Partida Rol por web

Es un lugar que no esta hecho para los mortales normales, no le aconsejo ir allí, si fuera tan fácil se abría obtenido lasangre mucho antes.

Le intente advertir sin profundizar en el tema, lo que nos interesaba esra que Triton derramará la sangre en el barco para así quitarnos la maldición de encima y marchar a ciudad Gris

La misión había concluido supuestamente con la extracción de la sangre del gigante, que éste esperaba de alguna manera que regresáramos para abrirle el sello hacía la ciudad que perdió, no había sido una misión fácil partimos de aquel barco 8 personas, de las cuales sólo regresamos 4 y no en muy buen estado, sin duda había sido un verdadero reto, que sólo unidos hemos superado, en estos momentos en cuando más te das cuenta en lo importante que son los amigos, aunque quizá sería más correcto llamarlo: Familia.

Al estar fuera de aquel lugar y sentirme menos presionada por todo, me acerqué a cada uno de mis compañeros y fui abrazándolos y dando las gracias, sin ellos no podía haber sobrevivido a ésta misión. 

"Gracias amigos" dije con un gesto de agredecimiento

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La maldición estaba a punto de ser liberada para el bien de la hermandad y los tripulantes de ese barco, ¿cual sería nuestro siguiente movimiento?, ¿que nos deparará el paso de los días? 

Cientos de sentimientos encontrados vagaban mi pensamiento, tristeza, dolor entre las que más...

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Al llegar al barco, dejé que mis compañeros hablasen, dado que no me apetecía en absoluto mediar palabra con nadie.

Pude encontrar los mejores recovecos para salir de allí una vez tomada la sangre del gigante, no había pasado mucho tiempo cuando nos encontrábamos fuera de la cueva, sin apenas detenernos cruzamos el lugar donde descuartizaron al pobre mediano, nuestro camino estaba claro, ya lo habíamos recorrido una vez en sentido contrarió y eso nos ayudo mucho. Los ropajes de Calista se encontraban junto a las plantas carnívoras, Pobre muchacha, pensé mientras continuábamos el camino lo más cautelosamente posible.

Por fin habíamos llegado a la playa, no podía decir que no me dolieran los golpes y heridas sufridos en la batalla, ha sido más duro de lo que pensé, dije mientras me sentaba en una roca a esperar que anocheciera.

Con la puesta del sol apareció el barco maldito, en ese instante me toque el bolsillo donde guardaba el frasco, por fin seríamos libres. Al montarnos el capitán excitado nos pregunto sobre como había ido todo, estaba bastante interesado en nuestra gesta y que podía sacar de aquella isla.

Han perecido, dije tajante a su pregunta sobre nuestros compañeros. 

Será mejor que no vuelvan a pisar esta Isla, si quieren aprovechar que hoy dejaremos de estar malditos. Y saque del bolsillo el frasquito con la sangre del gigante.

Me acerque y se lo di al capitán, ya tiene lo que necesita, ahora haga que la maldición desaparezca, tenemos que ayudar a un buen amigo.

Cuando vi el frasco los ojos parecierón salirseme  de orbita...

Cuando vi el frasco los ojos parecierón salirse de orbita, por fin teniamos la sangre del gigante, mis hombres comenzarón a flotar al rededor mio otros intentaban acariciar el frasco, formando un coro a mi alrededor.
Quité el tapon y comence a dejar la sangre sobre el barco.
Los segundos eran minutos y los minutos horas, no parecía que hubiese funcionado.
Pero de pronto mis hombres comenzarón a caer unos a cubierta otros al agua como frutas maduras, y nuestro espectro espiritual comenzó a ser cada vez más solido hueso, musculo, piel...
La Hermandad  se sintió en ese momento como si un peso se le quitase de encima y el corazón comenzó a latir como si una carga se hubiese desprendido.

Pero teniamos que salir pronto del lugar había compañeros que no habían salido tan sigilisomante como se pensaba y ahora que eran de carne y hueso decenas de barcas portando engendros medio orcos medio woses se acercaban había que recoger a los hombres caidos al agua alzar el velamen y salir lo antes posible por primera vez se necesitaba la fuerza humana para poner el barco en marcha.

Ya en alta mar habría tiempo de celebraciones

En la Profundidad de la nueva noche y de un distinto mar ( para la tripulación ahora humana ) el barco intentaba salir de la zona de la isla ITH.

