Partida Rol por web

Soy la primera en adelantarme. Antes de poner la mano, comento es decirrr, que toda vuestrrra segurrridad se centrrra en el interrriorrrr. Deberrríais plantearrros vigilarrr mejorrr el exterrriorrr, esos drrrones debisteis haberrrlos visto.

A continuación, pongo la mano, sin miedo. Mi nombrrre es Svetlana Semiónov. Soy rrrusa, como imaginarrreis. Me mandarrron aquí porrr que errra la jefa de una orrrrganización de la mafia rrrusa que trrraficaba con arrrmas, drrrogas y esclavas con el Daesh y Al Kaeda. Supongo que mientrrras nuestrrro negocio sólo errran drrrrogas y esclavas no había prrroblema, perrro el trrráfico de arrrmas no les gustó.

Rrrespecto a mis capacidades, se me da bien pegarrr palos, especialmente con arrrmas de fuego, y mandarrr, perrro mi prrrincipal capacidad es que es casi imposible pilarrrme porrr sorrrprrresa. Retiro la mano y dejo paso al siguiente.

-Vale, no meterme con Ga Yoon, entendido- digo ante la advertencia del hombre -Un par de puyas más y lo dejo; me va el riesgo- pienso. El agarre del tío para llevarme allí me pilla de sorpresa, aunque no le digo nada -Joder, menuda fuerza, mejor no me quejo- pienso algo impactado. Cuando me deja ya en el sitio, se lo agradezco -Gracias tío, aunque avísame la próxima vez que me vayas a coger así si puedes- le digo embozando una leve sonrisa.

Escucho la explicación de Ga Yoon y su ejemplo -Ahora si que me pienso eso de las puyas...- pienso al oír que torturó y mató a cinco tíos, aprecio demasiado mis huevos. Luego fue una de las rusas, la que me había propuesto ayudarme a andar -Joder, pero si creo que tiene más o menos mi edad... ¿y era jefa de la mafia rusa?- pienso, a lo mejor si que eramos gente peligrosa después de todo.

Me acerco a la mesa y pongo mi mano, con confianza -Mi nombre es William Horace, como ya todos sabéis... creo; y mi apodo es "Jester". Vengo de Canadá, ese pequeño país que hay arriba de Estados Unidos, no se si lo conocéis...- ni en estas situaciones puedo ser serio -A mi me enviaron aquí por un alto historial de bromas pesadas por todo el país. No os imaginéis cosas como cojines-pedorretas o bombas fétidas; algunas de mis bromas fueron hacer que una estatua de la virgen María llorara sangre en medio de una comunión y fingir una posesión, atascar un ascensor y hacerles creer a los que estaban en él que les había secuestrado Jigsaw, fingir un atentado en el metro, simular apocalipsis zombi, fingir ser inspector de higiene en restaurantes para comer gratis,... y por la que estoy aquí, que fue rociar al primer ministro de mi país con maíz y migas de pan, y acto seguido soltar gallinas hambrientas al escenario para que le picotearan; y todo eso televisado- no puedo evitar reírme de alguna de las bromas mientras las describo -Como habéis podido apreciar con todos estos ejemplos, se me da bien idear planes, los efectos especiales y el disfraz; puedo tanto trastear con un frigorífico para que funcione como microondas, como hacer que, por ejemplo, Ga Yoon, parezca un hombre negro de 72 años. Gracias por su atención- concluyo mi grandilocuenta descripción, un poco exhausto de tanto hablar -¿Podría alguien traerme un vaso de agua, por favor? Tengo la boca seca- pido a alguien, a ver si alguien es generoso.

Óscar avanzó cuando le tocó el turno, puso su mano en el lector y la retiró cuando le dieron la señal de hacerlo, luego se presentó escuetamente y se alejó de nuevo hasta su lugar. Allí ya había gente que no se callaba ni debajo del puto agua, así que él dijo lo mínimo:

- Soy Óscar. Vengo de España. Atraco a mano armada entre otras. Sé disparar y sé pelear.

