Partida Rol por web

Fisura

Preparando la Aventura

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09/10/2015, 00:30
Aisha Serthan

 Aisha pudo respirar algo más tranquila una vez se libró, por el momento, de aquella inquietud. Nunca terminaba de acostumbrarse del todo a los muros de Skyhold, y tan sólo imaginar los Caminos de las Profundidades la agotaba, pero lo que la esperaba era mucho mejor. Eluvians y Mythal.

 Estaba dándole vueltas a las palabras de Dawn y Solas, al legado del Pueblo, su misión, e incluso su clan, cuando se sorprendió ante la aparición del rubio. Tras un pequeño respingo entrecerró un poco los ojos para mirarlo mejor e intentar entender mejor lo que había dicho. Viendo que ni Dawn ni ninguno de sus compañeros se alertó por su presencia, pensó que sería mejor seguir el hilo de conversación de los demás, que aunque algo perdidos, o raros, eran más fáciles de comprender.  

 - Eh... No, Jacob. Vamos al templo de Mythal para empezar a buscar indicios de los Orbes. Lo de los Caminos de las Profundidades es algo totalmente distinto, donde quisiera no verme envuelta por el momento, y seguramente ninguno de vosotros. - Se cruzó de brazos. - Perdonad que haya enredado todo esto, sólo era algo que me inquietaba un poco. - 

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10/10/2015, 15:22
Ricky Jackson

- En cualquier caso, ¿cuándo nos vamos? Estoy impaciente para explorar vuestro mundo. 

Con energía renovada después de darle vueltas a la cabeza el tiempo que pensó suficiente, estaba ansioso para explorar. Nunca antes había estado en un lugar tan... fantástico. Sería como un videojuego con riesgo de morir de verdad. Si más no, una experiencia nueva. 

- Siempre podemos preguntar durante el camino si no entendemos algo. Veo raro preguntar por cosas que no sabemos que existen siquiera y tampoco es plan ir preguntando a cada cosa que nos crucemos. A base de estar por aquí, ya aprenderemos con experiencia. Mientras sepamos cual es nuestro objetivo principal por mi no hay mas preguntas. 

Estarse quieto no era lo suyo y seguro que las estrategias ya las llevarían otros. A él se le daba mejor improvisar y aprovechar las oportunidades que se ofrecían. 

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10/10/2015, 17:47
Dawn

Las distintas reacciones del grupo habían originado comentarios entre los Consejeros, pero mezclándose las palabras de modo que lo que se escuchó no fue más que un murmullo de voces, con un aire de "ya os lo había dicho" en cada una de ellas. Sin embargo, Dawn las atajó con un gesto extrañamente autoritario para ser hecho por alguien con aspecto tan dulce.

-Ya basta. Es comprensible, vienen de otra dimensión, y están tan anonadados como estaríamos sin duda nosotros si nos hubieran trasladado de golpe a su mundo. Eva, siento que no te hayamos explicado mejor nuestra situación. Y al resto. Pero lo que está claro es que Rick tiene razón, las respuestas a todas vuestras dudas pueden ir llegando poco a poco. La respuesta a vuestro problema, no. Hay que ponerse en marcha. Y lo haréis enseguida. No voy a obligar a nadie, si alguien quiere renunciar, simplemente que lo diga. Le daré provisiones y un mapa, y puede marcharse a su propia aventura. Pero no se lo recomiendo, sinceramente. Si tenéis alguna posibilidad es siguiendo juntos, y colaborando. Todos.

Volvió a mirar a Eva, la que sin duda era la más beligerante de entre ellos. Hawke, que lo vio, se acercó a la extranjera, y pareció que iba a abrazarla. Pero finalmente se lo pensó dos veces, y le dio simplemente una palmada amistosa en el hombro. Dawn desvió la mirada, y la fijó en Solas.

-Tú lideras, compañero. He de admitir que... me ha sorprendido mucho tu regreso, después de haberte echado de menos tras la batalla. Pero me alegro de que sigas con nosotros, aunque debas hacerlo volviendo a partir. En cuanto a ti...

