Me di vuelta como si quisiera volver a escuchar más atentamente un sonido que me había parecido extraño, pues debía haber escuchado mal, olido mal, era imposible que...

-AZU-CHAN?!- Sin pensarlo siquiera mi corazón dió un vuelco de alegría, mis labios hicieron una sonrisa gigante, y la abracé alzándola en el aire un momento- No puedo creerlo..¿como? ¿cuando? - Le estiro las mejillas para ver si es real.- No puede ser! De verdad eres tuuuuu!- (>w<) La abrazó y sacudo un poco, entonces me doy cuenta que eso arruinaría mi plan y antes de dejarle decir nada, miré a todos lados, le tape los labios y la escondí tras unos arboles para hablarle muy suave.-Escucha, estoy increiblemente feliz de verte, pero tengo algo MUY MUY MUY importante que hacer ahora. ¿Me esperarías en casa? Por favor, por favor, por favor, por favor, porfis, porfis, porfis, ¿Siiiii?. ¡Gracias! Eres la mejor, te recompensare al llegar! ¡Toma! ¡Ve en auto! - Le di un ultimo abrazo y me dispuse a salir de regreso al camino. Necesitaba que Azumi me entendiera, pues lo que debía hacer era recuperar a mi Naoko.

Pero Azumi no lo comprendió, y antes de que se fuera corriendo lo detuvo, otra en su lugar se hubiera molestado, pero Azumi quería demasiado a Tetsuya como para irse sin decir nada más.

- ey... espera - dice, sosteniendo su mano - hace unas horas pise suelo japones y me vine a buscarte impaciente de verte ¿y te vas asi como si nada? lo siento, pero no puedo aceptarlo, Tetsuya- kun - suelta tu mano y se cruza de brazos, marcando su bastante lindo busto. Había crecido.

No pude evitar sentirme un poco incomodo, aunque estaba más preocupado por no perderme la salida de Naoko.

-Es que...Azu-chan...Naoko, yo....estoy esperándola, ella me dijo que quiere estar conmigo y no le he respondido para responderle ahora, como una sorpresa.- De a poco mi rostro es el de un pobre perrito mojado.- Por favor...necesito recuperarla....¡Te juro que te compensare! ...Por favor....- Estaba desesperado. No haberle respondido a Naoko en todo el día fue un juego peligroso, y sin esta pieza final, mortal. Tenía que de alguna manera encontrarme con ella, decirle que la amaba, y que era todo para mi....

Al escuchar el nombre de Naoko, suelta la mano de su amigo, y baja la mirada, "pensé que ya... ya no pasaba nada", se dijo, pero contra Naoko no podía competir, Tetsuya  la quería y no había otra chica para él, Azumi era invisible para los ojos del chico, a pesar de siempre estar para él.

- ah... comprendo... claro, siempre es más importante, digo, es importante,  - suspira, y se gira, dándole la espalda - ve por ella campeón - lo mira de soslayo, y sonríe amargamente, ella viajando desde lejos, para poder volver donde sus amigos, convenciendo a sus padres de dejarla  volver, y para Tetsuya, eso no importaba. "hago mucho esfuerzos". 

Te hace sentir insignificante, aunque eso no es una novedad, no te sientes demasiado fuerte ante nadie, pero ante este chico, esa sensación de indefensión se  hace más intensa al punto que te bloquea. Si había sentido miedo antes, no se comparaba con lo que sentías en ese momento.

- creo que no me has comprendido, gusano - su voz socarrona suena con violencia en tus tímpanos, pero no es que grite, sino por precisamente lo contrario, ese susurro en que deja escapar esa frase, alargando cada una de las letras de la palabra gusano - ¿que harías para evitar que a Nagisa le pase algo? ¿cual es tu precio? - pregunta de nuevo. Era el diablo, y estaban tratando tu alma.

El nudo en mi garganta nacido por la angustia me quiebra la voz al pronunciar, con mirada triste e incomprendida:

-¿Qué quieres? Lo que... Lo que sea. Pero déjalo al margen... Andou-sama.

