Partida Rol por web

El hangar

Llegáis al hangar, que es un garaje pero bestia, con mucha más basura, mugre y chatarra de la que habéis visto hasta ahora, y con por supuesto varias naves, todas hechas polvo pero que más o menos pueden funcionar aún. Aquí encontráis también a otros dos tipejos, muy diferentes a vosotros, pero con los que tendréis que colaborar si queréis... "ganar".

Un monitor colocado en una pared de chapa se enciende ante vosotros y se ve al presentador del show hablando:

- ¡Y por fin el escuadrón cuatro se reúne! ¡Hemos seguido a cada uno de ellos hasta aquí, a cada cual más variopinto! ¿Nos conquistará el corazón el viejo barbudo knox? ¿Lo hará Benito con su intrigante mirada? Lo veremos pronto, ahora ¡deben darse prisa! ¡Sus rivales van mucho más rápido que ellos! ¡Y el tiempo es lumin en este sector infernal de Duslak!

Le sigue publicidad sobre un gel que lo mismo sirve para arrancar los diminutos organisuriles del pelo de los niños que para desengrasar motores de liantrofita. ¡Este gel refitalín es lo mejor para tus posesiones más queridas!

En el hangar hay varias naves, o vehículos, o trastos... los que tienen mejor aspecto, y que hasta podrían llegar a funcionar son los siguientes. No hagáis mucho caso a las fotos, los que tenéis delante no son así, esas fotos son de hace años... cuando estaban nuevos, relucientes, en condiciones; no como ahora, que dan pena...

Miro descaradamente a los otros dos que se vienen con nosotros, “un viejo y una canija pues vaya!, qué criterio para elegir escuadrón es ese?”

No entiendo muy bien qué he de hacer, así que lanzo una pregunta a ver quién me contesta -¿Alguno sabe qué debemos hacer? ¿Elegimos una nave o esperamos a que termine la publicidad?-

Exhalé un suspiro de admiración en cuanto vi aquellas reliquias de tiempos inmemoriables hechas un Cristo.

—¡JOOOOOODER, VIEJO! —solté, tras acercarme corriendo como una hiperactiva a las naves para quitarle ligeramente la espesa capa de polvo que se había adherido a ellas y ver el nombre del modelo—. ¡MIRA ESTO! ¡SON MÁS VIEJAS QUE TU BARBA!

Bueno, qué... mi barba ahora...

Por fortuna, aún parecían funcionales, aunque... eso sí, tendría que darle un buen remiendo a la mayoría si queríamos que fuesen mínimamente pilotables. Pero... ¡para eso estaba yo! Fuera como fuese, antes de ponerme manos a la obra quería comprobar, una a una, cuál era la que estuviera menos hecha polvo de todas, y si había alguna de ellas que... a la mínima exigencia, tuviera un alto porcentaje de saltar en mil pedazos.

Y a ello me puse cuando escuché de repente una voz... y luego caí en la cuenta de que no estábamos sólos y que el presentador había dicho algo de un tal Benito o yo qué sé que mierda...

—¡COÑO! ¡QUÉ SUSTO! —casi me da un paro cardíaco en cuanto me giré y vi al alien ese mirándome con los ojos abiertos como si fueran platos... ¡qué grimilla!—. Tshh... Viejo... ¿has visto su cabeza? Parece un... bueno... ehm... ya sabes... tu (ahora mi) «eso» pero con patitas y sin pelitos...

Ejem, aquello último, por supuesto, lo dije suavecito para no ofender al bichejo... Por fortuna, la otra parecía más normalita... aunque no sabría diferenciar si era más grande a lo ancho o a lo alto...

—¡Hola~! —saludé finalmente, tras el susurro al viejo, y tratando de sonreir y sonar amistosa—. Pues no tengo ni idea... pero dicen que van tomándonos ventaja, así que si queremos ganar... será mejor que elijamos rápido, ¿no?

Y yo pensaba ganar... aunque aún no sabía si esto era una carrera, ni siquiera qué había en juego y qué pasaría si nos oponíamos a participar. A decir verdad, no sabía na' de na'...

