepción guardias

Tirada: 1d100

Resultado: 51(+37)=88

Tirada oculta

Motivo: Abierta??

Tirada: 1d100

Resultado: 55

Notas de juego

* Cuento con que nos puede decir algo, y podemos buscar, si no, se obvia y punto!! xDD

RastrearCampamentoFuego y Percepción hechas, para las distintas cosas que voy haciendo durante el dia, ok?? Espero que Erik me ayude con el fuego, porque si no, vamos apañaos!! xDD

Edito: Tienes toda la razón, Erik, no se por que pensaba que Nagre nos habia pedido tirada de fuego!! X_X Pero tienes razón, sin estar en situacion limite, creo que conseguiriamos hoguera sí o sí...

Por cierto, enano, te has "ido" un turno por delante!! No es 508, si no, 507!! ;)

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12/12/2016, 15:02
Temudyin

Turno 507 II

No se discutió mucho sobre que camino seguir pues todos estaban de acuerdo que el que era algo más ancho y recto hacia el oeste era la mejor opción. El camino entre la niebla fue tranquilo, pero la mente paranoica de Temudyin no le dejaba descansar, pese al buen animo con el que se había levantado. Seguía mirando a todos lados esperando un ataque de los malditos orientales.

A la hora de comer, Tülak dio ordenes directas, como buen un buen líder tenía que hacer. El tuerto escuchó las explicaciones del Beornida sobre las plantas que debían buscar. Pensó en explicar las plantas que él conocía, pero supuso que estas no crecerían por aquellos parajes tan distintos a las tierras donde vivió antaño. Con un movimiento rápido de cabeza, asintió al umli y empezó su búsqueda de hierbas. No le gustó separarse de Tülak, pero así abarcarían más área de bosque y las hierbas eran necesarias.

La misma tónica de la mañana, fue la que siguió por la tarde. El camino fue tranquilo y con un tiempo, que a pesar del frío y la niebla, no trajo más lluvia. La mente paranoica del tuerto, hacia que este volviese repetidamente la cabeza para atrás. Alguien nos sigue. Repetía una y otra vez su cabeza y él la obedecía sin poder evitarlo.

Por la noche, nada más encontrar donde situar el campamento, se dedicó a hacer la batida, como bien ordeno Tülak. Una vuelta rápida alrededor reconociendo el terreno y buscando posibles puntos propicios para un ataque. Su mente, otra vez le volvía a ser precavido y cauteloso y quizás se demoró algo más de lo normal.

Después cuando volvió, ayudó a terminar de preparar lo que faltaba y cenó en silencio junto al fuego, intentando entrar en calor.

- Tiradas (3)

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 9(+57)=66

Tirada oculta

Motivo: Forrajear

Tirada: 1d100

Resultado: 57(+50)=107

Tirada oculta

Motivo: Percepcion Guardia

Tirada: 1d100

Resultado: 99(+57)=156

Notas de juego

Tirada de Percepción para la batida, Forrajear y Percepción para guardía. Todas sin restar penalización alguna. Master, no se si tengo o no, en la tutela pone que si, pero por enfermedad que se supone que ya la he pasado, ¿no?

Sobre las guardias,  no se que propone Tülak.  :D

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12/12/2016, 15:33
Director

RESOLUCION TURNO 507

 

La jornada, pese a que amaneció sin lluvia, fue bastante dura. La humedad del ambiente, fruto de la ventisca del dia anterior, había dejado un velo de niebla que tardo casi todo el dia en desaparecer. No vieron el sol hasta última hora de la tarde, cuando faltaban solo un par de horas para el anochecer. El frio estaba presente en todo momento, se acrecentaba dentro de la niebla y hasta los huesos se resentían de la falta de temperatura.

Habían confiado en su instinto, y tomaron el camino que creyeron conveniente. Por el ramal izquierdo se adentraron, pues discurría hacia el noroeste; casi recto al que habían seguido hasta el momento; mientras que dejaron atrás el otro, que giraba levemente al suroeste. El avance era muy pesado, el barro se iba acumulando en los cascos de los equinos, que tenían que alzar las patas más de lo normal para sacarlas del lodo que se había formado. No avanzaban demasiado aprisa, tenían miedo de herir a alguna de las bestias y de perder por tanto una importante manera de ganar terreno.

