Partida Rol por web

El geólogo no puede evitar quedarse boquiabierto ante la escena de Viktor y la completa carnicería que ha hecho con el dinosaurio. Pese a estar relativamente a salvo en el autocar no podía evitar sentirse algo impotente de que varios ahí fuera estuvieran jugándose la vida para ayudarles y él no pudiera hacer nada. Aun así, el instinto de supervivencia era mayor que el de la responsabilidad.

Hemos podido contra un Rex, hemos podido contra un Rex, esto es un juego de niños...

Randall vió como un viejo soviético recolector de heces de dinosaurio, conocido de oídas por todos los trabajadores de la isla, tumbaba a uno de esos bichos con una fuerza titánica y desparramaba sus sesos sobre el asfalto. La sangre corría a causa de la lluvia.

-El puto ruso -susurró.

Ya solo quedaba un dinosaurio, el del autocar. Comenzaron a llover balas hacia él, y Randall siguió medio agachado, pero atento al retrovisor. A la menor señal de peligro para él, obraría como mejor considerara: salir del jeep y esconderse para no ser visto, arrancar y acelerar... Esperaba no tener que llegar a eso. Los dinosaurios le ponían de los nervios.

Randall permanece en el coche, escuchando los tiros y mirando que no haya nada raro en ninguna parte de lo que merezca la pena salir pitando.

Alder, por su parte, recarga rápidamente y pega un tiro al dinosaurio. El tiro está algo justo, porque está Kenneth en medio, así que el balazo termina en el canto de la chapa del sufrido autocar, con un fuerte ruido metálico por un centímetro.

El herrerasaurio es bastante más listo que el resto de sus congéneres, y al ver fugazmente lo que le ha pasado al otro miembro de la manada, y lo que ha estado a punto de pasarle a él, corre hacia atrás del edificio de la sala museo, perdiéndose de vista rápidamente.

Los demás no alcanzan a disparar al dinosaurio, aunque buena parte del pasaje del autocar se tiró al suelo esperando lo peor, por si el herrerasaurio entraba y tenian que abatirlo desde fuera. Había sido una negligencia grave dejar un lado sin cubrir.

Afuera no se ve nada más, pero queda la duda de si el dinosaurio que escapó detrás de la tienda de souvenires era el que abatió Viktor, o ese era otro...

Dentro se escucha un grito enloquecido, y un aluvión de disparos de un mismo arma. Quien sea que ha disparado de esa manera, desde luego no se ha parado a apuntar y parecía realmente desesperado. Tras los tiros y el grito no se oye nada más desde el interior, ni rugidos ni más gritos. Probablemente fuera una pistola, pero sonaba un poco fuerte para ser una pistola. Tal vez una de las gordas.

Alder termina de recargar el arma y hace gestos para entrar al edificio a sus compañeros de escuadra.

¡Vamos chicos! ¡hay gente viva ahi dentro! o al menos eso espero

   Parpadeo lentamente, casi con incredulidad pero con un coraje férreo, mi mejilla casi choca contra el suelo, recorro cada rostro en mi rango de visión y la reacción del monstruoso animal, por lo que ayudandome de ambas manos, colocadas ahora sobre el volante, voy irguiendome hasta poder sentarme en el asiento, no necesito girar el cuello para echar un ojo a la parte trasera del autobus, sino que me guio por la costumbre, buscando los retrovisores a pesar de la intensa lluvia y la humedad.

  Respiro profundamente, en silencio, como un espectador en una obra maestra de hollywood, viendo como aquellos tipos de fuera se juegan el cuello, entonces, y sólo entonces, contemplo a Viktor, aquel anciano había sufrido la embestida de uno de aquellos seres y había sobrevivido, sin embargo no alcanzaba a discernir si estaba de una pieza...Parecian peligrosos.

 Justo cuando la calma regresa, cuando el tintineo de las gotas de lluvia sobre la carrocería del jeep y el autocar vuelve a inhundarlo todo se suceden nuevos disparos, de un arma potente, como si fueran bombas, justo al lado. Las manos tiemblan con la intención de tapar los oidos mientras un sudor frio recorre mis sienes, sin embargo no lo hacen. Y dejo de parpadear por completo, perplejo ante la visión de la situación, casi pensativo, como alguien que ha perdido la esperanza de encontrar a más personas con vida cuando vuelve el silencio. Tampoco hay rugidos...Pienso intentado reconfortarme. Asiento. Han acabado con ellos. Vamos allá.

 Apreté los labios y miré de reojo a mis acompañantes. Levante la voz una única vez, con autoridad, impropio de mi, pero lleno de coraje.

- ¿Están todos de una pieza?

Eché la mejilla a un lado, ladeando el cuello y los mire sonriendo placidamente, con una sonrisa que se adivinaba entre mis labios a duras penas, más de compasión y consuelo que de felicidad. Almenos hemos salido vivos de esta...

 Pero no sería la última.

Una voz contesta desde arriba, suena joven, nerviosa y enérgica

- ¡Eh! Alder, somos nosotros, hay otro de esos en el Aseo, rápido.

No acabáis de relacionar la voz del joven con nadie aún, pero desde luego parece que conoce a Alder

La voz es de Mike, uno de los encargados de la parte informática de la seguridad de Isla Nublar. Programas y esas cosas.

