Amanece un nuevo día y rápidamente empezáis el recuento temerosos de que haya habido más muertes. En un principio da la impresión de que estáis todos y no falta nadie, por un momento se ven caras de alegría y esperanza hasta que escucháis ruidos fuera. Un ejército esta sitiando el templo y se dispone a entrar. En ese momento es cuando hacéis un recuento de hombres hábiles para combatir y os dais cuenta de que falta uno, falta mascius.
Al rebuscar en el templo encontráis su cuerpo sin vida oculto detrás de un diván. Un corte limpio en el pecho y un trapo en la boca, debieron ponérselo ahí para que no hiciera ruido.
No hay tiempo para pensar en lo ocurrido y en porque solo ha habido una víctima porque los bárbaros se disponen a atacaros pero mientras se organizan las defensas y se bloquean las entradas vais pensando en cual será vuestro voto para el día de hoy.
Evento día cuatro: Bárbaros a las puertas. Los votos de los soldados valen medio punto más, +1/2 voto a los soldados.
-Dioses, castigad a los cristianos para que no hayan mas muertos inocentes-Rogaba a los dioses.
Antes de que Merula limpiara la sangre, se le adelanto y le dijo:
-Esta vez me ocupo yo.-mientras le dedicaba una sonrisa. No le parecia justo que siempre lo tuviera que limpiar ella.
Es extraño las muertes que hay, ¿soy el único que no ve una conexión entre ellas?- dice pensativo mientras ve el cuerpo -
Vorena ayuda a la mujer a limpiar la sangre , por favor. - dice con un tono amable a su fiel esclava -
La verdad que cada vez corremos mas peligro, tanto por el enemigo interior que tenemos y no podemos encontrar , además de la amenaza de los bárbaros fuera, ayudaré a reforzar las defensas para evitar que entren, además de ayudar a investigar quien es el causante de las muertes, tal vez no hay cristianos y sea una persona que busca venganza por algo, que en el pasado le hicieron. -dice mientras se acerca a los hombres, para ayudar a reforzar las defensas -
Amanece un nuevo día y Tito Pullo se levanta a ver que es todo ese ruido. Antes de marcharse despierta a Eirene, no sea que un asesino aproveche que está dormida y sola para acabar con ella. La escena que ve fuera no puede ser peor
- ¡¡A las armas!! - grita Pullo mientras corre hacia donde se han reunido todos. Cuando ve el cuerpo de Mascius pone mala cara. - Maldita sea la suerte de quien le asesinó. Necesitamos a todos los hombres disponibles, los bárbaros se preparan para entrar. ¡Debemos preparar las defensas! - exclama mirando a los ofiales, expertos en tácticas.
Marco Antonio se levanto con la noticia de la que los barbaros estaban a las puertas del templo Pullo quiero que te alistes, te pongas tu equipo y que en 10 minutos estes aqui. sin esperar la respuesta del soldado se acerca al senador Porcio Caton acaso no ves lo que pasa? no puedo encontrar relacion en todas las muertes pero Voreno y Mascius estuvieron en la XIII legion, Mascius ahora era un liberto pero dentro de el todavia habia un soldado. Marco Antonio le puso una mano en el hombro al viejo Estan dejandolos sin soldados...que podra cuando el ultimo soldado caiga en manos de los asesinos? podremos dejar los egos de lado? las diferencias entre Generales y Senadores? Solo asi podremos sobrevivir a los barbaros.
Es probable que la muerte de Servilia sea tambien para sembrar aun mas la desconfianza y el rencor entre populares y optimates, no crees?Las palabras de Marco Antonio eran mas calmadas y tal vez mas sabias que la de los dias anteriores pero tambien era cierto que desde la partida de Atia sus ojos habian perdido ese brillo que desbordaba vida Cuando vuelva Pullo ire a hacer una ronda para ver que todo este orden, cualquiera que pueda portar un arma con algo de dignidad puede acompañarnos y los que no que se queden, no podemos mostrar debilidad ahora. Cuando finalizo sus palbras Marco Antonio volvio a sus aposentos y preparo su armadura y su espada.
Los optimates ('los hombres excelentes') constituyeron la facción aristocrática y los populares el bando del cesar.
-Dejemonos de peleas inutiles y tomemos las armas, no importa que sean esclavos,libertos o ciudadanos, hombres o mujeres. Todos lucharemos hasta las ultimas consecuencias. Y quien se oponga a ello merece la pena maxima.
Si alguien tiene algo enconra de alguien ams que lo diga ahora, no quiero que vuestras intrigas socaven la moral.
los potimates fueron los principale opositores de Cesar, recuerda que fue contra ellos la guerra civil.
El grito de "A las armas" lo despertó de un tirón. Pronto descubrió que Mascius había sido asesinado durante la noche. -Por Minerva, los enemigos afuera nos sitian, los enemigos adentro nos acaban- dice mientras eleva una plegaria silenciosa a los dioses, esperando ser oído aún desde aquel templo profanado.