Tülak y Temudyin iban en cabeza, cabalgando al unísono abriendo camino por el lodazal en que se había convertido el camino. Tras ellos iba Haelembor, que visiblemente débil, hacia esfuerzos por mantenerse sobre Gilmor cada vez que tosía, mientras viajaba embozado en una manta. A él estaba atada Dali, la mula que llevaba la mayoría de los enseres para el viaje, y que a su vez arrastraba las parihuelas. Estas dejaban amplios surcos en el camino, que rápidamente se llenaban de agua. Freagulf iba sobre ellas, taciturno aun por la pérdida de Ulfer, varios días atrás. Se encontraba mejor, la pierna le dolía menos, pero aun estaba convaleciente. Había estado cuidando de los caballos en los descansos, pese a que lo mejor sería que no tratase de forzar la pierna, pero era lo menos que podía hacer pues sentía que era su deber. Cerraban Erik y Kolli, que trataban de no quedarse demasiado atrás, pero también de no acercase en exceso.

La sensación de peligro había desparecido casi por completo, tanto que apenas dirigían sus miradas atrás, o buscaban enemigos entre los árboles. El desagradable encuentro con los orientales había tenido lugar hacia ya una semana y no habían vuelto a tener constancia de que los hubieran seguido de algún modo.

Cuando la niebla al fin se levanto, pudieron ver como el sol comenzaba a esconderse tímidamente. Tardo un rato aun en hacerlo, momento en que aprovecharon para buscar un sitio para dormir. Encontraron con las últimas luces, un pequeño hueco entre los árboles, a pocos metros del camino, que permitía tener los caballos juntos y tumbarse en el suelo. Era una zona algo elevada y aunque completamente húmeda, al menos el barro no se acumulaba en ella. Bastaría con buscar la manera de aislarse del frio suelo. Ya casi a oscuras, lograron encender de nuevo el fuego, usando una vez más los troncos a medio quemar que habían recogido de los restos de la anterior hoguera, no tardaron en prender la llama, que poco a poco se iba volviendo fuerte y vigorosa consumiendo la madera seca. Tulak y Erik se encargaron de ello.

Los demás prepararon el resto del campamento, no montaron tienda, pues la habían destrozado la noche anterior, por lo que usaron su lona para tenderla en el suelo y dormir sobre ella. Ataron los caballos a los arboles y se dispusieron a colocar mantas alrededor del fuego. Era tarde para ponerse a buscar hierbas, pero Haelembor recordó que poseían un pequeño herbolario entre las cosas que les fueron entregadas. Temudyin se apresuro a buscar la bolsa en cuestión y se la llevo al beornida. No eran gran cosa, pero alguna era útil para aquel momento. Entre ellas, Haelembor reconoció una. Era una raíz que aun permanecía húmeda, casi viscosa. Se trataba de la raíz de Arlan, una planta que solía crecer en las montañas y que era usada por muchos pueblos para combatir los resfriados. Era justo lo que necesitaba. Tardo un poco en recordar cómo debía prepararse aquella raíz, pero cuando lo consiguió, dio explicaciones a sus compañeros para tomarla.

Tenían que rallar la raíz y ponerla a hervir tras mezclarla con agua. Después inhalaría sus vapores y le ayudaría a superar el catarro que empeoraba por momentos. Así lo hicieron y cuando estuvo listo, Haelembor tomo los vahos con la infusión.
Se prepararon para dormir, hicieron guardias sin contar con Freagulf ni con Haelembor, para dejar que descansasen como era debido. Al calor del fuego, y sin amenaza de lluvia, bastaba con estar cerca del fuego para calentarse lo suficiente como para no sufrir los rigores del invierno.

La mañana siguiente se despertaron, el dia no era como el anterior, esta vez la niebla había desaparecido. Entusiasmados se dispusieron a ponerse en marcha. Antes de partir, le hicieron otra infusión de aquella raíz y volvió a tomarla. El camino comenzó con más ánimo que de costumbre. Tras la ventisca y la niebla, el poder avanzar sin las inclemencias del tiempo, era todo un lujo en aquella época del año. Dos días después, la lluvia volvió a hacer aparición, de nuevo, Haelembor empeoro después de haber mejorado. Al menos por la noche, podían descansar relativamente bien, pues la lluvia les daba un respiro al ponerse el sol. El cuarto dia, por fin, vieron el final. El camino, varios metros más adelante, se abría a un mar de hierba donde el sol golpeaba con fuerza sobre las briznas que crecían allí. Estaban llegando al linde del bosque.

