Partida Rol por web

Terminada la comida, los chicos se encargarían de los platos, así que fui por mas cervezas, menos mal que había traído bastantes, ademas de otros bebestibles con alcohol para la siguiente noche.

Venga chicos animaos un poco que aunque mañana me levante a gatas, esta noche me bebo hasta lo del florero...me eche a reír brindando con mi botella, de un momento a otro me sentía mas alegre de lo normal, quizás la situación, el ambiente o lo que sea que mi cabeza estuviese pensando me había animado.

Hermanito pon mas música, si aquí eres el DJ...me fui a sentar en lo que seria la cama de Richard, que de seguro ese dormirá menos que yo, si me reclama bien puede ir a dormir con Susana.

Esperaba que fuese una noche de fiesta, como las de antes, donde nos divertíamos de lo lindo, recuerdo cuando nos tomamos la casa de Mario y dejamos un caos, la noticia se filtro por todo el colegio y se lleno al mas estilo de la peli Proyecto X, es que era el único que contaba con tremenda casota para hacer una fiesta, fue de locos, aunque al día siguiente entre la resaca y el trasnoche tuvimos que ayudar a limpiar todo a Mario, obviamente sus amigos le ayudarían a que el castigo no fuera tan grande, todos terminamos durmiendo siesta en su cuarto repartidos por toda la habitación, muy buenos recuerdos.

Susana estaba de buen humor, sobetodo después de haberse tomado una copa bien cargada de Gin Tonic, entonces se levantó de su asiento, se dirigió al lugar donde había dejado su equipaje y trajo consigo una caja, a simple vista parecía un juego de mesa.

- Bueno chicos, ¿que os parecería jugar a algo diferente? Mirad lo que he traído...- abrió la caja dejando a la vista de todos el famoso juego de la Ouija- lo compré en una tienda de antiguedades, aún no lo he utilizado pero sé como se juega... ¿Qué os parece?

Respondí a la alegría de Julia con una sonrisa y asentí con la cabeza. Pero cuando Susana apareció con el tablero de la Ouija, abrí los ojos como platos.

- Ejem... ¿Y no preferís un Parchís o un Risk? Tengo los dos juegos en mi maleta, además de una baraja de cartas. Ahora los traigo. - Entré un momento en mi cuarto y aparecí rápidamente con lo prometido, que puse sobre la mesa.

Miré el tablero que había traído Susana. - A mí no me hace mucha gracia eso de la ouija. - Un recuerdo reciente me asaltó y me entró un escalofrío, diciéndome que no debíamos jugar a aquello. - Me da mal rollo.

- Prefiero mil veces eso de bebernos hasta el agua de los floreros. - Sonreí a Julia.

Sonrío ante lo que plantean mis compañeros, el beber toda la noche y jugar un rato a la ouija. Seguro que, aunque se mantengan en silencio, los muertos serán mucho más interesantes que Mario. Además, podré mover yo el vaso y acojonar un rato a nuestro bufón particular.

Estoy de acuerdo, vamos a hacer ambas cosas. Hemos traído varias botellas así que voy a ir sacando algo -me acerco al frigorífico y saco un par de botellas de fanta y coca cola, junto a algo de ron y vodka que guardo en mi maleta -¿un chupito para ir entrando en calor? Susana, prepara la tabla, esta noche nosotros no seremos los únicos que asistirán a la fiesta...

Acaba la cena y los chicos plantean diversas posibilidades sobre cosas para hacer antes de irnos a dormir. La cantidad de ideas me anima a compartir con los demás mi idea:

-Muy bien, muy bien. También podemos aprovechar, antes de habernos bebido toda el agua de los floreros y vayamos un poco contentillos, para jugar a "Beso, atrevimiento o verdad", ¿qué os parece?- Digo tras escuchar la primera propuesta de Julia.

Observo como Susana saca un tablero de Ouija, y automáticamente me recorre un escalofrío por la espalda.

Ya sé que son chorradas para engañar a pardillos y leyendas urbanas para asustar a críos, pero que mal rollo me dan siempre todas estas cosas... 

Afortunadamente, Pablo ha traído otras alternativas de juegos de mesa, así que añado:

-Lo del parchís o las cartas está bien, siempre podemos adaptarlos para que sean juegos de beber y "entonarnos" rápidamente, jejeje.- Observo los movimientos de Ric con las bebidas y continúo- ¡Buen idea Ric, si quieres te ayudo a preparar esos chupitos!

Ya llevaba el tercer trago largo de mi cerveza, fría, bien fría y refrescante, las ideas para divertirnos aparecían como si fuesen mas cervezas, arquee una ceja ante la idea de Susana, como siempre mi amiga con sus exotericosas, luego Pablo con su propuesta y finalmente la idea mágica de Mario.