Su mirada ahora se dirigió a Morrigan, quien levantó una mano, interrumpiéndola.

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10/10/2015, 18:04
Morrigan

-Lo sé. La decisión es mía, Inquisidora. Voy por propia voluntad, y en mi nombre, únicamente.

Apretó los labios, dejó pasar un momento de reflexión, y prosiguió.

-Iba a marcharme de todos modos, ya lo sabes. La diferencia es que iba a hacerlo con mi hijo, Kieran. Pero ahora, con lo que hay, prefiero dejarlo aquí contigo. Si aceptas ser su tutora hasta que todo esto se resuelva.

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10/10/2015, 18:08
Dawn

-Desde luego.- Asintió, vehemente. De nuevo la sonrisa alumbró su rostro, dulcificando su expresión.- Será un honor, amiga mía. Y tendrá aquí el asesoramiento mejor que se pueda desear. Liliana, Josephine y Cullen serán sus mentores, junto conmigo misma. Y cuando decida qué camino quiere emprender con las armas, tendrá los mejores maestros.

Los tres consejeros mencionados asintieron también, y flotó por un momento una nota solemne entre los muros de la Sala. Lo que unía a los miembros de la Inquisición era algo mucho más profundo que un deber compartido, incluso que una amistad. Era el Destino, y, de pronto, todos ellos, Thedanos y extranjeros, lo sintieron pesar en sus almas, circular por sus venas. Fue fugaz y extraño, pero sin duda intenso.

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11/10/2015, 12:18
Eva Vogel

Puede que no tuviéramos más remedio que ir y yo, ya había dejado claro que iría, pero eso de que me podían contar las cosas por el camino era como decirle a alguien que lo iban a mandar a lo que casi parecía una muerte segura y que le contarían por el camino qué era eso de morirse.

No había caso. Estaba visto que aunque nos dijeran que podíamos preguntar, teníamos que quedarnos callados y asentir con la cabeza como si aquello fuera lo que esperaban de nosotros.

- Pues si se han pensado que voy a ser su nueva barbie la llevan clara.

Entrecerré los ojos de forma que claramente se vio que no estaba conforme con la situación y justo en ese momento Hawke puso la mano en el hombro. Y sí, puede que me jodieran las cosas y que no supiera callarme, pero eso lo entendía y puse los ojos en blanco.

A mí todo esto me sonaba a que ellos iban a ganar más que nosotros si encontrábamos aquellos orbes de los que hablaban y claro, teníamos que creer que sería nuestra forma de volver a casa. Eso por no decir que hacía tan sólo una temporada todo lo que hacía era practicar delante de un espejo e ir al gimnasio y ahora tenía que ir con una espada en una mano y esperar que todo el mundo se apiadara de mi peleando como había hecho Hawke hasta ahora.

En fin, guardé silencio, porque lo que estaba viendo era que cuando le decías lo que pensabas se les veía molestos y ya se me estaban hinchando las pelotas que no tenía e iba a acabar diciendo una barbaridad.

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12/10/2015, 20:20
.Narrador.

Dawn dejó pasar unos momentos de silencio, a la espera de que alguien más tuviera algo que preguntar, o algo que decir. No fue así, la tensión pesaba en el ánimo de todos, los Diez y los demás.

Finalmente se levantaron, dando la reunión por concluida.

Se dispersaron, apenas algunos intercambios de miradas, apenas algún susurro. Sabían su próximo objetivo: el Templo de Mythal, aunque para los extranjeros eso no fuera más que un nombre. Pero era el principio.

Notas de juego

Antes de cambiar de escena os pondré algún post privado para cada uno. Responded también sólo al director, y aprovechad para dejar claras vuestras expectativas con la Aventura (es decir, con la partida). Si alguien se siente decepcionado por lo que ha visto hasta ahora y lo que intuye va a seguir, que lo diga. No hay problema, prefiero que quien no esté a gusto lo diga y se vaya a tiempo que no que haya que hacerlo más adelante. Sin malos rollos.

