Partida Rol por web

El Aqua Animal Center era un recinto para animales con problemas de salud para rehabilitarlos. Pero, a su vez, también era una piscina climatizada a algunas horas del día. Hoy era sábado, así que había flexibilidad de horarios. A esta hora de la mañana era solamente piscina climatizada. Está situado cerca de la Plaza de las Naciones Unidas, un muy buen lugar para abrir un centro de rehabilitación. Cuenta con vestuarios individuales, varios socorristas que a la vez eran monitores en las horas de rehabilitación. Cierta cobra está recién salida de los vestuarios femeninos. Cada vez que aspira no huele a nada, ya que se usa la técnica de usar agua salada ligeramente clorada para que no piquen tanto los ojos bajo el agua al abrirlos. Aún así es obligatorio llevar gorro de natación. Pero en el caso de los reptiles, es una excepción. Mientras no muden la piel en la piscina, pueden bañarse tranquilamente. Eso sí, justo después de ducharse.

Sonrío observando el agua y notando el calorcillo que desprende el vapor en mi piel. Me gusta mucho este lugar, siempre es tranquilo y se puede nadar a gusto... según a que horas. Pero no todo puede ser perfecto. En cualquier caso, el agua caliente sin demasiado cloro es genial para poder hacer ejercicio, así que este se ha convertido en uno de mis sitios favoritos desde que me mude.

Me dirijo a las duchas y pongo el agua tibia. Me produce un escalofrío las primeras gotas que aun permanecían dentro pero en seguida esa sensación desaparece. Paso las manos por mi piel, para limpiarme y para estar bien mojada antes de entrar, también porque disfruto mucho esta sensación.

Aparto algo de agua de mi rostro y me dirijo a una banqueta que hay cerca de la salida del vestuario para esperar a eRRoR, me pregunto como será. Siento curiosidad y mi lengua sale juguetona, como siempre que tengo curiosidad por algo.

Entro en los vestuarios de la piscina, soltando el móvil en mi bolsa. Ese día y esa hora eran las buenas, ya que no suele haber mucha gente. Así me libraba de malas compañías y de las miradas de los hombres hacia mis... Bueno. Bajo la mirada hacia mis abultados pechos.

Ains. ¿Por qué me maldejiste con esto, mundo?

Escojo una taquilla, la que suelo escoger yo y empieza a cambiarme, sacando el bañador turquesa de la bolsa de deporte. Me desvisto, primero quitándome la ropa y dejándola con cuidado y bien doblada en la bolsa. Después, me quito el sujetador deportivo con un tirón hacia arriba. Solía llevar este tipo de sujetadores cuando iba a correr o a hacer cualquier tipo de ejercicio. Nunca se sabe cómo ibas a llegar a los lugares, y más vale ropa absorbente que no un sujetador cualquiera que hace que se te transparente la ropa. Después me quito los shorts y coloco ambos en la bolsa. Tras esto, me dirijo a una de las duchas para mojarme brevemente y quitarme el sudor. Había venido caminando, y desde mi casa hasta aquí hay un paseo largo. Y, para terminar, me pongo el bañador, que entra bastante bien debido a la humedad de mi cuerpo, aunque no es que tenga mucha. Soy un animal con pelaje "a prueba" de agua. ¡Además floto bien! Para terminar, me coloco el gorro y me cuelgo las gafas del cuello, para luego guardar mi bolsa en la taquilla y cerrarla. Salgo a la piscina, mostrándome "al mundo" con mi bañador.

*

Miro a mi alrededor, buscando a alguna hembra con bañador completo negro. En la piscina de las crías, hay varías jugando. Me hace sonreír. Me fijo entonces en los bancos junto a la puerta de los vestuarios. Una cobra hembra está sentada, con un bañador completo negro. Me quedo sorprendida al ver su pecho.

Dios... ¡Es como el mío! Oh bueno, más.

Bajo discretamente la mirada hacia mi busto, para compararlos mentalmente.

No, el suyo creo que es más grande. ¡Sheila, deja de pensar en pechos! A lo mejor es Hotstuff...

Me armo de valor y voy hacia ella.

- Di... disculpa. ¿Por casualidad en SinglesInt no serás Hotstuff?

Si me dice que no, voy a quedar en ridículo. 

No pasa mucho para que un nutria salga de los vestuarios y parezca que esta buscando. Me imagino que será eRRoR, lo que ella misma confirma cuando me pregunta por mi nick. Es algo mas bajita que yo, pero tiene una buena figura y un par que destaca en un cuerpo tan pequeño. Es realmente mona. Dan ganas de "comérsela". Detengo mi lengua antes de relamerme, seguro que se malinterpreta... o no, y tampoco le gusta.

