Partida Rol por web

La luz de la tarde era tenue, cuando la tensión ya no pudo contenerse más… La altanería y la superioridad del Sidhe crispaban a la gran mayoría de los presentes.

Como portador del Tridente, Garoé se situó frente a él, esperando un poco de sumisión de aquella criatura. La respuesta de Aldair no se hizo esperar. Dio la espalda a su adversario y dijo mientras  plantaba sus manos a los lados de su cuerpo.

No me hace falta tu Tridente para demostrar mi palabra…

Sin más un mar de niebla espesa cubrió el cuerpo de Aldair, olvidando su figura, quebrantando el mismo viento.

Los ojos relucientes de Garoé quisieron ver tras la niebla pero algo lo impedía… No hicieron falta los ojos ni la mirada a Faux Ungues y Adara, aquellas centauras recordaban la posición de su presa y como buenas guerreras llegarían hasta él.

Rompieron sus pasos con un veloz trote, y llegado el momento se alzaron sobre sus dos patas traseras y golpearon al unísono el aire varias veces con sus cascos delanteros. Cayendo entonces contra el suelo una masa de niebla condensado que dejaba a la intuición la posición de un cuerpo.

Garoé, entonces sonrió y sin ni siquiera moverse del sitio, una veloz hiedra de laurel y espinos corrió por el suelo hasta llegar a aquel amasijo de aire aún informe que todavía no mostraba la presencia que atrapaba.

La enredadera llegó y abrazó aquella nube, esperando atrapar su presa. Para ayudar a esto el Lich apoyó una de sus huesudas manos sobre la rama que acababa de nacer del Espíritu del Agua. Acto seguido un reguero de escarcha y afilados hielos comenzaron a circundar aquella hiedra, creando alrededor de la niebla una verdadera cárcel de hielo y espinos que obligaban a aquella presencia a aferrarse a su posición.

Ñusta sabía que había llegado su momento así que decidió abrir una grieta en el suelo y dejar que un demonio del abismo hiciera su trabajo.

Ante vosotros un ser despiadado, y sanguinario se erguía, con el tamaño de un gnomo pero con la fiereza de un titán.

Con aspecto incorpóreo atravesó aquella jaula que atrapaba la niebla, y se combino con ella, esperando disipar la aquella forma y desatar la muerte de su dueño.

Y entonces cuando todos esperabais ver el cuerpo de Aldair magullado por la acción de las centauras y herido por la cárcel que lo atrapaba, un ahogo llegó a vuestros oídos, que para nada recordaría la voz de un hombre.

Aldair miraba desde una columna cercana, todo aquel espectáculo. Mientras ante vuestra mirada, aquella niebla se disipaba, entre la escarcha y los espinos, y a la vez que aquella prisión caía al suelo, sin más… el cuerpo de Kilina herido se extendía ante vosotros.

Sus manos acariciaban su garganta, mientras la muerte se adueñaba de ella, sus ojos se borraban en un blanco nacarado, mientras de su último aliento, exhalaba el etéreo cuerpo de aquel demonio que Ñusta había mandado contra la niebla.

Aquel demonio, tras cumplir su tarea se desvanecía, pero entre vosotros, incrédulos, Kilina había sido vencida en una lucha que no le pertenecía.

Algunos ahora recordabais haber visto entre la niebla algún tentáculo fugaz, como queriendo escapar de la misma esfera que había propiciado su muerte.

Pero ahora, tan solo serían palabras, que habían costado la vida de la Cecaelia, dejando paso a la noche, mientras su cuerpo desprotegido fuera del agua, ahora poco a poco se secaba entre espinos y escarcha.

Sin más apoyado en la columna mira el espectáculo sin decir una palabra hasta que el seco cuerpo de Kilina cubierto de espinas y escarcha cae inerte al suelo. -Una lástima, me caía bien la chica marina, pero tenía que defenderme de alguna forma.. Se acerca al cadáver y con un movimiento de la mano, un montón de hojas mecidas por el viento caen sobre el cadáver cubriéndolo por completo. -Se merece un funeral de guerreros. Coge su gaita y entona una canción funeraria por el alma de Kilina

En fin.... espero haber demostrado mi inocencia mostrando mis poderes..

Me acerco al cuerpo de Kilina y con una de mis alas acaricio su rostro...

Descansa en paz Dama del Oceano... Espero que encuentres la paz y la calma en este nuevo sendero que comienzas a andar...