En cuanto les dieron la oportunidad se largó a su habitación para darse una buena ducha. La necesitaba de verdad. Al menos las instalaciones eran mejores que las del agujero del que venía.

Y además comería y descansaría. De puta madre.

" Pueden llamarme Esmeralda, no recuerdo mucho de mi vida antes de haber sido reeducada por una organización secreta rusa llamada Milennovich, formada por ex KGB, excepto que procedo de Ucrania y después de misiones de las que no tengo autorización de hablar, fui capturada y re-educada por una agrupación de inteligencia oculta de la CIA, ambas organizaciones son desconocidas, me desconocerían y eliminarían si las descubro, así que ayudare con inteligencia mientras que sigamos en absoluto secreto "

La chica pelirroja respira hondo Antes de pasar su huella por el lector y guarda silencio mientras escucha al resto después de haber hablado en inglés

Joel, curioso, miró al que dijo que venía de España y le saludo con un "Qué paza pisha". Había estado más atento a las paredes y referencias, intentando aprender un poco de aquel lugar que no se había fijado gran cosa en la gente. Ahora que estaban presentándose, cambió su foco de atención: - Soy Joel, De Israel, con origen Sefardí. Tragó aire y soltó toda una retahíla como si fuera una inundación: - Participé en un operativo del Shabak antiterrorista y conseguí hacerme con todos los asesinos y saboteadores que queríamos caputar, se frotó las manos con un aire de orgullo y cuando los sacaba a la calle para meterlos en el furgón, los asesiné a ambos a golpes contra la acera y el mobiliario urbano, y no sólo eso; las cámaras de las noticias estaban por allí y salió en todos los noticieros. Puso una mueca de asco por lo de los periodistas. Algo se de pelear y disparar, pero aún estoy siendo adiestrado. No quería presumir y no se consideraba idóneo para ello.

Pongo la mano en la mesa mientras estaba alucinando, iguales que nosotros, osea que el enemigo es ''invisible'', podría ser cualquiera...

-Mi nombre es Yago, desde pequeño fui criado por un cártel así que herede el negocio familiar, extorsión, drogas, armas, me gusta esta segunda oportunidad.

Voy a pegarme una ducha joder, ya empiezo a oler..

No podía creerlo... no encajaba en aquel lugar. Dios había sido mucho más creativo de lo que yo conocía... sus planes iban más allá.  Asentí a todo lo que decían esas personas que parecían comandar toda la operación orquestada.

Era hora de presentarse... la otra vez también me había quedado embelesado y desperté cuando ya todos habían tomado su rumbo, ahora esa no era una opción. Mi nombre es Peter, en mi caso... yo no he tenido nada que ver con guerra, con la calle, ni con la violencia como muchos de los que os habéis presentado. Yo fuí criado bajo un estricto dogma y disciplina basada en la religión y en las convicciones de la vida eclesiástica... por ello entré en el seminario bien joven. Estudié carreras de teología y religión... y vale, toda mi vida ha estado enfocada a eso... hasta que me vi envuelto y no se como.. en un crimen. Me pasó algo similar a lo que visteis cuando os conocí al bajar del helicóptero... me quedé embelesado, en mi mundo... y cuando desperté... una masacre a mi alrededor... mis manos se habían manchado de sangre. Dios quería que estuviera aquí con vosotros... - no quería recordarlo, al igual que tampoco quería estar allí, en aquel lugar. Si por mi fuera me quedaría en mi habitación esperando a que todo pasara... pero Dios no quiere eso de mi... - no se aún qué puedo aportaros... a no ser que alguien quiera confesarse más en profundidad... 

Esto... yo también necesitaría alguna venda o gasa para la herida que tengo en el pié - Era ínfima... una leve rozadura, pero podía intuir que para lo que se nos venía encima debía estar al 100%. - Necesito una buena ducha..