Lo haremos roleando, pero en privado como digo. Que vuestro pj se pronuncie en vuestro nombre.

;)

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12/10/2015, 20:38
.Narrador.

Salió de la Sala del Consejo ensimismado. Parecía imposible, pero habían pasado horas, no se habían dado cuenta. Y ahora, al salir, el aire de la noche azotó su rostro.

Pensó en ir a su habitación, a descansar, pero sus pasos lo llevaron de un modo completamente impulsivo hacia fuera de Skyhold, hacia el puente que lo separaba del resto del mundo.

Hacía una noche espléndida, que le recordó otra no hacía tanto tiempo, una allí, en el mismo lugar, con Aisha. Se volvió, casi esperando encontrarla allí de nuevo. Pero estaba solo. Se apoyó en la piedra fría, el vaho aleteaba frente a él fluyendo de entre los labios. Las estrellas allá arriba parpadeaban en intrincados patrones. Y la luna llena iluminaba las formas espectrales de las montañas, las rocas, los muros.

De pronto, supo que ya no estaba solo. Se volvió, aunque algo le indicó que no había peligro, al contrario, sintió una sensación cálida y próxima, así como un aroma peculiar y agradable que le dijo al instante un nombre: Morrigan.

La mujer le miraba con ojos profundos, con esa mirada que asaltaba el alma, que atravesaba. Sonreía, esa sonrisa suya que tenía un punto de socarrona, a su pesar probablemente.

-¿Puedo saber en qué estás pensando...?

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12/10/2015, 20:57
.Narrador.

Salió de la Sala del Consejo ensimismada. Parecía imposible, pero habían pasado horas, no se había dado cuenta. Y ahora, al salir, el aire de la noche azotó su rostro.

Pensó en ir a descansar, pero sus pasos la llevaron de un modo completamente impulsivo hacia fuera de Skyhold, hacia el puente que lo separaba del resto del mundo.

Hacía una noche espléndida, que le recordó otra no hacía tanto tiempo, una allí, en el mismo lugar, con Miron. Se volvió, casi esperando encontrarlo allí de nuevo. Pero estaba sola. Se apoyó en la piedra fría, el vaho aleteaba frente a ella fluyendo de entre los labios. Las estrellas allá arriba parpadeaban en intrincados patrones. Y la luna llena iluminaba las formas espectrales de las montañas, las rocas, los muros.

De pronto, supo que ya no estaba sola. Se volvió, aunque algo le indicó que no había peligro, al contrario, sintió una sensación cálida y próxima, así como un aroma peculiar y agradable que le dijo al instante un nombre: Solas.

El mago le miraba con ojos profundos, con esa mirada que asaltaba el alma, que atravesaba. Sonreía, esa sonrisa suya tan poco usual, y que tenía un punto de socarrona, a su pesar probablemente.

-¿Puedo saber en qué estás pensando...?

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12/10/2015, 21:02
.Narrador.

Salió de la Sala del Consejo ensimismada. Parecía imposible, pero habían pasado horas, no se había dado cuenta. Y ahora, al salir, el aire de la noche azotó su rostro.

Pensó en ir a su habitación, a descansar, pero sus pasos la llevaron de un modo completamente impulsivo hacia fuera de Skyhold, hacia el puente que lo separaba del resto del mundo.

Hacía una noche espléndida. Se apoyó en la piedra fría, el vaho aleteaba frente a ella fluyendo de entre los labios. Las estrellas allá arriba parpadeaban en intrincados patrones. Y la luna llena iluminaba las formas espectrales de las montañas, las rocas, los muros.

De pronto, supo que ya no estaba sola. Se volvió, aunque algo le indicó que no había peligro, al contrario, sintió una sensación cálida y próxima, así como un aroma peculiar y agradable que le dijo al instante un nombre: Garret.

El guerrero la miraba con ojos profundos, con esa mirada que asaltaba el alma, que atravesaba. Sonreía, esa sonrisa suya que tenía un punto de socarrona, a su pesar probablemente.

-¿Puedo saber en qué estás pensando...?

