Partida Rol por web

Las palabras de Ashley hicieron que a John, casi se le desencajara la mandíbula del susto. ¿Viajes en el tiempo? Hasta ahora, estaba convencido de que eso solo podia ocurrir en las películas de ciencia ficción. Ahora resultaba que el tipo ese era algún tipo de mensajero del futuro que venía a avisarles de un gran peligro.

La historia sonaba tan extraña que llegó a dudar de su compañera. ¿Y si de verdad se lo estaba inventando o alguien les había engañado? Tal vez eso explicara el que los otros profesores no les hubiesen creido.

Por el momento, prestó atención para ver lo que el profesor Dumbledore contestaba

Gary se queda anonadado y sorpendido a partes iguales. El futuro por un lado y por otro que Amy no habia dicho nada antes de esto al director y demas profesores.

Que estaba ocurriendo alli realmente y quien era Grindewald.

Esto cada vez parecia mas serio y peligroso. Y no parecia de locos si pensaban que podia traer consigo el cierre de Howgarts.

Godric estab esperando a ver la reacccion de aquel profesor a lo que le habia comentado Ashley.

Cuando se giro hacia Amy
-¿Y a ti como te fue el camino paso algo?

No le había preguntado aun a su compañera como le había ido en su vuelta al castillo

La sonrisa del profesor Dumbledore iba poco a poco borrándose de su rostro mientras Ashley le narraba sus vivencias en el Bosque Prohibido. Cruzó las manos frente a la barbilla y escuchó con atención hasta que la niña terminó su relato. En ningún momento la interrumpió, ni dio muestras de pensar que estaba mintiendo o mal de la cabeza. Cuando Ashley dejó de hablar, Dumbledore se levantó y miró a la profesora Bloom.

- Bellerine, querida -dijo-. Haz el favor de dejarme a solas con los muchachos. Y si eres tan amable, pide que nos envíen un té desde las cocinas para todos... No pensaba que hubiera sido un día tan complicado para estos chicos.

La profesora asintió y salió del despacho, impresionada por el relato de Ashley. El profesor Dumbledore movió su varita con rapidez, y nueve sillas surgieron de la nada, cómodas y confortables.

- Sentaos, por favor -indicó a los alumnos-. Antes de intervenir yo, ¿hay algo más que alguno quiera contar?

-Si profesor hay algo mas -añadio Godric

-Dijo que pronto estallaría una guerra tanto mugle como mágica y en sus ultimas palabras dijo que no le permitiese acercarse a los intrusos que acabase con el ahora ,que lo matase ahora que aun era un niño,que debia morir.
No se a quien se referia exactamente pero bueno eso dijo...

-Los intrusos ya han llegado al colegio.-dijo preocupada Alex, tanto por su relato por lo que acababan de decir Godric y Ahley. Lo que iba a contar era muy importante, así que tomo aire y espero a que todos estuvieran callados para empezar a relatar su aventura.

-Cuando nos separamos de nuestros compañeros acabamos fuera del colegio, en una zona de luz detras de un muro lejos del colegio. Desde ahi oimos a dos hombres hablar sobre alguien que se había fugado, y que Hogwarts seria el lugar mas seguro para esconderlo. Creímos que se referían a alguien que se había fugado de Azkaban e hicimos un plan para atraparlos: Mathilda hizo un conjuro para que el muro desapareciera, Moira y Max hicieron un Expelliarmus y un Desmaius y yo conseguí las varitas de los dos hombres. No lo vieron venir y todo salio bien.-dijo con una sonrisa orgullosa, seguía contenta por lo bien que lo habían hecho todos, y por eso no omitía ningún nombre, no le parecía justo privar del reconocimiento a quien se lo merecía.

-Luego él hombre nos amenazo sin éxito, e intentó quitarme las varitas, pero gracias a Gary no pudo. Entonces apareció Tom Ryddle e hizo que el intruso se desmayara. Y poco tiempo después aparecieron los profesores. Eso es todo.

-Por las palabras de aquel hombre se interpreta que se hablaba de alguien que podia acercarse hoy a los intrusos .

Los únicos que os habéis acercado sois vosotros y ademas parece que se refería a un niño,con lo que se referiría a que había que matar alguno de los niños presentes que estuvieron allí,¿Max, quizás?

