Partida Rol por web

Me quedo atento al ver a William caer, aunque decido no acercarme. Bastantes personas se han lanzado ya a por él. Agradezco haber actuado así cuando sufrimos esa sacudida, que me pilla bastante más estable que si estuviera moviéndome.

-¿Otro paseo por la nave? Maldita sea... Estamos tentando mucho a la suerte. William, ¿qué te ha pasado?-pregunto, sin moverme del sitio. 

El escáner del gato termina, y aunque no eres experta en veterinaria, eres consciente de que el gato tiene lo que, aparéntemente, debería tener un gato en su interior, y no hay signos de que tenga ningún parásito en su interior.

Claude sigue a William hasta la pared contra la que se sienta, y se arrodilla delante de él, acariciando sus brazos con las manos. - Ey... ¿Estás bien? - Le pregunta en un susurro preocupado.

Escondido en mis brazos ignoro los sonidos cercanos, sumido en mis pensamientos, pero cuando alguien me toca me aparto de inmediato por instinto. En cuanto consigo enfocar los ojos en Claude, cerca de mí, toda mi expresión se relaja un poco, y recibo su contacto como un bálsamo tranquilizador.

- Sí, yo... - empiezo, con un nudo en la garganta, pero no soy capaz de continuar. - ... No. - admito después con un hilo de voz, echándome hacia adelante para poder abrazarla y esconderme de todo durante el tiempo que pueda.

Claude frunce el ceño al ver cómo William se aparta en un primer momento asustado, pero lo relaja cuando la expresión de él se suaviza y lo abraza con cuidado, acariciando suavemente su cabeza. - Chssss, ya pasó, William... Estoy aquí y todo va a salir bien, ¿vale? - Murmura palabras tranquilizadoras durante el tiempo que él necesite. Finalmente, sin dejar de acariciar su cabeza se muerde el labio antes de atreverse a preguntar lo que le pasa por la mente. - ¿Qué ha pasado? ¿Qué te está pasando? - Susurra, preocupada por los desmayos del hombre.

Me dejo cuidar durante un par de minutos, tratando de no pensar en nada. Sin embargo, conforme voy siendo consciente de la situación comienzo a darme cuenta del ridículo que tengo que estar haciendo. Aún así, no me importa lo suficiente como para apartarme, aunque contengo mi pecho cuando mi impulso es comenzar a sollozar. - Aún... aún no lo tengo claro. - susurro despacio, intentando no romper a llorar - Pero creo que necesito una cita con mi psicóloga. - añado después intentando hacer una broma para quitarle hierro al asunto.

Cuando William vuelve en sí dejo que se aleje, se le ve bastante asustado. Pobre...recuerdo que todavía no ha recuperado del todo la memoria y toda esta situación poco debe ayudar a una estabilidad emocional. Dejo que Claude lo atienda y me vuelvo hacia los demás:

- Bueno, el escáner ha acabado por fin y parece que no debemos temer que salga ningún bicho del dichoso gato. Ahora decidid, ¿nos movemos o escaneo a alguien más? Sinceramente, creo que deberíamos movernos, pero si vais a negaros a que criogenicemos a estas dos,yo metería a una en el escáner y luego a la otra. Pero eso nos va a hacer perder 2 días.

Claude se separa un poco de William, lo justo para poder mirarlo a los ojos sin dejar de acariciar su cabeza. Duda durante varios segundos antes de hablar con voz suave. - Sé que es peligroso, pero... ¿Quieres que cuando nos movamos nos quedemos en otra sala y hablemos un rato? Podemos repetir la hipnosis si quieres, la vez que conseguimos hacerlo salió bastante bien, pero interrumpimos el tratamiento y necesitabas más sesiones... Ahora que estoy comunicada con Paysal podremos mantenernos comunicados con los demás aunque nos separemos. 

La mirada de la joven se gira hacia George mientras espera la respuesta de William. - Lo único que no me gusta es la idea de separarme de George.

Finalmente gira un poco la cabeza para dirigirse a la doctora y asiente a sus palabras. - Voto por movernos, y voto por criogenizarlas.

Después vuelve a mirar a William, bastante preocupada por él.

Me quedo a un lado de William y al ver que está medianamente bien me tranquilizo. Me aparto al ver que está queriendo tener tiempo a solas con Claude y me vuelvo a una silla.

- Yo estaré con ellos. No os preocupéis. Y me sé defender, ya lo sabéis... - Miro a Claude y hago el esfuerzo de sonreír un poco. - Además, Dios está de nuestro lado, ¿recuerdas? Vamos a matar a ese alien.