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12/10/2015, 21:05
.Narrador.

Salió de la Sala del Consejo ensimismado. Parecía imposible, pero habían pasado horas, no se había dado cuenta. Y ahora, al salir, el aire de la noche azotó su rostro.

Pensó en ir a su habitación, a descansar, pero sus pasos lo llevaron de un modo completamente impulsivo hacia fuera de Skyhold, hacia el puente que lo separaba del resto del mundo.

Hacía una noche espléndida. Se apoyó en la piedra fría, el vaho aleteaba frente a él fluyendo de entre los labios. Las estrellas allá arriba parpadeaban en intrincados patrones. Y la luna llena iluminaba las formas espectrales de las montañas, las rocas, los muros.

De pronto, supo que ya no estaba solo. Se volvió, aunque algo le indicó que no había peligro, al contrario, sintió una sensación cálida y próxima, así como un aroma peculiar y agradable que le dijo al instante un nombre: Sera.

La elfa le miraba con ojos profundos, con esa mirada que asaltaba el alma, que atravesaba. Sonreía, esa sonrisa suya que tenía un punto de socarrona.

-¿Puedo saber en qué estás pensando...?

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12/10/2015, 21:08
.Narrador.

Salió de la Sala del Consejo ensimismado. Parecía imposible, pero habían pasado horas, no se había dado cuenta. Y ahora, al salir, el aire de la noche azotó su rostro.

Pensó en ir a su habitación, a descansar, pero sus pasos lo llevaron de un modo completamente impulsivo hacia fuera de Skyhold, hacia el puente que lo separaba del resto del mundo.

Hacía una noche espléndida. Se apoyó en la piedra fría, el vaho aleteaba frente a él fluyendo de entre los labios. Las estrellas allá arriba parpadeaban en intrincados patrones. Y la luna llena iluminaba las formas espectrales de las montañas, las rocas, los muros.

De pronto, supo que ya no estaba solo. Se volvió, aunque algo le indicó que no había peligro, al contrario, sintió una sensación cálida y próxima, así como un aroma peculiar y agradable que le dijo al instante un nombre: Sera.

La elfa le miraba con ojos profundos, con esa mirada que asaltaba el alma, que atravesaba. Sonreía, esa sonrisa suya que tenía un punto de socarrona.

-¿Puedo saber en qué estás pensando...?

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12/10/2015, 21:10
.Narrador.

Salió de la Sala del Consejo ensimismado. Parecía imposible, pero habían pasado horas, no se había dado cuenta. Y ahora, al salir, el aire de la noche azotó su rostro.

Pensó en ir a su habitación, a descansar, pero sus pasos lo llevaron de un modo completamente impulsivo hacia fuera de Skyhold, hacia el puente que lo separaba del resto del mundo.

Hacía una noche espléndida. Se apoyó en la piedra fría, el vaho aleteaba frente a él fluyendo de entre los labios. Las estrellas allá arriba parpadeaban en intrincados patrones. Y la luna llena iluminaba las formas espectrales de las montañas, las rocas, los muros.

De pronto, supo que ya no estaba solo. Se volvió, aunque algo le indicó que no había peligro, al contrario, sintió una sensación cálida y próxima, así como un aroma peculiar y agradable que le dijo al instante un nombre: Sera.

La elfa le miraba con ojos profundos, con esa mirada que asaltaba el alma, que atravesaba. Sonreía, esa sonrisa suya que tenía un punto de socarrona.

-¿Puedo saber en qué estás pensando...?

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12/10/2015, 21:29
Miron Lupeithai
Sólo para el director

Miron se sintió extraño al tener delante a Morrigan, como si de repente se hubiera convertido en alguien más especial. Casi no podía disimular el asombro que le producía aquella mujer a distintos niveles. La observó con la boca entreabierta, sorprendido por encontrarla allí. ¿Por qué había venido a hacerle una pregunta de ese tipo? ¿Qué respuesta sería la correcta para alguien como ella?

