Partida Rol por web

Hombres lobo de Castronegro

Día 0

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25/02/2013, 22:54
Narrador

Vieja aldea de Castronegro. Conocida por sus humildes habitantes, famosos por su amabilidad y generosidad para con los extranjeros. Pueblo de paso para muchos peregrinos y sede de la organización del mercado de intercambios bianual. Aldea limítrofe con el mar, con uno de los puertos no más grandes, pero sí más famosos y transitados del lugar, por lo que el puerto empezaba a llenarse con embarcaciones llenas de mercancías valiosísimas. Una gran explanada se extendía alejándose del mar, y al fondo un frondoso bosque, sólo apto para aquellos valientes que no tuvieran miedo a nada.

En el mercado se concentraban todo tipo de personas de todo el reino, que abarcaba mucho más allá de donde podía llegarle la vista a cualquiera que estuviera subido al pico más alto del lugar.

Al sitio acudían cazadores a intercambiar sus pieles. Pastores a vender su lana. Hechiceros buscando los más insólitos ingredientes para hacer su magia. Nadie juzgaba el color de dicha magia, siempre y cuando el bolsillo del comprador viniera lleno de plata. Desgraciadamente... Donde se concentra el dinero también se concentran rateros deseosos de poder meter mano al bolsillo de algún marqués o conde que se dejara caer ocasionalmente por el lugar. Esa gente no era bien recibida, pero eran tan habilidosos y silenciosos que nadie se daba cuenta de quiénes podían ser.

También era conocida la aldea por sus famosos ataques de hombres lobo al caer la noche, pero estaba todo previsto, porque para esta temporada, los aldeanos enviaron mensajeros por todo el continente para reclutar a los más certeros cazadores, para asegurar la protección del pueblo de noche.

Pan con cerveza, elaborada para el evento, a porrillo para merendar y un ambiente animado. Canciones por un lado, historias de batallas por otro lado... El pueblo cobraba vida ante la llegada de más peregrinos ansiosos de llevarse las mejores gangas. Las casas vacías que las meretrices cuidaban durante la época entre mercados de intercambio, se iban llenando, precio a convenir depende de si la habitación era con o sin compañía.

Mujeres amasando pan, niños jugueteando con las faldas de las muchachas, hombres demostrando su valentía batiéndose en duelo amistoso espada en mano y juegos organizados para pasar el primer día de mercado de la mejor manera posible.

El día transcurría con total normalidad, mientras llegaban al pueblo más habitantes cada vez, concentrándose en la plaza el pueblo para hablar los unos con los otros sobre cómo habían ido las cosas por su zona y cuán crueles e injustas eran las tasas del rey, recién subidas por la temprana ocupación del trono por el sucesor (Sir Tristant), ansioso de poder y riqueza.

Notas de juego

Los "humildes habitantes" de Castronegro, de los que se habla en la descripción, son PNJs (no se refiere a los aldeanos sin poder específico). Con ello quiero decir, que todos sois desconocidos. Nadie conoce a nadie.

Podéis tener armas, si queréis (como la navajilla de Tom), incluso podéis amenazar con ellas a vuestros compañeros, si la cosa se pone tensa. Lo que no podéis hacer es matar con ellas a nadie (que esté en la partida. Si os encontráis a un "humilde habitante" o a un animal, si os viene en gana y la situación lo requiere... Adelante).

Si la "era" en la que estáis está tan avanzada como para que haya naves en el puerto, también hay carros tirados por caballos. Por lo tanto, en combinación de carro y nave, podríais venir de cualquier parte del mundo, inventada o real, aunque no conozcáis la ubicación exacta de la aldea.

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03/03/2013, 00:33
Ciguaco

Ciguaco había llegado a Castronegro con la esperanza de poder encontrar algunos productos imposibles de conseguir en su lejana tierra de ultramar. Era conocido que las cosas más extrañas y exóticas podían conseguirse en su mercado. Y a una hechicera como ella, le era imprescindible poder encontrar algunos ingredientes y... quien sabe si encontrar algún nuevo conjuro o aprender los misterios de otras disciplinas mágicas.

