Partida Rol por web

Es una noche oscura, llueve a cantaros y caen rayos en la ciudad. Te encuentras en tu estudio, rodeado de libros arcanos que nunca han visto la luz... Unicamente te iluminas con una vela titilante.
Pasan las horas y sigues enfrascado en tu lectura, cuando derepente te da la sensacion de que han llamado a tu puerta...

cojo cualquier trapo y envuelvo con el rapidamente el corte de mi mano, soplo para apagar la vela, no quiero que nadie vea que oculto, y me encamino hacia la puerta.

Abro ligeramente la puerta mientras asomo basicamente la cabeza y digo:

Ya es tarde para visitas, ¿quien anda ahi?

Cuando abres la puerte no hay nada ni nadie fuera... solo lluvia y frio...

Cierro la puerta y apoyo en ella la espalda, dejandome deslizar asta el suelo, donde me quedo sentado mirando a la ventana, ahora unica fuente de luz del cuarto:

Me lo habre imaginado... - Suspiro - Ya es tarde, y el cansancio esta haciendo de las suyas en mi mente. Quiza deberia recojer esto un poco e irme a casa

Escuchas en el piso de arriba mucho ruido, libros cayendo, papeles que se caen y una voz en la distancia - Donde esta.. donde esta...

lo mas sigilosamente me levanto y comienzo a subir las escaleras, intentando a la vez darme la maxima prisa posible, aprovechando el abrigo de la oscuridad y el ruido del intruso.

Ves a un hombre que te suena a ver visto en otras ocasiones...

La mejor expresion que puedo encontrar para describir esta situacion en el futuro es, metaforicamente hablando: Mi estomago ruje. Y no es de extrañar, pues una parte de mi lleva siglos sin probar bocado. Por suerte, puedo controlar esto, al menos un rato.

Busco una posicion ventajosa, esperando el momento oportuno, y me avalanzo sobre el, tirandolo al suelo, intentando inmovilizarle.

Lo tiras al suelo con violencia tirando al suelo aun mas libros y escritos - ¡AAAAAAAAAH! - grita el anciano. No sabes poco, pero justo antes de caer, el anciano se da la vuelta entre tus brazos y consigue soltar un brazo de tu presa... Notas un frio acero en tu cuello - Maldito... - masculla entre dientes

agarro con fuerza la muñeca del viejo, apretando con fuerza para que suelte el cuchillo y digo con tono autoritario:

¿quien eres y que estabas buscando?

Clavo mi mirada en sus ojos, con gesto rudo y amenazador, esperando respuesta.

El anciano te mira fijamente sin amedrentarse para nada... Con la otra mano se suelta de tu agarre e intenta apuñalarte sin exito - ¡¡¡UAAAAHHH!!! ¡¡ QUIERO LO QUE HAS CONSEGUIDO!! ¡ COMO LO HAS HECHO! ¡MALDITO SEAS! - grita iracundo

Quiza todavia puedas conseguirlo... de un modo algo.. especial...

Mis dientes se ven punteagudos y macabros.
Sonrio maleficamente mientras dejo que su vida se evapore hacia mi, lenta... y dolorosamente.

¡¡¡AAAAAAAH!!! - grita de dolor al notar como la vida se le es extirpada... Vuelve a alzar su puñal contra ti y lo clava con fuerza en tu hombro derecho con saña - ¡¡ESTE PODER DEBERIA SER MIO!! ¡¡MALDITO BELLACO!!

AH! Con una mirada de odio intento desarmarle, y continuar alimentandome de el.

El cuchillo sale despedido y se aleja entre la oscuridad de la habitacion... Anthony intenta golpearte como puede con sus puños impactando en tu cara con todas sus fuerzas - ¡MUERE! - grita desbocado

Agarro con las manos fuertemente su cuello, intentando que fije su atencion en este y no en golpearme.

Mientras continuo con el ritual de absorcion, pues... ya no debe faltar mucho para terminarlo

Cuando vas a darle la ultima dentellada que creerias que seria la ultima, el viejo traza unos simbolos con los dedos y desaparece en la sombra dejandote completamente solo

Golpeo el suelo con fuerza.
¡Maldita sea!

Se ha escapado, y para colmo, me a dejado herido y sabe volver
Con cualquier trozo de tela que pueda encontrar tapo la herida y examino el cuchiyo con el que me ha atacado, por si tiene alguna marca significativa

¿Vengarme?, ¿por un cortecillo?, tampoco es para tanto. Observo de arriba a abajo al demonio que se muestra ante mi y pregunto: ¿y quien es used, si me permite la pregunta?

Vaya, Ereshkigal... perdona no haberle reconocido. - Me quedo un momento pensativo y digo - Volvera, sabe donde encontrarnos, pero entonces estare preparado, y sere mas agil al utilizar los dones que me habeis concedido. - Sonrio con malicia - Y te aseguro que la proxima vez no escapara.

Me vuelvo hacia los libros desordenados que ha dejado el viejo y empiezo a devolverlos a su correspondiente lugar. De repente vuelve a mi cabeza el libro con el que encontre al demonio, dejo lo que estoy haciendo y lo cojo.

Lo primero que deberia hacer es ocultar esto de la vista de cualquiera... - Dirijiendome al demonio- ¿donde estaria mas seguro?