Partida Rol por web

Asdrom es un imperio sin piedad que conquista y arrasa cuanto se le antepone en el camino.

Los pueblos del norte son para el imperio una amenaza que trata de frenar, son barbaros incibilizadados que ocupan tierras que podrian usar para pastos sus animales. ¿Porque no exterminarlos? Los hombres son duros para las minas, las mujeres son apreciadas por su belleza y esa vena salvaje que atrae a mas de un noble.

El imperio esta enriqueciendose arrasando aldeas y vendiendo a sus gentes a los mercaderes de exclavos. Solo los ancianos, que son pasados a cuchillo, se libran de la exclavitud.

Por desgracia tu aldea fue la ultima que tomaron, mil hombres cayeron armados durante la noche sobre una aldea de cien personas. Luchasteis como fieras y os llevasteis a muchos por delante pero no fue suficiente.

Los hombres fueron metidos en jaulas como animales, destinados a las minas del imperio, los niños en otras, mandados a dios sabe donde. Las mujeres mas hermosas separadas para el mercado de exclavas, las mas viejas o feas fueron el divertimento de los soldados hasta su muerte....

Era una pesadilla, la peor de ellas... Mi pueblo había ardido y mi familia muerto, a mi me habían dejado con vida porque me consideraban muy bella y eso solo podía termina en ser una esclava que utilizara algún noble baboso... Estaba apunto de casarme, a falta de un mes de mi boda... Pero ahora mi prometido también había sido secuestrado para ser llevado a las minas...

Ahora estaba en una celda esperando ser comprada, esperando ver que mal nacido terminaba pagando por mi y rogando porque fuera una mujer que quisiera empleadas para su hogar...

Los soldados que te habian capturado hablaban un idioma extraño pero pasaste dias suficientes para entender algunas palabras. Uno de ellos os daba agua de tanto en cuanto pero la comida era un bien escaso, por como hablaban pensaste que querian que adelgazarais un poco para ser mas del gusto imperial y al perder fuerzas, mas dominables para los nobles.

Llegando a una frontera aparecieron otros hombres, mas gordos.. comerciantes y comenzaron una puja por cada una de vosotras. Tratandoos como animales, contandoos los dientes y palpando vuestra anatomia para hacerse una idea de la calidad del producto.

Entendiste palabras sueltas

Ella.... buena... fuerte... trabaja...

No era mucho pero por alguna razon se reian a carcajadas.

Una por una os obligaron a tumbaros y abrir las piernas para comprobar cual era virgen aun.

Las mas pequeñas de vosotras se separaron y vendieron caras, despues, las que seguian virgenes eran pagadas aun mejor. El resto fue a manos de los mercaderes mas asquerosos. Por lo que entendiste, para burdeles. Mientras al resto os diseminaron en grupos en direccion a todos los rincones del imperio.

A cada hombre que aparecía me daba la impresión de que era mas asqueroso que el anterior, cada vez que me tocaban apretaba los dientes casi haciéndose sangrar las encías, y mas de un golpe llego a mi...

Cuando me separaron de mi grupo por aun conservar mi virginidad no sabia si dar las gracias o no, hacia mucho que tenia fantasías y apunto estuve de perderla en varias ocasiones pero... Al final... Decidí esperar al que iba a ser mi marido saciando me a mi misma... Y... No me valió para nada..

Pasaron meses de viaje penoso, largo, frio...escuchando las voces de aquellos hombres que cada vez entendias mas. Os trataban como animales, aunque se cuidaban de no dejaros marcas si tenian que corregiros con una bofetada.

Algunas enfermaron por el frio y la falta de comida... Esas pobres eran aprovechadas ya que no podian venderse asi. Amigas tuyas, conocidas... las que no se perdieron por su mano comenzaron a venderlas en mercados de exclavos.

- Reservada para el palacio.- dijo un hombre cuando alguien se interesaba por ti, dejandote en ultimo lugar..hasta quedarte sola.

A veces pensaba que no llegaría a soportar eso, que no podría asumir todo aquello y mi cuerpo también terminaría rindiendo se pero finalmente todo fue mejor de lo esperado y... Sobreviví.

Cuando ya quedamos las ultimas para ser vendida repetían una frase que no entendía muy bien... ¿Porque no me vendían a mi? ¿Estaría defectuosa para ellos? ¿Entonces que iban hacer conmigo?