Pero algo llamo la atención a varios miembros del grupo, vieron un bulto, algo se movía en el suelo mas allá del lindero, una veintena de metros siguiendo el camino tras dejar el bosque atrás. Aun les quedaban otros veinte para alcanzar el borde del bosque. No podían ver lo que era desde allí, parecía una roca, o una piedra grande que estaba junto al camino…

 

 

- Tiradas (8)

Motivo: Herboristeria Helembor

Tirada: 1d100

Resultado: 67(+35)=102

Motivo: TR Haelembor

Tirada: 1d100

Dificultad: 73+

Resultado: 38(+20)=58 (Fracaso)

Tirada oculta

Motivo: percepcion guardias

Tirada: 1d100

Resultado: 49

Tirada oculta

Motivo: percepcion guardias

Tirada: 1d100

Resultado: 55

Tirada oculta

Motivo: percepcion guardias

Tirada: 1d100

Resultado: 44

Tirada oculta

Motivo: percepcion guardias

Tirada: 1d100

Resultado: 42

Motivo: clima

Tirada: 3d100

Dificultad: 20-

Resultado: 87, 7, 44 (Suma: 138)

Exitos: 1

Motivo: TR Haelembor

Tirada: 3d100

Dificultad: 73+

Resultado: 93(+20)=113, 46(+20)=66, 98(+20)=118 (Suma: 297)

Exitos: 2

Notas de juego

► Anotad el próximo turno como “Turno 508

► Avanzamos cuatro días desde la bifurcación.

► Veis a veinte metros del linde del bosque, cuarenta desde donde estáis, algo que no diferenciáis. Tirada de Percepción, “Muy difícil” desde esa distancia.

► Queda una hora de luz para finalizar este cuarto dia.

► Haelembor recupera dos niveles de enfermedad, aun tiene un -10 a la actividad y ha de superar una TR de N4.

► Habéis gastado cuatro dosis de Arlan, solo queda 1.

► Freagulf, han pasado 13 días desde tu lesión. Baja el penalizador de -80 a -40. En tres días mas estarás restablecido por completo.

► Resolución del próximo turno: JUEVES 15-12-16

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12/12/2016, 17:39
Freagulf

Turno 508A

SE había dado cuenta que Tedmuyin había estado inquieto todo el camino durante ese día. Muchas veces miró atrás. Muchas más de lo normal, y sobre todo si lo comparamos con el resto del grupo. Se movía despacio, entre los animales. Limpiando las pezuñas, cuartillas y cañas con sus manos. Con mucho cuidado, y si notaba algo duro, limpiando la zona, por si era algo clavado. Temía que con lo profundo que pisaban en el barro se hubieran herido.

- Una infección puede evitarse si se detecta problema a tiempo, y si no ... igual perdemos a la bestia.

Aún así, seguía distante. Pero por lo menos su mente se entretenía en algo. Cuando se sentó, se hizo hacia su amigo para intentar conversar. Entonces le susurró sus primeras palabras en días.

Notas de juego

► Freagulf, han pasado 13 días desde tu lesión. Baja el penalizador de -80 a -40. En tres días mas estarás restablecido por completo.

CHACHI

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12/12/2016, 18:01
Freagulf

Turno 508AA

¿Qué has visto amigo; o es algo que te preocupa?

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13/12/2016, 10:56
Temudyin

Turno 508 (Contestación a Freagulf)

Freagulf, extrañado de las continuas miradas del bosquimano hacia atrás, le había preguntado a este sobre lo que miraba, aprovechando que el tuerto se turnó con Erik en las posiciones de marcha.

- No veo nada, pero sigo pensando que esos malditos perros nos siguen. - Por un momento pareció meditar sobre sus palabras. - Lo cierto es que no hay razón para pensar eso, pero ya sabes como soy, siempre pensando que me siguen. - Le dijo sonriendo como disculpándose de su mente paranoica.

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13/12/2016, 14:09
Temudyin

Turno 508

Cuatro días habían pasado desde la bifurcación. Días que aprovecharon para avanzar todo lo posible y gracias al buen tiempo en la mayoría de ellos, consiguieron recorrer bastante distancia, excepto uno, que volvió a llover, pero por suerte para ellos no con la intensidad de unos días atrás. A parte de ese día, los demás los cogieron con ganas, por lo menos Temudyin que se levantaba con ánimo para seguir con la marcha.

