Partida Rol por web

Jotnar examinó los aguacates cuando Bac'cai comentó que eran una bendición de Isis. La carcasa era rígida y la carne de la fruta era suave y blanda. Se desgajó por la mitad en cuanto presionó un poco y en su interior descubrió el hueso, una esfera perfecta de color marrón. Unas leves hendiduras en la superficie le dieron la sensación al enano de que era un rostro, y en cuanto esas hendiduras se movieron, parpadearon hasta convertirse en dos enormes ojos felinos.

Lurzca escuchó atentamente las historias que aquel enorme ser de cuerpo perfecto y rostro canino, tenía que contarles, aunque realmente estuvo más atenta a lo formidable de aquel ser retornado de entre los muertos que a lo que iba explicando. Al fin y al cabo Lurzca nunca entendía del todo lo que sucedía entorno a ellos. Lo cual no era impedimento realmente para que pudiera llevar a cabo su labor dentro del grupo, que no era otra que la de abrirse paso entre enemigos a hachazos.

Lo que tampoco contribuyó a que la concentración de la mestiza fuera efectiva, fue el hecho que del aguacate que habían encontrado entre las ofrendas que los fieles dedicaban a sus deidades, saliera lo que parecía ser un hueso con forma felina y unos ojos tan negros como expresivos. ¿Otro nuevo vegeta consciente se uniría al séquito de Jotnar? Muy posiblemente así sería, pues Cebollito y Cocotilio se hacían querer y posiblemente aceptarían a aquel "gatocuate", como su mascota.

- Lo único que tengo claro Bac'cai, es que las serpientes son el mal y que debemos combatirlas. - Intervino la semiorca. - El tiempo apremia. El templo tiembla. Debemos darnos prisa. - Dijo tan seria como acostumbraba a estar siempre. - ¿Nos ayudarás a derrotar a las serpientes? - Le preguntó. - ¿Dónde pueden estar? Ésto es enorme.

—¡Bigotes de Bastet!—exclamó Jotnar cuando de pronto los aguacates cobraron vida, manoteándolos un par de veces entre las manos por el sobresalto como si quemasen o algo así. No obstante, miró enseguida a sus amigos—. ¿Qué? Esto tiene que ser cosa de Bastet; están ronroneando.

Alzó uno de ellos como quien presenta al cachorro del rey felino.

—Mira, Cocotilio ¡Son aguacatos!

El coquito berserker, que se encontraba encima de su cabeza, saludó con la mano a la otra fruta sentiente. Cebollito por su parte se puso a dar saltitos alegres en el suelo. 

En Mulhorand los gatos eran muy queridos, pero para Jotnar un gato que además era una planta ya no es que fuera querido, es que era el epítome de la perfección.

—Hola, chiquitines. Venid conmigo, os sacaré de este sitio oscuro y tenebroso—dijo con el tono edulcorado con el que se le habla a un cachorrito adorable. Luego agarró la pequeña bolsa que en su día había encontrado dentro de la pirámide de Akenseti y los colocó dentro para que estuvieran a salvo. Fue sólo después de eso cuando prestó atención al resto del universo—. ¿Por dónde íbamos? ¡Ah, sí! todo el ominoso asunto este de evitar la ascensión del dios-cocodrilo malvado.

Carraspeó. 

—Pues... no me suena que nadie haya ascendido a dios últimamente, no. Aunque ahora que lo mencionas, sí que hay algunos objetos mágicos por aquí que seguramente fueran ofrendas, pero no tenemos ni idea de qué hacen. Salvo que esa lanza tuya es mortal contra yuan-ti y el disco tiene poder para ascender a alguien a dios. Así que tendrá que valer con los aquí presentes para patearles el trasero a esos adoradores de culebras.

—Ha sido un placer ayudaros, campeón de Anubis.

Nepthis descartó la idea de arrodillarse y se contentó con hacerle una reverencia a Bac'cai, con más dolor que dignidad. Tras hacerlo miró hacia atrás, por encima del hombro, para asegurarse de que al menos su hermana tuviera la decencia de mostrar el debido respeto.

—Hemos encontrado otra ofrenda —asintió la Madre Reverenda cuando pudo recuperar el aliento—, una serpiente de Set. La destruimos, por precaución.

