Asiento mientras mi mente divaga un momento tratando de imaginar como le habra dejado el pelo a Carolina, hasta que por fin su pregunta me saca
de mis pensamientos
Madrid?, bueno, pues en el centro seguiran mas o menos tranquilos como siempre, y los barrios cada vez mas duros, mas gente para el mismo sitio y los mismos curros, lo de siempre
Veo que al final vas a querer celebrarlo por todo lo alto... cuando te decidas vamos a ver que encontramos... y si quieres algo "especial" malo sera que entre las dos no convenzamos a Mark Digo con una risita
"Curros"... No me es del todo desconocida esa palabra en jerga actual... ¿Trabajo, puede ser? Sea como fuere, deduzco algunas cosas de la escueta respuesta de mi contertulio.
-¿Puedo suponer, pues, que usted creció y vivió en alguno de esos barrios de los que habla además de verse obligado a trabajar de forma, podríamos decir, prematura? Quizá estoy pecando de exceso de curiosidad... Lo cierto es que yo mismo me sorprendo... No es necesario que conteste a mi pregunta, discúlpeme, ha sido una grosería... Me disculpo, con cierto rubor en las mejillas. Es evidente que no estoy nada habituado a las conversaciones del siglo XXI...
-Acabo de recordar algunos momentos que pasé junto a Mr. Perryns de Hampshire... Un hombre muy cabal y correcto, con quien compartí allá por el año 1795 conversaciones tan agradables que acabé por encariñarme de aquél lugar. Él era muy amigo de Jane Austen y no fue especialmente difícil llegar a conocerla. Una mujer de lo más entrañable, se lo puedo asegurar. Por aquél entonces y desde hacía ya unos cuántos años, comenzó a desarrollarse en Inglaterra una curiosa inquietud intelectual por Oriente, sobre todo por Japón, país del que, hacía no mucho, había regresado. ¿Y a colación de qué viene todo esto? Llámeme loco, si es menester, pero creo que algo en usted me ha recordado a aquél hombre del que le hablaba... ¿No tendrá usted ascendencia anglosajona? ¿Usted se llama Charlie, cierto? Pregunto, intrigado de pronto.
Tampoco te preocupes, si mi barrio era uno de esos tan entretenidos respondo quitando importancia a la pregunta, que tampoco la tiene,
Escucho el comentario sobre inglaterra con cara asombrada Con tantos años habra conocido a tanta gente que al final habra gente parecida, pero ¿un ingles de hace tres siglos?, mola
Bueno, que yo sepa no, vamos todo el mundo me llama Charlie desde hace muchos años, pero en mi carnet pone Carlos, pero creo que lleva tanto tiempo sin llamarme nadie asi que no me daria cuenta de que me estan hablando a mi
¿Qué te parece el negro entonces? A mi me gusta... es más elegante.
Julia se pone el vestido sobre ella misma exhibiéndolo un poquito, luego se acerca a Elisa y le da un beso.
¿Sabes qué me gustaría? Montárnoslo aquí los tres... tiene su cosa el que te puedan pillar.
Le devuelvo el beso y con cuidado le quito el vestido de la mano dejándolo en un taburete del vestuario para que no se estropee.
Mark no esta aquí pero yo si y te dije que hoy haría lo que quisieras... empiezo a besarle el cuello poco a poco con suavidad Solo espero no gritar demasiado... es algo que no puedo evitar digo bastante roja.
Estás loca...
Me dejo besar el cuello suavemente y me echo contra el espejo del vestidor mientras empiezo a acariciar suavemente la espalda de Elisa sobre el pareo.
Como nos pillen nos va a caer la grande...
No te daba cosa precisamente eso... Empiezo a masajear por encima de la ropa interior mientra la veo a los ojos. Creo que todo esto es una locura y nos van a pillar pero le había prometido hacer lo que quisiera y si se la puede contentar tan fácil... Aunque habra que darse un poco mas de prisa que esta noche no vaya a venir alguna dependienta a ver por que tardamos tanto
Cuando parece que ya han acabado de hablar shiro vuelve a la mesa y se sienta tomando un sorbo de su cerveza. Espero que las damas no se retrasen demasiado, hace no mucho que conoci a mis primas y tiene la costumbre de hacer esperar a todo el mundo comento con una sonrisa
Entro en el centro comercial mientras hablo por el movil, parandome en la puerta un segundo antes de colgar Claro papa, nos te llamare mañana, saluda a tu mujer y a mis hermanos. Dila a la abuela que la llamare mañana y espero que se mejore cuelgo guardandolo en el bolso. Entro y me encamino hacia las escaleras mecanicas bajandome las gafas del pelo.
Vestida asi:
Con esto al cuello
y estas son las gafas
Saludo a Shiro con un gesto cuando vuelve
Pues creo que tendremos que esperar un poquito, por lo que me dijo Caro debian estar cambiando de peinado
Vuelvo por un momento a mi sonrisa algo boba al volver a pensar en la llamada
Estoy saboreando mi cerveza cuando por unas escaleras emcanicas aparece Paulina con un atuendo extrañisimo.Oye Charlie esa no es Paulina, co esa ropas tan raras parece otra .
desde una mesa en el restaurante de la entreplanta Shiro te saluda con la mano esta junto a charlie y profesor Bradley. Estan tomando un aperitivo y por el numero de sillasdeben estar esperando a alguien mas.
Saludo a Shiro con un leve gesto de mano antes de volver a dirigir mi vista al frente mientras tamborileo en el posabrazos de la escalera mecanica. Al llegar arriba camino hacia una tienda donde entro y estoy un rato, salgo con una bolsa y compro un cafe sentandome en un banco a tomarmelo
Si me disculpais un segundin voy a saludarla y vuelvo .
Todavia ligeramente perdido en mis pensamientos hasta que me la señala Shiro
Si va rara, no se habra quedado con su novio o algo asi hay que joderse que pintas
Shiro se levanta y se acerca hacia Paulina andando tranquilamente.se acerca hasta ti . -hola Paulina , menudo cambio de look , vas a alguna fiesta?
Tienes razón, me encanta... ven aquí...
Cojo a Elisa del cuello y la acerco a mi besándola salvájemente mientras mis manos se deslizan por todo su cuerpo lujuriosamente hasta terminar en su culo.
Hazme tuya cariño... ¡Qué emoción...!
Podria decirse, luego voy a llevarme a mi novio a dar un vuelta y quiero que me vea guapa sonrio bajandome un poco las gafas y mirandote por encima de la montura ¿Esperando a alguien?
Entro en el centro comercial solo, caminando tranquilamente, y mirando las diferentes tiendas que hay por ahí, no parece que sepa muy bien que busco, simplemente paseo y ojeo los escaparates, hasta que por fin veo una joyería, y entro en el interior de la misma...