Partida Rol por web

Junto a su mejor amiga, Dorian tomó asiento y prestó atención a la nueva clase que comenzaba, esperando obtener el mismo resultado que en herbología, no tardó en verse decepcionado cuando uno de los hechizos no salió como esperaba,  viendo así aumentado aquél listado que mental, llevaba con cada asignatura que debía repasar en cuanto tuviese tiempo para hacerlo.

Sin que aquello menguase en su siempre buen humor, el cual a estas alturas parecía inalterable, Dorian esperó expectante a ver cómo terminaba Ari los hechizos, y es que sabiéndola mucho mejor que él en estas cosas, sabía que terminaría arrastrándola a la biblioteca cual tutora oficial y personal. 

- Fuimos desgranandolo de libros de la biblioteca - dijo Freddy tratando de no decir más de lo debido. No miró a Artemis, pero esperaba que entendiera lo que intentaba hacer. Si el profesor era un amigo no tendría por que saber que todo se lo había enseñado él a ellos. Y si era un enemigo, poner el foco sobre Artemis podría hacer que esté corriera un peligro innecesario.

En el último momento ingreso junto a mi mejor amigo a la clase, tomo asiento en el primer lugar que encontramos para los dos y bajo un halo de complicidad mutuo, le dedico una mirada divertida a Dorian. 

Atenta a las explicaciones del Profesor, tomo nota en el pergamino para no olvidarme de ningún detalle. Ya sea un ligero movimiento de varita, la forma de pronunciar el conjuro o todo lo que llamase mi atención y crea conveniente tenerlo allí escrito a modo de recordatorio personal. 

Durante el primer momento de la clase, el primer conjuro salió de maravillas, algo que no dudé en festejar junto a mi mejor amigo. Ambos lo habíamos logrado y eso era muy positivo. Finalmente, en la segunda parte, no he contado con la misma concentración debido a la algarabía que manifestaba junto a Dorian. 

Ahora preocupada por haber tenido mi primer fracaso, salgo del aula junto a mi noble compañero de andanzas. 

Los rápidos reflejos de Freddy me evitaron darle muchas explicaciones al señor Bane, en especial todo aquello relacionado al libro de Baltazar Blake, sobre el cuál no deseaba hablar más que con mis amigos más cercanos.

Es verdad profesor, estuvimos investigando por casi siete meses hasta que dimos con las runas correctas y luego todo fue cuestión de grabarlas en los accesos a las salas comunes. - respondo con sinceridad, confiando en que eso baste para saciar la curiosidad del profesor.

Escuché atentamente las palabras del profesor, y haciendo una reverencia le dije;

-Pondré todo el esfuerzo el día de mañana, profesor, nos vemos. -Dije, despidiéndome de él.

Sin variar su semblante, Bane los observa sopesando sus palabras.

Digamos que les creo, para evitar lo obvio chicos, pues su historia es poco fiable. Las runas nefilim no se encuentran en muchos libros de magia.

En fin sigamos con esto. ¿Quién de ustedes tiene la estela de Raziel? Pues como sabran sólo una estela de Raziel puede grabar una runa nefilim con éxito. - dice Bane, mientras saca un pequeño cuchillo de su saco y lo pone ante ustedes.

Y bien chicos. Estoy esperando y esta vez no quiero medias verdades, un objeto como este es muy poderoso y peligroso, por lo que no puedo permitir que se encuentre en manos de jóvenes inexpertos. - agrega Bane bastante más serio.

Al ver la navaja Kat no se inmutó pues en su vecindario la violencia con armas blancas era la norma, pero si entendía la amenaza implica indirecta.

Se acerco al profesor y con un gesto de secretismo le pidió acercar la cara para escuchar mejor, una vez lo hizo le dijo:

Profesor Bane, es cierto. Yo estuve ahí hojeando libros con ellos hasta que dimos con esa simbología, fue un golpe de suerte. Además tengo una pregunta-dijo y alzó la mano como si estuvieran en clase-¿Que es la estela de Rasiel?. Me paso la mitad de mi tiempo estudiando y es la primera vez que oigo el tema.

Kat en parte decía la verdad pues no había oído de la estela, sabia que el Profesor no era ingenuo por lo que esperaba apoyo con su versión de la historia.

¿Estela de quién? - fue lo primero que pensé cuando vi el cuchillo que el profesor puso ante nosotros. 

Algo en aquella arma me resulta vagamente familiar, pero no terminaba de identificarla plenamente.

Sinceramente profesor, no entiendo ¿A qué se refiere con aquello de la estela? - respondo con sinceridad.

Algo en el cuchillo de Bane te resulta extrañamente familiar, incluso sientes como si el arma estuviera llamándote.

Nefilim..... Nefilim.... Et lux in tenebris lucet..... - parece susurrar el arma en tus oídos.