Evitó hacer ningún comentario que luego pudiera lamentar sobre el creciente ejército de vegetales sintientes que Jotnar estaba empezando a acumular.

—Llevadnos a la victoria contra las serpientes, Bac'cai, campeón de Anubis —exhortó la sacerdotisa.

Los maullidos de los aguacatos acompañaron a los aventureros durante un rato. Los mininos con forma de hueso de aguacate parecían encantados de haber sido liberados de su pequeña prisión frutal.

Bac'cai miró las ofrendas y luego al grupo.

-Dejad que haga memoria, aunque no estoy seguro de para qué sirven todos ellos.

Tras una inspección, el campeón de Anubis volvió a ofrecerles los objetos.

-Mi lanza absorbe la esencia de los yuanti y me hace más fuerte. Pero está descargada -comentó dándole un golpe a la hoja-. Tendré que recargarla con esos miserables que han profanado este lugar sagrado. Este disco sirvió en su día para Ascender a los mortales elegidos por los dioses. ¿Ya no se hace eso? Muchas cosas han cambiado. Cuando Set quiso ascender a sus seguidores, todo se descontroló, Osiris fue asesinado y devuelto a la vida; pero mi señor Anubis no. No importa, tenemos que impedir que utilicen el altar de Acensión. Es posible que hayan encontrado alguno de los discos. Debemos detenerles.

Bac'cai identifica el Khopesh +1 Absorbearena: a una mano, 1d8, cortante, crítico 18-20. Propiedades: puedes hacer un ataque extra con esta espada tras un ataque completo. Con un 18-20, independientemente de si confirmas crítico o no, la espada absorbe la humedad del objetivo atacado, provocándole el estado exhausto.

Bac'cai identifica la capucha Corona del Rey Serpiente: mientras lleves puesta la corona, todas las serpientes mundanas o mágicas con VD 1 o inferior te ignorarán a menos que las ataques.

Mientras discutían la estrategia, Amessis cotilleó la corona con cabeza de serpiente.

-Yo creo que esto nos puede ser de utilidad, si entramos en una sala llena de serpientes, nos va a costar abrirnos paso sin llevarnos un mordisco...

Nepthis no dijo nada al respecto, de modo que la nigromante se la colocó sobre la cabeza. Le quedaba bien.

-¿A que sse me ve bien? -se llevó una mano a la boca-. ¿Pero qué passa? Oh, por Ossiriss.

La Corona del Rey Serpiente está maldita. Quitar la corona no acaba con la maldición, es necesario un conjuro de quitar maldición. Mientras la lleves puesta, el habla de la persona maldita tendrá un ligero siseo.

Amessis desbloquea un nuevo logro: recibe una maldición en este capítulo.

Bac'cai imitó una sonrisa al ver la maldición de Amessis.

-Lo siento. Seguro que ella puede ayudarte una vez acabemos con todas esas sucias serpientes -señaló a Nepthis y después le respondió negando con la cabeza-. Era una ofrenda maldita de Set, una parte de su esencia había sido encerrada en su interior. Si lo habéis destruido, parte de él se habrá liberado y estará buscando un portador. Habéis tenido suerte de que no tomara posesión de ninguno de vosotros. Aunque si tú, Amessis, le rechazaste una vez, probablemente esté buscando el Altar de Ascensión. Seguidme, os llevaré hasta allí.

El enorme campeón atravesó la habitación y corrió por los estrechos pasillos del complejo, que seguía temblando y sacudiéndose, y llenándose de arena. La Compañía, Salihah y Nebakay lo siguieron a duras penas, las grandes zancadas de Bac'cai lo hacían recorrer más distancia que las cortas piernas de los demás, que además iban cargados con pesadas armaduras.

Casi sin resuello, el grupo fue guiado por Bac'cai hacia la zona este del complejo, por uno de esos pasillos que no habían investigado todavía. Llegaron una sala de grandes dimensiones completamente vacía, llena de grietas, montañas de arena y agujeros en el suelo. El campeón de Anubis se dirigió al centro para después pedir que se colocaran cerca de él. Pronunció unas palabras y el disco solar de su colgante comenzó a brillar, un círculo dibujado en el suelo refulgió con un característico color verdegrís que recordaba mucho al color que tenían los conjuros de Amessis, y durante un instante todos se preguntaron si no habían sido engañados. 

