Partida Rol por web

-Vieron la armadura ahi? +pregunta con seriedad+ Si ese es el caso, adelante, sino, sigamos. Ya mas tarde habra tiempo de saquear tumbas... primero esta la mision. 

Bardryn mira a su hermano con el ceño fruncido, sin terminar de dar por pérdida los tesoros de aquella sala, aunque entiende que la elfa tiene parte de razón en sus palabras.

- Vayamos hermanito, a la vuelta podemos sacar ese oro, muertos no nos sirve de nada, vayamos a buscar al resto.-

Amane asiente a la enana y ordena al grupo.

-Enano, tu al frente. +dice, mirando a Ghalnek.+ Te sigo. Hantal con la luz, junto a mi y Bardryn, detras. No me gusta nada este retraso...+masculla, mirando hacia el pasillo por donde desaparecieran los elfos.

- Esta bien - dice el mago, intentaré alcanzarlo, seguidamente mete el brazo entre los barrotes he intenta alcanzar los trozos de metal.

Los huesos estan muy lejos para alcanzarlos a mano, de ahi que Gunaz intentara mejor abrir con la espada... La maga examina la segunda celda, con expresion seria, y el semielfo, aun aturdido por no tener su espada, la ultima. 

Tantean las celdas, la reja segunda es firme, pero la tercera se abre en silencio, al ligero empuje del espadachin... Una nube de oscuridad estalla en torno a vosotros, cegandolos por completo!

Thzed no podía alcanzar con las manos, lo intentaba cuando de repente un crujir de una cerradura le sobresaltó, Gunaz había conseguido abrir la cerradura de la celda pero en ese instante una oscuridad envolvió todo el lugar - Gunaz, chicos estais bien?? - preguntó este mientras estiraba los brazos intentando no tropezar con nada.

-Agh! Algo me mordio! +se escucha la voz de Gunaz, desde el otro extremo de la habitacion.+ Pueden iluminar esto?! Sino volvamos a la puerta! 

-No, solo me quedan conjuros de combate!+exclama la maga, cuya voz suena mas cercana+ Retrocedamos!

- Yo tampoco tengo ningun conjuro para iluminar, creo que deberiamos salir de aquí, ya!! - responde el mago a las voces de sus compañeros.

Poco a poco, van retrocediendo en la oscuridad. Tocas el brazo suave de lo que parece ser Nevia, en unos segundos, aunque resultaria imposible decirlo con certeza. Todavia no ves nada...

En esos momentos, se escucha un segundo gemido de Gunaz.

-Chicos, hay algo aqui! Me....

Sus palabas se interrumpen, mientras suena como un acero que cae en el suelo de piedra.

-GUNAZ!!

El grito resuena en los pasillos, alcanzando tambien a los enanos y el resto...

Al tocar un brazo suave - Tu quien eres? - pregunta mientras las palabras de Gunaz interrumpe y se cortan como si algo le hubiera ocurrido. - Gunaz!!!!! estas bien?, responde. - El nerviosismo se estaba apoderando del mago que llama a Gunaz incansablemente. he intenta orientarse y separase un pocco de la oscuridad.

Y ahora seguro que le gusta menos.

Desduzco tras escuchar el grito, aunque las palabras no llegan a salir por la ausencia de tiempo que perder en ellas.

¡Seguro que se ha topado con otra trampa!

Se oye venir por el pasillo el estruendo de los enanos corriendo en sus armaduras. Amane va ligeramente adelante, gracias a sus largas piernas, con los labios apretados... Hantal al fondo, sujeta la antorcha con una mano y su simbolo sagrado en la otra...

Al doblar el recodo, se topan con un obstaculo imprevisto. La habitacion delante esta sumergida en una oscuridad total! Ni siquiera la vision de los enanos parece atravesarla, señal que es magica. Desde la misma oscuridad, se oyen las voces de Tze y Nevia.

La maga elfa exclama:

-Soy yo idiota!. Tenemos que buscar a Gunaz! El estaba  mi derecha!

-Nevia! +exclama la rubia, deteniendose casi donde empieza la negrura+ Salgan de ahi.!

Mira detras levemente, al par de enanos.

-Pueden ver en esta oscuridad?

- Ahh eres tu!!! - responde el mago - Vaya con el genio de la señorita - pensaba al escuchar las palabras de Nevia. No podía ver absolutamente nada, la oscuridad era total - Gunaz puedes oirnos? -