Al ver huir de mi vista al dinosaurio, doy un suspiro... Menos mal... Pero ya esta herido, deberia ser mas facil acabarlo ahora.... Debemos busacrlo ahora antes de que nos tome por sorpresa... Comento, mientras saco el cargador casi vacio de mi arma, y le coloco el nuevo, guardando el otro para despues...

La voz del segundo piso nos advierte de uno mas... Que hacemos alder? Si no ayudamos a esa gente, puede que hayan mas bajas, pero si dejamos solo el autocar, el dinosaurio que huyo podria volver, y estarian indefensos... Digo mientras miro hacia el autocar, para ver si hay algun herido...

La supervivencia del mas fuerte...

¡Haced lo que querais! En el autocar sois un blanco estatico... ¡entremos en el centro de Visitantes todos! Necesitamos armas y provisiones... ¡salid ya joder! grita Alder algo molesto mientras se dirige al interior lentamente.

¡Vamos hacia alla! ¿Esta encerrado?

Alder mira hacia adentro un momento, y una voz de chica joven habla:

"Allí, allí, está allí, en el baño¡¡¡"

Cherry, la conserje, está señalando con una pistola hacia la puerta del aseo, que queda justo encima de la sala de muestra de fósiles, asomada a la barandilla. Hay al menos dos personas más con ella, Mike, y una ejecutiva vestida de blanco.

¿COmo estais? ¿Alguna herida? ¿habeis visto a alguien mas? ¿teneis armas? dice mientras señalo a los demas la posicion de los nuevos supervivientes

Tenemos un bicho de esos encerrado ahi dentro.

Me incorporo lentamente una vez más, tras toda la andanada de disparos. Parece que todos estamos bien, aunque el silencio es protagonista dentro de nuestro grupo en el autocar. ¿Hasta cuando pensaba durar esta pesadilla? Los "tiradores" deberían estar encargándose de los dinosaurios...¿y mis amigos? ¿serían esos cuerpos? ¿estarían bien? Reprimo un gemido, y vuelvo a tomar posición en el asiento, mirando con premura algo fuera, algo que pueda distinguirse entre tanta lluvia, y que al menos, nos aportase algo de información a lo que pasaba fuera...

Al alejarse el dinosaurio levanto la cabeza, escucho atenta.. Me parece escuchar unos disparos que provienen del interior del complejo. Alguien comenta de ir todos, que no nos quedemos dentro del autocar. Se que es la opción mas inteligente, pero siento mis músculos agarrotados, sin ánimo de empezar a moverse.

Miro a Lucrecia y a Simon que los tengo junto a mi, todavía no se sus nombres pero tengo tantas cosas que agradecer a esta gente. Si no hubiese sido por ellos hubiera terminado como aquel otro que intentó distraer al tiranosaurios. Un escalofrío recorre mi columna al recordar esas imágenes recién vividas...

En... Entonces, vamos hacia allí? Les pregunto señalando con la mirada hacia el complejo. Supongo que tienen razón, y no es buena idea quedarnos aquí parados... Aunque dentro tampoco sabemos qué podemos encontrarnos. Termino diciendo, encogiéndome solo con imaginarme ser devorada por uno de esos monstruos.

Miro a Viktor, y mientras Alder y Kenneth estan algo alterados en este momento segun me parece, ayudo a Viktor a la vez que le digo ¿Está usted bien, Don viktor? Aun en la situacion en la que estabamos, la fuerza de la costumbre me hacia hablarle de usted aun en la situación en la que estabamos. Para mi, al ser el que más experiencia podia tener en conceptos de la isla, ahora, me habia demostrado como en otras muchas ocasiones que su trabajo no era lo unico que se le daba bien...

Tras comprobar el estado de viktor, grito a los del autobus ¡¡Salid de alli, eso no es más que una trampa mortal!! Tras lo que recuerdo que la chica que salvamos del Rex llevaba una pistola, a mi mente viene el nombre de la que creo es la persona que mejor puede estar, psicologicamente hablando, despues de lo sucedido y grito de nuevo ¡¡Michelle!! ¿¡No teniais una pistola en el autobus!? Se me puede notar un tono de furia, más conmigo mismo por no darme cuenta que dejabamos el autobus desprotegido que por otra cosa...

Compruebo las balas que quedan en el cargador que tengo puesto en el VR1 para no disparar cuando no tenga balas tras lo que espero a que salgan los del bus para hacerles de defensa mientras van entrando al centro de visitantes con Alder y los demas en cabez...

El chico joven habla de nuevo a Alder

Dirigiendose a la barandilla:

- Alder, está en los Aseos, no creo que esté encerrado... Y esos hijos de la gran Lagarta tienen un pellejo para hacer chalecos antibala. Estamos casi todos relativamente bien... Elmar está muy jodido, Harmonie y Cherry lesionadas en mayor y menor medida. Encantado de verte de nuevo amigo...

Esta bien... necesitamos llegar a la sala de control. Alli podremos descubrir que diablos pasa con la energia electrica e incluso usar las armas... vamos a los baños... preparaos para coserlos a balazos...