Ga Yoon escuchaba atentamente lo que iban diciendo, al comentario de la rusa Svetlana dice:

• Se lo diré a los estrategas, que la muñequita rusa tiene consejos estratégicos que darles…

Tras la presentación de esta comenta:

• Así que traficante que está acostumbrada a mandar… bueno, a ver como aceptas ordenes, supongo que algo podrá hacerse… si eres buena puede que llegues a líder del equipo de intervención…

El segundo fue Jester, mientras hablaba Ga Yoon tecleaba en uno de los teclados, sin embargo, no parecía que apareciera lo que tecleaba en ninguna de las pantallas visibles, debía estar haciéndolo en la pantalla que tenía justo delante, cuando termina dice:

• Y supongo que también se te dará bien meterte en los sitios para poder hacer esas bromas…, si además parece que eres recurrente… bastante cargante y llorón, pero puede llegar a soportarse.

Tras la breve intervención de Oscar sonríe levemente y dice:

• Primera carne de cañón… ¿sabes que como en las películas americanas serás el primero en caer por negro no?

Sonríe levemente mientras James pone mala cara, el chico parecía que no era la primera vez que escuchaba esa broma, pero no fue mucho más, cuando Esmeralda hablo Ga Yoon mirándole dice:

• Si, conocemos esas misiones no te preocupes y parece que no se te da mal la cosa siempre que no sea tan directamente… ¿una asesina de esas de las películas podríamos decir no?, nos puedes venir bien cuando localicemos a altos cargos que sean Zaruk

Escucha a Joel, asiente mientras este estaba hablando y finalmente dice:

• Vale… otro más como carne de cañón… ¿tú eres moro o judío? Porque eso de sefardí no sé lo que es… no es que me importe mucho, pero supongo que si eres moro te manejaras especialmente bien con los explosivos y si eres judío… bueno, que tus compañeros no se fíen mucho de ti ¿no?

Mientras Yago hablaba asiente y dice finalmente:

• Así que conoces el negocio de la droga y tal… bueno, supongo que terminaras siendo también un poco carne de cañón… y ahora que me fijo eres más negro que Oscar, así que mira negrito te has salvado de ser el primero en morir

Mientras Peter hablaba ella seguía tecleando, pero cuando termino dejo de teclear y se quedó unos momentos mirando y asintiendo, entonces dice:

• Cierto que no puedes pelear y demás, pero eso no es lo único que necesitamos… nunca viene mal alguien a quien contar las cosas y sobretodo cierto apoyo moral y espiritual… además, seguro que sabes hacer más cosas… según tengo entendido algo de medicina y criptografía sabes y eso puede ser muy útil, aunque procura que no te den esas ensoñaciones y te quedes ahí en medio sin hacer nada a no ser que eso haga que los Zaruk alrededor tuyo exploten, eso si.

La chica vuelve al teclado y moviendo una mano como indicando que pueden marcharse dice:

• Podéis marcharos, el que quiere agua para reponer las lágrimas que ha llorado puede ir al comedor y conseguirse agua, los que quieren más atención médica a la enfermería, los que quieren una ducha que yo se lo diría a todos a las habitaciones, en 25 minutos se sirve la cena en el comedor.

Los pasillos estaban bien iluminados y había carteles indicando las direcciones a las que tenían que ir para ir a los diferentes puntos que Ga Yoon les había indicado.

Habitaciones

Las habitaciones estaban en un pasillo bastante largo y ancho, todas tenían un lector en la puerta sobre el que estaba el nombre de cada uno de ellos para poder identificar cual era la de ellos. Al entrar pudieron ver que la habitación no era demasiado grande, pero si más grande que una celda, al fondo una cama con una ventana que daba a una caverna bastante grande donde se encontraba la excavación de la antigua mina, un armario con varias mudas de ropa donde se encontraba un chándal, y algunos vaqueros, camisetas e incluso un abrigo, junto a este había una estantería con varias pantallas y un ordenador y al lado una pequeña puerta que llevaba a un baño no demasiado grande pero que estaba completo.