-Nosotros encontramos algo en el bosque, cuando veníamos hacia aquí para buscar al profesor Dumbledore.

Señala a John ya que es quien guarda el objeto que han encontrado en el bosque... bueno, ellos no, sino la ninfa del bosque que los ha interceptado... al menos no han sido centauros.

-John se lo ha guardado. Quizá sea algo importante.

Escucha la historia totalmente sorprendida. Las cosas parecen cada vez más raras y está claro que tantas cosas raras no pueden separarse y que todas tienen un motivo en concreto. Escucha a Ashley, a Godric y a Amy que explican su experiencia en el bosque y lo que han encontrado en él y luego escucha como Alex cuenta su parte de la historia.

-Profesor, no creo que ninguno de nosotros sea ese niño tan peligroso. Y Max es demasiado bueno como para ser ese niño tan peligroso... deberíamos buscar a alguien malo, no?

Con todas las historias alucinantes que sus compañeros estaban contando, John casi ni se acordaba ya del collar que se habían encontrado. En el fondo, solo era un collar, así que, ¿por que debería importar?

Al ver que varias cabezas se giraron en su dirección cuando Amy le señaló, se puso rojo como un tomate, y sus manos empezaron a rebuscar por los bolsillos de la túnica.

- Pues si profesor... cuando íbamos por el bosque nos encontramos con una ninfa y ella nos dio este collar.. -

Por fin sus dedos se cerraron sobre la cadena. El oro del medallón brilló con la luz de las lamparas cuando salió a la luz.

- Parece demasiado valioso para ser de algún alumno, así que pensamos que igual se le había perdido a algún profesor. ¿Sabes a quien pertenece?

Gary escucha a todos sorprendido y agobiado, cada vez mas angustiado. Todo lo que esta ocurriendo es horrible.

Un niño que puede convertirse en un monstruo y ser un peligro para todos. Lo raro es que nadie haya pensado en la posiblilidad que el hechizo que se cierne sobre el y que el profesor esta investigando sea uno que oculta que el es en realidad la persona de la que hablan. Gary desde hace un rato no puede pensar en otra cosa y esta horrorizado de hecho le cuesta incluso respirar con normalidad.

Desde detrás de su mesa, el profesor Dumbledore miró a todos con gesto grave, pero trató enseguida de dulcificarlo para no preocupar a los chicos. Cuando Álex relató cómo se habían enfrentado a los intrusos, la miró con admiración.

- Vaya... menudos fichajes hemos hecho este año -comentó, y se veía que lo decía en serio, no como si se burlara de ella.

Después John sacó el pequeño colgante dorado, y entonces Dumbledore se levantó sorprendido. Caminó hasta el chico y tomó el objeto de sus manos.

- Esto sí que no me lo esperaba -comentó tras examinarlo-. ¿Decís que una ninfa os lo dio? Sin duda alguien lo había perdido por allí. Aunque creo que encaja muy bien con la historia de la señorita Clearwater -añadió, mirando a Ashley.

Se lo pensó un par de segundos y luego lo dejó en la mesa.

- Ese objeto, pequeños -explicó-, es un giratiempo. Sirve para regresar al pasado. Así que es muy probable que ese Morgan White del que habla la señorita Clearwater lo emplease para retroceder desde su época hasta la nuestra. Sin embargo, hay que darle una vuelta para volver atrás una hora... y si decís que era hijo de uno de los alumnos actuales... eso son muchas horas. Nadie ha forzado un giratiempo hasta ese punto...

Dumbledore parecía ahora bastante sorprendido. Estaba claro que si alguien se había arriesgado tanto para retroceder tanto en el tiempo, tenía que tener una razón muy poderosa para hacerlo. No en vano, había acabado tan mal como el pobre Morgan...

Así que eso es como una especie de máquina en el tiempo que les hace retroceder en el tiempo equivalente en horas. Sin duda, ese señor tendrá que hacer dado muchas vueltas al giratiempo para llegar a su época.

-Profesor... y si usa usted el giratiempo para encontrarse con ese hombre? Sólo sería dar una vuelta o dos, no? Aunque seguro que hay peros...

