-¿Pasarme? Bueno que se me olvido votar, solo eso... -Parecía poca cosa, pero él como el resto sabia que era importante. Por otra parte Anne empezó a hacer un increíble resumen del día y asentí a cada palabra que dijo, no sin elogiarla después con una sonrisa.
-¡VAYA! Menuda memoria Anne, Si creo que no te has dejado nada. Bueno si, que Austin tiene millones de teorías raras. Pero que creo que gran parte de ellas están equivocadas. -Me sincere con los miembros de mi casa.
Y siguiendo el camino de la sinceridad continué con la pregunta de Tim.
-¿Mi poder? Si es verdad, Maren dijo que miraste mi varita pero que no pudiste verlo o algo así... Me toque la sien pensando en como decirlo. -No se... como llamarlo o decirlo a ya se. Vamos a hacerlo como un juego, ¿Yo os lo digo pero vosotros tendréis que sacarle el significado exacto vale?* -Sonrió pícaro.- ¿Os habéis dado cuenta que en las votaciones siempre hay alguien que falta? Eso hago yo.
Dicho esto me toco la nariz guiñando un ojo. -Pero esto que no salga de aquí.
-Oye Tim, ¿Y sabes quien te a vuelto a la normalidad? Por cierto, ¿Quien creéis que sera atacado esta noche? -Desde hacia días la casa no estaba tan animada de noche y no deseaba perder la oportunidad.
*Sinceramente a mi no me gusta desvelar roles sin mas. Me parece que le quita encanto al juego.
- Hechizo confundus, su-supongo- Tim había intentado aprenderlo en su momento, pero al no poder practicarlo con amigos no le había salido nunca bien.
- No sé quien me devolvió a la nor-normalidad, de repente la petrificación fue remi-remitiendo. Puedo suponer quienes no fueron.- Ojala supiera más, pero por desgracia las cosas no eran sencillas de averiguar.
-¿Y esta noche que varita vas a mirar o es un secreto? -Le pregunto curioso.
Durante la noche, entre los nervios y demás, no podías dormir bien, y en un momento dado decidiste levantarte e ir al baño. Apenas abriste la puerta y... no recuerdas nada más.
Este mensaje sólo puedes leerlo tú.
Amanece en las bodegas. Os reunís en la sala común. En seguida notáis la ausencia de Anne y de Kiwi. Las buscáis por las bodegas y encontráis a Anne petrificada junto a la puerta de los baños. No hay rastro de Kiwi.
Avisáis a la profesora Sprout, y ésta se lleva a la chica a la enfermería.
-Tim. Si pides a quien mirar yo lo haría con uno de esos dos. O incluso con Marty Dunnings, no se porque ella me da mala espina, apenas habla y cuando lo hace... no se. Pero esta claro que esta muy atenta a todo aun así. -Junto los indices un momento dudando si decir o no lo siguiente.- Creo que hoy voy a negarle la participación a Austin. -No quería admitirlo, pero yo también pedía consejo, la discusión en el comedor, era solo entre unos pocos y aun eran muchos que apenas decían algo.
- Las cosas están complicadas - dijo Tim mientras meditaba - Hoy hemos tenido cuatro bajas, aunque espero que los dos que buscamos estén todavía con vida. Ya no sé que pensar.
Miro a mis zapatos. -Yo no soy tan optimista. Creo que esos dos están mu-mu-muertos como Malcom. -Tartamudee sin quererlo- Lo siento no quería burlarme. -Me disculpe siendo consciente de su problema.
-Lo que me preocupa es que haya dos petrificados. ¿Podría ser uno victima de mortifagos y otro de algún justiciero que los busca por su cuenta? Nose, no me gustaría pensar que ademas pueden atacar a mas de uno por noche.
Amanece en las bodegas. Os reunís en la sala común. Los dos que quedáis, parece que estáis bien.
-¿Has visto algo interesante Tim? -Pregunto antes de reunirse con el resto en el gran salon.
- Lancé el he-hechizo sobre la varita de Austin, no había rea-rea-hecho ningún hechizo.- comentó Tim abrumado. No había servido lanzar su hechizo esa noche, había perdido una oportunidad de encontrar respuestas. Cualquier tipo de respuestas.
-Oye Tim, tengo un espejo que encontré en Kiwi y me permite, hablar con otra persona, sin que el resto lo sepa, pero... no se con quien usarlo. Tienes alguna idea de con quien podría usarlo para poder comunicarme con él y no se. ¿Sacar algo en claro de todo esto? Porque no se en quien confiar...-Nervioso me miraba los pies, mientras toqueteaba mi varita.
-¡Y oye! Si no sabes a quien mirar y si crees en eso de leer la mente de Marty. Porque no miras a Marcus Hadley o Dmitri Ivanov. -Eran otros dos nombres que me vinieron a la cabeza.
- ¿Po-podrías usarlo con petrificados? - dijo Tim agotado - De los que no estamos pe-petrificados solo con-confio en Valeria-
Cuando Willy le comentó sobre quien podría usar el hechizo movió lentamente la cabeza.
- Ma-mañana podré usarlo con ellos. Elige uno y se lo lanzare.
-¡MARCUS HADLEY! -Gritó sin darme cuenta, al dejarme elegir la varita de quien mirar.
Respecto a hablar con los petrificados no sabia, pero era buena opción intentarlo. -Creo que no se puede, porque la persona tiene que coger lo que le de, en este caso un espejo, pero vale la pena intentarlo, ¿Con quien debería? -Ya que Tim me había dejado elegir era lo justo.
-Espera... ¿Como voy a poder entrar en la enfermería? No creo que pueda dárselo a ningún petrificado, mejor pensar en un nombre de los que aun somos de carne. -Colarme en una zona, solo después de lo que estaba pasando no entraba en mis planes. Bastante peligroso era el día ya, como hacer algo en la noche.
- En ese caso podrías hablar con Valeria, quizá sepa algo que des-desconocemos.- dijo Tim mirando a las llamas de la hoguera. La noche había caído demasiado rápido y ahora solo eran dos personas para proteger su casa. Era posible que algo saliera mal.
- Use el he-hechizo esta tarde sobre la varita de James. No es-esperaba que se di-diera cuenta, pero creo que me vio y además, fa-fallé. - terminó con voz temblorosa.
-Vale. -Asentí a su propuesta de Valeria pero acto seguido torcí el gesto.
-¿Que quieres decir con que te vio? ¿Eso es malo?
- No ne-necesariamente- dijo Tim abrumado - Si es un mor-mortifago podría entrarle el miedo y ata-atacarme. Pero no tiene por que serlo. ¿verdad?-
No podía ocultar que tenía algo de miedo. Aunque extrañamente no temía volver a ser convertido en piedra, si no el hecho de decepcionar a sus compañeros al no poder averiguar más sobre los enemigos. Un gran poder conlleva una gran responsabilidad, pero el uso de su hechizo no había sido muy útil hasta el momento.
Asentí con rapidez a sus palabras, para evitar que pensara en cosas malas.
-Seguro, pero atrapar a uno de ellos empieza a ser máxima prioridad. Tu das tu máximo esfuerzo, sigue así, todos lo agradecemos
Amanece en las bodegas. Os reunís en la sala común. Los dos que quedáis, parece que estáis bien.
Quedan en escena: