Partida Rol por web

Dirk, que se encontraba mirando las últimas cartas repartidas, alzó la vista cuando escuchó a uno de los soldados del otro regimiento.

Pero vamos a ver West, te preocupas demasiado. En Scay´Hawlla hay unos 500 soldados, eso son... son muchos regimientos, en esta estación hay unos 5.000. Los relevos se realizan periódicamente ¿Tan raro os resulta? Dice echando un ojo al resto de jugadores con aleatoriedad.

Recuerdo cuando yo estaba destinado allí abajo, antes de incorporarme a los "Linces", acostumbrado a recorrerme todos los sectores con mi motocicleta, que he tenido que dejar allí, esta esfera de estación espacial se me queda bastante corta corta. Se atusa el gorrito mientras con la otra mano sujeta las cartas un tanto ladeadas hacia Maxon.

Que no me mires las cartas Maxon ¡Que no mires! Le chilla gutural mientras algún resquicio de saliva vuela por la zona.

Yo tengo hambre ¿Que hay de comer? le dice a la persona encargada del lugar.

- La cuestión es que no toca el relevo hasta dentro de 3 semanas, y el que bajemos al planeta no es por ello, ya que el general Urelis ha solicitado que vayamos 4 unidades allá - comenta Bratt - Es extraño y a mí me mosquea bastante

Bratt se queda pensativo durante unos instantes, y después se gira levantando la mano para llamar al camarero.

- Quisiera el plato de barbacoa número 2, por favor... y otra cerveza

Dirk escucha atentamente a su compañero y la petición del plato ha sido de lo más tentadora para el.

¡Y a mí póngame el plato número 1 y dos cervezas!

Veo que estás enterado de la situación allí abajo, quizá... ¿Pueda ser que quieran hacer una exhibición o una muestra de lo bien que funciona la estación y necesiten alguien más? o mejor aún... ¿Explorar fuera de la barrera?

-A lo mejor necesitan especímenes humanos fuertes y sanos para la reproducción masiva. -digo en tono serio- Pero seguro que Maxon acapararía a todas las mujeres para él...

Bratt mira serio a Dirk.

- No creo que vayamos a ir de excursión en la zona nativa... los expertos son muy maniáticos con el tema de no interferir con su entorno... como si tuviéramos ganas, ¡ja!

Acto seguido escucha el comentario de Ghost.

- Créeme, Kelly es mucho peor que Maxon, más vale que no te escuche...

Poco después de que los camareros sirvieran la comida, hace aparición por la cafetería una rubia despampanante, ojos claros y mirada fría. Repasa el local detenidamente, de izquierda a derecha, como si buscase algo. Maxon aprovecha y se acerca a ella confiado.

Maxon: Eh, guapa, ¿buscas al tito Maxon para algo de acción?

La chica, sin mediar palabra, le clava un rodillazo en la entrepierna, descomponiéndole al instante.

- Busco al cabo Bratt, soy la nueva...

Maxon, retorciéndose de dolor, señala hacia vuestra mesa con una mano. La chica se acerca a vosotros rápidamente hasta parar al lado de Alex. Os observa con completa frialdad, sin hacer una sola mueca.

- Disculpen, busco al cabo Bratt... soy Anna Karakov

Bratt: Ah, sí, la francotiradora siberiana... bienvenida al equipo. Veo que ya conoces a Maxon... - comentó, manteniendo la compostura como podía - Y ese de ahí es West...

Maxon: ¡¡¡Me mueroooo...!!!

 Bratt intentaba mantener la compostura, pero Alex no se molestó, tras una carcajada, preguntó al pobrecito:

- ¿Algún día aprenderás a comportarte? Tienes demasiadas ganas de sentir dolor, si quieres te puedo ayudar a ello. - Evidentemente era broma, pero de ella poco sabían además de su mal carácter, algunos incluso dudarían de que fuera broma.

Girándose hacia Anna, la dio también la bienvenida, mientras la señalaba una silla libre para que se uniera al grupo.

- Bienvenida, ya era hora de que hubiera alguna mujer más. 

Saludo a la nueva con la mano mientras hablo con Alex.

-Tranquila, está fingiendo. ¿No ves que ya tiene un callo en los huevos que se los protege?