Durante ese tiempo, Halembour había estado tomando los vapores de la raíz de Arlan y algo había mejorado. No del todo pues de vez en cuando esa tos característica suya, silenciaba el bosque unos segundos. Luego los típicos sonidos de la naturaleza, a los que ya estaban más que acostumbrados, volvían a envolverlos en su constante marcha por el Râd Angalalath.

También Fregulf se notaba mejor de estado físico. Ya no gruñía tanto y parecía soportar mejor los baches del camino que sacudían toda la parihuela donde seguía tumbado. Era evidente que los cuidados del animista habían ayudado en la pronta mejoría del rohirrim. Pese a que su ánimo seguía bajo por la gran perdida, se notaba que el rubio jinete había cambiado de actitud, retomando los cuidados de los equinos. Incluso alguna palabra dejaba escapar de sus casi siempre cerrados labios.

Por fin, el cuarto día algo cambio. Delante de ellos el eterno túnel de hojas verdes parecía tener su final. - ¡Por fín! Llegamos al otro lado del bosque, cosa que en algún momento me pareció imposible. Y creo que no fui el único en pensar así, ¿verdad Kolli? - Dijo en broma girándose para mirar al enano, que en más de una ocasión había comentado lo poco que le gustaba aquel bosque. Según iban avanzando, la claridad dejaba ver más detalles de lo que les esperaba fuera. Un mar de hierba donde el sol golpeaba con fuerza. Un cambio total de entorno que alegraba al bosquimano. El frío y la humedad dentro del bosque entumecía los huesos y músculos y ya notaba la necesidad de notar el sol en la cara. Mirando la salida, cada vez más cercana, fue cuando algo llamó la atención del tuerto. Al ir el primero junto a Tülak, cuando paró su montura, toda la compañía se paró. - Un momento. ¿Veis aquel extraño bulto? Me parece haber visto que algo se ha movido. - En silencio sin apartar la vista de aquello que le había llamado la atención, esperó un par de segundos. - ¿Será otro cervatillo? - Bromeó recordando el susto en el claro hace ya bastantes lunas.

Aunque había bromeado, su lado paranoico había vuelto a llenar su mente y estaba empezando a convencerse de que delante tenían una emboscada de los malditos perros orientales. El lugar era propicio. Una pradera de hierva donde esconderse era más fácil y el sol cegando a los viajeros que salían del bosque. No. No caeremos tan fácilmente. Pensó a la par que tramaba un plan para evitar aquella sucia trampa. Su cuerpo empezaba a ponerse en tensión recorrido por la adrenalina.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 64(+57)=121

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13/12/2016, 17:13
Director

Turno 508
Percepción

 

Temudyin trato de vislumbrar lo que veía delante. Era un bulto, grande, de color marrón. No se movía en si, era mas bien algo que lo rodeaba, o que removía desde esa posición... Se fijo mas tratando de averiguar de que se trataba... ¿un caballo? ¿un caballo tumbado? podía ser... ¿había movido la cola tal vez?¿La cabeza? Quizás no era eso, tal vez alguien trataba de esconderse sin éxito tras una roca, ¿o era un arbusto? Tendría que mirar mas de cerca para averiguarlo.

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13/12/2016, 17:17
Freagulf

Turno 508AAA

- Tranquilo hermano. Intentó calmar sus ánimos. En tu mente siempre te seguirán, y verás sombras extrañas, allá donde fueres, pero que sepas, que mientras quede algo de aliento en este cuerpo. Sorbió por la nariz con un tono de pesar. - No estarás solo para bregar contra esos mal nacidos, y procurar que duermas con más tranquilidad.

- Además, ya no está Ulfer, para cuidar, así que tendré que cuidar de ti. Y le dio un amigable empujoncito en el hombro que lo hizo moverse graciosamente, como si fuera el bajado de una campana, puesta al contrario.

Arrastraba pena en sus palabras, pero también indicaba, que el tener una ocupación entretendría su mente, y así, no caería en la desesperación. En la tristeza por perder un ser querido.

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13/12/2016, 17:22
Freagulf

Turno 508B

Se puso en pié, apoyándose en el hombro de Chakka. - Igual es una roca, pero si lo comprobamos, estaremos más tranquilos. Miró en derredor y preguntó: - ¿No será el oso que no está esperando para cobrarse la ayuda que nos prestó?.

