Partida Rol por web

Estas en la entrada del pueblo, tienes ya un año acumulado de memorias en tu mente, las mas recientes nada agradables, todo salpicado de sangre, traes las fichas de tus compañeros, básicamente lo único que quedo de ellos. o lo único que pudiste recuperar a tiempo antes de que la manada de lobos se te echara encima y te tocara salir corriendo.

Este previo año habías ya perdido compañeros claro esta, pero nunca de esta manera tan abrupta, si tan solo esos tontos te hubiesen escuchado y hubiesen tomado el otro camino hacia las ruinas en lugar de adentrarse en el bosque.

Intentar mantener una sonrisa así, era muy complicado. Therion lo sabía, y eso era lo que, por sobre todo, le molestaba. Les advirtió una y otra vez lo que sucedería, por lo que se mantuvo en un lugar a salvo, pero los hechos transcurrieron tal como lo había predicho, o quizá, un poco más brutales de lo que le habría gustado esperar. Fue una masacre. Una vez más, por la falta de intelecto del resto, se habían producido innumerables bajas en vidas, y no había podido evitarlo, sobre todo porque, cuando observó la situación, realmente sabía que no tendría muchas opciones, por lo que había elegido huir. Durante el camino había maldicho una y otra vez, puesto que los fracasos eran una de las cosas que más difíciles le era aceptar. ¿Habría podido convencerlos de otra manera, si se hubiera ido antes? No lo sabía, pero ahora ellos estaban muertos y no tenía muchas opciones. Llevaba en su libreta, anotado con sangre, los datos de sus compañeros fallecidos, al igual que los datos y la peligrocidad que circundaba a las ruinas. Debía avisar de su deceso, por lo que empezó a caminar por el pueblo.

Alla dónde vas la gente se aparta de ti, los rastros de sangre y la mirada perdida te da un toque de alma perdida o algo deese estilo así que es natural que la gente se aparte un poco, estas justo en una encrusijada, por el camino de la derecha quesa tu residencia y por el de la izquierda esta el salon de gremios donde se reportan los resultados de las misiones...

Justo en ese sientes una mani en tu hombreo y esuchas una voz tranquila pero firme. ..

Esta todo bien jovencito... 

Mientras comenzaba a dirigir mis pasos al salón del gremio para informar los resultados de la misión, escuché la voz y me di vuelta, a ver quién era la persona con la que estaba conversando, aún sin mirarlo a los ojos respondí;

-Nada mejor de lo que una fracaso y una misión desastroza podrían provocar, gracias por la preocupación. -

Dijo, de forma amable, intentando esbozar una sonrisa, mientras, en su interior, se fijaba en las vestimentas y en cada uno de los detalles reconocibles de la persona que tenia en frente.

Hablas con un guardia de la ciudad, lo reconoces de inmediato, no solo por su ropa sino al hombre... lo has visto, no sabes quien su nombre pero tienes certeza total de que lo conoces y lo vez prácticamente a diario.

Lamento oír eso, entiendo entonces que estas regresando? y tus compañeros?

Therion soltó un suspiro doloroso, y buscando en su bolsillo mostró las fichas manchadas de sangre de sus compañeros, y dijo;

-Ibamos camino a las ruinas a hacer un encargo...ellos tuvieron la idea de ir por el bosque, les indiqué las cosas que allí pasaban y bueno...los lobos nos tendieron una emboscada, el resto es historia. Ahora, si me permites...tengo que entregar esto para que les honren la memoria. -

Tras lo cual, Therion hizo un gesto de despedida, guardo las fichas en sus bolsillos y prosiguió camino al gremio.

Escuchas la armadura del guardia moverse y a los pocos segundos mas chirridos de armaduras, en un instante estas rodeado por dos guardias, uno de cada lado y frente a ti unos metros mas adelante el guardia que hablo contigo, va despejando el camino, pidiendo permiso a los transeúntes.