De repente decenas de barcas pequeñas emergieron del agua, nos perseguían y venían a acabar con nosotros, me levanté rápidamente e incité al capitán a alentar a sus hombres. "Vamos hombre, que muevan todos el culo, nos cogerán y no creo que sepan manejar el músculo ahora mismo"

Me sorprendio la destreza con que Ergala se desplazaba y mandaba por el barco.

yo no era tan aplicado como ella.

Tiene Ergala Razón capitan hay que salir de aquí.

Había vivido y visto cosas curiosas junto a la hermandad pero la trasformación de estos marineros al verlos de carne y hueso me supero, por eso no di mi 100% a la hora de ayudar en el barco

Me dirigía hacia la popa del Barco, mi mirada era desafiante hacia aquellos engendros, por un lado quería mi hacha volviera a beber sangre negra, pero por otro lado el cansancio de mis músculos me decía que era mejor salir de allí en dirección a ciudad gris, ya habría tiempo para acabar con seres oscuros.

Por Yavahna regresar a vuestra isla si queréis seguir viviendo. Les dije a sabiendas que no me oirían

Las barcas chocaban contra el casco del barco, otros canibales intentaban subir pero caian al mar, por una de las barandillas a somaba la cabeza de Triton el viento fresco meneaba sus melenas pelirrojas ahora casi oscuras por el paso de noche si mirada era fiera y amenazante y así fue como los canibales entre maldiciones vieron alejarse el barco.

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Las semanas pasaron y nuestros aventureros se recuperaron de las heridas, de la maldición y la espada de Malleus tras usar los restos  d la sangre del gigante y unas noches a la luz de la luna llena COBRO VIDA de nuevo.

su brillo era tan vital como antes, equitativamente al aspecto de nuestros aventureros pues tenian  buena comida y ropajes nuevos,

Los días de que hacía buen sol, el barco se detenía  y la tripulación se lanzaba al mar a darse un chapuzón breve, el agua estaba fría.

Pero también se toparon con días de tormentas y dias de mar picado.

La gente del barco estaba animada ya que por fin eran marineros de carne y hueso.

En ocasiones la preocupación estaba en el aire ¿que pasaba en ciudad Gris?

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Uno de  esos días animados unos de los piratas con brazos musculosos quiso retar a  los miembros de la hermandad a un PULSO ya tenía en la mesa 66 monedas de cobre y quería apostar todo o nada a que ganaba.

Otro quiso retar a lanzar dardos a  la Hermandad, había una diana a 5 metros de distancia, el primero que lograra esa proeza ganaría la puesta de 70 monedas de cobre. Ademas el barco se movía y balanceaba.

Pero el verdadero reto era una partida de cartas había que beber Hidromiel (una jarra o dos enteras ) y luego jugar al Poker Orco, en que las cartas tenían caras de orcos, trasgos, elfos, enanos.

se podría ganar de 2 a 16 monedas de plata o perderlas también se podía apostar objetos interesantes

Y estos eran los retos y  diversiones que se podía encontrar en  el viaje antes de llegar a buen puerto.

Finalmente y con la ayuda del Gran Tritón y del Pequeño Sam, conseguimos encontrar la salida de la gruta del gigante con la recompensa de nuestra liberación en las manos del enano.

Volvimos sobre nuestros pasos y fuimos recogiendo las pertenencias de la Dunedain, que iba perdiendo su sexapil conforme se colocaba la ropa y demás enseres bélicos, y tras un paseo lleno de recuerdos y de cabezas, cuerpos y miembros cortados y desparramados por aquel aterrador paisaje, llegamos a donde los botes para irnos directos al barco maldito.

Cuando subimos a bordo del barco y entregamos el tesoro de nuestra liberación, el capitán y toda la tripulación preguntó por todo lo ocurrido, a lo cual, hubo comentarios justos y mínimos sobre lo que esa isla deparaba a todos los que ponían sus pies en ella. Yo permanecí en silencio haciendo algún que otro gesto de negación con la mano para que el capitán no preguntara más de la cuenta y nos hiciera revivir todos los malos ratos. Mis pensamientos estaban dedicados a aquellos que cayeron en esa isla y a mi maravillosa espada que había quedado sin poder.

Cuando el capitán se quedó conforme de nuestras explicaciones, tomó el frasco ofrecido por Tritón y lo destapó sin pensarlo un segundo. A la vista del movimiento del capitán y de lo que podía hacer con esa sangre, desenvainé a Ahuwuen y lentamente la coloqué sobre la cubierta del barco. En ese mismo instante el capitán comenzó a verter la sangre del frasco en el barco y no parecía ocurrir nada del otro mundo, nada más que pringar el barco de asquerosa sangre. Pero no pasó demasiado tiempo, cuando los cuerpos etéreos del capitán y la tripulación comenzaron a tornarse en huesos, músculos y piel - buuufff, que asco ver esto... menos mal que ha sido rápida la conversión de almas etéreas a entes carnales... sino hubiera echado la pota sin ningún remedio - pensé con una pequeña mueca en mi rostro de asco.