De repente tuvo compasión de sí mismo, como si fuera un niño delante de un adulto que le estaba a punto de regañar. O quizá como un amante a quien iban a dar calabazas con dos palabras secas y punzantes. Pero, ¿por qué? Cruzó miradas con la bruja, aunque no se atrevió a mirarla directamente. Ella era un enigma, algo que le atraía muchísimo, pero a la vez tenía la necesidad de alejarse de ella, como si presintiera un peligro escondido proveniente de ella. Había oído mucho sobre sus sospechosas acciones y algunos rumores sobre cómo había conseguido llegar a los puestos que más le interesaban en cada momento. Sin embargo, tenerla cerca era como tener al alcance un antiguo tomo polvoriento que guarda secretos desconocidos y suculentos.

Se giró y sonrió para quitarse todos esos pensamientos de la cabeza. Se sintió como un enamorado, pero no estaba... enamorado. ¿Verdad?

Pienso en todo lo que estamos a punto de descubrir.- respondió mirando hacia el horizonte.- En lo que espero descubrir. He estado viajando durante algún tiempo, pero... no he conseguido averiguar nada que me sacuda y que revolucione mi mundo. Quizá ha llegado el momento.- se apoyó con las dos manos en el puente. ¿Acababa de decir que todo lo hecho había sido en vano? Todos esos días caminando en solitario, huyendo de templarios y magos por igual... Y, ¿para qué? Ahora ya no sabía qué creer.- Esto puede cambiarme la vida.

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12/10/2015, 23:54
Eva Vogel

En realidad no había pensado demasiado desde que había salido de aquel salón o quizás sí lo había hecho pero no había dado con la solución que quería hallar. Seguramente nunca lo haría.

- Pienso en que hay más posibilidades de que muera en esta misión que de volver algún día a mi casa.

No era ninguna estúpida y había sopesado las posibilidades. Había visto bien de cerca las caras de aquellas personas al hablar y bueno, estaba convencida de que no nos mandaban de excursión al campo donde como mucho nos encontraríamos con un oso.

- Además, me da mucha rabia que la gente se piense que somos estúpidos porque no conocemos las cosas de su mundo. Les hubiera dado una patada en el culo a toda esa panda de listos que cuchicheaban hoy en una esquina.

No me cortaba a la hora de hablar con Garret, total, ya nos habíamos dicho de todo mientras entrenábamos y ahora, era lo más parecido a un amigo que tenía.

- De verdad, toda mi vida he odiado que me miren por encima del hombro de esa manera y encima, te dicen que preguntes y luego, se burlan de ti cuando lo haces.

Definitivamente, hubiera roto bien a gusto dos o tres huesos en aquella reunión, pero muy a mi pesar, me había comportado como la persona civilizada que era en Los Ángeles antes de acabar en el reino de Papá Noel.

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13/10/2015, 22:45
Aisha Serthan

 Sus pensamientos no dejaban de dar vueltas sobre su cabeza, así que decidió hacerlo ella también para tratar, tal vez, de ordenarlos, si no de apaciguarlos para poder descansar más tarde. 

 Por una parte se encontraba con la enorme responsabilidad de salir victoriosa en su misión, no sólo por el bien de la Inquisición, o del legado de su pueblo, si no por la paz y la seguridad de todo Thedas.

 Por otro lado, exceptuando a Solas y a Miron, y por irónico que pudiera parecerle siendo ellos magos, no se sentía cómoda con sus compañeros de aventuras. Esos shems tan ignorantes de los que casi tenía que ser tutora y supervisora para que no metieran la pata, más magos, la elfa rara y, particularmente, esa rubia tan molesta. Sin duda su cometido no parecía un peso fácil de cargar, y no confiaba en que sus nuevos compañeros fueran a hacerlo más fácil.