Sin darse cuenta, después de haber conseguido algunas de las cosas que andaba buscando, se dio con sus piés en la plaza mayor del pueblo. Allí se había congregado gente. Aunque su intuición la decia que lo mejor era poner pies en polvorosa, algo, la empujo hacia el corrilo de gente.

¿Que pasó, wey?- preguntó a la primera persona que vió por ahí.

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03/03/2013, 03:12
Tom

Como todas las mañanas Tom había madrugado y se había despertado en el viejo molino

- Buenos días Papá- dijo mirando a las vigas viejas que sostenían el techo- Creo que hoy me acercaré a la Plaza... A ver qué se cuece por ahí

De un salto se vistió y tras pasar por el riachuelo a acicalarse y robar un par de manzanas de uno de los huertos, fue a la plaza escabulléndose entre la multitud. Como no podía ver nada, trepó a una de las cornisas más cercanas y cual gárgola de piedra se quedó allí atento a todo lo que ocurría metros debajo de él. 

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03/03/2013, 04:01
Felicia

Caminaba haciendo cara de asco por el lugar. Odio este pueblo de porquería, no hay ningun chico de mi edad y los pocos que quedan son todos unos tarados, y claro esta con ese cuento de que las chicas maduramos más rápido que los hombres me tienen  cagada,  ni soy niña, ni soy adolescente, no soy  nada. Vaya pueblo de poqueria este, no se porque mis padres decidieron venir a este pueblucho, lleno de viejos y mujeres feas.

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03/03/2013, 04:25
Tom

Tom se fija desde lo alto en la muchacha con cara de asco que camina por el pueblo. Tiene cara de asco y parece nueva. Seguro que al ser chica será un rollo como todas, pero... esta tiene algo que le hace gracia y no puede evitarlo. 

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03/03/2013, 04:35
Felicia

¿qué miras mocoso? digo al chico Tom. apartate, sigue jugando tus tonterias y dejame en paz.

Paso de largo al lado de él. Odiaba ese sitio.

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03/03/2013, 08:51
Cura Melchor Izzo

El padre Melchor, tras terminar los oficios recorre las calles de Castronegro, le gustaba mantener contacto con sus feligreses y como el decía con los que no lo son, estar informado de los problemas para no perder el contacto, huyendo de las reuniones de las viejas beatas que no aportaban más que cotilleos. Tanto el mercado, como el puerto eran un bullicioso ir y venir de foráneos y locales enfrascados en sus negocios. Decidió encaminar sus pasos a la taberna local, siempre era un buen lugar en el que enterarse de los últimos sucesos, dirigiéndose al dueño:

- Buenos días, ponme un vaso de vino, pero sin bautizar que tú no tienes carné.

 

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03/03/2013, 10:52
Travis Touchdown

Había sido un viaje lrgo y muy aburrio, pero al menos ya había llegado a Castronegro. Decidí dar una vuelta al pueblo y acabé con mis huesos en la plaza del pueblo donde miraba languidamene a la gente, a la espera de encontrar algo interesante. Me fije en una chica de apariencia extraña y me pudo la curiosidad.

-Veo que no eres de por aquí, ¿Eh?-Sonrio amistosamente.

Notas de juego

A falta de confirmacion por parte del master llevo una espada y un cuchillo.

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03/03/2013, 11:13
Adán García

El viaje había sido agotador, y lo más apetecible en estos momentos era ir a una posada cercana a tomar, descansar y recuperar fuerzas. Allí se encontró al párroco local, tomándose un descanso. Adán, alzó su copa a modo de saludo dirigiéndose hacia el cura, y una vez se terminó su consumición, dejó pagada una habitación para la noche y prosigió su camino por la ciudad.

Notas de juego

Yo llevo un látigo y un machete.

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03/03/2013, 12:54
Robert Basil

Volvía a casa después de salir temprano a cazar. Era de los pocos del pueblo que cazaban, de echo, se podía decir que sólo mi familia lo había echo en el pueblo. Castronegro siempre había sido un pueblo tranquilo. Llegué al mercado, con mis liebres desolladas y se las entregué al carnicero. Me dio lo que me correspondía y me dispuse a comprar algo de comer para la tarde.

Hoy el mercado estaba muy bullicioso, me daba la impresión de que había más gente de lo normal. Incluso me pareció ver a una chica con extraños ropajes. Pero allí estaba el saltimbanqui ese de Tom... Un día se matará seguro... Busqué el puesto de la panadería. Quería almorzar queso con pan.