Cuando escucho la propuesta de Claude me muerdo la mejilla por dentro de la boca, pensativo. La manera que tiene de cuidarme hace que todo lo que me hace sentir mal parezca más lejano. Poco a poco voy tratando de respirar más calmado. No me gusta que me vean así, y menos George... Tras valorarlo largo rato, termino asintiendo con la cabeza - Podemos quedarnos aquí cuando se vayan ellos... - propongo - Así no tenemos que andar deambulando por la nave. - digo, ligeramente repuesto, mientras tomo con mis dos manos la que ella tiene libre. Luego busco a Julian con la mirada. - ¿Confío en ti para cuidar de George?

-Decidido entonces, vamos a criogenizarlas. Intentaré arreglar la máquina si es que está estropeada.-Me giro a William y a Claude.-Tened cuidado si decidís separaros... No me parece buena idea, la verdad. Esa sesión la podéis tener una vez hayamos acabado con esas cosas y sin correr peligro. Pero...-Me muerdo el labio.-Creo que debería ir al puesto de mando. Si esta nave sufre algún desperfecto no podremos volver a casa y eso es prioridad.

La idea de ir solo no me agrada demasiado, pero la idea de quedarme en esta nava toda la vida tampoco.

Claude se esfuerza por devolverle la sonrisa a George y mientras espera la respuesta de Julian a la petición de William, duda todavía mirando al pequeño. - ¿Me prometes que no te separarás de ellos? ¿Te quedarás cerca de Akira, Julian o la doctora todo el tiempo?

Después se dirige a Akira, frunciendo el ceño con preocupación. - Yo pensaba lo mismo que tú, pero... Es que creo que William se está poniendo peor, Akira. Y si puedo ayudarle, voy a hacerlo, aunque tengamos que correr el riesgo de separarnos. Después intentaremos llegar donde estéis, y mientras esté Paysal con vosotros, podremos hablar en cualquier momento. - Cuando Akira habla de ir solo al puente de mando, Claude se frota la cara, preocupada. - Bien, entonces, ¿por qué no os dividís en dos grupos? Uno que vaya a la sala de criogenización y otro al puente de mando... Para evitar paseos innecesarios. Entiendo que debas ir para averiguar qué ha sido ese golpe, pero no creo que debas ir solo, llévate a alguien y podemos reunirnos de nuevo en el puente de mando todos después.

Finalmente se gira hacia William de nuevo. - De acuerdo, nos quedaremos aquí y después iremos donde estén ellos, ¿vale?

Escucho hablar a Claude, y un escalofrío me recorre la espalda cuando dice que estoy peor. ¿Hasta dónde va a llegar esto? Asiento cuando afirma que luego nos reuniremos con ellos, pero trans un instante hablo a todos. - No. - digo de forma directa - Que no se dividan en dos grupos. Cuanto más pequeño es el grupo, más fácil es que alguno de los alien decida atacarlo. Cuanto más numeroso sea, mejor. - les digo - Pasad antes por el puente de mando, y luego id todos a la sala de criogenización. De todas maneras, lo de la sala de mando no debería llevar demasiado tiempo.

- ¡Me quedaré aquí! - Respondo. - ¿Dividirse en dos grupos? No creo que sea la mejor idea, teniendo en cuenta que hay al menos dos monstruos más...

- Yo también creo que no hay que dividirse más de lo necesario. Está bien, pasaremos antes por el puesto de mando. Luego la sala de criogénesis, armería y regresamos aquí. Creo que este es el mejor lugar como base, ya que puedo curaros con más facilidad y no está destrozado como el puesto de mando. Así que William y Claude, no salgáis de aquí.

Suspiro al comprobar lo que parece ser otra decisión del grupo guiada por la psicosis colectiva.

-¿En serio vamos a criogenizarlas? Sigue sin parecerme una buena idea. Tanto una pérdida de tiempo, como una posibilidad de matar más gente innecesariamente. Pero yo soy sólo uno, y vosotros sois varios, así que mis palabras no valdrán de nada. 

Me sorprendo mucho al darme cuenta de que mis oídos captan algo que de otra manera no podrían, y miro durante un instante a George y a Claude, sorprendido.

Entonces suspiro, y decido dejar de espiarlos. Son las personas que más me importan, sobre la nave y en cualquier lugar. Si deseo respetar la intimidad de alguien, es la de ellos.

Durante un instante me quedo mirando a George y a Claude, dudando antes de hablar, pero finalmente me dirijo a la doctora. Mi voz suena cansada, y mientras hablo suelto una de mis manos de la de Claude para llevármela a la cara. y frotarme el ojo.

- ¿Hay algo que podamos hacer mientras tanto para que las máquinas vuelvan a funcionar? - pregunto.

- Las máquinas funcionan. Están manteniendo en buen estado los cuerpos de los fallecidos, ésa es su función. Vosotros ocupaos de tu terapia, que ya es bastante. Y si acabáis y no hemos vuelto, no estaría de más escanear el cuerpo de Claude, no podemos permitirnos perderla. Pero no sé si serías capaz de hacer funcionar el escáner.