Al fondo del pasillo había una puerta doble con un letrero que decía “Baño conjunto”

Comedor

El comedor era bastante sencillo, predominando los tonos blancos y azules, una gran cantidad de sillas y mesas, incluso había ventanas con imágenes de diferentes exteriores del mundo, en esos momentos podía verse una vista de una campiña del norte de Europa con un paisaje verde y agradable. En los mostradores parecía que estaban terminando de preparar las cosas. El lugar era un autoservicio en el que mediante una pantalla pulsaban que era lo que querían y a los pocos minutos aparecía en la barra, con las bebidas sucedía lo mismo, pero era inmediato. Apenas había gente, solo destacaban un par de personas sentadas en las mesas, por un lado un chico con una mezcla de rasgos árabes con occidentales joven con el pelo al estilo occidental y vestido con ropas occidentales que tenía una Tablet y que leía y escribía en ella atentamente mientras tomaba algo de café y no muy lejos de allí una chica con rasgos asiáticos y el pelo rubio que tenía el pelo mojado y llevaba una camiseta blanca de tirantes con la insignia 4M como Ga Yoon que hablaba tranquilamente con un hombre occidental joven con el pelo negro y corto peinado revuelto, que parecía estar tomando algunas notas de lo que la asiática le decía.

Enfermería

La enfermería era un lugar de aspecto tranquilo, el blanco era el color que predominaba en el lugar y podían ver una gran cantidad de monitores y algunas camas, todos estaban vacíos, el lugar estaba realmente tranquilo en esos momentos y en una silla medio adormilado había un hombre de mediana edad occidental mirando la pantalla del ordenador.

Después de salir del hangar me había quedado totalmente pasmado. Entre el efecto de los calmantes y que nos adentrábamos en una especie de base secreta a lo Men in Black, no me salían palabras, únicamente me quedé mirando todo lo que había a mi al rededor, alucinado. Esto me pasó hasta tal punto que cuando entramos en la sala de reuniones o lo que fuese aquello donde la mujer nos dijo que nos presentásemos poniendo la mano en el lector, se me pasó totalmente. La mujer volvió a hablar diciendo que podríamos irnos y los compañeros empezaban a levantarse. Antes de que fuese demasiado tarde puse mi mano sobre el lector.

-Esto... Lo siento, madame. Igual ya es un poco tarde pero... Mi nombre es Pierre. Soy francés, de una ciudad del sur. Estoy aquí porque... Digamos que me gusta tomarme la justicia por mi mano. Ya saben lo que dijo Maquiavelo, el fin justifica los medios, ¿no?... Maté a un pobre infeliz y me metieron en un correcional... entre otras cosas. -Mi tono era como el de un niño intentando impresionar. La verdad es que no quería que me tomasen por un blando. -No estoy muy seguro de cuales son mis cualidades, pero me gusta mucho leer, supongo que soy... ¿creativo?... Sí, algo así. También me gusta mucho explorar y esas cosas... No sé, algo podré hacer con el equipo adecuado. -Al terminar me pasé la mano por el pelo de la nuca, esbozando una sonrisa y con las mejillas levemente enrojecidas. Me daba algo de vergüenza hablar delante de la gente.

Una vez terminé me levanté yo también y me dirigí hacia mi habitación para darme una ducha. Después de la ducha mi intención era ir a la enfermería, para que me mirase la herida. No era nada grave, o al menos los otros miembros del equipo médico no le habían dado más importancia, pero creía tener el hombro dislocado por el golpe, y me dolía a horrores. Realmente podía curármelo yo mismo, pero mejor tener la opinión de un profesional, así que hacia allí me dirigí.

Alargo la mano derecha y la apoyo. Tras esto digo:

Soy Darby Shelby. Estoy aquí por decisión propia. Antes cumplía condena de por vida y creía que sería más fácil escaparse de este lugar ... estaba equivocado ... 