Notas que no estas en ningún problema solo te van "escoltando" en silencio, una especie de ayuda tratando de hacerte el camino hasta el gremio mas "facil" o al menos menos accidentado.

Lo mire con cierta tristeza en los ojos, y le sonreí, bajando la cabeza y dándole un silencioso gracias. Era obvio que no le podía ir diciendo al resto de las personas que mis compañeros habían muerto por su "asombrosa inteligencia y genio táctico" pero algo que solo yo sabía, y que no podía compartir con nadie. Para que ellos no perdieran su tiempo, apresuré un poco el paso hacia el lugar. Le debería una a ese guardia, pues este gesto nunca lo olvidaría, y yo jamás olvidaba a la gente que era gentil conmigo, porque muy pocas personas realmente lo eran. La lealtad era un fuerte sentimiento que pocos podían compartir, y siempre le agradecería eso.

Finalmentes llegas al salón de gremios, aquel imponente edificio en peno centro de la ciudad, entran por la puerta norte y hasta ahí te acompañan los dos guardias, el guardia que hablo contigo te acompaña un poco mas justo hasta la puerta de la oficina de la fuerzas especiales.

Ahí se despide con un simple Que todo vaya bien.. poniendo la mano sobre tu hombro, comienza a caminar para retirarse y dejarte tranquilo

Lo observo irse no sin antes decir;

-Muchas gracias por el apoyo, no lo olvidaré. -

Tras lo cuál, procedo a acercarme a la puerta para tocarla, y una vez me dieran el pase, entraría al lugar, con una cara seria, preparado para entregar un informe sobre lo que ocurrió y devolver las fichas de mis compañeros. Aquí el fracaso se sentía mucho mas fuerte que en todo el camino, y tuve que respirar profundamente para entregar las malas noticias sobre lo sucedido.

La puerta estaba abierta, por lo que entras directamente, esperabas encontrarte a la encargada que siempre esta aquí encargándose de las misiones y apuntando los resultados, una mujer bastante fría e indiferente a lo que le dijeran, podríamos decir que era casi un robot... robot? donde habías escuchado esa palabra antes?... que es un robot?... pero en este momento no era así, ella no estaba en su lugar de pie y de espaldas a ti se encontraba nada mas y nada menos que el Capitán de las fuerzas de reserva, aquel que te dio la bienvenida el primer día de memoria que alberga tu mente... Britney...

Al escucharte entrar se gira y al cruzarse sus miradas, toma asiento y cruza las manos frente a su rostros con los codos apoyados en la mesa, habla entre sus manos... Tu dirás gatíto... su rostro serio no deja ver ningún tipo de emoción.

Me di la vuelta y observé a Britney. El siempre me había llamado la atención, y me daba ciertos escalofríos. Debía ser mucho más peligroso de lo que aparentaba, y más aún, siempre encontraba a todo demasiado...fríos, como si realmente no les importara las videas que se ponían en juego en este lugar. Lo miré y le dije;

-Capitán Britney, la misión conjuto a mis compañeros fue un desastre. Fueron despedazados por lobos, tras internarse en el bosque al intentar tomar el camino a las ruinas. -

Tras eso, busque las fichas en mis bolsillos y la deje en la mesa, mirándolo, para finalmente comentar;

-Esto fue lo único que rescaté de ellos. -

Dije, con voz amarga.

Luego de rebuscar por debajo de la mesa saca una gran bolsa de cuero y la pone abierta frente a ti en la mesa, dentro habrá unas 150 a 200 fichas como las que acabas de colocar en la mesa...

Otro grupo que se desvanece... no te sientas mal por haber sobrevivido... solo busca nuevos compañeros y sigue tratando de sobrevivir...

Aquellas palabras no las dijo con indiferencia ni frialdad, mas bien fueron pronunciadas con aceptación o resignación hacia algo inevitable...

Y como siempre para el sobreviviente una pequeña compensación... y te deja sobre la mesa 2 monedas de plata por cada compañero caído, osea te dejo 8 monedas de plata...