La actitud de Kilina me había parecido un poco rara siempre, pero especialmente después de que me diera aquel beso... sin embargo, mirando su frío cadáver, reflexioné que esa muerte no era lo que se merecía. Quizá no fuese perfecta, al fin y al cabo, ¿quién de los allí presentes lo éramos?, pero tenía la certeza de que no era ella la que debía haber muerto.

   Algunas gotas de agua cayeron de las hojas del Garoé sobre el cuerpo de la caída. 

   A pesar de lo difícil que podía ser interpretar las expresiones faciales de un ser formado a partir de ramas entrelazadas, era muy fácil entender aquel gesto.

   Un precio demasiado caro... - susurra el Garoé, lamentando la ausencia del ser que más íntimamente estaba relacionado con el agua de todos los presentes. Entonces mira en torno a sí mismo - No esperaba que me siguieseis en este día. Lamento mi error.

A pesar de nuestras diferencias por quienes somos un ser tan bello no se merecia morir.

Evaporo un poco de agua de un riachuelo cercano y hago que una pequeña lluvia caiga sobre el cadaver como señal de repeto.

Faux miro aquello con bastante asombro, aquel hombre era un guerrero bastante impresionante, aunque era realmente lamentable el resultado final... aquella criatura marina no parecía tener intención de lastimar, y aunque las criaturas acuaticas no eran de sus preferidas, había llegado a convivir con alguna en los bosque donde residía y por ello conocía un poco de su naturaleza.

-Guerrero!- dice dirigiendose a Aldair -Por que ha sido ella el objeto de tu poder?*- pregunta tratando de comprender por que era ella quien había terminado muerta.

Termina los últimos acordes de la canción. -Y porque me habéis atacado vos, mujer mitad caballo? Se cruza la gaita a la espalda y después se cruza de brazos -Supongo que porque os caigo mal o me creíais un asesino, me confundo?

Mira al guerrero con plena serenidad -Las preguntas no suelen responderse con preguntas- dice algo decepcionada, no por no escuchar su respuesta, sino por no comprender lo que en realidad sucedía -Quien carga una espada necesita mas de una escusa para ser un asesino, pero ciertamente no tengo nada en tu contra, he escuchado las razones de otros sobre sospechas hacia ti, poco concretas, pero era mas de lo que tenía sobre algún otro- dice con toda calma.

-Ahora que ya sabes lo que preguntas, podrías decirme lo que he requerido?- dice mirandole intrigada.

No pretendía responderos con una pregunta, si no saber los motivos de mi ataque. Carraspea. -Pues la he escogido a ella pues por el simple hecho de que ha dejado caer que soy culpable en cuanto ha podido, y me pareció un buen escarmiento y una buena forma de demostrarle mi inocencia, pero al menos le he dado un funeral de guerreros, como muestra de respeto por su muerte..

-Un escarmiento?...- repite viendole preocupada -Entiendo... Y ahora arremeterás contra todo aquel que haya alzado su dedo señalandote?- pregunta expectante, puede que fuera inocente de lo que se le acusaba, pero ¿Era un ser vengativo? al parecer así era.

-Espero que si el momento de tu venganza contra mi llega, sea en una batalla justa, sin trucos o magia que engañe, una batalle entre dos guerreros- dice cerrando los ojos Aldair, en sentido de resignación, hace mucho que la centauro no levantaba un arma, pero lo haría bien en caso de tener que defenderse, tal cual como se le había enseñado desde muy pequeña, pero ahora ella solo quería estar tranquila.

Faux se retira a un rincón solitario sin esperar respuesta del guerrero, ha escuchar la voz de su propio pensaminto y no el rumor de batallas guerras y desolación.

Debía ser un goblin tonto, porque no entendía cómo pretendía Aldair demostrar su inocencia matando a Kilina.

-¿Y por qué deberíamos pensar que eres inocente? De los que estamos aquí, el único que sabemos fehacientemente que ha matado a alguien eres tú...

Exactamente dijo el zorrito que miraba con pena el cuerpo muerto de Kilina Ya lo he dicho una vez, ese elfo es demasiado idiota para matarnos, tiene que usar un truco y la fuerza de los demás para matar una dama vulnerable.  Dijo con fingido desprecio, mientras sonreia en interior por el impresionante uso de su habilidad.

Si fuera asesino, no cometería su crimen tan a la vista no creen? Concluyo yendo flotando cerca de la cara de la Tirana.