Estaba más que hambriento cuando la moza malhumorada hizo aparición. No me corté un pelo y seguí a lo mío, ingiriendo cual pato sin tragar, mientras un crujir de huevos sonó en la entrada del bareto.

Cuando todos hubieron saludado acababa yo de tomar el último bocado, mostrando a todos una inusitada velocidad para el comer. Bebí el último sorbo de la garimba, menos mal que había pedido dos. Con la  lata vacía advertí a la rubia platino mientras me la colocaba en el (¿antecodo?) la mitad del brazo.

Eh, la nueva, mira esto. Contraje mi brazo, sacando a relucir el biceps para aplastar la lata que quedó como el canto de una moneda. Lo revisé y lo cisqué delante de la mujer Guárdalo, te dará suerte comenté entre risas mirando al resto.

Acto seguido saqué un puro y lo encendí con un mechero que llevaba inscrito el logotipo del escuadrón.

medite las palabras de Bratt y me deje arrancar la baraja sin ningun esfuerzo, todo eran conversaciones rapidas en la mesa sobre pq bajabamos, pero yo solo tenia sentidos para mi Yoko, asi que no me entere de la conversacion, mire a Yoko y segui mirandola hasta que entro la chica nueva, entonces me bebi de golpe la cerveza, me levante y la dije:

- Bienvenida.

y dirigiéndose al resto termino diciendo.

- Bueno chicos desearme suerte, pq esto es peor que emfrentarse a la muerte. y con un resoplido concluyo para si.

- Animo Masaki, vamos para alla.

se dirigio sin dar rodeos hacia la barra donde Yoko Matsugane recogia y limpiaba la zona mas alejada de la barra, si tenia que decirla algo ese era el lugar oportuno, alejados de los oidos y el bullicio del bar.

al acercarse la saludo con un simple

-Hola Yoko, Me pones una cerveza?

Mientras se la ponia se sento en un taburete y continuo..

- Sabes, vamos a bajar al planeta, casi no me lo creo, lo malo es que....

masaki no encontraba las palabras, ya volvia a dudar, y ese no era momento para dudar, Yoko le miro con dulzura como hacia desde hace algun tiempo y le pregunto. - Que es lo malo Masaki?

Masaki noto como un poco de tristeza en la voz de Yoko, pero no estaba seguro asi que trago saliva y al final arranco

- Lo malo esk pasara tiempo sin probar esta cerveza, sin ver las manos que me la sirven, sin ver ese pelo castaño esa sonrisa preciosa y esos ojos marron oscuro que me atrapan el corazon cada vez que me miras Yoko.

Masaki no se lo creia, habia soltado una frase entera sin titubear, ahora solo faltaba la reaccion, a Masaki casi se le salia el corazon, esto era peor que todo lo que se habia encontrado en la vida, pero el primer paso ya estaba dado, ahora ya nada le pararia, le iba a decir que sentia, y era el momento, mañana a primera hora tendrian que estar en un transporte direccion a la colonia, asi que solo le quedaba el resto del dia y quizas algo de la noche.

Yoko mira fijamente a Masaki durante unos instantes, inmóvil, incapaz de articular palabra alguna. Sentía cóm ose le oprimía el pecho al enterarse de la noticia, que no iba a ver a Masaki en una temporada. Entocnes irrumpe el otro camarero.

Camarero: Vamos, Yoko, vete con él. Yo te cubriré el turno - dijo guiñando un ojo.

Yoko asiente con la cabeza, sonriente, y se gira hacia Masaki.

Yoko: Vayamos donde quieras, Masaki...

Anna toma asiento en la silla donde estaba Maxon, quien sigue en el suelo dolorido. La rusa parece esbozar una sonrisa, aunque se nota que no lo hace a menudo.