 Aunque por otro lado y, como a muchos otros, tal vez los estuviera prejuzgando. Y aunque así fuera, ¿Qué era todo eso comparado con la oportunidad de visitar el templo de la mismísima Mythal? Tan sólo el inicio del viaje ya era un premio para ella, y sus dudas se desvanecían a medida que recordaba sus motivos de ingreso en la Inquisición. Incluso habiendo crecido entre los cuentos y las historias de lo perdido en el tiempo, lo arrebatado, y de los 'despiadados' shemlen, seguir limitándose a lamentarse mientras otros hacían el duro y necesario trabajo no tendría más cabida. Había que actuar antes de que otros lo lamentaran como ella tuvo que hacerlo, antes de que todos tuvieran que hacerlo.

 Pensar en todo aquello al aire libre la ayudó a ordenar sus ideas, a saber lo que quería, y lo que responder al mago con exactitud, hacia el que se volvió con tranquilidad al sentir su presencia.

 - Halam'shivanas* - Contestó a su pregunta, esbozando media sonrisa. Inspiró profundamente antes de continuar y extenderse algo más, mirando por un momento hacia otro lado. - Pienso en el camino que nos espera por delante. - Volvió a mirar al elfo. - En cómo una acción de la que sólo podía esperar problemas, me ha... Recompensado. Sé que no es un juego, ni será fácil. - Intentó explicarse mejor. - Pero... Bueno, creo que puedes entenderme. Para nosotros el templo de Mythal simboliza algo mucho más profundo que para el resto de los que partiremos en esta misión, incluso más que para Miron. - Recordó divertida el entusiasmo del humano, pero prefirió sin embargo no opinar sobre Sera, confusa sobre su posición frente a su cultura. Estaba segura, sin embargo, de que algunos de los miembros de su clan se matarían por estar en su lugar, pero Aisha no lo hacía por su historia... No sólo por su historia, al menos. - No se si tal vez signifique algo más para ti. - Observó, levantando un poco las cejas. Había que estar ciego, o ser tan nuevo como aquellos cuatro shems, para no darse cuenta de que el conocimiento del mago era más que extraordinario. Los eluvians, los orbes, el conocimiento de los objetivos, su próximo liderazgo... No por nada sería el líder en la aventura que les esperaba, pero no indagaría más en ello.

 Aun tengo que... Acostumbrarme a la compañía. - Reconoció. - Pero, como sea, quiero hacer esto. - Concluyó decidida.

Notas de juego

 * Significa: El dulce sacrificio del deber.

 No me lo he inventado, por cierto, nunca haría eso xD Es una expresión del lore élfico de DA. Algunas ya las se de tanto oírlas, pero a veces me da por buscar recopilaciones de expresiones o traducciones para entender mejor DA. De todas formas, si hay algún problema con eso, edito y listo ^^.

 Oh, y perdón por el tochopost, espero que todo eso contenga más o menos lo que querías ^^u. Pero si no, en resumen me encanta, vaya, creo que en mi caso ya lo sabes xD

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14/10/2015, 10:19
.Narrador.

Ella le escuchó sin interrumpirlo, aunque no apartó la mirada de su rostro ni un segundo. No era incómoda, ni escrutadora, era una mirada amplia, como si Morrigan estuviera situando a Miron en ese mundo del que él estaba hablando.

La silueta del mago se recortaba contra el blanco reluciente de las montañas, bañada por la luz lechosa de la luna. Por tanto, el resultado era límpido, la pureza inundaba el momento. Era un momento extraño, y más siendo, como sabía, que Morrigan era alguien oscuro. Y quizá también lo era parte del propio Miron.

Luego, cuando él calló, ella asintió y se apoyó también en la piedra gélida de la baranda, aunque con los codos, deslizando sus manos por sus brazos, buscando algo de calor. Pero de pronto se giró hacia él, y llevó su mano hacia la cara de Miron. Por un segundo pareció que iba a tocarle, que iba a rozar su piel.

No lo hizo.

Las puntas de sus dedos se quedaron inmóviles, las yemas a un suspiro de él.

-Llevas el Sol contigo. ¿Por qué? ¿Elegiste tú el tatuaje? No eres un elfo, no es una vallaslin...

