Partida Rol por web

Ya lejos de la ciudad y empezando a montar el pequeño lugar de acampada nuevo, Khasar se sentó en un tronco para escuchar a Zorpex.

Yo también escucharía a esa tal Reynac si está dispuesta a hablar y si al menos es más simpática que estos cretinos de la Villa. No me gusta la idea de que esa especie de conjuro siga afectando a toda la gente de la villa. Quizá si Reynac se muestra receptiva a hablar podamos llegar a algún termino sobre el conjuro. Sobre todo para poder volver a entrar si es que queremos volver a pasar por allí sin arriesgarnos a caer presa de él.

Khasar crujió el cuello mientras bajaba del trono para apoyarse contra él.

Sea como sea, deberíamos descansar, me propongo a hacer la primera guardia de la noche, y si eso avisaros si llegan los guardias de la Villa para entregarnos los víveres.

Una vez estuvieron ya fuera en su campamento improvisado y lejos de los oídos de los guardias, se sentó junto a sus compañeros.

- Son puta basura. -Soltó, por fin, con el ceño visiblemente fruncido. Luego continuó susurrando-. Yo tampoco se si esa escoria humana ocultaba algo más, pero con lo que dijo fue más que suficiente. Encontraremos a la bruja y la ayudaremos a que rompa el hechizo y les pise la cabeza. ¿Para qué quieres enemigos teniendo una guardia así? -Finalizó mientras miraba de reojo hacia la ciudad.

- Creo que estamos de acuerdo- dijo Zeki acomodándose junto a sus compañeros. - Descansemos y mañana vayamos a hablar con esa bruja. No demos por hecho de que la guardia de la ciudad son "los malos" aquí. Cierto es que parecen ocultar algo, pero aún no conocemos a esa Reynac.  Conozcamos su versión sin llevar ideas preconcebidas que nos nublen el juicio.

Mientras preparabais el lugar de descanso la tarde empezaba a llegar. Hacía un poco más de calor que por la mañana y dabais por seguro que si bien por la noche refrescaría un poco, se podría dormir bien si contabais con las suficientes capas de ropa para dormir al raso o si estabais acostumbrados a climas más fríos.

El bosque y la hierba se agitaba de vez en cuando, pero sin llegar a ser molesto. Parecía un lugar bastante tranquilo esta zona de la Península de los Gigantes. A pesar de lo que habíais encontrado en Villa Arroyo, todo parecía transcurrir con normalidad fuera de su urbe.

Zorpex de desperezó tras un merecido descanso. Parecía que no iba a poder dormir nunca, a la vista de los últimos acontecimientos, pero afortunadamente pudo hacerlo, y ya se sentía más recuperado. Además, aprovechó parte del tiempo para repasar su libro de conjuros y prepararse ante futuras eventualidades. También para meditar unos instantes tratando de captar sus habituales presagios.

-Bien, vamos con el sueño cambiado, pero quizá sea beneficioso para nosotros. Normalmente preferiría visitar a Reynac de día, pero hemos visto que suele pasarse por la villa, y puede que no diésemos con ella en su cabaña. Ahora por la noche es posible que contemos con más posibilidades. Yo iría ya para allí. ¿Qué opináis?

No sé si la noche será muy segura en el bosque.. Khasar pensaba eso, miró a Althaea y Zeki para ver que opinaban ellas.

Mientras estaba afilando su hacha con un trozo de sílex, sentado en el suelo y luego soltó una leve risotada.

Aunque qué demonios.. si nos encontramos alguna amenaza acabaremos con ella y listo. bruto.

Le habría gustado mantenerse aunque fuese ligeramente despierta porque viendo todo lo que les ocurrió últimamente no se fiaba un pelo de la tranquilidad aparente. No obstante, el cansancio pudo con ella y se quedó profundamente dormida como si hiciese meses que no pegaba ojo. Por suerte, nada ocurrió, y el descanso le vino de fábula.

Se desperezó y tras frotarse un par de veces la cara, comenzó a cargarse a la espalda el arco, la ballesta y el carcaj.

- Siempre vamos a tener algún riesgo, tanto de noche como de día, así que creo que es mejor ir ya. Zorpex tiene razón, si vamos de día quizás no esté allí. Aunque habrá que tener mil ojos porque seguramente alrededor de su casa tenga bastante protección.