Miro a Svetlana y continuo. Me dedicaba a fabricar y diseñar drogas, y a la mejora de su proceso de producción. No me encargaba de su comercialización pero sé que en Rusia eran amantes de "Las Pikachu" y de "Las AtrapaPulpos" ... tampoco era el encargado de los nombres.

Refiriéndome de nuevo al conjunto. Estudié Química y Física, me apasiona la ciencia, la medicina y la ingeniería, aunque aún no he tenido tiempo de adentrarme profundamente en esos campos Miro a Jester se que no puedes convertir un frigorífico en microondas ¬¬. 
Quizás pueda aportar algo a la causa, pero antes necesitaría saber más sobre los Zaruks.

Cuando todos terminan sus historias me dirijo a darme una ducha para hacer tiempo antes de la comida.

Hyuung, desde la intervencion de Ga Yoon en el hangar no habia dicho ni una palabra. Habia revelado ante todos que era una manipuladora. Solo esperó que la gente no hubiera prestado atencion a aquello. Sus pasos la guiaron detrás de los demas, avanzando la ultima, cabizbaja. Estaba distraida aparemente de lo que le rodeaba. Se limito a escuchar de forma obediente y sumisa, inclusive no protestó ni dijo nada a medida que el resto hablaba, se presentaba y decian sus delitos como si aquello fuera un ritual de iniciacion. Ella estaria mas segura si no decia sus delitos, si nadie sabia quien era. Siempre podria darles un nombre falso. Esperó a que la mayoria se retiraran tras Ga Yoon darles el visto bueno, quedando los rezagados. Se acercó a la mesa, poniendo el dedo en el lector, con la vista baja. Entonces fue cuando habló en coreano, para que nadie mas la entendiera.

- A nadie mas que a ti o al resto de superiores les importa mis delitos, Ga Yoon. Esto se basa de supervivencia, y no quiero que sean ellos los que me jodan. Tratame como quieras, pero respeta que intente salvar mi culo.- le dedicó una mirada afilada y acida, antes de retirar la mano del lector y volver a su gesto asustado, como si se hubiera quitado y puesto una mascara distinta. Acudio con los demás, sin aun haberse presentado, al cuarto. Lastimosamente su nombre salia en la puerta, asi que todos la podian conocer con solo leerlo. Aquello no le agradó, pero tampoco iba a quejarse por ellos. Entró en el cuarto y aprovechó el tiempo. Se duchó, se vistio, registró el cuarto de arriba a abajo y se dejo el cabello suelto. Casi seria la hora de la comida cuando saliera de aquella habitacion, de nuevo con ese gesto de niña asustada que no sabia donde estaba, mirando alrededor y buscando algun rostro conocido antes de llegar al comedor.

Después de darme una ducha me dirijo al comedor, estaba un poco harto de reuniones así que decidí ir al comedor nada más terminé de ducharme.

Óscar se mantuvo en el sitio hasta que tuvieron permiso para irse, en cuanto pudo se dio media vuelta y se largó en busca de su habitación, cuando llegó se dio una ducha de veinte minutos largos, luego volvió a vestirse y se dirigió al comedor para llenarse el estómago.

Se sentía mejor después del baño, tenía las ideas más claras, aunque la situación se había convertido para él en una especie de cuenta atrás con un final más o menos claro. No le afectó de modo alguno, con el rostro tan inexpresivo como de costumbre, fue al comedor y se sirvió una especie de puré de patatas, con carne y dos piezas de fruta. Se acercó con su bandeja a una de las mesas y comió en silencio, sin mirar a nadie.

Poco a poco empiezo a comprender a Ga Yoon. En cierto modo, me gusta su estrategia: somos de lo peor del mundo, no puede permitir que pensemos que podemos pasarle por encima.