Me levanto y me acerco saludando con la mano y sonriendo sin abrir la boca. - Llámame Cassey. Hotstuff es un poco vergonzoso para usar en publico ¿Verdad? Bonito bañador ¿Es de la ultima línea?- Me detengo pues estoy a punto de decir que lo llena muy bien, puede sentarle mal. - ¿Vienes mucho por aquí?- Mi cola se agita nerviosa y contenta involuntariamente. Espero poder llevarme bien con ella, necesito amigos por aquí.

Me lo confirma, con una sonrisa. Se llama Cassey. Veo como se relame y agita la cola. Pero no lo malinterpreto. He tratado con varias serpientes a lo largo de mi vida. Suele ser su reacción normal ante mi. Ya fuesen hembras o machos. Le sonrío ante su pregunta. 

- Yo soy eRRoR. Pero fuera de Internet me conocen como Sheila, encantada. ¡Sí, es bastante nuevo! Lo vi y no pude resistirme, jeje. Además, estaba de oferta - es entonces cuando me pregunta por mi frecuencia aquí. Algo me pincha en la mente. No puedo evitar sentir algo de tristeza, pero lo disimulo bien, con una sonrisa - Sí. Todos los días tengo gimnasio, pero los lunes, miércoles y sábados aprovecho también para venir a nadar - miro a la piscina. En mi mirada de puede ver algo de nostalgia - Aunque voy a empezar a trabajar el lunes cinco, así que estoy hablando con el gimnasio y la piscina, para que me cambien el horario - agito un poco la cola. Me hacía feliz conocer a alguien que le gustase lo mismo que a mi - ¿Y tu? ¿Sueles venir con frecuencia? - para no estar paradas, comienzo a caminar hacia el borde de la piscina, para que me siga Cassey. 

Enarco una ceja con esa media sonrisa. Algo la preocupa, pero ¿Que? Por ahora lo dejare de lado, a ver si mas adelante lo descubro.

-Aaah, si. Lo ves, eso es lo malo de estos sitios. El ho-ra-rio. Yo tengo una entrevista el día 10 y no se si podre venir con asiduidad. Y realmente me gusta.- Aprieto la manos mientras se lo expongo con vehemencia. - El agua, calidez y hacer ejercicio, las tres cosas juntas. Que sea igual solo se me ocurre...- Me callo a media frase. Aun no la conozco lo suficiente.- Ehem, bueno ya sabes.- Continuo con una sonrisilla picara.- Ahora estoy intentando venir todos los días después de correr un poco.- La sigo hasta el borde de la piscina y jugueteo con los pies y la cola en el borde.- Y vas a un gimnasio todos los días ¿Qué tal es? ¿Esta cerca? Tengo que apuntarme a uno.

Me río suavemente de sus frases mientras me siento en el borde, introduciendo las piernas y la cola en el agua. Estaba tibia, justo como a mi me gustaba. Bueno y esa temperatura era ideal para los reptiles. Se interrumpe cuando va a decir algo incómodo. Me sonrojo pero sonrío. A ver, no teníamos confianza suficiente. De hecho nos acabábamos de conocer. No era de mucha educación hablar de sexo en la primera quedada. Pero parece simpática. Me cae bien. Termino por introducir todo mi cuerpo en el agua, despacio para que no me doliese la parte superior de la espalda. La miro a los ojos. Y... Veo simpatía en ellos. 

- Sí, está de camino aquí, en la Quinta Avenida, justo en la esquina sureste de Central Park. Tiene unas vistas preciosas del parque. Eso sí, es femenino - mientras me mantengo flotando cerca suya, bajo la mirada hacia las "profundidades" - No... No me siento cómoda en un gimnasio mixto por... Bueno, ya sabes - digo mientras gesticulo hacia mis pechos - Solo me siento cómoda haciendo ejercicio junto a otras mujeres. Sí, alguna que otra lesbiana se me ha lanzado encima. Pero cuando hablo amablemente con ellas me dejan ir. Que vergüenza, contarte todo esto sin siquiera conocerte. Háblame de ti - le digo, alzando la mirada hacia ella - ¿Es mucha indiscreción preguntarte de que trabajas? Yo el lunes que viene trabajaré en atención al cliente en SouthPort. ¡Es genial! 