- Gracias por la bienvenida, chicos - Anna recoge la lata aplastada con curiosidad - Si llego a necesitar reciclar latas, te llamaré para que las aplastes con tus bíceps

Tras soltar ese comentario en tono de broma, preguntó al cabo Bratt sobre la bajada al planeta, pero el propio Bratt era incapaz de aportar nada, pues sabía casi lo mismo que ella y vosotros. El resto del día transcurre entre charlas, manos de cartas y algún que otro chiste de un recuperado Maxon, quien no necesitaba recurrir a sus técnicas de ligue para sacar uans carcajadas

a Masaki se le ilumino el rostro con la mayor sonrisa que habia mostrado nunca y eso que casi siempre estaba sonriendo, salto de la silla sin haber tocado la cerveza y sali corriendo al extremo por donde salian los camareros para esperar a que se cambiara, cuando llego Yoko con unos pantalones baqueros y una blusa ajustada que marcaban sus curvas, a masaki le parecio lo mas vello del universo, hizo un reverencia galante al estilo nipon y la dijo.

- Hoy va a ser el dia mas feliz de mi vida, y cogiendola de la mano empezo a andar sin rumbo saliendo de la cantina y pasando por pasillos, por zonas residenciales, parques, zonas de ocio, mientras paseaba lo unico que podia hacer era mirar aquel angel que iluminaba su corazon, iba a estar sin ella unas semanas, y lo que antes añoraba con tanto ainco, ahora se le tornaba en un castigo. pero asi de cruel es la vida, y se dijo a si mismo que no deberia malgastar el tiempo sin decirla lo que sentia, asi que empezo poco a poco a hablar hasta que se encontrase en situacion de soltarlo, y aunque parecia que a ella le gustaba, su juventud le hacia inseguro.

cuando pasaban por un parque ajardinado con flores artificiales muy vistoso con bancos y agua corriendo en cascadas y el sonido artificial de pajaros y murmullo de agua,  Masaki saco el cuchillo y con un limpio tajo corto una flor.

entonces se paro se puso enfrente de ella mirandola a los ojos, con la mano cogida y mientras guardaba el cuchillo sostenia a la vez la flor en la misma mano,( los juegos magia daban sus frutos penso masaki al notar la facilidad con que con una mano usaba un cuchillo y sujetaba una flor).

-Yoko, como sabes vamos a estar unas semana alli abajo, pero lo que antes deseaba con tanto ganas y emocion, ahora casi es un sufrimiento. Y tu eres la causa de ese cambio en mi reticencia a bajar.

Entonces se sentaron en un banco y sacando la flor la dijo:

- Yoko, seguramente a veces te he parecido un gilipollas mientras me decidia que bebida tomar y me aguantabas tods mis cambios de bebidadurante un cuarto de hora, o cuando apartaba la mirada rapidamente, etc.. pero todo ello es pq soy un tonto, y un miedica, si ya se que estoy en una unidad especial y que he luchado alguna vez, pero no hay nada tan fuerte y que me de tanto miedo como lo que siento por ti en mi corazon, el amor por un lado y el miedo al rechazo por otro.

y haciendo una pausa y  mientras la miraba a los ojos dijo:

- Te quiero.

y sin pensarselo dos veces, esperando una reaccion parecida a la de Alex se lanzo y le beso en los labios dulcemente, aunque tan rapidamente, que yoko si quiso no pudo responder y si no queria no la dio tiempo a resistirse. ahora la pelota estaba en el tejado de Yoko, ahora era un si o un No, un medalla al heroe o una muerte horrible y sin epitafio.

Yoko, inicialmente sorprendida por la iniciativa del joven Masaki, reacciona rodeando sus brazos y devolviéndole el beso. Era justo lo que ella buscaba, y esperaba durante mucho tiempo que Masaki se lanzara. Unos instantes después, sus labios se despegaron de los de Masaki como si fuesen ventosas, y le miró a los ojos.

- Llevaba semanas esperando este momento, Masaki... y no quiero perder el tiempo - Yoko mira hacia unos matorrales que estaban junto a un banco, y después dedica una mirada pícara a su acompañante - Quiero que este momento sea imborrable en nuestros corazones...

Yoko cogió de la mano a Masaki y le llevó hasta detrás del arbusto, se puso frente a él desabrochándose un par de botones, mirándole insinuantemente y aguardando ansiosa a que se lanzara. Masaki, titubeante al principio, se lanzaría apasionadamente para mostrar físicamente el amor que sentía por ella... y por como transcurrió ese momento, ese amor era mutuo.

Transcurrió la noche sin más percances, aparte de que Anna noqueara a otros 2 soldados que intentaron flirtear con ella y Alex en la cafetería, con las consiguientes risas.