No puedo reprimir el impulso de una lágrima que cae por mi mejilla izquierda, destilando miedo, pero también, a la par que angustia, tristeza porque no comprendo qué necesidad tiene de tomarla conmigo... Realmente soy un desgraciado...

-Lo que sea... Pero déjalo.

Note que Azumi no estaba nada contenta...y tenía razón. -Espera, espera!- Dije tomando su mano para que diera vuelta. Solte su mano y las junte en gesto de rezo -Lo siento, tienes razón, estoy hecho un estupido. Vamos a casa, tenemos mucho de que hablar. Solo dejame hacer una llamada y arreglare esto para estar contigo. - Dije mientras empezaba a caminar rápidamente hacia casa con ella, tomándola del brazo para que me siguiera.

-Abuelito. Llama a la florería, quiero muchos,muchos ramos de flores de todos colores en la casa de Naoko lo antes posible. Con un cartel que diga "Para la Sra.Kido, del Sr.Iseki". Y que la abuelita prepare muchas cosas ricas, estoy llevando una hermosa sorpresa a casa, y puede que sea una reinita de pelo rosa.

Al decir lo último le sonreí a Azumi y la tome de la mano. Mi idea era tomar un taxi hasta la casa, para llegar lo antes posible.

TÉRMINO DE LAS CLASES: 3ER DÍA

---Salida de la escuela--

Habías quedado con Sara de irse juntas a casa, el chófer llegaría pronto a buscarlas, pero Sara no aparecía por ningún lado, y cuando ya llevabas 10 minutos de una insufrible espera, recibes un mensaje por whatapps de tu amiga "lo siento linda Shae, vivieron por mí temprano mis papás, iremos a comer fuera, te quiere, Sara" Era obvio que ese mensaje no te alegraba ni siquiera un poco, ¡Había hecho que perdieras 10 minutos de tu vida! así que feliz no estabas, sin embargo, entre que te mordías el labio inferior, y dabas un pisotón al suelo, ves a Andou que está intimidando a un chico de tu clase, -sabes que está intimidándolo por la cara de espanto que tiene el pobre.

Andou es la razón por la que te alejaste de Shino, esa chica era (y es) una versión  de ti, pero bastante mal intencionada, algo en esa chica pone los pelos de punta, y aunque las unía el desagrado por Fuwa, en ella era mucho más que eso, era un odio parido, y lo veías en sus ojos, además, de que era amiguita de Andou.

Ahora te fijas en el chico, intentas ubicar su cara con un nombre y lo logras, Kaoru Sawamura, pero es demasiado callado, y sólo lo han visto con Kawuro Nagisa, el genio prodigio de tercer año, en fin, eres la única persona en ese lugar, y posiblemente el único impedimento que Andou le dé una paliza a ese escuálido chico, al que iba arrinconando tras los matorrales, alejándolo de tu campo visual...¿ qué haces? ¿eres heroína y te escabullas como una sombra?.

Imperdonable. Diez minutos me pasé plantada cómo un ficus para que al final resultase en vano. Nunca supe muy bien por qué ésta fijación tan extraña con el tiempo, resulta tan... Barroco. Suspiré, estaba dispuesta a marchame de allí cuanto antes e intentar recuperar aquellos minutos perdidos con algo de diversión, pero entonces me fijé: el matón de Andou volvía a las andadas, y ésta vez con aquel muchacho callado que solía ver acompañado de Nagisa. - Kaoru, si no me equivoco... - Pensé, a la vez que me aproximaba allí con el ceño fruncido y los puños cerrados.

- ¡Eh, Andou! - Exclamé para llamar su atención. Me crucé de brazos una vez me encontraba al lado de Kaoru, mirando desafiante al matón. - ¿Por qué no vas a perderte por ahí? Ya es un poco cansino verte intentado arreglar tus complejos metiéndote con todos. Fus, fus. - Le hice un gesto con la mano para que se retirase, cual perro.