- Ah, pues me vendría genial.- La sigo al agua deslizándome desde el borde dejando que el calor me recorra el cuerpo. Según continua la miro y entiendo a que se refiere, aunque no comparto su molestia ante las miradas. - Si, el tener una buena figura puede ser una maldición. Pero si aprendes a disfrutar con ello, conviertes una debilidad en un juego.- Le susurro divertida al final. - Es que realmente tienes un cuerpo que atrae miradas. Te sorprendería saber que a muchos tipos se les controla mejor con una palabra amable que con reproches. - Le digo mientras perfilo mi silueta con la mano. - Pero entiendo que te incomode. - Dejo el cuerpo bajo el agua salvo mi rostro, moviendo las extremidades para mantenerme a flote. Eso a ella se le da realmente bien, creo que alas nutrias les es natural.- ¡Oh! Mi entrevista ha sido allí también para publicidad. - Me emociono y me acerco para tomarla de las manos.- Que bien, ya conoceré a alguien en la empresa.

Tenía razón. Tener un cuerpo bonito a veces podía ser un arma de doble filo. El lado bueno era que si encontraba a tu pareja ideal, podías "darle" tu cuerpo sin arrepentimientos, sin problemas. El lado malo era que todos los demás se te quedaban mirando. Y eso era mi problema. Me sorprende ver lo bien que lo lleva ella, que tenía un cuerpo precioso, bastante más bonito que el mío - Bueno... A lo mejor tengo que esforzarme más por "comprender" la psicología animal, jeje. 

Es entonces cuando me dice que ella también trabajará allí. Mi sonrisa aumenta cuando me coge las manos - ¡Ostras, qué guay! ¡Bien, ya conozco a dos de la empresa, jeje! - se me escapó el "dos". Aunque no era nada del otro mundo. Peregrine era una persona magnífica. Ojalá le vaya bien en RRAA. 

​​​​​​- ¿Hacemos unos largos? - recuerdo entonces lo que me dijo el médico: Nada despacio, ¿de acuerdo? Fue un golpe muy duro para mi, pero bueno - ¿Al estilo rana? ¿O estilo libre? 

- Si te lo tomas como un juego es mas divertido.- Saco la lengua y me toco un dedo mientras le guiño un ojo juguetona. Sin embargo esa es mi ultima palabra sobre el tema, no quiero incomodar a Sheila.

- ¡Ah! Perfecto, perfecto. Entonces podrás presentarme también.- Replico con emoción. Genial, será mas entretenido si consigo amigos por allí. Puede que incluso este en mi misma sección. Al menos con Sheila debería de trabajar de vez en cuando, publicidad y atención al cliente suelen colaborar... bueno publicidad y muchos departamentos imagino.

- Claro. Uhm, estilo serpiente jeje. - Le digo y hago una vuelta de ejemplo moviendo sinuosamente el cuerpo y la cola por el agua, haciendo como si me deslizase por el agua. No es muy rápido pero es un buen ejercicio.- ¿Cómo sueles nadar tu?

Me pongo algo roja, pero no dejo de sonreír. No quería que se llevase a casa una mala impresión de mi, así que intento mostrarme lo más simpática posible. 

- ¡Claro! Te va a encantar - pero entonces pienso en nuestra prehistoria. Las serpientes comían pájaros. Bueno, pero eso eso era hace muchos años. No creo que ella estuviese tan loca como para comerse a Peregrine. Sonrío un poco al enseñarme el estilo serpiente y le aplaudo por encima del agua. Pero su siguiente pregunta me toca un poco la patata. 

- Yo... Bueno, de todo menos braza y mariposa. Son dos estilos que requieren mucho esfuerzo y... No me conviene forzarme - intento decírselo alegre aunque tímidamente, pero dejó salir algo de nostalgia en mis palabras. Entonces, me coloco de espaldas, dejando que mi naturaleza de nutria haga el resto. Mi cuerpo se queda flotando en el agua, pudiendo sacar brazos y piernas, pero voy nadando de espaldas hacia el otro lado, despacio. 

- Y... Háblame de ti. ¿De dónde eres? Yo soy de Lansing, Míchigan. Tu nombre suena a francés. ¿Me atrevería a decir que eres francesa? ¡O canadiense! 

La observo curiosa, habla como si se hubiera hecho daño; quizá tenga algún compromiso después. - ¿Si? ¿Estas bien? No te preocupes tu a tu ritmo, esto no es una competición.- Le digo en tono amigable y desenfadado. Quiero que se sienta a gusto y además esto es para nosotras, para hacer ejercicio. No tenemos porque convertirlo en una competición que no llevara a ningún lado. Comienzo a nadar con la cabeza por fuera a su lado para seguir hablando mientras nos movemos.

