Partida Rol por web

Animado por la curación de Sureya Boran se lanza al ataque sin mucha suerte.
Varis tampoco lo consigue.
Sir Oberest, recuperado del ataque lanza un espadazo a Boran, pero también falla.

Aelar trata de concentrarse, pero la movilidad y la excelente táctica del jinete impiden que acierte con las dos armas. Parece, sin embargo, que con la corta anda algo más fina que con la larga.

Preocupado porque el combate no termina de decantarse hacia el lado deseado, Hadarai vuelve a lanzar un potente rayo de fuerza sobre Sir Oberest. Sin embargo, el proyectil mágico sale algo desviado, errando en su objetivo.

La espada corta de Aelar hiere al caballero en el muslo.
En cambio el conjuro de Hadarai no funciona.
El escudero hace avanzar al caballos para acosar a Boran, el espadazo de Ilsifan deja muy malherido al guerrero.
El escudero aprovecha también para empujar a Aelar con su escudo, pero la pícara se agacha justo a tiempo.

Boran sabe que está perdido, acosado por frente y espalda por hombres a caballo, sabe que otro golpe más lo matará.

Tomarse un respiro sólo le dará un instante de alivio, por lo que, a la desesperada, vuelve a intentar tirar al caballero.

El golpea a la desesperada de Boran desequilibria al caballo que acaba en el agua con jinete y todo.

Boran no puede evitar un largo suspiro cuando consigue tirar al río al caballero. Momento en que aprovecha para aplicarse rápidamente un unguento a su herida, que parece que ahora sangra un poco menos.

El paladín ve a su compañero en peligro y trata de ayudarle, pero Boran sabe apañárselas bien y vende caro su pellejo, consiguiendo tirar al caballero al río.

Aún así no deben confiarse, así que Varis invoca los poderes curativos de su diosa sobre el guerrero, y alejándose del escudero para que no le estorbe, invoca una llamarada dirigida a Sir Oberest: Espero que caiga pronto, es más duro de lo que pensaba...

El poder del paladín hiere al caballero que se debate en el agua.

Sureya invoca el poder de su dios y lo canaliza mediante un rayo que, partiendo de su mano, pasa junto al cuerpo del escudero, sin lastimarlo...

- fsdfkjsdlfkjldfk Una blasfemia surge de la lengua bífida de la clérigo.

Aelar vuelve la cabeza por un instante al oír el chorro de profanidades que ha soltado la clériga, y antes de concentrarse en su siguiente ataque dice en voz alta: ¡Tsk, tsk, esa boca, niña! ¡A ver si me vas a quitar la fama de ser la más malhablada del grupo!

Como por arte de magia el caballero y su montura aparecen de nuevo sobre el puente. Lo siguiente que hace Sir Oberest sube a su caballo.
Maldito animal traicionero dice mirando a Boran.

Como quiera que sir Oberest está aún lejos, Aelar descarga su ira sobre el escudero, y lanza un ataque sobre Ilsifan con la espada larga, tras el cual se aleja una casilla.

Sorprendido por la facilidad con la que el caballero ha regresado montado al puente, Hadarai lanza un nuevo proyectil de mágica energía azulada hacia su rival más poderoso.