Dumbledore escuchó la propuesta de Moira y miró el giratiempo, como considerándola.

- No, creo que no -dijo al fin-. Aunque es una buena idea, señorita Lostwood, me temo que nunca se ha forzado un giratiempo hasta este límite. Podría ser que no fuera seguro volver a utilizarlo...

Se levantó y depositó el colgante en una de sus estanterías.

- De todas formas, tal vez no sea necesario -dijo-. Según contáis, ese hombre se quedó en el bosque. Estoy seguro de que si hablo con los centauros, me harán el favor de permitirme verlo. Si sigue con vida...

Parecía preocuparle ese último punto. Los centauros no le habrían causado un daño irreversible, simplemente lo tendrían como prisionero... Pero el estado en el que se encontraba no hacía abrigar muchas esperanzas.

- No podemos ignorar lo que ha dicho ese hombre -terció Dumbledore-. Tal vez sólo sea alguien muy bien informado, pero por otro lado... le ha dado datos a la señorita Clearwater que nadie debería conocer. Iré a hablar con los centauros y trataré de traerlo de vuelta. Así sabremos a qué se refería con lo de "matarlo ahora que aún es un niño" y si sabe quiénes son los intrusos. Hasta que todo se aclare, será mejor que extrememos las medidas de seguridad. Todo lo que está pasando es demasiado extraño para que sean coincidencias.

Se dirigió a los niños y sonrió como para tranquilizarles.

- Bien, mensaje recibido -dijo asintiendo-. Creo que lo mejor será que volváis a vuestras salas comunes y tratéis de calmaros. Pediré que os envíen el té allí en cuanto esté listo. Los profesores nos ocuparemos de todo, pero mientras tanto... ¿alguno de vosotros tiene alguna pregunta o duda? No me gustaría que os quedáseis intranquilos.

Puede esto tener algo que ver con lo que me dijo al finalizar la clase?.

Pregunto timidamente Gary y con mas miedo que otra cosa.

-Entiendo... sería muy peligroso tratar de forzarlo más... y quizá se rompiese en medio del viaje temporal y se perdiese... es peligroso.

Se queda un momento pensativa para acabar de buscar una solución a ese entuerto, pero parece que el profesor Dumbledore prefiere hacerlo solo y que tiene muchas cosas en las que pensar.

-Profesor... quien es Grindelwald?

Dumbledore miró a Gary y negó con la cabeza, sonriente.

- No, tranquilo -dijo-. Lo que te dije antes no tiene nada que ver. Es más, creo que en cuanto la cosa se tranquilice un poco te llamaré para darte una... sorpresa.

No hizo más alusión a su anterior conversación con Gary y miró a Moira.

- Grindelwald es... un viejo conocido mío -dijo mientras una sombra le cruzaba el rostro-. Hace muchos años que no sé de él, aunque... Bueno, no. No es nada. Nada que deba preocuparos.

Dio una palmada y alzó ambas manos.

- Bueno, creo que eso es todo. Voy a hablar con los centauros. Os avisaré en cuanto sepa algo de nuestro visitante. ¡Ah!, y no os acerquéis a la torre de Astronomía, porque estoy seguro de que allí es a donde llevarán a los intrusos. Será mejor que os mantengáis lo más lejos posible de ellos...

Todos salieron al pasillo y Dumbledore cerró la puerta de su despacho. Les saludó una vez más con una sonrisa y se alejó hacia la puerta principal del castillo, dejándolos solos.

Max observó alejarse al profesor Dumbledore, y cuando se perdió de vista tras una equina, se encogió de hombros.

- Uf... bueno, ¿y ahora qué? -preguntó al resto-. Ya le hemos dado el mensaje, pero no nos hemos enterado de mucho. Y han cancelado las clases... ¿Qué hacemos?

La verdad es que estaba cansado después de tantas emociones, y además se preguntaba qué estaría haciendo Fitzens, que llevaba solo toda la mañana. Aunque quizá alguno de los chicos tuviera alguna idea sobre qué hacer para enterarse de algo más acerca de todo lo que estaba pasando. Entonces recordó algo.

- ¿Dices que ese tipo que te encontraste te dio una foto nuestra? -le preguntó a Ashley, sorprendido.