Observé la bolsa, y no pude evitar mostrar algo de asombro, y a la vez horror, pero oculté como pude mis emociones. Vi las monedas de plata sobre la mesa y no pude evitar sentirme, de cierto modo, aprovechandome de sus cadáveres. Tomé las monedas y lo miré, diciendole;

-Capitán...¿Alguna recomendación, o algún consejo? Espero no sonar altanero, digo, a todo aquél que llega usted lo recibe, y nos da la oportunidad de sobrevivir, lo acepto totalmente, pero tampoco nos ayudan mucho más a enseñarnos como sobrevivir en este lugar. El entrenamiento de gremio te ayuda un poco, pero lejos, la mayor experiencia o entrenamiento que solo soldados experimentados tienen, esta lejos de nuestro alcance. Me gustaría ser más fuerte y poderoso para proteger a los demás, no quiero ver a nadie más morir a mi cargo, ya han sido demasiados. -

Dijo, con una seriedad y frialdad, además de una determinación muy distinta a la faceta que mostraba siempre, mostrando un poco de la cara oculta, fría y calculadora que se encontraba detras de sí.

La mirada firme y seria, sin atisbo de dudas...

Eso es bastante sencillo la verdad, simplemente no seas estúpido y no te rodees de estúpidos. El gremio no es la única cantera de formación, también puedes unirte a grandes grupos de aventuras o simplemente aprender a cazar cosas pequeñas antes de ir por manadas de lobos, pero como dije simplemente es tener algo de sentido común...

Dicho eso se pone de pie y notas como la mujer que normalmente atiende entra por la misma puerta que entraste tu...

Me rasque la cabeza, pensando atentamente lo que me decía, asintiendo con la cabeza, luego di vuelta la cabeza al ver a la jefa recién llegada y haciendo una pequeña reverencia, le dije;

-Buenas noches mi lady, mi grupo fue muerto por lobos, ya le he entregado la medalla al capitán Britney. -

Tras lo cuál haciendo un gesto de despedida a ambos, me dirigí a la salida, para ponerme en camino a la residencia. Lavaría mis ropas y mi cuerpo que tenía de la sangre encima y me dirigiría a la taberna a dejar un anuncio sobre mi busqueda de nuevo grupo. 

La mujer simplemente asiente a tus palabras y continua su camino hacia adentro.

Te diriges a tu residencia, te cambias y aseas, sales de casa con tu equipo o con ropa "de civil"?

Estas en la puerta de la taberna que se escucha bastante alegre hoy.

Una vez salí del lugar con la ropa casual, entre a la taberna. No solía venir mucho aquí, pues prefería gastar mi dinero comiendo que bebiendo. En el lugar, buscaría en el típico lugar dondr se buscaban nuevos integrantes para grupos.

Therion tenía algunas ideas en mente, como por ejemplo, ¿Y si se dirigía a la torre, agarraba al próximo grupo que llegará y lo entrenaba desde 0? No le parecía una mala opción, quizás a futuro, podría armar su propio clan y entrenar a los nuevos novatos para salvar les las vidas. Dio una mirada por el lugar a ver si encontrará algo que le llamara la atención. 

Apenas entras sientes un pequeño brazo sobre tus hombros y una voz que te habla...

Tiempo sin saber de ti Therion... mi pequeñin, me tenias abandonada.. al voltear no es otra que Barbara, la líder de tu gremio.

Bárbara era el único tipo de persona en el mundo que conocía que era capaz de darme una mezcla entre excitacion y terror. Por un lado tenia el cuerpo de una diosa, y por otro, una maldad y un sadismo peor que el rey muerto. Sentí un escalofrío cuando la oí a mi espalda y dándome la vuelta, con una sonrisa afable, le dije;

-Maestra, buenos ojos los míos de encontrarme nuevamente con usted. ¿Aceptaría una invitación a beber de parte de un alumno? ¿O me estaba esperando por casualidad? - Pregunté con una sonrisa, mientras estudiaba la situación en la que estaba.