Notas de juego

Llevo una escopeta y un cuchillo desollador.

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03/03/2013, 13:11
Vinganna

Vinganna salió de su cabaña del bosque con el alba. Cargaba con las pieles y las cornamentas a la espalda, el cuchillo asegurado al cinto y el carcaj lleno de flechas al hombro. En la mano izquierda llevaba el arco, listo para ser usado al menor signo de peligro o ante la visión de una presa de oportunidad.

El camino a Castronegro fue tranquilo. Cuando salió del bosque se cruzó con unos pocos transeúntes, pero ninguno estaba interesado en sus pieles o trofeos. Tendría que esperar al mercado para vender sus mercaderías.

Cuando llegó al mercado estaba atestado ya de gente. Eligió un rincón apropiado y extendió la enorme piel de oso sobre la que luego comenzó a depositar los retales de cuero, las pieles, las garras y colmillos, las cornamentas de ciervo y el resto de cosas que había traido. Y mientras iba vendiendo poco a poco, observaba atenta a todo el mundo. No se le escapó ni siquiera el muchacho que desde los tejados observaba espectante. Quizá fuera un ratero buscando robar algo, por lo que lo mantuvo vigilado.

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03/03/2013, 13:13
Orlac de Melk

Cuando mi madre me pidió que fuese al mercado de Castronegro me pareció una aventura fantástica. Por primera vez podría atravesar el valle y relacionarme con gentes de otras partes del mundo, no todo se reducía a mi pequeña aldea del sur. Debía comprar algunas semillas de cara a la temporada de siembra que se avecinaba.

Al llegar al mercado lo que más me llamó la atención fue la cantidad de gente que allí se encontraba comprando y vendiendo todo tipo de artículos. Era increíble el movimiento de personas que había logrado congregar aquella cita en Castronegro.

En mi bolsa llevaba las monedas justas para los encargos de mi madre y poco más para sobrevivir unos días fuera de casa. Tengo bastante miedo de que algún bribón me quite el dinero y por ello aprieto con fuerza la bolsa dentro de mi fajín.

Veo junto a un muro a un anciano ciego cantando viejas trobas sobre héroes de antaño, el sonido de su zanfoña me parece mágico. Me acerco y escucho sus versos, manteniendo la distancia necesaria para no verme obligado a tener que pagar por su melodía.

Cuando termine iré a ver los puestos de semillas...

Notas de juego

Llevo una pequeña navaja

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03/03/2013, 13:17
Ciguaco

¿A poco? ¿A poco no? ¡Chinga mi vieja si tu eres habitante del pueblito! - digo amagando una risa cubriéndome la boca con la mano. Señalando las armas de Travis. ¿Tu no viniste a comersiar, eh, wey? No pienses que me achingatas. Acá hay mucho extranjero armado con ganas de charrasquear. ¿Que onda?

Notas de juego

A todo esto, servidora lleva un bastón grandote, como toda maga que se precie. Lo que no sabeis es que tiene un mecanismo muy ingenioso que sólo conoce Ciguaco, que la convierte en una lanza, si es preciso. Como buena maga, también lleva una daga ceremonial, pero no la lleva a la vista...

Y que me disculpen los mejicanos si maltrato su habla xD

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03/03/2013, 15:06
Travis Touchdown

Vaya que mujer tan belicosa.

-Relaja la raja, mujer que solo estoy de paso- Alzo las manos riendo.- E venido a curiosear este sitio, esta repleto de cosas interesantes aunque desde luego tu te llevas la palma. ¿No conoceras un lugar decente donde pasar la noche verdad?

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03/03/2013, 16:02
Garos Nagar

Garos había llegado recientemente a Castronegro. Venía de una región muy lejana sólo para verificar sobre lo que personas de allí decían del mercado de la aldea. La cerveza parecía de buena calidad, la juerga que se tenía montada no lo era menos. El ambiente era casi perfecto.

Se disponía a ver el rastro, necesitaba cambiar las ajadas pieles que cubrían su espalda. El viaje había sido largo, y cansado. Al final llega al puesto dónde se ofrecen pieles, a mucho dinero. Así que Garos no tiene más opción que pensar dos veces la compra. Se queda un buen rato haciendo comprobaciones.