—En cualquier caso, si vamos a hacer equipo... será mejor que nos presentemos —sonreí y señalé a Hub—. Ésa de ahí soy yo, Knox; y yo soy él, Hub.

Dicho así, caí en la cuenta de que sonaba un poco raro y que igual me tomaban por una desquiciada mental (cosa que en cierto modo era cierto, ejem), así que traté de explicarme algo mejor...

—Quiero decir, YO soy KNOX, pero... en el cuerpo de HUB; y él es HUB pero en el cuerpo de KNOX... no sé si me entendéis —estaba claro que iba a ser difícil de explicar—. ¡Bah! ¡Bueno! ¡Da igual! ¡Qué me dejéis echarle un puto vistazo a estas cosas!

Y seguí a lo mío... o sea, revisando aquellas preciosidades de los años en que el viejo era un crío.

- A ver, mocosa, déjanos hablar al resto, que te atropellas, hummmffff, esta juventud, siempre tan nerviosa. Y además, ¿quien es esta gente y porque hay que hacer equipo con ellos? ¿Porque lo dice la "Gran Voz Que Todo Lo Ve y Me Toca Las Narices Con Cada Cosa Que Dice"? - Desde luego los co... bueno, esos, no me los puede tocar. Al menos no directamente. Y creo que por las explicaciones de Knox quedaba claro. Esperaba. Vamos, más le vale. Es que siempre tan acelerada, la mingurria esa. 

Miro a la tipa que nos ha preguntado con cara de ¿"y a mi qué me cuentas"? Y así se lo dije, claro, escupiendo antes. Lo cual, por cierto, no se hacía tan bien con aquella boquita de pitiminí.- Y tu, amiga nueva, tenemos tanta idea cómo tu de estar aquí. Y, bah, esto es una chorrada seguro. A ver, ya sabes cómo nos llamamos, así que al menos, dinos quién eres.Porque lo de saber qué haces aquí... parece que eres como una babosa espacial, si, de esas que nunca saben si van o vienen.

- Bufff. - Ese buff iba hacia el otro ser de la sala, el tal Benito. - Oye, amigo, ¿y tu? ¿De dónde vienes? He visto de todo pero a tu especie no. ¿O eres un invento raro del tiparraco de la Voz? - Humm... Pongo cara de flipar, de no entender nada. Le digo a Knox en bajito - Es feucho el amigo, pero vamos, no tanto como una gilponiosina que una vez en un bareto... bueno, mejor lo dejo, qué asco... Ni me preguntes... brrr. Eso si era... curioso.. Y no insultes a mis... tus... hmmmgggg lo que sean. Cosas. 

Y luego de las presentaciones, la eléctrica "Knox en cuerpo divino de Hub" se fue hacia los vehículos. Humm... Espera... Aquello podía ser... - ¡Oh! Los viejos y fiables Taurusontes, ¿sabes qué una vez...? ...- Me lo pensé dos veces, y gruñí una protesta. Busqué una cámara, y me planté delante de ella, escupiendo a un lado (Cada vez lo hacía mejor), y dije: - A ver, por los geles esos sedantes, o calentantes,thhnsns, o flipantes, lavantes, lo que sea, me da igual, ¿qué hay que hacer, tarado?

Respondían sin sentido y seguía sin enterarme de nada, hasta que ella se dirige a mí, de una manera que no me gusta. Abro los ojos de par en par y a pasos agigantados me acerco y la agarro por el cuello mientras mira a la pantalla – ¿A quién has llamado babosa?- aprieto su garganta con una mano mientras le digo -Me da igual si eres un viejo o una vieja, me llamo Mita. No lo olvides al volver a referirte a mí o te haré una soga con ese collar-

¡Me cago en...!

—¡Eh! ¡Tú! ¡Oye! ¡Quietecita! —dije, acercándome con cara de mala leche a aquella enana—. ¡Qué ese cuerpo que estás agarrando es el mío! ¡Ya puedes estar soltándolo, flipadilla!

Sí hombre, encima de que el viejo la liaba, me iban a quedar moratones a mí... ¡y una mierda!