-Mucho me temo que esta muerte deja aún más preguntas. Si sabemos que entre nosotros, uno se toma la justicia por su mano y otros ejercen su cruel culto en impune asesinato. ¿De quién ha sido víctima Mascius? y ¿Por qué no hubo una segunda víctima? las preguntas se tornan difusas hermanos romanos, pero ahora otro enemigo acecha afuera de estas paredes- y camina hacia donde había dejado su armadura ayer.
Empieza a ponérsela, con calma, pensando que ya había visto mucha acción, pero dispuesto a dar la vida por Roma de nuevo. Empuña su espada y camina hacia donde los guerreros que quedan se disponen a hacer frente a los bárbaros. -Hermanos de Roma, viviremos como hijos de la misma ciudad y moriremos por ella, más, que nuestra preocupación no nuble nuestra mente ni un instante. Aún debemos descubrir a quien se hace llamar romano, y tan solo esconde a un asesino traidor- espeta.
-Mis sospechas siempre irán con quienes se refugian en el silencio- anuncia con más calma y templanza.
Levi se despierta inquieto. No sabía cuando el sueño pudo con él, arropándolo en su seño. Al momento se dióc uenta de donde estaba. Esto le llevó a pensar en ver si hoy habría víctimas.
Otra vez observó gente arremolinada entorno a alguien. Otro muerto. Mascius. Pero lo peor era lo que estaba fuera. Los bárbaros les estban sitiando e intentaban entrar en el recinto sagrado.
Debemos luchar. Si no conseguimos detener el asalto bárbaro, moriremos todos. Así que debemos unirnos todos, semos loq ue seamos y luchar contra nuestro enemigo común. Luego intentaremos buscar al culpable.
Cogiendo la espada del mismo Macius se giró y dijo
Yo no soy más que un tonto, pero deseo vivir. debemos unirnos en la lucha contra los bárbaros.
Una vez pertrechado, Pullo se presenta ante Marco Antonio. - Listo para comprobar las defensas y rechazar el ataque.
Antes de marcharse se despide de su mujer dándole un consejo. - No quites vista de nadie, es posible que el asesino aproveche el desconcierto para acabar con alguien o se descuide. Si alguien saca un cuchillo que no estuviera a la vista, es posible que sea el asesino que buscamos.
Cuando va con Marco Antonio, vuelve a hablar - Señor, es posible que POmpeyo tenga razón. Aquellos que tratan de acabar con nosotros matando a quienes podrían defender el templo serían unos necios si se quedaran expuestos a la ira de los bárbaros. Seguramente se quedarán escondidos como las ratas que son, así que tendremos que ir con cuidado y buscarlos. Es posible que esta noche no hayan actuado por miedo y por eso no hayamos tenido más bajas.
Mascius. Muerto. Bruto no lo conocía demasiado pero le muerte de Servilia le había afectado demasiado y no pudo evitar la pena por la muerte de aquel hombre. Después escuchó la intervención de los militares.
- Debo decir que estoy de acuerdo contigo, Pompeyo. Pese a que no pueda considerarte amigo me uniré a ti por el momento. Pero también he de decir que no puedo decir lo mismo de otros a los que si tengo en gran estima, a los que incluso llamaría padre.- miró entonces a Cesar - Dais un paso al frente para ordenar lo que ha de hacerse, os erigís en salvaguarda de la moral de los presentes y os atrevéis a indicar condena para aquellos que estén en vuestra contra.-
Entonces se volvió hacia los demás - Es acaso casualidad que el último en ser votado fuese un senador. Un representante del pueblo romano. Temo que detrás de esto haya más que una invasión bárbara.-
Erastes observaba la situación desde un segundo plano. La situación claramente lo sobrepasaba y habÃa vagado por la zona como si de un fantasma se tratase, la mayorÃa ni siquiera se habÃan percatado de su presencia.
Al oÃr las palabras de Tito Pullo alzó la vista para contemplar a los presentes, si era verdad lo que decÃan, uno de ellos era el que estaba provocando las muertes. Mirava nervioso hacÃa todos los lados como si alguien se fuera a abalanzar sobre él, pero no pasó nada de eso. SabÃa que tenÃa que poner todos sus sentidos en no ser la próxima victima.
Una nueva muerte, al menos es solo una, aunque esto no parece ir a acabar
Recojo una lanza y la sopeso entre mis manos, no se bien como usarla pero será mas sencillo que una espada, y además me permitirá guardar las distancias con los bárbaros, o al menos intentarlo
-puede que Levi sea un tonto, pero tiene razón en algo, todos somos iguales en esta situación, no tiene sentido pensar en si las víctimas son soldados, libertos, cónsules o esclavos, los asesinos nos quieren a todos muertos y pueden ser cualquiera entre nosotros, no uséis vuestro rango para ocultaros-
Tras decir esto me acerco cabizbajo a una de las barricadas, nunca he luchado y hubiera preferido seguir sin luchar, no creo que salga vivo de este templo
Me levanto y digo de manera glamurosa. Algo parece ser clave en esto, hay muchos de ustedes muy callados, y entre los líderes que no hablan, algo se cuese como patata, es claro para mí que no sabemos sí los muertos son o no cristianos, ¿cómo podemos saberlo?