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14/10/2015, 18:42
Miron Lupeithai
Sólo para el director

Morrigan parecía estar analizándole, o quizá simplemente observándole con detenimiento mientras hablaba. Cuando se le acercó, Miron no supo muy bien cómo reaccionar, y menos aún cuando acercó una mano hacia su rostro casi tocándolo. Se quedó inmóvil y con expresión confusa, pero cuando la maga hizo referencia a su tatuaje, fue él quien pasó los dedos por debajo de su ojo derecho.

¿El Sol...?- murmuró.- Este tatuaje me lo hizo una aprendiz del Círculo donde estuve.- sonrió y miró más allá de Morrigan.- Era una buena amiga mía con una vocación artística increíble y dejé que... practicara conmigo.- repasó el tatuaje como si recordara el día en que lo recibió.- Fue difícil conseguir los materiales necesarios allí dentro, pero lo conseguimos gracias a nuestra ilusión.- se rió entre dientes con un rastro de sarcasmo y sacudió la cabeza.- El dibujo fue suyo. Yo simplemente la dejé hacer.

Se giró para mirar hacia el horizonte de nuevo. Recordó la expresión siempre alegre de Eyrine, sus manos delicadas y su sonrisa cálida...

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15/10/2015, 02:09
Sólo para el director

Sonreí mientras me giraba, perdiendome en la insondable profundidad de aquellos grandes y expresivos ojos durante unos momentos, realmente no veía tantas diferencias entre nosotros los humanos y los elfos, y sin embargo, ellos tenían una peculiar belleza que me cautivaba, tanto hombres como mujeres y esa chica con su forma de ser tenía una atracción casi animal para conmigo que a veces me hacía difícil estar cerca de ella por controlar aquel impulso primigenio que me asaltaba frecuentemente -Pensaba en lo mucho que me gusta este lugar, a pesar de que no es mi mundo natal, me siento más en casa aquí que allá... cielos, incluso casi olvido algunas cosas de ese otro lugar, ahora ese parece el sueño- le respondí volteando mi mirada nuevamente a las estrellas y la luna durante un momento antes de volverla hacia ella nuevamente -y tu? que haces aquí a estas horas? pensé que estarías camino a tu alcoba para descansar- le pregunté mientras acercaba mi mano a su rostro para apartar un mechón de cabello de este

Notas de juego

siento la demora, me llamaron del servicio y no salí hasta hoy en la mañana

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15/10/2015, 10:15
.Narrador.

Hawke se acercó más a ella, con toda naturalidad, y se apoyó en la baranda de piedra. No llevaba la armadura, iba vestido cion un jubón de lino, pantalones de cuero remetidos en sus botas, y una capa de piel de algún animal de pelo negro, largo y suave. Con la misma naturalidad con la que se había arrimado a ella abrió su capa, y la rodeó con un brazo, arropándola bajo el manto cálido.

No fue un gesto paternal, ni siquiera protector. Era seductor y sin embargo no era una imposición, había sido tan inconsciente que Eva no supo si era realmente espontáneo o él había buscado su contacto. Lo que sí era cierto es que el calor que sintió podía deberse tanto a las pieles como al propio Garret.

-No te miran por encima del hombro. Están asustados, y eso es bueno. No entienden bien qué está ocurriendo, no más allá de lo obvio: el mundo, nuestro mundo y quizá el tuyo, se está yendo al carajo. Por culpa de fuerzas mágicas que no saben, no sabemos bien como combatir.

Calló, pensativo. Luego se volvió hacia ella, tan cerca de su rostro que su aliento cosquilleó en su mejilla. Miraba su labio, el que le habían herido en la partida de cartas, y que aún tenía un moretón azulado. Levantó un dedo, y pareció que iba a acariciarlo, pero se detuvo a un suspiro de su piel.

-No dejaré que mueras. No lo permitiré.

Se apartó, con dificultad, muy serio. Frunció el ceño, súbitamente enojado. ¿Quizá aún estaba disgustado por la terquedad de ella al no quererle contar nada acerca de eso? ¿O era otra cosa...?

-Si finalmente lo que quieres es... regresar, lo harás. Como que me llamo Garret Hawke.