Partida Rol por web

-Sí, supongo que es buena idea intentarlo. Por otro lado, sugiero que seamos prudentes con el asunto de las manchas negras. No quisiera atraer la atención de alguien que pudiera estar involucrado...-comenta Urth. 

En ese momento, regresa Vincent con expresión satisfecha. -Hay dormitorios libres para invitados. Podríamos descansar un poco por ahora y hablar con el profesor Albine mañana, si les parece. 

- Perfecto pues. Retirémonos por hoy y mañana nos pasamos a hablar con tu profesor. - Y a visitar el laboratorio.

La habitación para invitados recordaba más a la del hotel de Deling que a la del jardín de Galbadia. Afortunadamente, el cansancio del día guía a Kyros a una noche sin sueño. 

El otro día amanece soleado pero frío. El clima en aquella zona era decididamente más frío que Galbadia. Arroh saluda a Kyros desde su interior

-Buen día, Kyros. Antes de que salgas a investigar este asunto, quisiera avisarte de que tengo una extraña sensación en este lugar. No podría decirlo con certeza, pero siento que hay algo raro aquí. Ve con cuidado, por favor. -comenta el GF con voz serena. 

Kyros medita unos instantes sobre las palabras de Arroh. ¿Tendría que ver la sensación del Guardián con los recientes sucesos que estaban sucediendo en el mundo? De cualquier manera, Kyros no podía quedarse de brazos cruzados. - Gracias por el aviso, Arroh. Estemos alerta mientras sigamos en Trabia. Si vuelves a notar algo raro, avísame.

Tras desperezarse y vestirse, Kyros agarra a Susurradora y sale de la habitación, dirección al mapa que vio el día anterior. Esperaba encontrar allí a Vincent o a Urth. Y en caso de no localizar a ninguno de sus amigos, la visita al laboratorio se habría adelantado.

En el hall central del jardín, Kyros se encuentra con Vincent y Urth. Éste último saluda con la mano cuando el SeeD se acerca. 

-Buenos días-saluda Vincent. -Más temprano he hablado con el profesor Albine. Le dije que unos amigos de otro jardín tenían una consulta para él. Accedió a encontrarse con nosotros en su despacho después de su próxima clase. Tenemos algo de tiempo antes de eso. ¿Prefieren visitar primero el laboratorio o esperar directamente al profesor? 

Por toda respuesta, Urth se encoge de hombros. 

"No conozco tanto el mundo y a sus gentes. Al fin y al cabo... ya sabes..."
"Soy un adolescente" le digo a EVA-01 "No he tenido mucho tiempo para conocer al CEO Shinra, al Presidente Deling o al Gran Duque Cid Faboule IX"

"Pero lo que está claro: NADIE quiere que el lugar donde vive sea devastado y destruido. Al menos, no sin tener algo muchisimo más valioso que ganar"

Me siento a gusto con EVA-01. Con él simplemente puedo dejar de ser el tontorrón que sólo piensa en el oro. Puedo ser el verdadero Alphonse. Aunque siga obsesionado con hacerme rico, eso no me impide pensar con claridad.

"Tenemos que investigar QUE era ese cacharro, y lo más importante: QUIENES lo tienen Y PARA QUE"
"E investigarlo de forma que los SeeD no me bajen el sueldo."

"¿Tienes alguna idea?"
 

¡Al laboratorio! - exclama Kyros, con tal vez demasiada excitación. Tras ver la cara de sus compañeros, Kyros se recompone - Quiero decir, ¿para qué esperar de brazos cruzados pudiendo hacer un poco de turismo antes de la reunión? Vayamos al laboratorio hasta que tengamos que ver a tu profesor.

Kyros echa otro ojo al mapa, y finalmente le dirige una mirada ansiosa a Vincent - ¿Vamos?

-Es muy fácil tomar decisiones al respecto cuando uno no tiene que hacerse cargo por ello. -comenta el Eva. 

-Mientras convenga causar problemas para generar ingresos, no es problema hacerlo si se tienen las posibilidades. 

Para llevar a cabo una organización así, hace falta de cómplices. Si no quieres arriesgarte a exponerte ante las autoridades, quizás puedas visitar a uno de los cómplices.  Por otro lado, para poder hacer eso hace falta tener una posición de poder. ¿Sospechas de alguien? Prometo no bajarte el sueldo. 

-Bueno, vamos allí, entonces. -responde Vincent con una ligerísima sonrisa. 

El SeeD los conduce hacia una de las alas del jardín. El lugar se asemejaba a la armería de Galbadia; pero con la diferencia de que aquí podía entrar al mismo lugar donde la gente trabajaba. No era recluido como la armería de Galbadia. Un hombre con cara de aburrimiento los saluda en la entrada. 

-Buenos días, ¿puedo ayudarles? -pregunta con hastío. 

-En realidad, estoy mostrándoles a mis amigos las instalaciones. No tienen nada de eso en su jardín.-comenta Vincent. 

El hombre se encoge de hombros y se hace a un lado para dejarlos pasar. 

En varias mesas metálicas, se puede ver a distintas personas trabajando en tareas diferentes. Una mujer de aspecto serio se encuentra trabajando en un prototipo de gunblade a un lado. En otro lado, dos jóvenes silenciosos intentan armar una pequeña estructura metálica. Por otra parte, un grupo de científicos examinan a un geezard a través de un vidrio. 

-Glamoroso- comenta Urth. 

-  Vaya... - Kyros empieza a pasearse por el laboratorio, embobado. Esto no se parecía a nada que hubiese en el jardín de Galbadia.