Me rio un poco, es fácil llegar a esa conclusión dado mi apellido.- Jejeje. Si, del sur de Canadá. Me crie en un pueblo de Ontario y luego estudie en Ottawa. Vine a Nueva York atraída por la gran ciudad y sus oportunidades. - Me pongo bocarriba. - Por ahora me esta gustando bastante. Hay muchas cosas para hacer, gente que conocer y que probar. No todo es bueno,  pero no me gusta centrarme en las cosas negativas.

- ¿Eh? ¡Ah, no tranquila! Fue hace bastante, no te preocupes - no quería profundizar mucho en el tema de mi lesión. Por ese motivo no podía volver a competir. Mi espíritu de competición ya se había apagado. En esos momentos solo pensaba en ganar a toda costa. Ya no. Ya solo quería nadar tranquilamente. Sigo nadando de espaldas, con la cabeza fuera. Todas las nutrias podíamos hacer eso. Supongo que las serpientes también podrían hacer lo mismo que ella.

- Pues has venido al lugar ideal. Muchos dicen que es Chicago. Pero en Chicago no hay grandes edificios ni "grandes" empresas. Además, aquí tenemos Central Park, que está AL LADO de nuestro futuro centro de trabajo - miro al techo, con expresión soñadora - Siempre he querido ver Canadá. Me gusta mucho el campo, sobre todo si hay lagos, jeje. Y en Canadá creo que tenéis más de uno.

Parece que no quiere hablar del tema, así que no presiono mas. Prefiero que estas cosas salgan de manera natural.

-Aaah, si. Canadá, es tan rural como cabria esperar y un poco mas. La gente esta muy bien, y las ciudades son... bueno, les falta un poco de... No se, siguen siendo un poco rurales. - Me rio ante mi propia incapacidad de explicarlo. - La naturaleza esta por todas partes. No es que me moleste, pero creo que soy mas de ciudad. Los lagos y los bosques son preciosos te hacen sentir en sintonía con el mundo. Pero también hace mucho frio salvo en el sur.- Buceo un poco y salgo de nuevo, apartando el agua de mi cara para mirar a Sheila.- No cuesta mucho ir, unas horas de viaje. Si algún día quieres ir solo avísame. Te hare de guía y podríamos quedarnos en la casa de mi familia. Eso si, prepárate para comer mucho.

- Y ¿Qué me cuentas tu? ¿Alguna cosa de la empresa? ¿Algún cotilleo jugoso? ¿Alguien que te haya captado tu atención? - Me muevo a su alrededor  hasta que poso mis manos sobre sus hombros y le hablo muy cerca del rostro con un tono pícaro y juguetón. 

- ¡¿Sí?! Entonces... ¿Eso significa que ya somos amigas? Jeje, disculpa, me vengo muy arriba en seguida. ¡Y yo tengo buen sake, no te creas! - le digo mientras nos paramos en mitad de la piscina, que es cuando me empieza a preguntar sobre la empresa, a lo cual me río y me pongo un pelín roja.

- A ver, aún no he entrado a trabajar, empiezo el lunes. Aunque ya te comenté que el mismo día de mi entrevista conocí a uno de RRAA, por la mañana conocí a un león albino que es SIMPATIQUÍSIMO. Es un amor de persona. Y... Creo que a nadie más - su contacto debería resultarme incómodo pero... Nada más lejos de eso. Me resulta hasta agradable. Después de mucho tiempo sin que nadie me toque ni un solo pelo... A excepción mía, claro está. Era una sensación agradable. No podía juzgarla porque debajo del agua todo contacto se nota a la misma temperatura que el agua, pero era una sensación preciosa. Yo me estaba moviendo con las piernas, arrastrándonos hasta el bordillo más próximo - ¿Y a quién conociste tu en la empresa? 

-Claro que si. Sera genial tener una amiga en la empresa.- Respondo acompañando su entusiasmo.- Tranquila en casa te trataran como... bueno, como en casa.- Me rio un poco con la tontería.

Me llevo un dedo a la barbilla pensando, mientras sigo sujeta a Sheila con una mano y con la cola a una de sus piernas. - Veamos, yo hice la entrevista con otros tres y la chica que nos la hizo.- Fue ayer mismo así que tengo el recuerdo bastante vivido (*)- Éramos tres chicas, la señorita Brown, que dirijo la entrevista; Nora una gata naranja y yo. De los varones... eran ambos muy grandes. Un oso polar... Sna... Snu... uf es un nombre muy raro en ruso, yo le llamo Bjorn (Biorn). - Me encojo de hombros con una sonrisa, digo le llamo, pero por ahora no he hablado con el mas que ayer.- También estaba Sanza, un lobo de pelaje blanco con una expresión dura; pero luego parece buena persona.- Sigo a Sheila hasta el bordillo y una vez allí me suelto de ella para apoyarme en el borde.

