Partida Rol por web

Gracias Liam... tus palabras demuestran la pureza de tu corazón... Seguro que por eso Tía Guyna os ha mandado mi cuidado... ella se está portando muy bien conmigo.

Después de todo mi difunto padre era su hermanatro.

Aún con el rostro taciturno le digo: Bueno ... descansaré un rato si así lo quiere mi tía... y después ¿que podriamos hacer?... ¿Podrémos bajar al jardín un rato?...

- Deberiais descansar señorita, mañana vendra vuestro maestro muy temprano y comenzaran vuestras clases antes del alba incluso, Lady Guyna desea que recupereis rapidamente los dias perdidos en vuestra educacion.- declaro la chica. Te diste cuenta que entre los criados era una ley no mirar a los ojos de sus señores.

Si es así me ire a descansar rápidamente... ya habrá tiempo de mirar las flores y pajaros en la fuente.

Ya nadie me miraba a los ojos... ni Gill ni los criados y criadas... desde que me separé de Esthenos todo había cambiado... El me regañaba y me trataba mal ... pero cuando lo hacía me miraba a los ojos...

No sabía que una mirada llenara tanto cariño...

Me tumbe en la cama pensando en lo que estaría viviendo Gil... y mientras tanto sin darme cuenta cae dormida...

La noche fue muy tranquila, la cama maravillosa pero tus sueños horribles. Por alguna razon soñaste con rios de sangre y gritos, cosas abstractas desagradables mezcladas con el recuerdo de golpe que le diste a Gill.

Al despertar Liam ya estaba alli, ayudandote a vestir, el sol aun no asomaba.

-Su maestro espera, señorita.-te dijo con calma y cara de sueño.

Me levanto sin rechistar y con los ojos aún entornados miro a Liam y le digo mientras me voy vistiendo: ¿Áun no es de día?... esta noche ha sido una de las noches más largas de mi vida...

¿Sabes si mi tía esta ya levantada?.

- No nos esta permitido molestar a su tia durante la noche.-dice casi con miedo.

-Siento que no descansarais, señorita pero su maestro la espera.-insiste mientras te ayuda a levantar

Me termino de vestir y le digo a Liam: Ya esto lista, cuando quieras posemos ira con mi maestro.

No se podía interrumpir a Guyna por la noche... pero a la niña levantarla para dar clases si... si estos eran leyes de la nobleza ojala tuviera ya 20 años...

Cuando termine con mi maestro, si mi tía está levantada me gustaría ir a verla, necesito hablar con ella, ¿vale Liam?... y no me digas señorita dime Laia, por favor.

Sin más la esperé al lado de la puerta esperando a que me guiará hacia mi primera clase dentro del palacete de Guyna.

Medio dormida te llevaron a una sala preparada con un pupitre y un gran pieza de pizarra colgada de una pared. Un hombre te esperaba ya dentro.- Llega tarde señorita, sus clases comienzan a las cuatro y media en punto.- dijo severo.- Primero calculo, despues lectura e historia, media hora para almorzar y despues seguiremos con geografia y filosofia. Una parada de descanso de treinta minutos antes de continuar con clases de piano, canto y protocolo antes de la cena. ¿Alguna pregunta, señorita?

Si... ¿Cuál es su nombre?

Sería mi profesor y un agrió pero además era mal educado... no se presenta y ya me está regañando.

Me siento en el pupitre y espero a empezar las clases con Don Ogro...

Al parecer tenía el día bastante cargado... las flores, las fuentes, los pajaros y Gill deberían de esperar...

-Señorita, tengo tantos datos que meter en su cabeza que le aseguro que cuando acabe no le quedara sitio ni para recordarlo. Ahora sientese y comencemos con algo de calculo basico. ¿Conoce las tablas de multiplicar?

Si....mi ... mi anterior maestro me explico aquello que debería conocer cualquier niño que hubiese ido en condiciones normales a la escuela...

Le recuerdo que mi padre era el hermano de Lady Guyna.

Nunca habia sido tan arrogante pero que me hablaran con aquel tono de despecho sacaba todo lo insacable de mí.

- Por eso mismo, señorita, no puede parecer una plebleya analfabeta.- dijo secamente.- Una dama de su cuna debe saber mucho mas que un niño "normal" pero deje de perder el tiempo y comencemos.

Es severo, tajante, te hace repasar cada numero una decena de veces y cuando cometes un pequeño error te lo hace repetir hasta la saciedad. El resto de sus clases siguen el mismo tormento.

Minuto a minuto y palabra a palabra se ganaba un mote.... estaba decidido para mi el maestro pasaría a ser Don Ogro hasta el fin de los días.

Llego la hora el almuerzo y fuiste al comedor principal donde te esperaba Lady Guyna.

- Buenos dias querida sobrina ¿Que tal tu descanso? y ¿Que te parece tu nuevo maestro?.- pregunto mientras el servicio ponia delante tuya un suculento plato de estofado.

Hola Tía... ¿La verdad?... He tenido muy mala noche... alguna que otra pesadilla... y de mi profesor mejor no hablar... Es todo un Ogro... aún estoy esperando a que se presente.

Sé que quieres la mejor de las educaciones para mí... pero Don Ogro se pasa... ¡¡¡soy una niña de 8 años!!!

El estofado era de los más suculentos que había probado hasta el día:

¡¡Ummhh!! Delicioso Tía Guyna... dale la enhorabuena a tu cocinera... pues el almuerzo es delicioso.

¿¿Estaría comiendo Gill de aquel delicioso estofado??... Ojala que sí... al menos eso pagaría en parte mi golpe con la fusta.

- No esta bien poner motes a los maestros, Laia.- dijo con firmeza.-Es severo porque pedi al mejor para ti, aprenderas mucho con el y espero que le muestres todo tu respeto. Si es su nombre lo que quieres te dire que se llama Elioth Graunt, Laia.

Lo siento Tía... ahora si me disculpa creo que debo de volver a clase con el señor Og...Graunt.

Mis palabras no sonaban entusiastas pero debía de respetar la decisión de Lady Guyna si quería que me enseñase a realizar magía como la que ella hacía

Me levante y me diriji hacía las clases.

Las horas de la tarde fueron peores. El sueño de levantarse tan temprano unico a la comida abundante y el calor de la chimenea mientras escuchabas recitar tratados antiguos de sabios y filisofos hacia tus parpados cerrarse casi sin darte cuenta.

Te sumergiste en un profundo sopor, soñaste que caias y te encontraste en una gruta oscura. Al fondo una luz clara y hermosa parecia llamarte....

- ¡Señorita!.- grito tu profesor despertandote de golpe.- ¡Su señora tia sabra de esto!.-prometio enfadado.