Partida Rol por web

Nos dejo el Restaurante para que lo lleváramos en su ausencia.... - decía con tono desconfiado a aquel hombre -

Si quiere que le demos algún recado, solo nos lo tiene que decir - terminaba de decir Takeshi -

No logras ver nada por la ventana. Ni siquiera puedes distinguir las formas que hay en su interior. El cristal no solo está tintado, si no que tiene varias rugosidades. Solo ves luz, y poco más. Por otro lado, podéis escuchar claramente tras la puerta...

Siento decirle que Kar Wai ha abandonado el Restaurante, mataron a su hija, de la afliccion se fue lejos de aqui..., no se mas...

Nos dejo el Restaurante para que lo lleváramos en su ausencia.... Si quiere que le demos algún recado, solo nos lo tiene que decir

Jack te mira desconfiado- Esto si que es la gota que colma el vaso. Kar Wai no tenía hija. Prepárate, pero no ataques hasta que yo te lo diga...

De repente, Jack dice a quién se encuentre tras la puerta- Muy bien, lamento molestarle, ya volveremos en otra ocasión, siento molestar... -Una vez dice esto, retrocede unos pasos, coge carrerilla, y...

¡GUAYAAAAAÁ! -Grita, mientras pega una patada voladora contra la puerta. La puerta parece resistente, pero eso no es problema para el negro. Cuando te asomas, ves que en el interior de local, al fondo, se puede ver a una mujer, algo joven, acompañada de un tipo con cara alucinada con lo que acaba de pasar. Y, en el suelo, puedes ver al propio Jack, que ha sacado una Desert Eagle, apuntando a la cabeza de un chaval, que no tendrá más de 20 años...

Muy bien payaso, ya puedes empezar a hablar. Kar Wai no tenía hija, y no dejaría su restaurante tan fácilmente. Además... ¿Acaso te crees que soy tonto? ¿A quién pretendías engañar con esa mala imitación de anciano?. Ya puedes empezar a hablar, y, por tu bien, espero que sea coherente...

Al otro lado de la puerta, escucháis- Muy bien, lamento molestarle, ya volveremos en otra ocasión, siento molestar...

Parace que, quien fuera que llamase, se ha ido, porque no oís nada. Takeshi se da la vuelta, se encoge de hombros, y, de repente...

¡GUAYAAAAAÁ!

La puerta de abre de par en par, con un sonoro golpe. La cerradura salta, destrozada. Podéis ver, por unos intantes, como un tipo negro, con una camisa vaquera, y una AK-47 en la espalda, acaba de abrir la puerta con una patada voladora. El tipo aterriza sobre Takeshi, que cae al suelo. El hombre, le sujeta un brazo para inmovilizarlo, y saca del pantalón, una Desert Eagle. Por las pintas, diríais que es americano. ¿Qué coño hace un americano buscando a Kar Wai en Hong Kong?.

Al otro lado de la puerta, podéis ver (bueno, Karin y Flash, porque Takeshi solo ve el suelo) a un tipo elegante, trajeado, con el rostro impasible, que sujeta dos glocks, una en cada mano. Karin apenas puede reaccionar, al igual que Flash.

De repente, el negro, comienza a hablar- Muy bien payaso, ya puedes empezar a hablar. Kar Wai no tenía hija, y no dejaría su restaurante tan fácilmente. Además... ¿Acaso te crees que soy tonto? ¿A quién pretendías engañar con esa mala imitación de anciano?. Ya puedes empezar a cantar, y, por tu bien, espero que sea coherente...

Que coñ...¿cómo que no es su hija?, fuimos  a por la chica luchando contra los Espinas del Loto negro, cuando llegamos ya era tarde para ella, no pudimos hacer nada, los malditos esbirros de las Espinas del Loto negro nos jodieron retrasándonos, el anciano afligido nos paso el restaurante para que lo llevaramos, si supiese donde se halla Kar Wai, el mismo os lo contaría.....,¡¡quitate de una puñetera vez de encima mio !! -decía enojado Takeshi -

Imite al anciano porque de momento nadie conoce lo que te he dicho, asi que suelta, pedazo de revienta puertas.... - decía Takeshi, notando como una pistola se le apoyaba en la cabeza -

Jin Lau miró a Jack y no pudo evitar reir, el negro repartía leña como un profesional. El pistolero quitó el seguro a sus armas y entró despacio por la puerta, como la muerte misma, una vez pasado el umbral, el elegante y trajeado asesino alzó las manos cual cristo, apuntando a ambos lados de la sala, para tener a todos controlados.