Luego de ver que toda la tripulación estaba ya en condiciones normales, eché un vistazo a mi espada. A ésta pareció tomarle algo más de tiempo, pero poco a poco ésta iba cambiado de color. Sus tonalidades mates comenzaban a desaparecer y su brillo iba ganando terreno hasta que finalmente brillaba y relucía como antaño. Lo único que faltaba para recuperar todo su poder era el descanso que se merecía a la luz de la luna. Cada noche de luna llena, me iba a cubierta a que Ahuwuen recuperara todo su poder y descansaba junto a ella.

Finalmente y tras unas noches de dormir a la intemperie junto a Ahuwuen, ésta recuperó todo su habitual poder. La envainé suavemente en su vaina y resultaba incluso más ligera de lo que antaño fue - ¡¡Vaya!! parece que has adelgazado un poco hija mía... habrá que alimentarte con sangre de orco, trasgo.... para que vayas recuperando la forma... - le comenté a modo de alivio para mi ser.

No habíamos acabado de zarpar de donde estábamos cuando desde la costa de la isla, se empezaban a notar movimientos de botes que se apresuraban a llegar hacia donde estábamos - ¡¿pero es que esta gente no se ha llevado suficientes palos!? - comenté mientras Ergala comenzaba a dar órdenes cual capitán barba azul. Mientras preparábamos el barco para poder zarpar, los botes se apresuraban a llegar a nuestra posición y algunos de los tripulantes enemigos intentaban, frustradamente, subir a bordo para morir - ¿¡¿¡tantas ganas tenéis de sucumbir a nuestro poder criaturas insignificantes!?!? ¡¡¡COGED LOS BOTES E IROS POR DONDE HABÉIS VENIDO O LA HERMANDAD DARÁ BUENA CUENTA DE VOSOTROS!!! -  no había acabado de gritarles para amedrantar sus intentos de acabar con nosotros, cuando el barco empezó a surcar rápidamente las lindes de la isla para adentrarse en mar adentro y perder de vista a los impíos seres de esa fatídica isla.

Luego de un tiempo de navegación, la cosa se relajó en el barco y todo eran bebidas, juegos, desafíos "amistosos" entre la tripulación y La Hermandad....

Como era bien sabido en el grupo, el ir en barco no era una de mis pasiones, solía pasar más tiempo en el camarote que fuera de él, uno de los días note que el bullicio era aun mayor de lo que estaba acostumbrado.

Subí a la cubierta, y mientras daba un paseo uno de los piratas, quizás el más musculoso de todos, con aire de superioridad me reto a un pulso, sabía que a los piratas les gustaba las competiciones en los barcos para amenizar el viaje y me pareció que esto era una de esas competiciones.

Creo que has ido a buscar al oponente erróneo, le dije sin apartar la mirada, yo seré tu rival.

Me arremangue mientras andaba hasta donde nos habían colocado un par de taburetes y una mesa. Uno de los tripulantes, que parecía algo huraño, me pidió unas monedas de cobre en señal de apuesta del duelo. Aquí tiene, una vez formalizado los tramites me senté en el taburete y ofrecí mi brazo en señal de que comenzase el duelo.  

El musculitos con su cuerpo fibroso recien recuperado de su aspecto Espectral deja sobre la mesa todas sus monedas.

la boca se le seca pensando en toda la Hidro miel que va a beber a costa de ganar al enano.

pone su enorme brazo sobre el bidón de madera la madera se resiente del peso.

Triron ha de subir para para ponerse a su altura, sonrie se remanga y desafiante pone su brazo en la madera las manos se apretan fuerte mente en plan desafiante los marineros se quedan mirando uno a otro mientras uno delgado y pequeñajo con cara de ratita y dientes salidos hace sonar una campanilla la competición comienza 1,2...

... no llegan a decir el tres despues de sonar la campana cuando triton sin esfuerzo deja caer su brazo en la mesa se escucha un sonido vacio y un gran silencio llena el lugar, todos abren los ojos viendo como el enano a ganado con toda la facilidad del mundo al musculitos,

El silencio se rompe con una ovación y gorros por los aires, el que ha postado a favor del enano a ganado los otros pagan con mal humor.