Escucho lo que dice de los demás, con una sonrisa. Mi apreciación es correcta: trata peor a quienes tienen crímenes más violento, se puede decir, y mejor a quienes no tienen ese tipo de asesino violento.

Me marcho a mi habitación. La única que aún no consigo comprender bien es "la manipuladora" china. No es una persona que me guste, pero teniendo en cuenta el tipo de personas que estamos aquí podría haber sido peor.

Entro en mi habitación, me desvisto y me meto en la ducha. Abro el grifo del agua fría. El frío siempre me ayuda a despejar mi mente, a ver las cosas con claridad. Las gotas del agua fría corren por mi cuerpo haciendo que mi piel se ponga de gallina y que mis músculos se tensen.

Salgo de la ducha, me seco y me visto con un vaquero y una camisa antes de ir hacia el comedor. No nos han dicho hasta qué punto podríamos intimar unos con otros. En fin...

La joven ucraniana hizo mutis hasta que el último de los chicos se retiro del lugar, pero antes de que la mujer coreana hiciera lo mismo le sonrió por un momento para acercarse a susurrarle algo.

-Guau, menudo grupito: miembros de cárteres, espías, manipuladoras, cocineros de droga, asesinos... y yo solo soy un bromista- pienso, comparándoles conmigo -Y pensar que soy el más "inocente" de ellos-. Me río ante la respuesta de Darby por mi comentario -Desafío aceptado; en cuanto encuentre un frigorífico sin vigilar, herramientas y componentes, te invitaré a palomitas de congelador- le respondo; la que iba a liar si encuentro todo eso.

Una vez se fueron yendo todos, conseguí arrastrarme por las paredes y cojear hasta mi habitación. Una vez llegue, me pegue una buena ducha; sobre todo para quitarme la sangre que tenía pegada a la pierna. Me puse ropa limpia (y unos vaqueros menos ensangrentados) y me dispuse a ir cojeando y apoyándome en las paredes hasta la enfermería; a pesar de que me estaba acostumbrando a la reducción de movilidad, prefería desplazarme con unas muletas en vez de tener  que dejar mis epiteliales en todos los muros del lugar.

Ga Yoon escuchaba a Pierre y cuando este termina dice:

• Me da igual que matases o no, lo que importa es que estas aquí ahora… supongo que ya que eres como Dora la exploradora puedes ser explorador…

Después mira a Darby y asiente mientras dice:

• Si se te da bien la química y demás a lo mejor puedes echar una mano con el tema de la identificación de los Zaruk…

Da un largo bostezo cuando Hyung habla en coreano la chica levanta la mirada y responde en el mismo idioma con una sonrisa bastante enigmática:

• - jag-eun doll're na-ege butag-eul mudneun naega na-ege tto daleun byeonhwaleul jul ttae ... geulsse , nan dangsin-i hal su issseubnida gwansim gwonlileul saeng-gaghaneun geos gat-ayo ... butag ?

Y cuando todos se fueron la chica se quedó mirando a Esmeralda que parecía querer susurrarle algo y le dice:

• Dime, que quieres

- Muñequita me estas pidiendo un favor… bueno, a mi cuando me piden un favor me tienen que dar otro a cambio… supongo que se te ocurrirá que puede interesarme de ti ¿no?

En la enfermería el doctor estaba medio adormilado y parecía que estaba distraído con el ordenador, pero al ver a Pierre llegar se pone de pie y se sacude un poco la cabeza para terminar de despertarse sin duda, le mira y dice:

• Ummm tu eres… bueno, uno de los que ha resultado herido no?... supongo que quieres que te mira un poco mejor la herida no?

Decía el hombre mientras daba unos largos bostezos, en ese momento William entra por la puerta, el médico le observa y dice:

• Si… el herido en la pierna… supongo que como tu compañero has venido a que te vea… bueno no os preocupéis el tratamiento que os han dado ya mañana estaréis bien… eso sí, tendréis unas buenas cicatrices.