Al llegar a las 10 de la noche decidieron todos irse a descansar (excepto el joven Masaki, quien estaba con Yoko en una velada memorable, y la noche era aún joven para ellos).

Era la mañana siguiente, las 7:15, un cuarto de hora antes del emplazado por la capitana Rutherford. West, Maxon y Anna ya estaban allí en el hangar, charlando desenfadadamente (auqnue Maxon seguía un poco renqueante del rodillazo que le propinó la rusa). Se nota que estaban de buen humor. Poco después hace aparición Ghost, algo somnoliento, acompañado con Dirk. Ambos llevaban encima su (ligero) equipo, aunque a Dirk le fastidiaba que el ejército le diese solo un cañón ligero de combate cuando hay armas como las Vulcan o las escopetas de doble barril.

Poco después aparece Bratt, revisando su pistola y poniéndole el seguro antes de guardarla en su funda.

- Buenos días, chicos. Hace una buena mañana para bajar al planeta, ¿no creéis?

Caro: No hace falta que lo digas, "Bratty" - Caro era una mujer fornida y escultural, le gustaba hacer pesas y mantener sus músculos a tope. Si Maxon no le tiró la caña hasta ahora era porque le daba grima...

Caro iba acompañada por su unidad al completo, y por la de Kelly (quien no pudo evitar repasar de arriba a abajo a Anna). Ambos acaban de llegar al hangar.

Kelly: ¡Wow! ¿Es esa la nueva recluta, Bratty? ¡Está tremenda! - se acerca a Bratt para susurrarle - Oye, ¿crees que querrá... ya sabes?

- No te lo aconsejo, Kelly... ayer convirtió en tortilla los cojones de Maxon...

Kelly: ¡UF! Eso me duele hasta a mí... - dijo con una risa.

Ya estábais todos en el hangar, esperando a la capitana Rutherford... excepto Masaki, quien parecía que se estaba demorando. Eran ya las 7:20

Con ese ambiente saqué y encendí mi puro de buena mañana, ojee un poco las puertas de entrada a la par que mi cara mostraba desconcierto. Avancé un poco hasta ella dejando resonar las botas que con todo mi peso encima se hacían eco por la sala.

Humm ¿Donde está el chino? dijo con rapidez, para volver luego al lugar donde estaba, aprovechando que regresaba por retaguardia para observar el culo de Caro, con el que seguro podría prensar latas de cerveza, al igual que yo hice con mis biceps.

Seguí paladeando el gran cigarro hasta que se diese la orden de transbordo.

No me gusta la falta de puntualidad, y menos en una situación como ésta. El responsable soy yo.

Llega Dirk preguntando por Masaki. A lo que yo respondo con rotundidad:

-Eso mismo me pregunto yo. Dirk, ve a buscarle y traelo aquí. Y si está en pelotas que se vista por el camino. Es el benjamín, pero ha de hacerse a la idea de que ya no está en el colegio.

Tras pasar una romántica y memorable noche con Yoko, te quedaste a dormir con ella. Te despertaste a las 7:02, y al descubrir la hora te sobresaltaste. Te levantaste de un bote y te vestiste a todo correr, procurando no despertar a Yoko, quien parecía dormir plácidamente. No querías perturbar el sueño de semejante ángel por nada del mundo. Una vez vestido y con el equipo a rastras te disponías a salir, pero una voz te frena en seco.

- ¿Te vas sin despedirte de mi? - Yoko estaba despierta, frotándose los ojos. Cuando mira la hora se da cuenta de que tienes el tiempo justo, así que se levanta y se acerca a ti para besarte con ternura. Después te acerca el puñal, el cual casi olvidas - Corre, que llegas tarde... espero verte pronto.

Sonríes a Yoko y la dejas en su habitación. Eran ya las 7:09. Corres por los pasillos, maldiciendo tu situación. Ibas a llegar tarde y seguramente iban a echarte la bronca. Al tomar un desvío te equivocaste y te extraviaste en los largos pasillos de la estación espacial. Cuando más nervioso estabas sientes una mano en tu hombro.

- ¿Necesitas algo, soldado? - era la capitana Rutherford, con quien habíais quedado en el hangar para bajar al planeta. Suspiras aliviado al encontrarte con ella.