—Si quieres pegarle a él, pégame a mí —le puse la mejilla preparada y me di un par de golpecitos con el dedo índice, señalando a dónde tenía que apuntar—. Pero mi cuerpo, o sea... el de él que en realidad es mío... lo dejas en paz, ¿capisci?

...

Ejem, aunque luego aproveché el segundín de confusión para susurrarle por lo bajini una cosilla al vejestorio...

—Pss, viejo... cuando te suelte, le arreas...

Jujujuju. Las mejores relaciones empiezan con una pelea de bar, o eso dicen... En cualquier caso, incluso con trampas, no sé si teníamos las de ganar... ¡Menudo Biceps se marcaba la tiparraca ésta!

-Bah, bah, bah, que piel más fina tienen por aquí. Como se ve que algunos no escuchan bien - Hago por soltarme, más o menos lo que puedo, celebrando, y rezongando algo. -No sabes dónde estás, nosotros tampoco. Y el amigo  tampoco, rgffgtgshev. Las babosas de Gamma Rigel no saben nunca donde están y les da igual a donde ir. Pero pffff. Si vamos a hacer equipo y ya me quieres pegar... Pffff. Mita. No soy tan mayor como para olvidarlo, ¿vale? - Digo, tocándome el cuello, y estirando lo intentando recuperar el aliento, y mirando a Knox, diciendo que iba a pasar. Me interesaban más las naves.... Bah, y saber dónde estábamos. 

Pues estáis de suerte. Knox investiga un poco y concluye que todas las naves están igual de jodidas. Muy jodidas, de hecho. Inservibles, vaya. ¿Y por qué eso es estar de suerte? me imagino que os preguntaréis. Porque con esa pedazo de tirada, con ese pedazo de crítico que ha sacado, podrá distribuir puntos en las naves que ella quiera, que para eso es mecánica, y para eso ha sacado un crítico. Podrá repararlas, ponerlas en marcha, y hasta darles un toque molón. No denostéis esto último, pues la audiencia es alta, y a los patrocinadores les gusta ver cosas bonitas y brillantes por holo-visión.

La cosa es que a Knox le va a llevar un buen rato reparar estos cacharros, así que en vez de pelearos, que aún es pronto para eso, podríais decidir qué naves (o nave) os interesan más. EEEE significa EstructuraEnergíaEstiloEquipo. Son las distintas variables de una nave, como toda criatura de la galaxia sabe. El número a la derecha es la capacidad máxima de cada nave para ellas, para el total de ellas, no para cada una ¡ojo cuidao! Por supuesto que podéis cambiarles el nombre, ¡faltaría más!

Teniendo en cuenta que sois 5 4 pues ya veréis... aunque confiarlo todo a una sola carcasa pues no sé... allá vosotros. Algunos ya tenéis experiencia en esto de explotar naves y quedaros con el culo al aire en el páramo absoluto. De todas formas no estáis obligados a formar equipo. Allá vosotros también en ese caso... os aviso ya que por ahí ya hay escuadras bien compenetradas y bien armadas dispuestas a aniquilaros venceros, no sé si me explico... cooperar puede no ser mala idea (guiño, guiño).

Tahïr entra en el hangar y se encuentra con cuatro insurrectos peleándose entre ellos y trasteando las sucias y destartaladas naves que hay aquí. La mugre lo cubre todo, y el óxido, y la mugre sobre el óxido. Tened cuidado con las chapas afiladas y los cables pelados, que al viejo ya le han dado un aviso... por cierto, Tahïr es... mmm... especial... bueno, ya os iréis conociendo todos, que el resto tampoco es que seáis muy normales.

Me encamino hacia el hangar para conocer al equipo. Según me acerco me parece escuchar sonidos de pelea. Entro al hangar con cuidado, asegurándome de que no me he equivocado siguiendo las indicaciones.

El lugar presenta un aspecto lamentable. Esto debe ser un nido de gérmenes...

¡Ay, no... cuidado con esa arista oxidada! - pienso al ver pelear a los sujetos que se suponen forman parte de mi equipo.

