Adolphus se dirigió hacia el cadáver y se inclinó sobre él. Aparentemente, no quedaba mucho por hacer por el infortunado sujeto. Sin embargo, en la lucha contra el mal nunca debía darse nada por sentado. Elevó una muda plegaria por tan torturada alma y luego procedió a estudiar a conciencia el cuerpo que tenía delante de él, intentando encontrar alguna pista que pudiera indicarle algo acerca de su identidad. También quería saber si existían otras heridas, además de las notorias de su cabeza, que pudieran evidenciar otros signos de combate.
Tirada: 1d20
Motivo: Sanar?
Resultado: 13
El cuerpo esta despedazado, sin el cerebro es practicamente imposible revivirlo y menos aun sanarlo, pero con tantos contras aparece una posible pista, a unos pies de distancia hay un papel en el suelo, quiza se le haya caido al azotamentes en su apresurada huida, en la taberna se comienzan a oir los murmuros de siempre.
en cuanto a los rastros de sangre, no se ve nada, es como si el azotamentes se hubiera tomado todo el liquido encefalico y tambien la sangre de las arterias y venas proximas al cerebro.
El clérigo tomó el arrugado papel y lo observó detenidamente por unos momentos, intentando descifrar su contenido. Instantes después, se lo tendió a la pícara.
Su vista recorrió los alrededores, buscando signos de cualquier movimiento, pero en su interior sabía que ya era demasiado tarde. El monstruo estaría fuera de su alcance, esperando una nueva oportunidad para atacar. El Mal había perdido uno de sus soldados, pero otro aún más fuerte había tomado su lugar. La tarea de los servidores de la Justicia nunca acabaría…
el papel parece estar escrito con simbolos extraños, es el poco conocido infracomún que balbucean los azotamentes, el clerigo lo mira un poco pero no pone mucho enfasis en entenderlo, parece que solo queria ver de que se trataba, por su forma parece ser una nota de encargo o un contrato de propiedad
tirada de desifrar escritura si quieren saber algo mas.
Tirada: 1d20
Motivo: Descifrar escritura
Resultado: 5
5, no entiendo nada.
Sería bueno saber que pone en este papel, tal vez algún erudito del pueblo nos pueda ser de ayuda. Yo, por mi parte no entiendo nada.
Tirada: 1d20
Motivo: Descifrar
Resultado: 18
adolphus nota que la carta dice
Cita:
Adolphus rondaba por los alrededores del cadaver, intentando buscar algún rastro del azotamentes, cuando de repetente se frenó en seco con una expresión de espanto pintada en el rostro. Quedo unos momentos paralizado, con sus facciones desencajadas.
- Por Heironeous, no puede ser…
Después, en un estallido de vigor, se abalanzó sobre Evea, vociferando con desesperación:
- Niña, déjame ver ese papel...
Unas gotas de sudor perlaban su frente mientras arrancaba el trozo de pergamino de las manos de la joven. Con sus manos temblando de forma incontenible, intentó ponerlo frente a sus propios ojos y comenzó a observarlo, casi con una mueca de dolor por el esfuerzo. Un susurro escapó de sus labios:
- Es terrible…
"necesitamos que mates a un sujeto que viste ropajes blancos y se oculta siempre luego de asesinar a alguien en una taberna cercana a nuestra herreria, el indivudo estara encapuchado y llevara un simbolo nuestro estampado en varios lugares de sus ropajes, ten cuidado, es fuerte pero no tanto como tu
se te pagara con armas para tu ejercito
Cumple o muere.
Antonidas"
No se como poner citas.
Lyam, al ver lo angustiado que se había quedado el anciano clérigo, se extrañó. Parecía que había en juego ciertos factores que desconocía. Al fin, se decidió a actuar, y le preguntó a Adolphus:
-¿Qué es lo que pasa? ¿Por qué ponéis esa cara de asustado?
Perdon, pero todo el parrafo final de mi ultimo post debería ir como cita. Simplemente no se como hacerlo. Adolphus está leyendo en voz alta lo que dice el papel.
Cuando el anciano descifra lo que pone en el papel, Evea queda sorprendida y atenta al proceder.
Con gesto preocupado, el clérigo se dirigió a sus compañeros, aunque cuidándose muy bien de alzar la voz.
- Tal vez deberíamos buscar a la guardia y comunicarles esto. - Hizo una pausa, mientras observaba las reacciones de los demás. - O podríamos dar unas vueltas... y ver si hay alguna herrería por aquí.
Su tono no dejaba lugar a dudas, acerca de sus preferencias. Al viejo le chispeaban los ojos de solo imaginar una confrontación titánica contra tan poderosos enemigos. Sin embargo, respetaría las decisiones del grupo. Por otro lado, primero debía conseguir toda la información que pudiera sobre este misterioso grupo.
Evea contempla al excitado anciano.
- Eso no es nuestro problema Adolphus, en todo caso ya haremos mucho si informamos a la guardia, no tengas tanta prisa en desacerte de tu pellejo. Acaso no has visto que le ha hecho al tipo ese.- Dice señalando con el pulgar al fallecido descerebrado.
Lyam se encontraba dubitativo. Por un lado quería seguir investigando la extraña secta del fallecido hacíoa pocos minutos. Por otro lado, su sentimiento de autoconservación le decía a gritos que saliera corriendo de la ciudad y volviera a su casa. Después de estar unos segundos enfrentándose a sus miedos, decidió continuar con sus nuevos compañeros. Pero...la idea de enfrentarse a solas con nuevos engendros no le hacía especial ilusión, así que contestó a las palabras de Adolphus:
-Aunque respeto tu audacia, no creo que estemos preparados para enfrentarnos nosotros solos a esa secta. Ayer hicimos amistad con los soldados de la guardia, así que mi proposición es ir a avisarlos, que ellos estén enterados y dispuestos para acabar el problema. Luego, nadie nos puede detener si paralelamente investigamos cuál es el objetivo del sectario....con discreción, claro. Y en caso de que necesitemos ayuda, la guardia ya estaría preparada-
Evea asiente con la cabeza ante las sabias palabras de Lyam.
estoy presente a toda hora, solo que no veo porque narrar ahora que estan en plena discucion.
- Tienen razón, debemos ser un poco más cuidadosos. Anoche casi nos matan a todos, y solo eran una partida de engendros. Vayamos por la guardia… ya habrá tiempo de actuar.
- Además, si algo nos pasara, no quedaría nadie para advertir a las autoridades. Si han despachado con tanta facilidad a ese clérido malvado, debe tratarse de algún grupo poderoso. No debemos dejar que la vanidad se interponga en nuestros deberes.
Evea parece extrañada.
- Que te hace pensar de que se trate de un clérigo?- Pregunta intrigada.- Una cosa chicos... creo que alguien tendría que vigilar la escena del crímen, para que no vengan curiosos y demás... imagino que esta muerta avisará a la guardia y que pronto llegaran, sólo tenemos que esperar.