Fueron transportados a otro lugar en un abrir y cerrar de ojos.

Sin embargo, la magia del disco los había protegido de aquel cambio de plano y no se sintieron mareados o desorientados. Pero entendieron que no estaban en Mulhorand, a pesar de que la habitación era la misma. Sin embargo, no había sufrido el paso del tiempo, no había grietas y sus columnas estaban en perfecto estado, así como los murales que representaban a los antiguos dioses y las ofrendas de los mortales. Luces de color verde y gris flotaban en el aire, llenando el ambiente con una sensación tenebrosa y opresiva, como de otro mundo. No debía ser ese el color original del Altar de Ascesión, como tampoco debían estar todas las esculturas de Set colocadas entre cada columna, grandes cabezas de serpiente. Grupos de reptilianos y cocodrilos rodeaban los bustos, adorándolos, mientras al fondo, frente una gran estatua descabezada de Anubis, sustituida por una enorme serpiente gigante, tenía lugar un ritual.

El suelo estaba completante cubierto de serpientes, pero formaron un espacio alrededor de Amessis.

-Puess parece que ssi funciona -comentó la nigromante con un siseo-. Ssiento a Sset aquí dentro -dijo con aflicción llevándose una mano la cabeza-. Creo que essstamosss en ssu plano. Veo muchosss esspirituss, me gritan y me piden ayuda, quieren sssalir de aquí. Han sssido sssacrificadoss... Esssstan atrapadosss...

-No estamos en el plano de Set -aseguró Bac'cai, enarbolando la lanza-. Este demiplano está profanado, los seguidores de Set hacen que el dios sea más fuerte aquí. Vamos, hay que detener el ritual.

En cuanto los yuanti y los cocodrilos se dieron cuenta de la presencia de la compañía, se abalanzaron sobre ellos. El campeón de Anubis se envolvió en una tormenta de arena y creció de tamaño, mientras alzaba su lanza y comenzaba a despejar oleadas de reptilianos.

-¡Al altar! Yo me encargo de ellos. Detened la Ascensión.

El grupo congregado frente al altar estaba en pleno ritual. Allí se había congregado lo mejor de Mulhorand, seguidores de Set y de Sebek. Un enorme cocodrilo humanoide se dio cuenta de que la Compañía se aproximaba e hizo avanzar a un pequeño grupo de reptilianos armados con cimitarras, las mismas criaturas a las que se habían enfrentado antes. Al otro lado había un hombre serpiente gigantecto, musculoso y abominable, armado con una khopesh. Frente a la estatua había un hombre de ropajes oscuros, pero desde la distancia ninguno podía verle bien el rostro por culpa del turbante.

Tenéis un turno de preparación antes de la acción. Tirad iniciativas. Nepthis ha lanzado fuerza de toro sobre Jotnar. El Bendecir está siempre activo. El círculo de protección de Lurzca está activo. Nebakay lanza otro círculo de protección contra el mal sobre Jotnar. Nebakay se equipa con el Khopesh +1.

(x) Yuan-ti 15J- ileso
(x) Yuan-ti 14J- ileso
(x) Yuan-ti 16K- ileso
(x) Yuanti Abominable - ileso
(x) Primo de Sebek - ileso
(x) Serpiente Horrible - ilesa
(x) Ahmoud El Oscuro, futuro Ascendido de Set - ileso
(x) Bac'cai, campeón de Anubis - ileso
(x) Amessis - 35/35 (convicción +3, bendecir +1)
(x) Nepthis - 40/40 (convicción +3, bendecir +1)
(x) Jotnar - 64/64 Daño aplazado 0/10 (convicción +3, bendecir +1, Fuerza de toro, círculo de protección contra el mal)
(x) Cocotilio - 29/29 (convicción +3, bendecir +1)
(x) Cebollito - 21/21 (convicción +3, bendecir +1)
(x) Lurzca - 67/67 (convicción +3, círculo de protección contra el mal +2, bendecir +1, Fuerza de toro)
(x) Nebakay - 53/53 (bendecir +1)
(x) Salihah - 42/42 (bendecir +1)

—No sé cuántas veces te he dicho que no andes toqueteando cualquier cosa que te encuentras en una tumba antigua, Amessis —amonestó Nepthis a la guía de ánimas.