Me acerco lentamente al grupo, con una sonrisa inocente y agitando la mano en señal de saludo.

- ¡¡Holiii!! Soy Tahïr, la médico destinada aquí. - alargo la mano sonriente, esperando que alguien la estreche y dejen de discutir.

¿Es que nadie va a estrecharle la mano a esta ashiana? ¡Por el amor de Dûnin! ¡Si ha venido a salvaros el pescuezo y a poneros pomada cuando os hagáis pupita! Madre mía... así esto no va bien ¿eh? ya no queda educación en Duslak... bueno, en verdad nunca la hubo.

Dejo la mano de Tahïr en el aire, a la espera, para hacer un inciso patrocinadoril. ¡Habemus regalo! Un tal flauro (el singular de gafapasta, no el espectro plural) manda un paquete con un vale por un Dado Extra a nuestra amiga Mita. Por su impresionante arranque de violencia desmedida contra el viejoven Rezongos. Al parecer a este holo-espectador le mola ese rollo, el de coger por el gañote a niñas poseídas por viejos. En fin, en esta galaxia cabe de todo. El regalo lo trae un dron que casi se estrella a toda pastilla al entrar en el hangar; lo suelta desde el aire y se pira antes de que a alguno le de por cazarlo. El paquete viene acompañado de una nota:

"Me ha parecido tierno, así que pulgar hacia arriba. Regalo para ella para que pueda enseñarle educación al viejo-vieja... No se merecía que la llamaran babosa."

Suelto a la chica y justo alguien más aparece saludando. Le doy la mano mientras digo -Hola, ¡Qué educación!, cómo se nota que tienes estudios- apunto mirando de reojo a la pareja de Knox y Rezongos – Soy Mita, no sabía que íbamos a necesitar hasta una médico y todo. Esto está bien preparado- digo convencida en lo acertado de mi decisión de intervenir en el holoshow.

Cae en mis manos un paquete con una nota, lo abro rápidamente -¡Qué ilusión!- y mirando hacia todos los lados, busco una cámara o algo -¿A dónde miro? Quiero agradecérselo- sigo sin encontrar dónde dirigirme, así que grito -GRACIAS HOLO-ESPECTADOR-

- Sí, eh, bueno...  ¿ Holo-espectador? o sea... ¿ Pero... nos están viendo?- digo  atusándome apresuradamente los tentáculos craneales para mejorar mi aspecto. 

-Encantada, Mita- digo con una amplia sonrisa.

Miro a los demás esperando a que también se presenten.

Toco mi cuello, todavía algo dolido. Hummm. Que les zurzan. Que nadie me ha preguntado para estar siendo visto. O vista, no se. Me da igual. Gruño con cierto enfado, mirando hacia la nueva que ha entrado, sin saber nada. - ¿No te han dicho nada? A ver, no sabemos qué hacemos aquí. Al menos yo y mi amiga Knox. - Digo, señalando hacia mi propio cuerpo, que tiene la mente de Knox. - Hummssss.... a ver cómo lo explico, no sabemos ni cómo estamos el uno en el cuerpo del otro, ni nada de nada. Vamos, que es como caer por una falla temporal al usar un hipermotor. Que ni pajolera idea de nada.

-Hum. - Digo mirándo a la médico, y acercándome, tendiendo tambien la mano. - Pareces buena... persona. Si. Oye. Yo soy Hub "Rezongos". No te fíes, aunque ese sea mi cuerpo, está en mejores condiciones de lo que parece, Knox no sabe usarlo. - Miro a la mocosa-viejosa, con un tono de ironía- ¡No, no sabes, así que ni una palabra, tablilla!. Grrrrr... Y dejad de hablar a esas cámaras. Jum. ¡Nos quieren muertos para reirse! No, no, a mi no me pillas en esas, Bubú, o Bobó, o como te llames, "Voz Que Mucho Dice Sin Decir Nada". 