Fue un horrible truco el que hizo contra vos, pero siento que no es culpable. le confiesa pasandole cariñosamente su pequeño rostro por el de ella. Perdon. Dijo bajando las orejas.

Cuando la niebla se disipó y tras ella kilina muerta, no mostré reacción alguna. No me inspiraba confianza y fue objetivo de mi voto.

Miré a Aldair, su mirada y actitud arrogante no le ayudaba desde luego, a pesar de mostrar su poder.

Al ver el cuerpo de Kilina empecé a reir sin razón. -Por mi parte, yo felicito al elfo.- Dije a los demás. -Definitivamente acabamos de ver la sangre fría de un ser totalmente desalmado. Alguien que ni siquiera merece llamarse "guerrero". Una persona que al fin y al cabo es peor que los traidores.- Hice una pausa y hice una mueca que casi era una sonrisa. -Me encanta.

Acto seguido, fui hasta el cuerpo fallecido y lo observé, viendo si quedaba algo rescatable para usar como ingrediente en futuros experimentos mágicos.

Ru burrú bushú shu shu ru wiiii bu.*

Fatuo revoloteó de un lado al otro.

Estaba claro que quería llamar la atención de los demás, o simplemente había comido guindillas.

No, quería llamar la atención.

Sku.**

Faux se levanta al escuchar aquella luminosa y curiosa criatura -Y tu puedes hablar con los que están en el mas allá?- pregunta mientras intenta tocar su azulada flama con uno de sus dedos. Por un momento desvía la mirada para ver como el Lich parace buscar algo entre los restos de la recién fallecida -Ese tipo de cosas no se ven bien- dice en gesto de desaprobación.

-Deberíamos darle una sepultura digna y cuidar de su integridad, ya ha tenido suficiente al haber tenido una muerte tan injusta- se muestra tranquila, pero no había de esforzarse mucho para notar algo de molestia en ella.

Disculpeme señorita, pues a menos de que se me vuelva a atacar, esto no ocurrirá otra vez... no tengo nada en vuestra contra, solo me he defendido de las acusaciones de una forma un tanto... peculiar...

Se acerca al goblin. -Ser verde, que yo sepa.. no he matado a nadie... si no que quien ha matado han sido los que me atacaron a mi, que es distinto, pues hubiera muerto yo, en vez del ser marino.. eso les convertiría en asesinos, de todas formas, yo lo único que he hecho, ha sido un truco para salvarme... a pesar de la muerte de ella..

Cierra los ojos al dirigirse a Kurama y sonríe. -Me tomáis por idiota, pero como habéis dicho, es un simple truco que no me convierte en un asesino.. si no que los asesinos mas bien han sido mis atacantes aunque como veis, me culpan a mi, zorro blanco.

Ser de hielo, si creéis que no soy un guerrero eran cinco seres contra mí, una sola persona, eso muestra cobardía y me he defendido usando a alguien que puede que sea inocente, o puede que no, francamente no lo sé. ahora mismo lo único que puedo afirmar, mientras me insultáis sin parar y demás tonterías mundanas, es que me parece a mi, que algunos de los que siguieron a nuestro poderoso "líder". Esto ultimo lo dice con Sorna. -Serán asesinos probablemente, ya que podrían aprovechar la oportunidad para que este, pierda su inmunidad, o Acaso yo, Idiota, desalmado, asesino, vengativo, y todo lo que queráis decirme, me he dado cuenta de esto? Se lleva la mano a la barbilla pensativo. -mmm, me parece que si..

Vuelve a descolgar la gaita y se pone a tocar tranquilamente aparentemente ajeno a su alrededor

Despreocupadamente, mientras seguía investigando el cuerpo de Kilina, le contesté al elfo. -Yo no estoy diciendo que lo que hayas hecho esté mal. Solo dije que fue ruín y descorazonado, pues un guerrero hubiese preferido morir de pie.- Dije mientras abría una de las branquias del cadaver para extraer un poco de agua.

-Sin embargo admiro tu valor. Definitivamente, si yo hubiese hecho ese truquito no me pondría a discutir con las personas que intentaron asesinarme y llamarlos cobardes, pues tal vez lo intenten otra vez. A pesar de eso, también te tomo por alguien inteligente, pues elegir el camino del guerrero y morir peleando, cuando puedes hacer lo que hiciste, hubiese sido una de las cosas más estúpidas que haya visto nunca.