Nadie te decia nada, solo te trasladaban de un lado a otro dentro de una jaula.

En tus sueños extrañabas a tu prometido y te preguntabas que le habrian hecho. Te protegio hasta que fue humanamente imposible hacer, tuvieron que herirlo para separarle de ti y se lo llevaron vivo. Le viste en la jaula que los separaba de vosotras...

Mis sueños me atormentaban, Barem salía en todos ellos, los momentos de niños juntos, nuestro primer y tímido beso, cuando pidió mi mano a mi familia... Y... Cuando lucho cuanto pudo para protegerme de los invasores....

Me desperté con lagrim en los ojos, deseando que el pudiera salir de su prisión en las minas y ser libre...

El exclavista que te vigilaba te tiro un cubo de agua atraves de los barrotes de tu celda. - Deja de llorar, perra.- gruño en tu idioma sorprendiendote de que lo conociera ya que nunca antes habia dado muestras de saber una palabra.- Si tienes los ojos inchados para cuando llegemos a la capital y no vales para lo que quiero, te arrancare la piel a tiras.

Me quede mirandolo con los ojos como platos y me acerque a las rejas mirandolo con fuego en los ojos ¿Porque no me has vendido aun? ¿Porque solo quedo yo? ¿Donde me dejaras? le pregunte con sarna casi escupiendo mis palabras y agarrando los barrotes como si quisiera arrancarlos.

- Deberias agradecermelo, te reservo para el castillo. Vas a ser el regalo de cumpleaños de un principe, nada menos. Si juegas bien tus cartas podrias convertirte una concubina real.-dijo apartandose de los barrotes.- Para mi es un orgullo poder decir que una de mis exclavas complace a la realeza, de modo que ya puedes comportarte, porque si te devuelven te regalare al peor burden del puerto.

Me aparte de las rejas y me hice un ovillo en una esquina, pues aquello suponía que era bueno, al menos seria en un lugar limpio, y seguro que los príncipes tenían miles de esclavas, y seguro terminaría aburriendo se de mi y quedándose haciendo labores del castillo... O quizás estuviera casado y con hijos y fuera a cuidar a sus niños.... Al menos era lo que intentaba creer...

Barem se aparto mucho, corrio hasta robar un caballo y despues te llevo aun mas lejos. Terminasteis en una cueva al pie de una montaña, refugiados en el interior, cubiertos con pieles y durmiendo abrazados.

Al despertar el ya estaba con los ojos abiertos.- ¿Como te encuentras, mi dulce reina?.- pregunto en vuestro idioma.

Abrí lo ojos y sonreí al verlo allí a mi lado...Ahora mejor que nunca... No debiste arriesgar tanto Barem... Ha sido una locura... susurre acariciando su rostro y acercando mis labios a los suyos con todo el amor del mundo.

- No podia dejarte en sus manos... imaginaba que podian hacer y solo sentia ganas de matar.- dijo Barem abrazandote.- Aquel hombre, Grifith... te miraba como... como si te quisiera para el. Le habria sacado los ojos, te lo juro.

Baje la mirada avergonzada de lo que hiba a decir Grifith es un buen hombre... Y si me quería para el, creo que se enamoro de mi... Pero no me toco... Sigo... Sigo guardando me para ti... con lo ultimo mis colores subieron aun mas mientras mis manos acariciaban su rostro con cariño.

Hacia tanto que deseaba tenerlo a mi lado...

- ¿y tu?¿Te enamoraste de el?.- pregunto con todo el miedo del mundo.

Lo mire abriendo los ojos como platos incredula - ¿Como puedes preguntarme eso? - Dije sin terminar de creermelo - Le estoy agradecida, y puede que con el tiempo le cogiera hasta cariño. Pero solo te amo a ti Barem... tu eres mi unico hombre... - Me subi sobre el para besarlo con cariño infinito.

El te abrazo.-Lo siento.- dijo buscando tu perdon.- ¿Aun quieres casarte conmigo?

- Claro que quiero... Ser tuya es lo que he deseado siempre... Dije disfrutando de su calor y su cuerpo pegado al mio - ¿Que vamos hacer..? La oferta de la reina fue muy amable Barem... Alli viviriamos bien, sin miedo a que nos capturaran ni nada - Pero el no querria ir jamas...