El musculitos se retira humillado masajeandose el brazo.

Para el poker son  tiradas de percepción o inteligencía el primero que tenga tres exitos gana.

Para las dagas es Ataque a distancía df 17. son cuatro dardos es decir 4 tiradas el que haga más aciertos gana.

muchos se quedan mirando a Malleus y Triton y les comentan de hacer un pulso entre ellos  hay 3 monedas de plata y 23 de cobre en la mesa para el que gane.

El viaje desde que dejamos la isla fue reconfortante, la brisa y el sol recargaba suficiente energía como para estar como nuevos en apenas unos días, Triton prácticamente no salió a superficie a excepción de hoy, donde un barullo intenso se enfocaba en la cubierta del barco, yo andaba descansando en la cama, cuando escuché la puerta abrirse del camarote de Triton con fuerza, por lo que yo también me incorporé y subir a estirar las piernas y ver que pasaba.

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la primera estampa que ví, fué a como Triton ganaba a un cachas parlanchín que presumía de ser el más fuerte del barco, pero que tritón venció como si fuese aún de hueso, había estado muy triste estos días pero al ver como el brazo del marinero se retorcía ante la fuerza del enano una sonrisa apareció en mi cara " JAJAJAJAJA LA FUERZA DE TRITON ES CONOCIDA POR TODOS LOS MARES, NO PODEIS HACERLE FRENTE " justo en ese momento cuando se levantó de la silla el marinero, ví una pequeña timba de póker a la que me uní silenciosa, dejando mis monedas sobre la mesa.

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La tarde seguía con Triton sentado en aquella silla, retando a cada uno de los marineros, el enano no se aburría desde luego, cuando en uno de esos momento en los que alardeaba el enano, me coloqué delante de su silla y me senté, poniendo el brazo sobre la mesa, sonriendo al enano " A ver si puedes conmigo, engullepintas" dije entre risas.

El buen rollo se respiraba en aquel barco, Malleus también hacía de las suyas por cada rincón.

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Al acabar los juegos me acerqué a mis compañeros "Deberíamos hablar del siguiente movimiento que tomaremos, disfrutemos esta noche y mañana nos reunimos, pasaré la noche buscando algún libro interesante en éste antiguo barco, buenas noches! " acabé de decir y me dirigí al capitán del barco para preguntarle donde podría encontrar algún que otro libro, mágico, con suerte. "¿Donde se encuentran los libros de éste barco Capitán?" 

Era muy bueno lanzando cosas desde la distancía así que mientras Ergala jugaba a las cartas, Y Triton II competía en fuerza yo me dedique a lanzar estos dardos.

el barco se movía pero la diana no estaba tan lejos para mi.

Yo no tenía la inteligencia o la fuerza de mis compañeros pero era diestro lanzando cosas.

Ergala comienza a jugar la partida, le recuerda viejos tiempos cuandoe ra una adolescente y apartaba los libros para reunirse con las de su edad,  charlar, beber y jugar a las cartas, pero ahora a pasado muchos años, su forma de jugar es distinta usa la logíca y los números a su favor en poco tiempo despluma a los demás.

has ganado 5 monedas de plata, pero uno de los contrarios quiere volver a jugar tus 5 mp + las 5mp ganadas por (saca algo escondido) un pergamino muy raro que encontro hace tiempo en la biblioteca.

Decide Ergala puedes ir hablar con el Capi  o jugar de nuevo todo o nada, el que te reta es un poco más listo que los otros.

Sam eres una maquina menuda punteria. :)

falta saber si Triton y Malleus aceptan hacer un pulso ante la espectante Tripulación (sería tres intentos ganaría el que más intentos consiga)

La timba, fue tomando curso a mi temprana victoria con no mucho esfuerzo, así que me alcé con las monedas en no más de 20 minutos; tirando las cartas a la mesa y levantándose uno a uno refunfuñando se alejaron de allí, cuando al ir recogiendo las monedas un marinero, me agarró la mano justo cuando iba a levantar la bolsa, levanté la cabeza y allí estaba, serio y punzante en mis ojos, me miró y dijo "Doble.... o nada", me quedé perplejada al ver la cara del chico, era muy mono, con la camiseta entre abierta dejando leer entre lineas que era atlético, la verdad que de primeras ya me había llamado la atención, y, me fijé que tenía en su brazo derecho un pergamino, y dije "¿Que me ofreces?" mientras deslizaba el dedo suavemente por mis labios.