Rezó una plegaria a Hathor para hacer a Jotnar más fuerte y echó a correr detrás de Bac'cai. Pese a que ella llevaba una armadura ligera que no dificultaba el movimiento, seguía a duras penas a los demás debido a su ataque de lumbago. Cuando llegaron al sanctasanctórum del complejo, el corazón se le iba a salir de la boca.

—¡Madre dedicada, auxílianos en esta hora tan oscura! —alzó la voz entre jadeos la sacerdotisa de Hathor por encima del siseo de las serpientes y el murmullo de la letanía de los cultistas—. Deja que mi corazón sea tu luz. Entrega a través de mí tus bendiciones. Proporciona curación al herido, salud al enfermo, protección al que está en peligro. ¡Socorre a los siervos fieles de Mulhorand para que podamos desterrar del paraíso a las serpientes!

Uno a uno, Nepthis comenzó a tejer velos defensivos en torno a sus amigos.

Nepthis comienza el combate en U22. Iniciativa: 14.

En el asalto de preparación, Nepthis lanza Escudo de la fe (+3 desvío a la CA durante 6 minutos) sobre Bac'cai como acción estándar y se mueve a Q18 como acción de movimiento. Gasta 3 expulsiones para activar Devoción por la protección (+3 sagrado a la CA en un radio de 30’ a su alrededor, 10 asaltos) como acción inmediata. Como acción gratuita activa Dominio: Familia (+4 esquiva a la CA a dos aliados que estén a 10’ de Nepthis 6 asaltos).

Lurzca frunció el ceño, pero no dijo nada. Estaban rodeados por un gran número de sabandijas, algunos más grandes que otros y entre ellos, un humano. ¿Sería el prometido de la hermana de Nepthis? Sin duda tenía muchos números. 

Fue en ese momento cuando la mestiza agarró el amuleto que pendía de su cuello desde hacía bastante  tiempo. En éste estaba tallada una silueta en forma de avispa. La acarició unos momentos y entonces asintió. 

- Es el momento... - Murmuró. - ¡Bzzzz! - Emitió un molesto zumbido y entonces una enorme avispa apareció del interior del amuleto dispuesta a servir a la semiorca.

Convoco avispa gigante de mi amuleto. Dura 1 minuto. La descripción de sus rasgos están en notas. 

Empiezo en P18.

Avispa gigante en Q-P-18-19, volando por encima de Nepthis y Lurzca.

—¡Hola, Ahmoud!—saludó Jotnar jovialmente—. ¿Has venido a venderle alfombras a las serpientes también? Nosotros hemos venido a partirte la cara. Podemos partirte la cara ya, ¿no?

Por supuesto Jotnar no podía verle el rostro a aquel tipo, pero había dicho eso únicamente porque tanto él como Nepthis habían desconfiado de él desde el principio. ¿Y si no era Ahmoud? Daba igual. De espaldas y con túnica era clavadito a Ahmoud de espaldas y con túnica, así que era totalmente entendible si se confundía. 

Pura lógica.

Sin embargo, el gesto en la cara del enano cambió instantáneamente a un ceño fruncido, y su tono se volvió mucho más serio.

—Volved a la bolsa—les dijo a Cocotilio y a Cebollito—. Luego os lo compenso.

Por supuesto, el caballero cebolla hizo un gesto marcial de "a la orden" ante la petición de su señor, pero el coquito berserker quería sangre, así que sólo la promesa de compensación pudo aplacar su temible furia. Ambos corrieron a refugiarse en la bolsa mágica de semillas junto a los aguacatos.

Jotnar por su parte se colocó en la vanguardia mientras los clérigos del grupo conjuraban sus bendiciones y quiso secundar a Nepthis, pero como lo que había dicho era muy largo y no se iba a acordar de todo sin liarla, resumió:

—¡Lo que ella ha dicho!

Luego esgrimió el hacha.