Jojo. ¡Qué personajes hemos encontrado! Este par... el traductor se entorpece un poco pero consigue entender que tienen el poder de intercambiar cuerpos. Estos humanos, cajas de sorpresas. El viejo menciona sus nombres y comienza el ritual de presentación tradicional de este planeta, lo he observado desde mi llegada, el primer humano menciona su nombre y luego alguna palabra ofensiva, en este caso "babosa", el otro humano toma del cuello al primero. La cantidad de golpes depende del aguante de cada uno y de la empatía que logren. En este caso termina siendo breve.

Ese humano de barbas, es tremendamente obsevable, la cantidad de detalles en arrugas y pelos, podría mirarlo durante días, creo que lo haré. Pero momento. ¡Mita ha recibido un premio! Giro con saltos y aullidos de celebración. Y además nos han dado un médico, se nota que están en los detalles. Aunque aún estoy un poco nervioso intentaré un saludo tradicional.

- Mi nombre es Benito. Tu hueles a sudor rancio. - y me le quedo mirando muy fijamente.

¡¿Tablilla?! ¡Bah! ¡Que no se enteraba el viejo que no tenía complejos con mis pechitos... ¬¬

En cualquier caso, le miré mal por unos segundos, aunque luego sonreí y miré a la chica de los tentáculos.

—¡Hola~! Yo me llamo Knox.

En realidad, parecía maja... Tenía ojillos de buena persona, y tentáculos suaves y sedosos que inspiraban confianza... Sin embargo, cuando el bichejo de los ojos como platos saludó a la médico y le soltó eso de que olía a sudor rancio...

PFGHHMMFHHHHJJJJJ... ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!

Juro que lo intenté. ¡De verdad! Al principio se me inflaron los mofletes tratando de controlar la risa, pero... tanto aire era difícil almacenar en unos mofletillos flácidos como aquellos, y la garganta no paraba de agitarse pidiendo a gritos que soltara la carcajada. Y... bueno... la intención es lo que cuenta, pero desde el luego el intento de controlarlo fue un auténtico fracaso...

—Ay... ¡qué me muero! —dije, retorciéndome de la risa y secándome con los dedillos las lagrimillas que se me escapaban de los ojichuelos del viejo—. ¡Tranquila! ¡Tampoco hueles tan mal! —luego miré al otro—. ¿De verdad te llamas Benito? Ehm... ¿te puedo llamar Envoltura Testicular? Ejem... ya sabes... creo que es un nombre que inspira más respeto que Benito. Seguro que el resto de participantes se aCOJÓNan en cuanto escuchen tu nuevo nombre... ehm... sí, ya verás... ejem... juju. ¡Serás el terror de la competición! ¡Todos te temerán! ¡Cómo un dolor en los huevos...!

Desde luego, algo de miedo sí que daba... que ni siquiera pestañeaba. Aunque... ¿cómo iba a pestañear si no tenía ni párpados? Ehm...

—¡Bueno! ¡Escuchad, mequetrefes! —exclamé, hinchando el pecho de orgullo—. Tenéis suerte de tenernos al... vejestorio y a mí en vuestro equipo: En primer lugar porque, aunque no lo parezca, ése de ahí es el mejor piloto de toda la Puta Galaxia. No hay nadie que pilote como él, y... os prometo que en sus manos no tenéis que temer a meteros, al primer hipersalto, en un jodido agujero negro que os lleve directo al estómago de un gusano de arena... ejem... ¿verdad qué no, viejo? —le guiñé un ojo—. Y yo, Knox Lightnight, soy la Mejor Mecánica de TODOS LOS TIEMPOS. ¡Pjé! Puedo hacer una aeronave espacial propulsado por Iones de una jodida cafetera.

En definitiva, que... ¡estáis en buenas manos! Pero... estas ascos de naves están tan jodidas como los ojos de Envoltura Testicular en un día de tormenta de arena... Podré reparar algunas de ellas, por eso no os preocupéis... pero deberemos elegir cuál serán las mejores.

En cuanto a eso, yo propongo que nos quedemos con 2 o 3 naves a lo mucho. Una para llevar a casi toda la peña, y dos para reventar a quien quiera ponerse tonto y enseñarles quién manda en este barrio. Así que... diría de quedarnos con: Wasabi, porque es verde y muy molona; Strike porque quiero ponerla de color rosa y lanzar bombitas con forma de besitos; y Max Aka D'Or o Taurusonte porque... ¡JOOOOODER! ¡CÓMO MOLAN!