- ¿ Visitar la casa de una bruja en mitad del bosque en plena noche? ¡ Claro! Me apunto ¿Qué puede salir mal?- digo Zeki haciendo gala de su conocido y a veces cansino sarcasmo.

- Deberíamos andar con especial cuidado la acercarnos. No me extrañaría que la bruja tuviera trampas protegiendo los alrededores de su cabaña, ya sean mecánicas o mágicas.

La noche ya era cerrada en el bosque, estáis en vuestro campamento. La naturaleza es exuberante a vuestro alrededor, estáis rodeados de árboles y de hierba y tierra bajo vuestros pies. La última vez que Zorpex logró atisbar a Reynac fue en una zona cercana a esta, pero parece que vais a tener que idear alguna manera de encontrar su cabaña.

Ya tomada la decisión, ahora quedaba lo más difícil, encontrar la cabaña. Zorpex no era muy ducho siguiendo rastros, pero había pasado tanto tiempo en la naturaleza con la compañía mercenaria que conocía algunos trucos. Intentó buscar señales por los alrededores. Quizá una senda marcada por el tránsito habitual, huellas u otros rastros.

Althaea no tenía ni idea de magia ni sus cosas, pero intuía que la gente con dotes de ese estilo podría olerla en el ambiente, o algo por el estilo, igual que ella podía oler un buen botín a cierta distancia. No era lo mismo, ¿pero por qué no intentarlo?

Intentó reconocer la energía del ambiente que le rodeaba y notar si había algo que no cuadraba con ella.

Khasar hizo a la par de Zorpex y se puso a buscar rastros, marcas de paso o alguna evidencia de lo que pudiera ser alguien que hubiera pasado por allí, tocaba la tierra, los árboles.

No obstante todo ese rito de búsqueda le estaba quedando muy bonito pero poco fructuoso, incluso levantando una roca y mirando debajo de la misma.

Mientras los demás buscaban por el suelo, Zeki por su parte subió a un árbol. Pretendía, si bien la cabaña de la bruja no era visible desde allí, al menos buscaba claros entre los árboles en los que pudiera ubicarse.

Vuestra visión en la oscuridad os permite moveros por el bosque sin mucha dificultad. Las ramas del camino son comunes, además de las nudosas raíces de los árboles que en muchos casos sobresalen de la tierra. Todos os ponéis a buscar pistas en el último lugar donde Zorpex vio a la bruja, intentando encontrar un rastro que os lleve a su cabaña. Si bien todos ponéis de vuestra parte, ya sea buscando el rastro por el suelo o subiéndoos a un árbol como Zeki, son unas cuantas ramas rotas por pisadas lo que encuentra Zorpex lo que posiblemente os lleve tras Reynac.

Por su parte, Zeki se sube al árbol con facilidad. El bosque es espeso y los árboles tienen ramas en abundancia y gruesas para que cualquiera pueda subir con facilidad. Sin embargo, es imposible atisbar algo desde ahí. No parece haber ni hogueras ni gente pasando la noche en el bosque.

-Aquí. Estas ramas rotas...-dijo el gnomo.

Señaló lo que parecía un rastro. Podía ser de cualquiera, desde cazadores hasta lugareños u otros habitantes menos amables que morasen en el bosque. Sea como fuere, había que exprimir cualquier pista, de manera que el mago intentó seguir aquel indicio hasta donde le llevase.

Khasar se acercó a Zorpex y miró las ramas que encontró su compañero.

- Bien, sigamos entonces ese rastro, sea a donde sea que nos lleve, será mejor que ir dando palos de ciego por el bosque.

Khasar llevaba su arma fuera por si las cosas pudieran complicarse en cualquier momento, depredadores nocturnos o incluso algo peor que rondase el territorio de la bruja, nunca se sabe.

Por su parte no fue capaz de ver nada que apuntase a la bruja, pero Zorpex parecía tener la clave. No le sorprendió, sabía que al gnomo se le daban bien los asuntos de la magia y estaba segura que o él o Zeki darían con la clave. Le siguió.

Ella también echó la mano a la daga por si acaso se topaban algo. No tanto por la bruja, pues creía que irle con las armas ya mostradas no iba a ayudar a hablar con ella, si no por el resto de cosas que pudiesen encontrarse por el camino.

- Te seguimos- añadió Zeki bajando del árbol.