"Lo que sea.. pero déjalo" Kaoru había firmado su pacto con el demonio, pero el trato no sería revelado en ese momento, no aún, Audou de todas formas había jugado un juego perverso, sólo había recibido el informe de uno de sus "amigos", de que Nagisa parecía muy interesado en un chico nuevo, así que jugó sus cartas y luego de blufear cual ladino estafador, había ganado. "te tengo..." pensó mientras que se giraba hacia la voz femenina que lo asaltó por la espalda y salvó - de momento-  al pobre de Kaoru.

- pero que tenemos aquí, la bella Shae Hiethana... - sonríe y jala de las ropas a Kaoru, levantándolo como si fuera un trapo, y arregló sus ropas - ¿pero de que hablas Hiethana-san?, sólo conversaba con mi amigo - le echa el brazo a los hombros a Kaoru, y lo estrechó contra su cuerpo - y que boquita tienes, pero igual de hermosa - le lanza un descarado beso hacia ella.

- Vete al cuerno Andou, ningún ser decente querría ser amigo tuyo.

Le respondí sin cortarme un pelo, escurriendo al pobre Kaoru de las garras de aquel monstruo para traerlo a mi lado. Lo observé con algo de lástima, a saber en que chanchullo le habrá metido el malnacido de Andou. - El día que te metas con alguien más poderoso que tú, sabrás lo que se siente y te darás cuenta de lo solo que estás en realidad. - Le dediqué una última mirada de desprecio al matón antes de alejarme con Kaoru agarrado del brazo. - Buenos días. 

Ya algo alejados, cambié mi comportamiento a uno más cercano.

- ¿Te encuentras bien? ¿Te ha hecho algo? - Le pregunté al callado muchacho.

Sonrie de medio lado, con ese aire triunfalista de quién tiene un haz bajo la manga, de quién maneja los hilos más allá de lo que las mentes débiles.- no te pongas así, que te saldrán arrugas - sonríe de medio lado, y se aleja de la pareja, sonriendo, pero antes pasa por el lado de Kaoru y le susurra - "estaremos en contacto" - pero Shae no logra comprender del todo lo que decía.

Azumi sonrió preciosamente, estaba realmente feliz, y fue hasta donde estabas y se aferró a tu brazo, se sentía la chica más importante del mundo, la mejor, porque su amado Tetsuya había preferido ir con ella,  - sí, vamos, afuera hay muchos coches, podemos tomar un taxi y partir - ni siquiera el hecho que pidieras flores para Naoko, desanima la cara de felicidad de Azumi.

-Si, tomemos un taxi ¿O acaso viniste con chofer?- Tenía pensado llegar a casa, calcular cuando llegarían las flores a lo de Naoko y mandarle un mensaje. Se pondrá super feliz. Y además ahora tengo a Azumi para apoyarme, nada puede salir mal! -Oh, no importa, lo que importa es que Nee-chan esta conmigo! -Dije y aprete su cabeza fuerte en un abrazo.- ¿Cuanto tiempo te quedarás? Oh! ¿Vinieron los tios contigo? ¿Te quedarás en casa? Eh! eh! (>.<) waa! Tienes tanto que contarme.- Naoko era la persona con quien más me divertía, ella siempre me entendía, me escuchaba, confiaba ciegamente en mi, solo Naoko se comparaba con ella, pero claro, mi amor por ambas era diferente. Naoko....ya habrá salido? Giré la cabeza curioso, si bien no iba a volver con ella, si llegaba a verla irse a su casa sin problemas me quedaría más tranquilo, todo iría bien.

TÉRMINO DE LAS CLASES: 3ER DÍA

---Salida de la escuela--

Pero los cuentos de hada, por lo menos para la pequeña Azumi nunca son completos, o por lo menos no tiene un final feliz, porque cuando Tetsuya, ya decidido en ir con su amiga, gira su cabeza como último intento de buscar a Naoko, la ve caminar desde la escuela, la pobre tendría un aspecto doliente, sus ojos alicaídos demostraban gran tristeza, pero no de la que se produce por un hecho puntual, sino por la duda que genera una decisión. 