Despues de escuchar los ataques estoy paralizada en una esquina al escuchar los combates, mis lagrimas no pueden salir en mayor cantidad, entraran al templo y nos mataran eso es seguro.
Desde el día que amaneció con su marido muerto no había dicho palabra, y no pensaba hacerlo, nada merecía ya mucho la pena, la misma noche que su marido había vuelto con ella, se lo habían arrebatado de su lado, y nada se lo devolvería, ni su llanto, ni los culpables, nada.
Sabia que no mucho podía hacer con un arma, ella que jamas había empuñado una, así que no le quedo mas que esperar que regresasen heridos y poder hacer algo por ellos, aunque suponía que ese mismo día se reuniría con Voreno, y quizás seria lo mejor. Si había alguien que debía morir, fuese por las manos que fuese, debía ser esa arpía de Egipcia, no pintaba nada allí, y se atrevío a pronunciar el nombre de mi difunto esposo en esa sucia boca de ramera, pero no, no seria yo quien la matase, o soy ninguna asesina.
Marco Antonio estaba cansado, apenas si habia dormido la noche anterior y sabia que tenia algunas enemistades con los presentes pero el no iba callar Varios preguntan porque solo hubo un asesinato, se olvidan que ayer condenamos a un hombre? les pregunta a los presentes mirandolos La Reina de Egipto pregunta como podemos saber si los que murieron eran cristianos...bueno que solo hubiera una muerte en vez de dos para mi es un indicio. finalmente posa su mirada en Bruto Que Ciceron fuera un senador no le daba carta blanca para acusar y no ser acusado, yo creo que los cristianos contaban con alguien de gran labia para confundir las mentes de los presentes pero reconozco que Pompeyo tiene razon y entre los mas silenciosos seguramente se esconde un lobo vestido de obeja.
Finalmente Marco Antonio se acerca a Tito Pullo Pullo ya lo dije antes, creo que estan acabando con los soldados pero no tanto para acabar con las defensas sino para exaltar la discordia entre los comandantes tal vez no sobreviva a la proxima votacion pero por Baco que no me quedare callado como un cobarde se cuadra delante de Pullo y mira a Julio Cesar General los sobrevivientes de la XIII legion estamos a sus ordenes.
-Presurosas conclusiones sacas Marco Antonio, más quizás solo mañana podremos saber si el tener solo a una víctima esta noche fue algo temporal o permanente- le dice adusto.
-Bruto, no ha sido coincidencia, ha sido él ayer quien fuese votado, y dudo mucho que haya sido votado por su investidura, más por sus palabras- reflexiona unos instantes. -Mucho más me preocupa, que entre quienes emiten sus votos, haya quienes silenciosamente parezcan dirigirse a quienes parecen opcionados. Los mismos que parecemos hablar y discutir, mientras ellos guardan silencio y observan por momentos, sin pronunciarse demasiado... e incluso sin pronunciarse al respecto-
-Alocuciones que desvían el tema, víctimas usando el miedo de excusa. Si hemos de sobrevivir, tendremos que ser todos los que tomemos las decisiones correctas, los que hablamos y los que no hablan tanto...- y frunce el ceño -Y no ser los primeros víctimas del silencio de los segundos-
Esta vez es la brusquedad de Tito Pullo la que despierta a Eirene. Un marido que sentía más pasión por la guerra que por su propia mujer...
Se acercó a donde Gaia estaba limpiando la sangre y se arrodilló para ayudarla. Otro muerto más, otro hombre que se debatiría entre el Helheim y Niflheim, o tal vez se convertiría en Einherjer y lucharía en la batalla final junto a Voreno. Los cristianos seguían matando y Eirene solo conocía un sitio donde estos sectarios debían residir: en el Nastrand, donde iban todas las almas de las personas viles, los asesinos, los perjuros y los mentirosos notorios.
Cuando su marido se hubo puesto el equipo, la mujer atendió a sus palabras. Ten cuidado, le respondió. Temía más por él que por ella misma. La hubiera gustado unirse a la lucha, combatir para salvar su vida, pero el papel de la mujer en la sociedad romana era menos valorado que el de un esclavo, o el de un tonto. Aquellas que luchaban por ser importantes debían hacerlo a través de un hombre.
Volvió a agacharse para restregar con firmeza la sangre del suelo.
Impotente se sentìa la vieja merula dado que a su edad y con su poca experiencia en batalla era seguro que si entraban los barbaros la matarian, ella era la màs debil de todo el grupo, no era noble, no era soldado, no era joven...
Era vieja y esclava....
Y aùn asi miraba con recelo a los señores mientras hablaban màs de la cuenta.
En silencio recorrio el templo alejandose de las puertas y de las ventanas, por sì lanzaban algo que pudiera perjudicarla.
La muerte miraba igual a cualquiera, y los suyos, poco le importaban su seguridad.
A mi parecer Romanos, Timon es el mas sospechoso de todos.