Postura: Destello de la Guardia de Hierro
Daño aplazado: 0/10

Jotnar está en P17, defensa total.

Cocotilio y Cebollito se refugian en la bolsa mágica de semillas.

El aludido se dio la vuelta, porque puede que fuese Ahmoud, o porque simplemente habían pegado cuatro gritos para llamar la atención. Vestía túnica oscura, y desprendía un aura tenebrosa muy parecida a la de Amessis.

-Finalmente habéis llegado, mis invitados -comentó con una sonrisa y los modales que recordaban, sin duda alguna, a Ahmoud-. ¡Presenciad el ascenso de un dios!

(27) Lurzca - 67/67 (convicción +3, círculo de protección contra el mal +2, bendecir +1, Fuerza de toro) TU TURNO
(27) Avispa terrible - 32/32 (círculo de protección contra el mal +2, bendecir +1) TU TURNO
(20) Primo de Sebek - ileso
(19) Bac'cai, campeón de Anubis - ileso (bendecir +1, escudo de la fe +3)
(17) Yuan-ti 15J- ileso
(17) Yuan-ti 14J- ileso
(17) Yuan-ti 16K- ileso
(16) Serpiente Horrible - ilesa
(16) Ahmoud El Oscuro, futuro Ascendido de Set - ileso
(16) Yuanti Abominable - ileso
(15) Nebakay - 53/53 (bendecir +1)
(14) Nepthis - 40/40 (convicción +3, bendecir +1, devoción por la protección +3, dominio familia +4 CA)
(9) Salihah - 42/42 (bendecir +1)
(3) Amessis - 35/35 (convicción +3, bendecir +1)
(2) Jotnar - 64/64 Daño aplazado 0/10 (convicción +3, bendecir +1, Fuerza de toro, círculo de protección contra el mal, defensa total, destello de la guardia de hierro)

-Tú no eres Ahmoud -exclamó Salihah con vehemencia, señalándole con la maza-. No sé qué habrás hecho con él, pero desde luego, no puedes serlo. Por Hathor que resolveremos esto por la malas y limparé su nombre después de machacar tu impío cráneo.

La mestiza vio claro que tenía que defender el flanco. Por ello avanzó hacia aquella criatura ofídica con determinación y agarrando su gran hacha con firmeza y furia. Una furia que invadió su cuerpo haciendo que sus músculos crecieran todavía más y que las venas que discurrían por sus brazos se marcasen hasta el punto que parecían a punto de estallar.

Cuando la semiorca se encontró a unos diez pies de distancia de su enemigo, desapareció para volver a aparecer junto a la criatura y en ese momento descargó un fuerte hachazo contra la enorme serpiente bípeda. 

Mientras tanto, la avispa voló sobre las cabezas de un sinfín de enemigos para situarse sobre Ahmoud y trató de aguijonearle sin demasiado éxito. No obstante, allí estaría ella para molestar en todo lo posible a quien sin duda se presuponía un lanzador de conjuros.

Lurza mueve a K20 y ataca. 19 y 30 de daño si entra.

La avispa mueve a H-I-13-14 (5' por encima de la cabeza de Ahmoud) y ataca a Ahmoud. 11 y supongo que falla.

Ataques: +16/+11 1D12+13 (Crítico: x3)

CA: 20 (22 malignos) PG: 79

TS Fortaleza: +11 
TS Reflejos: +9 
TS Voluntad: +11

Asaltos restantes de furia: 5

Cargas tobillera: 0/2

Avispa turnos restantes: 8/10

Lurzca corrió hacia la enorme criatura mitad humano, mitad serpiente, con el hacha por encima de la cabeza. Tenía un cuerpo grueso y ancho, la cabeza con la forma de una cobra, colmillos afilados y lengua bífida. Los brazos eran anchos como troncos de palmera y la parte inferior de su cuerpo era una larguísima cola de serpiente. También tenía una khopesh que levantó para evitar el golpe de la semiorco, pero la curva le permitió golpear con el filo el brazo de Lurzca justo cuando ella le incrustaba el hacha en el torso.  Recibió el impacto de la semiorco con un siseo molesto.