 

Notas de juego

Yo me sirvo con una navaja y un látigo ( si se me deja, claro está).

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03/03/2013, 19:19
Jorge Trujillo

Llego con la ultima embarcación de comerciantes. Una nueva ciudad para poder aprender de ella y de paso continuar escribiendo su diario de viaje, dentro de poco seria un magnifico manuscrito para todo viajero, mientras tanto no era mas que un libro lleno de apuntes sueltos y garabatos.

Su primera parada seria el mercado, el lugar mas bullicioso de la peculiar aldea, con sus peculiares ciudadanos, ademas era un buen día para observar y tal vez tomar algo de buen cafe. Al igual que él, las calles estaban plagadas de extranjeros.
-Que suerte la mía.-Comento en alto mientas limpiaba sus lentes, un caro objeto de su tierra natal y que lo diferenciaba del resto.

Notas de juego

Yo tengo un poderoso y pesado... libro.

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03/03/2013, 19:31
Bonny Gilligan

Al bajar de una de una de las naves pude ver el ambiente que se respiraba. En esos momentos pensé que no me habían engañado, ni tan siquiera aumentado las buenas (aunque también terribles) historias de la aldea de Castronegro. Gentes comerciando, riendo, niños jugando, duelos simulados, fiesta por doquier... un espectáculo bastante bueno, diría yo.

No sabía cómo iba reconocerle. Aquel truhán me habló del lugar con entusiasmo, y del contacto que esperaría aquí... o más bien le esperaría yo, y él... él me saldría al paso. Sólo accediendo de esta forma tan clandestina podría dar rienda suelta a mi producto... pues mis polvos de hechizos bien lo valían.

Y no. No era menester ponerse en un lugar a predicar cómo y de qué maner conseguía yo obtener el resultado a base de dedicar horas de mezclas y proporciones a la hora de crear mis componentes. Quizá aquí no tuviera un renombre como en otros parajes, pero eso sería bueno, pues así vender ésto podría resultar más provechoso económicamente.

Estuve esperando alrededor de media hora, y mientras, veía los puestos de aquí para allá. Entre chismorreos y comentarios de vendedores que queríanme vender una espada o una cofaina me enteré que allí señoreaba un rey, que a la vez era sir, Sir Tristán. Parecía que todas las bocas que le anunciban (según oí), hablaban bien de él (tan sólo algunas se quejaron de algo acerca de los impuestos).

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03/03/2013, 20:07
Ciguaco

Andelé compadre. Yo me echo el coyotito en una casucha que está a dos cuadras de acá. Es así como medio baratucha. Los dineros que traje los gasté ya casi todos en algunos componentes que vine a buscar expresamente al mercadito. También estoy de paso, como dices tú, wey. Siempre sí, compadre. Siendo extranjera de la tierra de la que vengo no están acostumbrados a mis ropajes.- parece que el extraño tipo le ha caido bien y sonrie. Mi nombre es Ciguaco. ¿Así pues, viniste a por los lobitos, no es cierto?

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03/03/2013, 21:24
Vinganna

El hombre del sombrero se detuvo ojeando sus pieles. Sus miradas se cruzaron. Vinganna no suele sonreír, y en esta ocasión no fue diferente. Arqueó una ceja y miró el atuendo del hombre, un extranjero en Castronegro como ella.

- ¿Ves algo que te guste...? -se atrevió a decirle.

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03/03/2013, 21:38
Travis Touchdown

Asiento a la mujer.

-Ya veo... un sitio baratucho no muy lejos. Eso suena perfecto para mi.- Luego la miro a los ojos por encima de mis gafas de sol. ¿A dicho lobitos?- Tenia entendido que este sitio era conocido por las grandes bestias de Castronegro... No por una panda de lobitos... De todas formas e venido a averiguar si es cierto lo que dicen sobre ellos. El cadaver de una de esas bestias debe ser impresionante sin duda. Y deben dar un buen pellizco por el.

Luego sonrio y la guiño un ojo.

-Pero el dia aun es joven y lejana es la noche. ¿Te atreverias a tomar algo conmigo?