No logras escuchar nada más que un molesto zumbido.

"¿Estela de Raziel?" pensó Freddy ensimismado en el cuchillo. No recordaba que hubieran usado nada más que sus varitas para poner las runas defensivas y, además, lo habían tenido que hacer tan rápido que no podrían haberse pasado el susodicho artefacto a tiempo para grabar todas las casas.

- Guau. Un artefacto de esos hubiera sido muy útil, pero de todas formas no usamos nada más que nuestra magia para todo ello. - dijo el joven Townsend sinceramente. Le empezaba a molestar la impertinencia del profesor y, quizá, tendría que hablar con el director sobre su insistencia y el haber sacado un cuchillo para amedentrarlos.

¿En serio chicos? Llevo años haciendo esto. - dice Bane cogiendo en "cuchillo" y ofreciéndoselos.

En cuanto Bane toma el cuchillo, la punta de este emite un destello plateado, el cual les recuerda al Iratze.

Vamos observénla más de cerca, esta es una estela de Raziel, ya sé que no todas son iguales, pero sin importar el diseño, todas tienen este cristal en la punta y es éste el que permite dibujar las runas.

Es muy importante que sean sinceros conmigo. - les ruega Bane mientras le entrega la estela a Freddy, al tiempo que el cristal se apaga, lo que parece sorprender un poco al profesor.

- Vaya, se ha apagado - dijo Freddy esperando no haberla roto cuando la cogió. - De todas formas es la primera vez que veo una - terminó tratando de no darle más vueltas mientras enseñaba el extraño cuchillo a sus compañeros.

Había perdido el miedo a un castigo y se volvía a comportar con buen humor. Fuera lo que fuera que buscaba, ellos no lo tenían.

Era interesante el tema de la estela de Raziel, mas al ver lo que era. Kat miró la navaja enseñada por Freddy con curiosidad, debía ser una especie de tallador para runas. Luego de verlo un poco musitó:

-Esto se siente como el hechizo Iratze. Wau

Tocó la navaja en la mano de Freddy con los dedos, la dejo y dijo:

-Es cierto lo que decimos, encontramos el hechizo y las runas en un libro.

Cuando Kat menciona el Iratze, el rostro de Bane se torna algo confuso. Sin embargo, dicha confusión dura a penas un par de segundos, pues cuando Kat toca la estela esta vuelve a brillar con fuerza.

En ese momento, Bane centra por completo su atención en Kat, para luego recuperar su serenidad habitual.

Iratze.... - dice haciendo una pausa. - Está bien chicos, hemos terminado por ahora.

Sin embargo, quiero oír más sobre ese Iratze en un par de días después del almuerzo. Ahora será mejor que vayan a cenar, se les está haciendo tarde.

Miré con desconfianza la navaja, seguro que sería algo para pillarnos si decíamos mentiras o para intimidarnos. No esperaba algo así de un profesor. En silencio, dejé que mis compañeros hablaran sin decir una sola palabra, si todos hablábamos a la vez, terminaríamos contradiciéndonos y todo terminaría sonando a excusa. La pregunta de la estela me tomó por sorpresa, nunca había oído hablar de ello y merecería la pena investigarlo. También la reacción del profesor cuando Kat habló del hechizo Iratze.

Me dispuse a ir, sin haber pronunciado todavía ninguna palabra todavía, cuando miré de nuevo al profesor.

- Profesor, ¿qué quiere decir con que usted no habría podido hacerlo mejor? ¿Acaso no conoce runas como las que usamos o que no posee esos conocimientos?  

En realidad señorita Rose, sólo un número muy reducido de magos es capaz de emplear esa clase de runas. 

Yo las conozco muy bien, pero me sorprende que un grupo de chicos tan jóvenes como ustedes puedan emplearlas, más aún sin haber recibido el entrenamiento adecuado y sin contar con una estela de Raziel.

Buenno chicos tengo mucho en que pensar y ustedes tienen que cenar, por favor dejen la estela en mi escritorio y no olviden nuestra cita para el jueves, no quiero tener que ir a buscarlos.

No vi necesidad de decir nada más sin comprometer más nuestra información, por lo que agradecía al profesor su tiempo y sonreí forzadamente ante sus últimas palabras. No sabía bien si confiar o no en el profesor Bane, me producía sensaciones contradictorias.

Sin más que una leve despedida, corrí hacia el comedor con mis compañeros.

Cuando entran al despacho, pueden ver un enorme libro abierto sobre el escritorio del profesor y varios pergaminos sobre un baúl que descansa al lado de la puerta.

Y bien niñas soy todo oídos. ¿Quién es la persona responsable de las rrunas? - pregunta Bane mientras toma asiento frente a ustedes cerrando el libro..