Kyros observa a los trabajadores, cada uno inmerso en un proyecto distinto. Le llama la atención especialmente el grupo de personas que está mirando a un geezard enjaulado mientras toman notas. En Galbadia las bestias estaban sueltas en la zona de entrenamiento, y lo único que hacían con ellas era exterminarlas. Esta gente parecía que estudiaba a la bestia. ¿Por qué?

Mientras pensaba esto, Kyros se acercó a la vidriera para mirar con atención al monstruo.

El monstruo parecía igual a cualquier otro Geezard de allí fuera. No parecía tener nada de particular. Cada tanto, el monstruo lanzaba un salto espasmódico hacia arriba o hacia adelante; como solían hacer. -Ah, ¿te interesa el estudio de los monstruos? -comenta uno de los hombres cercanos a la vitrina. -Este espécimen fue capturado por uno de nuestros SeeDs en Balamb. Estamos compilando información sobre la mayor cantidad de monstruos posible. El conocimiento es poder, solemos decir. 

Eso dicen, sí - comenta Kyros, con fingido interés. Tras halagar un poco el trabajo de los investigadores, Kyros vuelve a dónde está Vincent, sin poder disimular una mueca de decepción -. Bueno... ¿Deberíamos ir ya a hablar con tu profesor, Vincent?

-Claro, claro...-responde Vincent mirando a lo lejos, como si algo le hubiera llamado la atención. -Vamos, entonces.-define finalmente. 

Guía al grupo hacia la biblioteca con aire distraído. -No podía evitar la sensación de que alguien nos estaba oservando ahí dentro...-susurra. 

La biblioteca, como era de esperarse, es enorme. Montones de libros, mapas, y diversos tipos de registro adornan paredes, mesas, escritorios y hasta el techo. Algunos estudiantes se encuentran trabajando en una de las mesas hablando en voz baja. Finalmente, encuentran al profesor Albine. Se trata de un hombre de mediana edad y cabello claro. Una barba prolija y un gesto cordial definen su rostro. 

-Hola. Ustedes deben ser los visitantes desde Galbadia. Vincent me habló de su estudio sobre los monstruos. -comenta el hombre. 

Kyros se lleva el puño al pecho e inclina levemente la cabeza, a forma de saludo - Profesor Albine. Vincent ha hablado grandes cosas sobre usted. Esperábamos que pudiese ayudarnos con un tema algo... delicado.

Kyros mira a sus compañeros y, tras unos pequeños instantes, se dispone a narrarle al profesor Albine los extraños fenómenos que les han ocurrido recientemente en sus viajes. Le habla de esos extraños objetos voladores, de las manchas negras, y de la bestia a la que se enfrentaron en aquél cañón.

Tras acabar su historia, Kyros mira a los demás a la espera de si quieren añadir algo más, y se queda a la espera de la reacción y la respuesta del profesor.

-Vaya. vaya...-comenta el profesor frotándose los ojos. -Este asunto suena como algo serio. La mayoría de la gente tomaría esto como una locura, pero desafortunadamente, conozco lo suficiente como para creerlo.

Verán, estudios recientes cuentan que los seres que nosotros llamamos "monstruos" surgen de la luna. Con esto en mente, es posible que un mismo tipo de sustancia pudiera atraer a todos los monstruos por igual. Si alguien consiguiera fabricar o descubrir este tipo de material, sería capaz de manipular hordas de monstruos e incluso...usarlos como fuerza de choque. 

-¿Qué más haría falta para poder manipular grandes números de monstruos de esa manera? -pregunta Urth. 

Con gesto pensativo, Vincent responde -Humm...por lo menos algún tipo de sistema de distribución... tal vez esas esferas plateadas... Además de los jardines, se me ocurre de un lugar donde se pudiera manipular este tipo de tecnología... Y no es muy lejano...

-¿Hablas de la villa de los Shumi?-inquiere el profesor. 

Vincent asiente con gesto algo sombrío. Pareciera ser que la posibilidad de que el propio jardín de Trabia estuviera involucrado aumentaba a cada momento...

¿Shumi? ¿Quiénes son? - inquiere Kyros visiblemente confuso - ¿Amigos tuyos, Vincent? ¿Son ellos los responsables de lo que está sucediendo?

La pregunta de Kyros toma a Vincent por sorpresa. -Ah, lo lamento...es conocimiento común aquí y a veces se me olvida que no es así en todas partes... 

-Los Shumi son una raza inteligente, de cuerpo amarillo y pequeño. Son expertos en tecnologia y artes. Su principal ubicación es la villa de los Shumi, cerca de aquí. 

No sé si sean los responsables de lo que aquí ocurre, no son mala gente por lo general. Pero son extravagantes y particulares. Es posible que al menos estén involucrados... 

- En ese caso - dice Kyros mientras se reincorpora y se despereza - deberíamos hacer una visita a los shumi - con un gesto de agradecimiento, Kyros se dirige al profesor Albine -. Gracias por su ayuda, profesor. ¿Vamos, chicos?

-Me parece buena idea. -responde Urth. -¿Se puede ir directamente?- pregunta mirando a Vincent. El SeeD responde -Claro. Es una villa abierta al público. Se puede visitar sin problemas. 

-Pueden llamarme con lo que necesiten.-responde el profesor. -Intentaré investigar lo que pueda de este asunto por mi cuenta. 

Urth se pone de pie y asiente. Vincent hace lo propio. -Cuando quieran. Es cerca de aquí. 

Vamos. No hay tiempo que perder - Kyros estrecha la mano al profesor -. Muchas gracias por su ayuda, profesor.