Partida Rol por web

Liderando al grupo de vástagos fuera del principado Raphael demora el paso para lanzar una invitacion.

- Señor Volgo, me supongo que con los respetos de su clan, ya debe tener un refugio adecuado, sin embargo, me gustaría ofrecerle un habitación en mi residencia. Por supuesto si no está en contra.

Esperando la respuesta sale del principado encontrándose con el guardián algo nervioso.

Volgo asiente ante las palabras de Raphael.

-Será un placer. Un cobijo seguro es algo muy apreciado para un recién llegado a la ciudad. Gracias.

La verdad es que hacía muchas noches que no descansaba en un colchón como dios manda. Lo más cómodo que había catado había sido ese jodido tren de mercancías, y aún así no consiguió relajarse pues su compañía era de lo más... molesta.

- Entonces todo arreglado, ahora el regreso….

Buscando por alguna parte el choche de la familia, recordando en última instancia que ni Katarina ni Baltrek tienen posibilidad de haberlo usado se acerca a la calle.

Logrando detener un taxi en esta madrugada es una odisea el convencer al guerrero de entrar y mantearse quieto mientras Volgo se camufla con la espada del gigante.

Sentándose al frente junto al conductor, Raphael  distrae al conductor mientras la faena se realiza. Una vez listos y ya en la residencia del sangre azul, el grupo despide al taxi entrando a la mansión. Tras dejar a Katarina, convencer a Baltreck de que su habitacion es donde desperto y dedicar un cuarto al nosferatu, ademas de inspeccionar la propiedad buscando alguna pista fiable, el Ventrue despide a cada vástago para pasar el día.

Pasando el día en sus cuartos los cainitas despiertan con el sonido rítmico de las gotas contra las ventanas. A pesar de ser temprano aún (8pm) el cielo se ve mas oscuro que de costumbre cubiertos por las nubes negras que se descargan en la ciudad.

Bajando al living los vástagos encuentran a Raphael quien redacta algo sin prestar atencion a las personas que se acercan.

A pesar de lo poco que has entendido, es claro que en la casa hacen falta gente, un vampiro respetable en cualquier tiempo que viviera tiene algún sirviente, lo cual no pasa en la residencia de Raphael y Katarina. Y tras ver a los cainitas buscando, imitaste el comportamiento sin encontrar nada interesante.

Sin encontrar nada interesante… en efecto, ni una sola pista ni un solo signo de violencia. Según te parece todo esta en su lugar, incluso al buscar en otros cuartos todo parce arreglado. Si un alguien asalto la casa y rapto a sus ocupantes hizo un trabajo increíble, o…

Registrando la mansión, buscando en cada cuarto y en cada rincón donde podría estar algo escondido, no ves nada extraño.

De hecho no hay indicios de que alguien haya usado la fuerza en el ataque del que te hablaron, ni siquiera forzaron una puerta, o ventana. Sin poder imaginarte en este momento que pudo haber pasado en la casa, algo te llama la atención, un pequeño recuerdo de algo que te molesto al ver. Volviendo a la habitación de Esmeralda, abres el guardarropa siendo todo normal.

Sin poder quitarte la inquietud e de la cabeza, miras, volteas, sacas, revisas, examinas todo el contenido del enorme guardarropa de la señora de la mansión. Casi dejando de lado la búsqueda mientras ves a Volgo caminando por el pasillo, usas la memoria y cuentas.

Encontrando que es lo que falta en el guardarropa, por lo menos 3 vestidos completos desaparecieron y más ropa falta, siendo solo insignificantes faltas, solo la ropa de Esmeralda falta, mientras las de Raphael (que es guardarropa combinado) está completa.

Dando el aviso a Raphael, te diriges al cuarto casi desmayándote por el sueño sobrenatural de cada dia.

Ayudando a buscar pistar por la casa, y usando tus talentos aprendidos entre los de tu clan (además del talento natural) buscas en la casa en general, sin tocar las habitaciones imaginando una ofensa para los moradores de la casa.

Tras un vistazo rápido compruebas el mejor camino para entrar y las posibilidades del presunto raptor para entrar y llevarse al vástago elegido, además de terminar con toda la servidumbre de la mansión.

Sin poder concretar nada, la puerta no es forzada, las ventanas con seguro y completas, ninguna otro acceso ni siquiera un signo de violencia la casa está en buenas condiciones. Recordando el encuentro ante el principado con Sven, tienes una teoría al tiempo que el sueño te invade y decides dejar tus teorías para la próxima noche.

Me pongo de pie, apenas me levanto. Había descansado bien y por lo menos ese era un punto a favor entre toda la mierda del día anterior. No tenia muchas ganas de salir del cuarto. No me animaba a enfrentar a mi Padre después de la noche anterior. Realmente no entiendo como podía respetar a ese imbécil. Me voy a bañar, tranquila y tomándome mi tiempo. Cuando salgo me pongo una bata roja de seda y me siento en la cama. Necesitaba pensar en los sucesos del día anterior.

el valaco es consciente de que poco podria hacer sin katarina presente, se puso a buscar la habitacion de la joven y luego iria a hablar con su padre, tena algunas pregunats que hacerle

el valaco recorre la casa durante un buen rato (una hora) intentando encontrar a la joven, sabia que sin ella, no podria comunicarse con nadie y tenia unas preguntas que hacerle a Raphael antes de volver a salir de la casa... ttras la busqueda sin resultado, y sin saber muy bien como, encuentró a Raphael ensimismado escribiendo, pero éste, no hizo nada, para que, si no le iba a entender, seguro que los demas vendrian a ese lugar tarde o temprano, tomó asiento y se quedó esperando a que los demas aparecieran...

EL sonido de una puerta contra una pared contigua hace que te sobresaltes. Prestando mas atención a los sonidos, escuchas de nuevo el abrir y cerrar de una puerta, y un andar pesado y apurado. Un vistazo rápido revela al gigante haciendo una inspección rápida de los cuartos, uno por uno abre y cierra las puertas mirando rápidamente.

Mientras cambia su rumbo directamente a tu cuarto, misteriosamente se detiene un momento y continua su camino, hacia la planta baja.

De nuevo en el silencio del cuarto, este solo es roto por el rítmico sonido de las gotas de lluvia. Siendo ya mas de una semana de lluvias en al ciudad, cada noche la humedad hace mella en el humor de los cainitas, mientras las alcantarillas se inundan una vez más, llegas a imaginar a lso nosferatus locales luchando contra el agua o yendo hacia otro refugio temporal.

La imagen mental de los nosferatu moviéndose por las alcantarillas, trae el recuero del sheriff y su caída.