-Que tal si jugamos de todo, ¡la noche es joven!- mire a Mario, cerrándole un ojos -Propongo la disparatada idea de Mario primero, pero como somos poquitos, ¡los besos son entre todos!- parece que la cerveza ya se me subía a la cabeza, no terminaba de imaginar a Mario dándole un piquito a Richard o a Pablo, reí de buena gana al imaginar por completo la escena.

-Después nos vamos con un poker de esos con penitencia, si pierdes te quitas la ropa...¡HASTA QUEDAR TODOS EN CUEROS!- volví a reír, mirando la cara de los todos, mas de alguna seria un poema -y para terminar la noche e irnos a la cama asustados y con miedo, rematamos con la Ouija-

Me puse de pie esperando las opiniones del resto -¿que les parece el programa?-

Susana aguantó de buen talante las reacciones adversas de sus compañeros, ella veía la Ouija como un mero entretenimiento, nada serio... sólo algo con el que asustar a los niños pero que aún así tenía su morbo.

- Alcohol, juegos y desenfreno... sois unos mente sucia. No pienso ponerme en cueros- declaró tajante pero con tono divertido- pero si vosotros queréis hacerlo por mí no hay problema- comentó refiriéndose a los chicos- bueno vamos a preparar esos cubatas, yo un Gin Tonic por supuesto- la clase por encima de todo "Of course", concluyó dejando el tablero sobre la mesa para después dirigirse a preparar las bebidas.

- Para mí, ron con cola. - Dije sin pensar, mientras me incorporaba al equipo de los barman. - Venga, que esto lo más fácil es poner botellas y vasos en la mesa y que cada cual se sirva lo que quiera. - Diciendo esto, comencé a recopilar los vasos, ya que otros se habían adelantado en el manejo de las botellas.

Cuando llegué con los vasos, acabé de despejar la mesa, si aún quedaba algún cubierto o plato o cosas por el estilo, para que todo estuviera preparado para jugar a los que acabáramos pactando. Mientras lo hacía, una idea me vino a la cabeza.

Comencé a posicionar los diferentes juegos sobre la mesa, formando un círculo. La Ouija, el parchís, las cartas, el Risk y un vaso, para indicar la idea de Mario. Luego agarré una botella de refresco vacía y la puse en el centro de la circunferencia. La hice girar sobre sí misma, a modo de prueba. Cuando me aseguré que todo estaba preparado, ya habían llegado los demás con las bebidas.

- Ya tenemos una ruleta. Así no habrá discusiones. ¿Qué os parece? Hacemos girar la botella y será ella quien elija a qué jugamos. El vaso indica la propuesta de Mario, de "Beso, atrevimiento o verdad".

Parece que había variedad de ideas, y opiniones sobre dichas ideas entre el grupo. Julia, como un torbellino para variar, lo quería todo y buscaba la manera de que fuera posible. No pude menos que sonreír ante su energía. Pero fue Pablo el que apareció con la idea más divertida y, de alguna manera, más justa para decidir qué podíamos hacer:

-¡Gran idea lo de la ruleta, Pablo! La suerte decidirá a que jugamos y así lo hace un poco más emocionante. Y si nos cansamos, podemos volver a consultarle a la ruleta a ver que nos recomienda a continuación.- Comenté mientras empezaba a prepararme yo también un gin-tonic, mientras dejaba hacer a Ric con los chupitos.

Sonreí al ver que, por lo menos por parte de Mario, la idea había tenido buena acogida. Mientras los demás se acercaban a la mesa, con las manos apuntando a la ruleta de la botella, les invité a que la hicieran rodar.

- ¿Quién hace los honores?

no terminaba de imaginar a Mario dándole un piquito a Richard o a Pablo, reí de buena gana al imaginar por completo la escena.

Hombre, reír reír... Yo no es que me ría precisamente imaginando la escena, XD

A Susana eso de quedarse en bolas no le hacía ni pizca de gracia, pero lo esperar tampoco y puesto que le estaban dando todos tantas vueltas a girar una simple botellita, se agarró los machos, en sentido figurado por supuesto... que ella era toda una dama, y con un suspiro cogió la botella para hacerla girar.

- Lo haré yo... esta visto y comprobado que aquí mucha palabra pero poca acción... voy a tener que tomarme un Gin bien cargado después de esto- y sin más giró la botella conteniendo un poco el aliento.

La botella gira y gira y se queda entre medias de dos de las opciones; parece que hay que volver a girar.

Susana enarcó una ceja y de manera resuelta volvió a girar la botella.