-Vivo para dar muerte -exclamó entonces el siervo de Sebek sosteniendo con fuerza el símbolo de su dios que colgaba de su cuello, una diminuta cabeza de cocodrilo con cuernos.

Los gruesos brazos del cocodrilo con forma humanoide crecieron en tamaño y se volvió aún más peligroso cuando avanzó hacia el flanco de la Compañía. Enarboló un hacha de extraña manufactura. Los yuan-ti se prestaron a avanzar con el cocodrilo cuando vieron a la avispa gigante sobrevolar hacia ellos y agitar el agijón sobre Ahmoud. Se giraron hacia la criatura para defender al entunicado siervo de Set.

Entretanto, la serpiente gigante que había tomado posesión de la estatua, se escurrió hacia abajo y se abalanzó sobre la avispa, agarrándola entre sus enormes fauces, dispuesta a tragársela. Sin embargo, Ahmoud levantó la mano hacia el torso de la avispa y al tocarla, consumió su fuerza vital hasta que la criatura dejó de moverse.

El yuanti gigante enarboló el khopesh contra la semiorco y le abrió tajo en el otro brazo, tremendamente doloroso.

El Yuanti Abominable ataca a Lurzca, impacta 1 vez, 12 de daño. 

El cocodrilo de Sebek se lanza Fuerza de toro y avanza hacia Nebakay.

Los yuan-ti pura sangre focusean a la avispa, todos impactan, uno casi confirma un crítico. 10 de daño entre todos.

La Serpiente Horrible desciende por la estatua y mueve hasta ponerse al alcance de la avispa (10'), y ataca. Impacto, 20 de daño + veneno, no entra.

Ahmoud ataca a la avispa con charnel touch, crítico confirmado, la mata.

El clérigo de Isis corrió a encontrarse con el de Sebek enarbolando la khopesh, el filo desprendió una nube de arena y abrió un feo tajo contra las fauces del cocodrilo.

Nebakay mueve y ataca a Sebek, por poco no activa la magia del khopesh, 8 de daño.

Bac'cai comenzó a agitar su hacha y a segar cabezas de yuan-ti, alejando de sí todas aquellas abominaciones.

-¡Enseguida acabo con esto! -avisó a los aventureros.

Ignorad mucho los números que me he hecho lío.

Bac'cai reparte estopa con Gran Hendedura. Deja a los enemigos a -2 y 0 con su primer ataque. Con el segundo, deja a otros a -4,-5,-2, 0. Ataca una segunda vez al que está a 0 para sumar 1d6 al daño en los suguientes ataques. Con el tercer ataque falla.

Uno de los yuan-ti mueve y Bac'cai le hace lasthit con un AdO. Ahora sumará 2d6 a su daño. El que está a 0 mueve y muere. El resto atacan a Bac'cai con más moral que maña.

(27) Lurzca - 67/79 (convicción +3, círculo de protección contra el mal +2, bendecir +1, Fuerza de toro)
(27) Avispa terrible - -4/32 (círculo de protección contra el mal +2, bendecir +1)
(20) Primo de Sebek - 8 pg (fuerza de toro)
(19) Bac'cai, campeón de Anubis - ileso (bendecir +1, escudo de la fe +3)
(17) Yuan-ti 15J- ileso
(17) Yuan-ti 14J- ileso
(17) Yuan-ti 15I - ileso
(16) Serpiente Horrible - ilesa
(16) Ahmoud El Oscuro, futuro Ascendido de Set - ileso
(16) Yuanti Abominable - 30 pg
(15) Nebakay - 53/53 (bendecir +1, fuerza de toro)
(14) Nepthis - 40/40 (convicción +3, bendecir +1, devoción por la protección +3, dominio familia +4 CA) TU TURNO
(9) Salihah - 42/42 (bendecir +1)
(3) Amessis - 35/35 (convicción +3, bendecir +1)
(2) Jotnar - 64/64 Daño aplazado 0/10 (convicción +3, bendecir +1, Fuerza de toro, círculo de protección contra el mal, defensa total, destello de la guardia de hierro)

—¡Jotnar! —dijo Nepthis y señaló hacia delante—. ¡A por ese hombre que mi hermana dice que no es Ahmoud!

Nepthis retrasa hasta después de Jotnar.