La verdad es que no tenía muchas ganas de nada. Tenía aún molestias, y estaba recobrando los ánimos, pero no lo suficiente como para recobrar los ánimos que le arrastraron a perseguir al explorador que Tedmuyin descubrió al principio de su viaje. - Aquella loca carrera. Aún así, si encontraba algo con lo que descargar su frustración a espadazos, se resarciría de todos estos días imposibilitado. Por lo menos, durante un acalorado rato.

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13/12/2016, 19:15
Erik Frost

Turno 508
El fin de la amplia senda se abría ante nosotros como una enorme sonrisa, sus dientes, dorados por el reflejo de los primeros rayos del Alba en los juncos maduros, se mecían acompasados al son del Viento del Oeste.
Una jornada de luz y calor nos esperaba al otro lado de aquellos últimos troncos que franqueaban el Bosque verde.
Sin embargo aquel laberinto de raices y barro, todavía debería cobrarnos un ultimo peaje por abandonar sus humedos y oscuros dominios...

En cuanto Chakka y el resto de pies largos nos pusieron sobre el aviso de que algo se movía en el claro, mis instintos de combate se activaron.

Instantáneamente, retrocedí unos pasos y recogí mi maza de combate de las alforjas de Helmund para asegurarla firmemente en mi cinturón. Si aquello era un cervatillo, entonces estaba demasiado bien alimentado...y si no lo era, tal vez necesitásemos tirar de la artillería pesada.

Acto seguido, desenvainé mi Jabalina y eché a andar cautelosamente hacia el lugar donde había percibido el movimiento.
Mientras lo hacía escrutaba con atención aquel océano de juncos intentando discernir que era aquello que se movía entre las hierbas...cuando estuve a unos 25 metros del objetivo, me agazapé entre ellas y eché la vista hacia atrás esperando las indicaciones del Umli.

El bosque verde suspiraba a nuestras espaldas y su aliento, frío como el beso de la muerte, congelaba los corazones de aquellos que acariciaban la luz que arrojaba su salida.

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Percepcion (Algo se mueve ¿que es?)

Tirada: 2d100

Dificultad: -20+

Resultado: 100(+20)=120, 28(+20)=48 (Suma: 168)

Motivo: Acechar/esconderse

Tirada: 1d100

Resultado: 19(-25)=-6

Notas de juego

Recojo mi Maza de Combate y desenvaino mi Jabalina. (También tengo el martillo equipado)

Embrazo mi escudo

tiro percepcion Oculta con Yelmo con -20 por Muy Dificil.

Me adelanto 15 metros, hasta estar a unos 25 de lo que se mueve. Y espero por las ordenes de TÛlak^^

Edito: Aunque no lo pides, dejo hecha una tirada de Acechar/esconderse por si fuese necesaría, ya que roleo que me acerco cautelosamente....

Edito2: Roleo que me agazapo entre las hierbas, dando por hecho que las hay, aunque todavia no llegué al claro...si no las hubiese en el camino, me apartaria a un lado y me esconderia entre la maleza o tras el tronco de un arbol...
Por cierto, la hago abierta, avisame si prefieres que las haga ocultas^^

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14/12/2016, 19:59
Tülak

Turno 508

Elevando una plegaria a Mililic, mas por inercia de haberlo hecho miles de veces, en el pasado, antes de entrar a formar parte de los Montaraces, seguidores de Oromë, nos adentramos en el camino algo mas ancho, y que Chakka había elegido, quizá siguiendo una corazonada. La persistente niebla se aferraba al suelo, como si de las garras de una bestia que no quiere soltar a su presa se tratara, y estuvo con nosotros hasta que, por fin, fue derrotada por el postrero sol del atardecer de aquel primer día de viaje tras el temporal que acabó con Haelembor francamente enfermo. Al menos, la lluvia nos dio una tregua, y cuando por fin tuvimos claro que seguiamos el camino correcto, y no un fondo de saco ciego, que hubiera echado por tierra nuestras pretensiones de llegar a tiempo a Tir Anduin, al fin pude soltar el aire que almacenaba en mis pulmones, como si lo fuese a necesitar para resistir la decepción, mientras pensaba:

- Bien por el tuerto bosquimano!!!, pensé, aunque, como tantas otras veces, las palabras se ahogaron en mi garganta, pues no encontraron voz que las entonase, aunque clavé mis ojos, azules como el hielo del fondo de un glaciar, en el bosquimano, durante varios segundos, en una franca muestra de respeto por sus habilidades.

