Partida Rol por web

Algo frustrado por haber pulsado el interfono y no recibir contestación alguna me alejo de él, para ver el botón que al final nadie se atrevió a pulsar, tanto decir que a ver que hacia y John se marcha a la sala dos sin pulsarlo. Me encamino hacia allí, pulsándolo esperando a ver que pasa, para instantes después reunirme con el resto en el lugar donde se encuentra Carol tendida.

- Voy a pasar el primero a la sala 10 si recibo una nueva descarga eléctrica, lo mejor sera ir a la sala dos con el resto, esperemos que no sea el caso - comienzo a decir al resto -  A ver si en las otras salas encontramos algo para poder curarte esa quemadura. ¿Que tal te encuentras? - pregunto esperando su respuesta para dirigirme hasta la puerta, que da acceso a la sala 10.

Reina se acerca a Carol tan rápido como puede, que no es mucho precisamente. 

Estás bien? Dijo, mientras ayudaba a incorporarse a la niña. Tienes que aguantar, tal vez en alguna habitación encontremos medicinas. Tenía que ir justo a ti la descarga...

Una vez incorporadas mira a Nicolai y asiente. Iré detrás de ti. No creo que sea capaz de resistir una descarga como esas.

Cuando Nicolai pulsa el interfono escucha con claridad: La oscuridad esconde promesas y regalos.

Tras las enigmáticas palabras se dirige a la puerta de la sala diez con cuidado, temiendo que un rayo eléctrico vuelva a lanzarse contra él. Por suerte parece que la carga eléctrica se ha apagado y podéis entrar sin problemas en la habitación.

El resto del grupo sale por la puerta número diez, dejándote completamente solo.

Me acerco a la puerta de la sala 2 y la inspecciono en busca de alguna trampa como la de la otra puerta, inspecciono la sala, creo recordar que había algunas provisiones, en ese caso las cojo todas. En caso de que la puerta 2 sea segura paso por ella, en caso contrario sigo al resto hacia la puerta 10

Por lo visto las puertas se han cerrado por completo y no tienes forma alguna de salir del lugar. Para más inri tus compañeros han saqueado todas las raciones, dejándote sin ninguna.

Una voz resuena por toda la sala, una voz que ya conocéis de sobra, esta vez sin ningún tipo de distorsión robótica. Distinguís claramente que quien os habla es una mujer.

Espero que las pocas horas que lleváis en este laboratorio sean de vuestro agrado. Podéis creerme cuando os digo que vosotros estáis aportando más por la ciencia que cualquiera de esos burócratas o engañabobos que reinan en las ciudades. Gracias a vosotros lograré desvelar numerosos enigmas, ascenderé un nuevo escalón en la comprensión de la ciencia. Y la ciencia, como es obvio, lo es todo. Es el cosmos y el vacío, la tierra y el cielo, es lo que explica vuestra necesidad de comer, vuestra agresividad o vuestro impulso para amar. Y también es la causa de que seáis como sois, de que penséis como pensáis, de que actuéis como actuáis. La ciencia es la llave que abre todas las puertas y gracias a vuestra aportación aquí estaré más cerca de completar su construcción.

La voz se detiene, dejando un silencio triunfal para que reflexionéis unos segundos. Dicen que la noche altera las acciones de la gente, que hace que vuestras emociones tiendan a los extremos. Veremos si esto es verdad.

Nada mas acaba de sonar la voz busco algún tipo de fuente de luz portátil (linterna, mechero, antorcha...), y recuerdo que antes alguien menciono un conducto de ventilacion, asi que decido probar suerte con el conducto

Logras meterte por el conducto de ventilación aunque es obvio que su función no es la que tu estás usando en estos momentos.

Lentamente avanzas por el conducto hasta que este se divide en dos. Por uno de los lados el conducto sigue sin más mientras que por el otro hay una hélice que te impide el paso aunque, si eres lo bastante ágil, tal vez puedas pasar al otro lado.

Me meto por el lado sin hélice, prefiero no perder demasiadas fuerzas aun, puede que las necesite para encontrar a Grar, pero antes de introducirme miro en el conducto por si hay alguna marca o mancha extraña.