-Todo el mundo quieto, las armas que hacen "bang" al suelo y a cuatro pasos de los cuchillos, calderos, y bandejas.

Advirtió. Recordó una mala experiencia donde un camarero de un restaurante italiano en Nueva York le atizó con una bandeja de canelones.

-¿Todo controlado, "hermano"?

Lau miró de reojo al negro y dibujó una afilada sonrisa, aunque por ahora, esa broma solo la entendían Jack y Lau.

Todo hubiese sido más fácil si no te hubieses puesto a imitar a Kar Wai -Dice el hombre, mientras sigue apuntando a la cabeza con la pistola al Takeshi- De momento, empezaremos por lo fácil. Quizás luego te suelte. ¿Quién coño sois vosotros, y porque os dejó el restaurante Kar Wai?. ¿Quienes son esos Espinas de Loto que mencionas? ¿Por qué coño mataron a Karina?

¿Espinas de Loto?. No creo que esos chinos sin pelotitas hayan intentado extenderse en esta época. Es la época de máximo poder de los Ascendidos, y ya saben cómo se las gastan...

Saliendo de su asombro inicial, a Flash le parece una falta de respeto total como han entrado esos tíos en el restaurante. Si eran pocas las pérdidas que tenían por su culpa con los platos, encima ahora había que reparar la puerta.

Inignado, pregunta- Bueno, ¿y quién coño sois vosotros para entrar así en el restaurante?.

El negro alza la cabeza, y mira a Flash con una sonrisa. Ante su pregunta, responde- Lo siento tipo duro, pero yo he preguntado primero. Debería inquietarte más por qué todavía no os he volado la cabeza por estar en el restaurante de Kar Wai, cuando es evidente que ninguno sois camareros...

Y ahora, sale respondón el rubiales. No sí, al final, tendremos que liarnos a tiros...

Jin da un paso hacia Flash y lo encañona.

-Eh Nick, tienes pinta de llamarte Nick, me gusta Nick.

Insistió, para poner nervioso a su adversario e incluso, tener la pinta de ser un tipo tranquilo en una decisión limite....en realidad estaba tenso como una cometa.

-Nick oye, en serio, yo he intentado hablar con él también y se pone de mala leche cuando le interrumpes así que...Callate. Por cierto, deberías cortarte el pelo.

Opinó, asintiendo en plan amigable, un poco cinico. Sus ojos otearon el lugar, el restaurante tenía pinta de ser un poco cutre, y estaba algo destrozado o en reformas recientemente, aunque Lau optaba por el destrozo gratuito.

¿Y a tí qué te importa como me llame, chulito? ¿Acaso te he preguntado yo a tí tu nombre?. Y mi pelo está bien como está, sería mejor que te metieses en tus asuntos. Te recuerdo que sois vosotros, tu amigo y tú, los que habéis irrumpido en el restaurante como una manada de búfalos. -Contestó Flash al tipo del traje. Solo faltaba, que encima de que irrumpiesen aquí, y se cargasen la puerta, diesen lecciones de estilo capilar...

Jin volvió a sonreir de forma afilada, mostrando sus colmillos. Había conseguido lo que se proponía, sacar de quicio a su rival. Eso le convertía en un enemigo especialmente odioso...le gustaba ese pique, aliviaba su propia tensión.

-Es cierto Nick, culpa mia, no me importa tu nombre, pero puestos ha amenazar, prefiero usar un nombre ¿no? De todos modos, insisto en lo de tu pelo tio, si sales vivo.

Se calló un rato mientras miraba a la chica, luego volvió abrir la boca.

-Nick, otro consejo. No le hables así al tio que la tiene mas grande que tu...

Guiñó un ojo a la chica y movió la pistola de la mano zurda, como refiriéndose al arma..o tal vez no.

Dió varios pasos hacia atrás cuando vió que tumbaban en el suelo a Takeshi. En cuanto vió las armas y que los apuntaban a todos, levantó las manos, el bolso lo dejó caer al suelo y lo colocó detrás de sus pies.

Se mantenía en silencio escuchando lo que decían unos y otros.

- No tenemos ni idea.. Nos encontramos en todo este problema sin buscarlo, solo quisimos ayudar a Kar Wai para salvar a la chica pero le fallamos y no pudimos hacerlo. Y ahora nos pidió el favor de que nos encargaramos del local mientras él estaba fuera. Por eso estamos aquí, aunque no tengamos ni idea pero solo nos encargamos de abrir y cerrar el local, nada más.