Partida Rol por web

Hank baja tras sus compañeros a la alcantarilla despues de fijarse bien en el simbolo.

Después de dar unos cuantos vistazos a derecha, izquierda, arriba y abajo, miro al resto señalando una posición

Creo que es por aquí, aunque no estoy muy segura

Kolthar, baja tú primero y te tiraré mi escudo para que me lo agarres cuando estés abajo.

Dicho esto, Touran espera pacientemente y en cuanto recibe la señal tira su escudo y desciende con algo de dificultad.

Kolthar asiente y con sumo cuidado, por no decir torpeza, se aferra a la cuerda y comienza a descender. El minotauro rellena casi todo el hueco del pozo con su corpachón, rozando con las paredes cada dos por tres.

Una vez abajo se retira hasta que el escudo cae y lo recoje, hasta poder devolvérselo a Touran.

El elfo espera a que bajéis a las alcantarillas antes de tirar de la cuerda y volver a colocar el panel dejándoos en la oscuridad.

¡Ey, qué oscuro que está esto! Por cierto, disculpadme por mi falta de cortesía: olvidé presentarme. Me llamo Rowan, dice el kénder.

Encantado Rowan. - dice Touran mientras mira alrededor.

Confío en que no tardaremos en encontrar ese pasadizo así que...

Dicho esto, Touran coge una piedra que esté suficientemente seca, la levanta y dice,

Señor del Cielo y las Alturas, otorga una minúscula parte del brillo del sol a tu servidor.

Como si se fuese despertando, una luminosidad va en aumento centrada en la piedra.

En cuanto la piedra de Touran comienza a brillar...

¡Vaya! ¡Yo no sé hacer eso! ¿Me enseñarás?, pregunta Rowan.

..veis que os encontráis en el centro de una especie de sala colectora en las alcantarillas. Esta habitación es bastante grande, pues no alcanzáis a ver los extremos. Desde esa pequeña plataforma veis que, aunque el agua no parece demasiado profunda, el suelo podría ser resbaladizo. Afortunadamente, unas pasarelas a los lados de las paredes parecen más secas y, en consecuencia, seguras.

En cuanto os movéis un poco, veis que hay tres túneles que salen de la sala.

Los túneles son anchos: pasajes de 5 pies a cada lado y una torrentera central de 15 pies de ancho. Ésta tiene 5 pies de profundidad en el centro pero el agua solo cubre 3 pies. Los techos se curvan hacia arriba formando una arco encima de la torrentera. El agua y los desechos circulan por la misma, estando el agua bastante sucia.

Asintiendo a Touran muy ingenioso amigo mio.

Ahora démonos prisa antes de quedarnos a oscuras digo dirigiéndome hacia el pasadizo que está orientado, si fuera un reloj, a las siete en punto. Mientras avanzo, giro la cabeza para mirar a Rowan. Yo soy Quivalen, encantada de conocerte

Una vez a la entrada del túnel, me giro hacia el resto ¿alguién haría el honor de ir más adelante? alguien que tenga los sentidos, como decirlo, más desarrollados acabo mirando al kender.

Encantado, Quivalen. Mi nombre es Rowan, responde el kénder tendiendo la mano a la silvanesti. Eres muy valiente al poner tus agudos sentidos élficos al servicio de nuestro grupo aventurero y ofrecerte para ir la primera. Como no quiero dejarte sola, yo iré detrás tuyo.

Con un rictus de sonrisa Ja, que curioso. He conocido al primero de tu raza que no es mejor que un elfo en temas de subterfugio. Lo cierto es que los otros siempre alardeaban de que podían avanzar sin ser vistos ni oídos. Alzando las cejas y elevando los hombros bueno, pues nada. Quédate atrás, y si se tercia, ya te enseñaré lo que vaya encontrando.

Hay tan poca luz que me aburriría ahí adelante: no hay casi nada que ver. Pero, ¡muchas gracias por prometer que me vas enseñar lo que encuentres!, responde Rowan sinceramente agradecido.

Mira, yo encontré esto en el suelo cuando bajamos. A lo mejor te sirve para convertir a un troll en un feo minota..., esto, un ogro.

El kénder tiende a Quivalen unos pétalos de rosa.

Venga. A ver si vienen los demás y yo iré detrás de ti explicándote cómo convertirte en una exploradora kénder silvanesti.