Sonreí orgullosa de mí misma por hacer tan bien de líder y demostrar con mi grandes dotes de estratega las bases en las que me había basado para elegir las naves que quería.

—Bien, ¿qué me decís? —pregunté finalmente—. ¿Alguien pone alguna pega antes de que empiece a tunearlas?

Fruncí el ceño y les miré algo mal. Quien pusiera una pega, igual le pateaba el trasero... Así que más les valía estarse calladitos....

Mientras realizáis las presentaciones podéis oír de fondo al famoso presentador del show:

- Jajaja ¿Qué os ha parecido eso? Así que "sudor rancio" es una buena presentación para el simpático diablillo. ¡Estos variopintos concursantes son los favoritos del público, pero están de fango hasta el cuello! Aún no tienen armas ni vehículos, y lo que es más grave ¡todavía no tienen nombre para su escuadra! ¿Qué nos propones tú, Rocksteady? ¡Un momento! ¡El "Escuadrón Alfa" acaba de entrar en su sector! ¡Van a toda velocidad y directos a su hangar! Lo siento por nuestros holo-espectadores pero es mejor que vayan despidiéndose de la furia de Mita y de las coletas de Rezongos. ¡Les van a aplastar!

En la pantalla medio cascada pueden apreciarse unas cuantas naves relucientes, surcando el desierto a toda velocidad y dejando tras ellas una larga nube de polvo. Al fondo, recortado sobre el horizonte ¡vuestro hangar! Benito, Mita y Tahïr lo reconocen al instante, que ellos lo han visto por fuera.

Mi saludo tradicional no parece funcionar. Tal vez no fui lo suficientemente ofensivo. No debo desalentarme, lo intentaré cuando tenga otra oportunidad.

El viejo Knox es de lo más animado. En seguida hemos pegado buenas energías.  A cada cosa que dice, afirmo cada vez más entusiasmado. El traductor coge lo de “envoltorio” pero no encuentra un equivalente en mi idioma para “testicular”. Joder. Debe ser algo muy crudo. Y yo envolviéndolo. Voy a explotar de emoción. “¡Todos me temerán!”. Casi repito junto con el viejo. “¡Cómo un dolor en los huevos...!” Lo sabía. Jojo. Muy crudo. Le dolerá incluso a su descendencia no nata. Se nota que conoce el juego.

Mi asombro no para.  ¿La mejor de la galaxia? ¡El mejor de la historia! Que me jodan, no podemos perder. Apenas unos días fuera de mi planeta y estoy en un Holo show con celebridades. – Mita, nos acomodaron con los mejores, estamos de suerte. – Digo jadeando de entusiasmo e ilusión.

Entonces el presentador nos da una nueva buena noticia. ¡Empieza el juego! – ¡A jugar! ¡A jugar! – Corro a pegarme bien cerca de Mita al grito de - ¡No saben con quienes se meten! – Los mejores. Jojo. Qué pasada.

El saludo de Benito me pilla un poco desprevenida.

Pero... si los ashianos no sudamos, o sea... iba a decir cuando el comentario de Knox "tampoco hueles tan mal", hizo que empalideciera. A lo mejor el olfato humano no está hecho para los perfumes de Ashe, o sea... pienso.

No llego a entender lo que me ha contado Rezongos sobre algo de cuerpos cambiados con Knox, pero no me da tiempo ni a preguntar. Vemos en la pantalla unas naves que se acercan a un hangar y el presentador presenta a otro equipo

-  ¡Anda! ¡O sea, que es verdad! ¡Salimos en la tele, qué supermegaguay! - digo dando pequeños saltitos y aplaudiendo- ¿ Y cómo se juega a esto, o sea?- pregunto toda ilusionada a mis compañeros de equipo.

Ya hasta se me ha olvidado indicar a Knox que el término correcto para lo que quería decir era "escroto".