La pierna de Fragulf, gracias a los cuidados del animista, fue mejorando con el paso de los días, aunque aun viajaba en las parihuelas que tan buen resultado nos habían dado durante el viaje, y si bien es cierto que apenas comía, y solo alguna que otra palabra salió de sus labios en aquellos dias, al menos parecía que recuperaba el brillo orgulloso en sus ojos, a la par que sus rutinas cuidando de las monturas, quizá para hacer mas llevadero por el dolor de su perdida.

Por su parte, Haelembor luchaba con bastante éxito contra su mal, gracias a que recordó que, entre nuesto ingente equipo de inicio, llevabamos algunas hierbas que podía usar contra él, así que, rallando unas raices de olor penetrante, se fue haciendo unas infusiones que inhalaba con fruición, y al menos hacía disminuir la intensidad de su tos, y le ayudaba a expectorar. Uno de los días, la lluvia volvió, y, de nuevo, recayó levemente, para volver a remontar el dia siguiente.

Al atardecer del cuarto dia, por fin, llegamos al final del camino, que serpenteaba entre los postreros arboles antes de morir en un mar de hierbas, verdes por las lluvias generosas de Nínui, que se mecían a merced del inclemente viento que venía de las Hithaeglir, como conocían los elfos a Las Montañas Nubladas, a cuyo norte, contaba la leyenda, se encontraba, profundo bajo la montaña, el lugar donde despertaron los primeros naugrim, origen también de mi raza.

Pero no todo parecía tan placido y bucólico, Temudyin se tensó sobre la silla de su montura, la vista fija al frente, así que levanté un enguantado puño de nuevo, llamando al resto de la comitiva a detenerse, y, haciendo visera, traté de vislumbrar aquello que había llamado la atención del bosquimano, y que se agazapaba a unos 40 metros de nuestra posición: - Parece una roca..., o no será...*

Despues, desmonté despacio, sacando del camino a Zanahoria, que parecía haber olfateado nuestra incertidumbre, y guiñaba las orejas, mientras sus pupilas crecían, haciendo una seña a mis compañeros para que hiciesen lo mismo. Entonces hablé, sin levantar la voz: - Hasta que no sepamos qué es aquello, o si puede suponer un problema, seguiremos valiendonos del subterfugio que nos da la espesura... En ese momento, Erik, que ya se había armado su maza de combate, hizo ademan de acercarse, diciendo que quería estar a una distancia desde la que poder reaccionar, si aquello resultaba ser un enemigo. Meneando la cabeza, mientras cerraba entornaba los ojos, le dije, con un breve esbozo de sonrisa:

- No dudo, mi buen amigo, de que serías capaz de tumbar a un troll negro de un solo golpe, pero el rechinar y el traquetear de tu armadura llamarían la atención del mas sordo de los sordos, al igual que pasaría con la mia..., le concedí, mirando a su vez mi cota de mallas, así que, por qué no dejamos que Chakka, cuya sutileza al moverse rivaliza con la de los ligeros elfos, se acerque, mientras los demás esperamos su señal, preparados...?? Bueno, los demás, menos Freagulf y Haelembor. Mirandoles fijamente, continué hablando, bajo, grave: - Se que estais mejor ambos, pero necesitamos que os recupereis completamente para enfrentarnos a las corrientes del Anduin, así que, por favor, esperad acontecimientos, y no entreis en combate si no es estrictamente necesario..., si es que finalmente lo es..., concluí, con la mirada fija en la zona en la que se vislumbraba el extraño bulto, antes de hacerle una señal a Chakka para que procediese, y calzarme mi yelmo, embrazar mi  escudo y, lanza en mano, acercarme con cuidado tras uno de los troncos, sensiblemente mas finos que los que habíamos visto en lo mas profundo del bosque, y esconderme tras una mata de hojas pegajosas. Desde allí esperaría la señal de Chakka, o su vuelta, si tenía que dar el informe volviendo hasta nosotros...

- Tiradas (4)

Tirada oculta

Motivo: Esconderme

Tirada: 1d100

Resultado: 62(+7)=69

Tirada oculta

Motivo: Abierta??

Tirada: 1d100

Resultado: 63

Tirada oculta

Motivo: Percepcion (-20 por muy dificil, sin yelmo)

Tirada: 1d100

Resultado: 12(+17)=29

Tirada oculta

Motivo: Abierta??