Escucho la descripción de sus compañeros de entrevista, además de la mención de la señorita Brown. La secretaria era muy amable y educada. Y, por como describe a sus compañeros de entrevista, quizás fuesen buenos animales. Una vez estamos al lado del bordillo, simplemente me dejo flotar en la espalda, con la cabeza siempre alzada.

Menos mal que nací nutria, jeje.

Entonces se me ocurre que, ya que estábamos tan "unidas", quizás podría decirle lo del bar karaoke. Al fin y al cabo, no era algo de la empresa, sino que un camarero nos dio publicidad.

- Cuando terminamos la entrevista, fuimos a la cafetería de enfrente y allí, uno de los camareros nos dio publicidad de un bar country en Manhattan. Se llama Pretty West Coyote. Todos los viernes hacen festivales de música para novatos. Y, tras el festival, hay karaoke con canciones country y el típico baile de Achy Breaky Heart. ¿Te apuntas? Estoy hablando con Peregrine para ir con su pareja y... - me froto un poco el brazo mientras sonrío tímidamente - Es que no quiero ir de sujetavelas. Y menos con una pareja tan reciente. ¡Ay, no debería haber dicho eso! Lo de la pareja reciente. Es que Peregrine tiene novia. Aún no la conozco, pero me ha contado que es encantadora.

- Oh que bien. Suena divertido. – Replico a su sugerencia del festival country. – Pero… Sheila… ¿Estas pidiéndome que sea tu pareja? Pero creo que deberíamos conocernos mejor primero. – Digo con un tono pícaro y divertido acercándome sugerentemente. Luego me rio y le pongo una mano en el hombro. – Es broma. Claro que te acompaño cariño, parece un buen plan. Aun no conozco a Peregrine pero si te cae bien imagino que será majo. – La música country no sería mi primera elección, pero desde luego no pinta nada mal.

Al decir lo de que sea mi pareja, me sonrojo un poco. Seguro que lo había malinterpretado, es decir, estábamos en nuestro primer encuentro, dio la casualidad que íbamos a trabajar en la misma empresa, yo le invitaba a un festival de música. ¡Pero nunca le dije lo de ser pareja!

- ¡Yo no quería... ! - pero entonces ella lo aclara. Estaba de broma. Mi conciencia estaba tranquila, lo cual expreso soltando todo el aire. ¡Casi me hundo! Pero me rio un poco al saberlo, dándole un suave golpe de amigas en el brazo más cercano a mi. Su piel escamosa era muy suave - ¡No hagas eso, Cassandra! Caigo muy fácilmente en las bromas. Aunque ha sido muy buena, jeje.

Mientras seguimos flotando, pruebo a ver si se me ocurren temas de conversación. Pero, como dijo ella antes, ¡nos acabábamos de conocer! No sabía cuales eran sus... Por dentro me estaba dando muchos facepalms.

- ¿Y qué te gusta hacer a ti, Cassandra? - se me ocurre una idea un poco infantil, pero así era yo - Si me lo dices, yo te digo lo mío - y le lanzo una sonrisa adorable de nutria, mientras me empujo con el bordillo, dando vueltas despacio sobre mi misma y mi espalda.

Me pongo horizontal en el agua, para flotar bocarriba mientras miro a ningún punto en particular del techo.- Bueno, me gusta mucho el cine, y dar paseos. Sobre todo si hace buen tiempo. También nadar. Creo que no puedo decir que tenga un hobby. Quiero decir, cuando tengo tiempo libre me gusta distraerme, y disfrutar con amigos; jugando; leyendo. No se. Los hobbies son como trabajos por los que pagamos. - Me rio ante la tontería pero realmente me gusta mas simplemente desconectar que estar pensando en algún proyecto de marquetería o música... Imagino que hay mas cosas pero disfruto demasiado el tiempo libre como para llenarlo con algo en particular. - No quiero faltar a la gente que tiene hobbies. Es solo que a mi no me interesan.

- Oh, oh. Comer cosas ricas. Eso me gusta mucho. Podría aprender a cocinar. Pero se me da mal.- Admito volviendo a mirar a Sheila a la cara.- Debería apuntarme a clases, pero... uhm... no se, suena aburrido aprender sola.