Naoko levantaría la cabeza y vería a Tetsuya tomado del brazo de una chica de cabello rosado, la que lucía demasiado feliz, 

Naoko, esperaba encontrar a Tetsuya, de verda necesitaba verle, esperanzada de poder encontrarlo al terminar de clases, corrio hasta la entrada del Insituto donde lo vio junto a una chica de cabellos rosados, Naoko se detuvo en seco, sorprendida, la reconocia, aquella chica era la de la fotografia...la mejor amiga de Tetsuya...Naoko bajo la vista, cruzo su maletin frente a ella tomando las manillas con ambas manos, entonces recurrio a su mejor sonrisa...un fingida como muchas que ha debido dar durante el día, pero hacerlo con Tetsuya no lo esperaba.

Camino hacia la salida, cogio su movil para comprobar si su chofer la esperaba en la salida...y asi era, listo y dispuesto por si debia refugiarje se otra mala noticia...ya tenia el corazon roto, ahora estaba a pasos de sentirse sin alma.

Buenas tardes Sr. Iseki...saludo amablemente, miro a la chica...Hola...le tendio la mano...Soy Naoko Kido.

Mi mundo entero dio un giro hacia Naoko, que acababa de salir, pero para mi sorpresa, no estaba bien. Algo andaba mal. Algo le estaba pasando a Naoko. ¿Eran celos? No. No seas egocentrista Tetsuya! Claramente esto no es sobre tí. Impropio de mi, interrumpí lo que Azumi fuera a decir luego de que Naoko se presentara. -Naoko...¿Qué pasa? ¿Qué ocurrió? ¿Andou te hizo algo? No te ves bien...- Debí haber esperado, aunque Azumi se enojara. Al fin y al cabo tarde o temprano ella lo entendería. Realmente me preocupaba, estos tres días habían sido una locura.

Ahi estaba Tetsuya, como siempre con una percepción muy desarrollada...No, no he visto a Andou desde la mañana, pero he tenido un mal día, queria hablar de eso contigo, pero veo que estas ocupado, y puedo esperar a otro dia...Respondi en un tono amable, tambien pasando por alto lo que dijera la pelirosa.

¿Esperar otro dia?...seguramente con ella aqui, sera mucho mas que eso...

Cuando dijo lo de que estaba ocupado me di cuenta de que no las había presentado. -Oh...OH! Cierto. No las he presentado. Naoko, ella es Azumi. Azu es mi amiga desde que eramos pequeños. Azu nee-chan, ella es Naoko, es la chica especial de la que tanto te he hablado.- Cuando digo lo de "chica especial" le sonrío especialmente a Naoko. Quiero que sepa que ella sigue siendo mi número uno. -Yo...debo acompañar a Azumi a casa, pues acaba de llegar a Japón. Naoko, por favor ve a tu casa y toma un descanso ¿si? Esta noche iré por ti... - Le sonrío. Es esa sonrisa que solo Naoko conoce, esa que trato de cubrir pues me siento un tonto. Mi sonrisa de "Te amo. Eres todo para mi". Eres un tonto! Deja de reir! Realmente desearía poder dividirme en dos...

Trago saliva mientras me sacudo el polvo del uniforme y me arreglo el pelo alborotado. Noto el dolor sangrante que emana de un pequeño rasguño abierto en mi mejilla y lo palpo haciendo una mueca de dolor. Me había arrojado contra los arbustos. Pero ello no era lo peor... Era la certeza de que una etapa de amargura había comenzado...

-Sha... Shae-san. -Miro su mirada noble que adorna con una sonrisa alentadora. -Gracias... No sé qué habría pasado si no fuera por ti, Shae-san. Eres muy... eres muy buena, Shae-san.

Intento sonreír, pero lo que comienza como una amable mueca se ve interrumpida por un quebranto de tristeza que me lleva la pregunta desdichada a mi cabeza...

¿Por qué yo?