Tirada: 1d100

Resultado: 39

Notas de juego

Joooooderrrrrr, se me ha apagado el ordenador segundos antes de darle al puto click de enviar!!!:''''''(

Bueno, en fin, paciencia, y a rehacer el post (tochopost era, cagontó!!), ahora que lo tengo fresco!!

*, lo que sea, según nos salga la tirada!! xDD

Por partes:

Chequeo de Percepcion Muy Dificil (-20), para ver qué es aquello.

Si puedo, freno al aventurero Erik que, cual hombre osquesta, pretende presentar nuestros respetos al "cervatillo y sus 2000 arqueros"!! xDD Que vaya un "pofesional", alma de cantaro!! Jajajaja!!!

Me pongo el yelmo, y embrazo escudo y lanza.

> Me escondo tras un arbol (Acechar/Esconderse).

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14/12/2016, 22:23
Erik Frost

Notas de juego

^^ Ok.

Nagre, a peticion del Lider de grupo, anulo mi accion de adelantarme eses 15 metros y espero ordenes. Supongo que no habrá problemas para eso.^^

Bien visto Haffi, yo es que queria aprovechar el turno para hacer cosas y como no siempre es posible esperar a que postee Tûlak...

Siempre que lo creas oportuno, haz como ahora y rectifica las acciones de Erik...en principio siempre obedecerá las ordenes de Tûlak...y siempre puedo anular accion.

Si tuviese mas tiempo, no me importaria esperar al post de Tûlak, por desgracia no es asi, de modo que habra que asumir que a veces tendre que rectificar mis acciones^^

Espero que no sea un Troll...se suponia que ya no habia bichos de eses en esta epoca xD

Siento lo del Post..a mi tambien me ocurria mucho T.T

Ahora o uso Word, o procuro copiar mi post a medida que lo escribo por si algo falla. Animo!^^

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15/12/2016, 12:52
Kolli Gyrdrson

Turno 508.

El humor del herrero había ido aumentando así como algo en su interior le decía que estaba escapando al fin del tenebroso abrazo de aquel bosque maldito. 

- Si estas fuesen tierras civilizadas como mi hogar, amigo mío, ¡habría una buena posada donde poder descansar y celebrar nuestra dicha! Ya invitaré a un buen festín. - Rió desenfadado.

Después, la tensión volvió a cargar el ambiente. Había algo fuera de lugar en aquel paisaje, y no sería inteligente pensar que sus perseguidores se habían dado por vencidos.

Oteó el horizonte con los ojos entrecerrados, mientras Tulak tomaba el mando. Confiado de que por fin empezaban a actuar al unisono, dejó las decisiones para el umli, asistiendo el sentido común de sus palabras.

- No tengo ninguna gana de corretear por el campo detrás de conejos, esperaré a que digáis lo que tenga que ser hecho. - Afirma, pertrechándose como el resto de sus compañeros.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 74(+5)=79

Notas de juego

pues eso, embrazar martillo y escudo y ponerme yelmo

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15/12/2016, 19:49
Director

Turno 508
Percepcion

 

Alli delante, Erik lo ve claro. Aquello era un caballo, esta tumbado, y estaba vivo. Movía la cabeza de arriba a abajo, como si estando allí tirado disfrutando de los rayos de sol. No había nadie cerca, o al menos, nadie a la vista...

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15/12/2016, 19:55
Director

Turno 508
Percepcion

 

Tülak trato de vislumbrar lo que veía delante. Era un bulto, grande, de color marrón. No se movía en si, era mas bien algo que lo rodeaba, o que removía desde esa posición... Se fijo mas tratando de averiguar de que se trataba... ¿un caballo? ¿un caballo tumbado? podía ser... ¿había movido la cola tal vez?¿La cabeza? Quizás no era eso, tal vez alguien trataba de esconderse sin éxito tras una roca, ¿o era un arbusto? Tendría que mirar mas de cerca para averiguarlo.

 

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15/12/2016, 19:56
Director

Turno 508
Percepcion

Kolli trato de vislumbrar lo que veía delante. Era un bulto, grande, de color marrón. No se movía en si, era mas bien algo que lo rodeaba, o que removía desde esa posición... Se fijo mas tratando de averiguar de que se trataba... ¿un caballo? ¿un caballo tumbado? podía ser... ¿había movido la cola tal vez?¿La cabeza? Quizás no era eso, tal vez alguien trataba de esconderse sin éxito tras una roca, ¿o era un arbusto? Tendría que mirar mas de cerca para averiguarlo.