Partida Rol por web

Quince años han pasado desde que me he transformado en un ser superior a lo que era en muchos aspectos, como dirían algunos, he sido bendecida con la evolución de mi condición de humana, abrazando la muerte y dejando que esta me posea por completo, que me haga su hija y yo, la reconozca como mi madre. Soy un vampiro, y desde aquella tarde de verano, de hace 15 años, he tenido que convivir también con mis pesadillas más profundas, con mi miedo y con el hambre constante que sólo la meditación ha logrado compensar. Me he encontrado conmigo misma, con esta nueva yo, pero mi vida anterior sigue a cuestas, no negaré que ha sido difícil, no negaré que mi corazón que ya no late, no ha dejado de sufrir.

Sebastian no comprendió, lamentablemente no pude viajar donde él para explicarle, y decirle que aunque desee si ser su mujer, no podía ya, la Javiera que él había conocido ya no existía y era esto, esta hija de la noche. Debí decirle que lo quería, pero que no lo amaba, que no podía ser su esposa, y que encontrara algo mejor, siento que fue lo mejor, pero incluso 15 años después duele, y en ese momento, la sangre de mis ojos brotó mientras deseaba que él comprendiera, si hasta imaginé abrazarlo y unirnos en la no  vida para siempre, pero no podía ser tan cruel y condenarlo a una guerra que no le pertenecía, a la que ni yo pertenecía pero que estaba en medio de todo. Los lazos con él se rompieron aunque recibí una carta de él, en la que estaba el anillo que me había regalad, diciendo que me amaría y que ese anillo era mío. Sonreí, también lo amaría, él representaría todo lo que debí dejar en mi pasado, y todo lo que debía hacer antes... 

Con mi familia fue algo similar, mis padres no me han vuelto a ver luego de todos estos años, y no pueden, sobre mi cara no han pasado los años y ya debería tener 45, pero mi piel sigue siendo suave y tersa, hermosa como nunca antes, los extraño locamente y sigo ayudándolos económicamente, incluso vinieron a Argentina, pero fue poco lo que con ellos pude compartir, de noche tan sólo, pero Carlos ayudó mucho en eso, le he dicho a Alfredo si es mejor fingir mi muerte, para así restarle este dolor enorme que les estaba produciendo a ellos y a sus hermanos.

Y Carlos, él ha sido mi única alegría, aunque ha sido extraño, recuerdo aquella noche, dos meses después del ataque del teatro, fue con él, en compañía de Alfredo y le contaron lo que era, Carlos no reaccionó bien, estaba molesto, y aunque no creyó al principio, cuando le mostró lo que podía hacer, no le quedó dudas, estaba asustado y no me miró de la misma manera sino luego de haber dado una larga vuelta, Alfredo me dejó sola, y él regresó conmigo, tomándome las manos y luego me abrazó, fue reconfortante sentir su calor, y mi cuerpo se sintió más cálido también, para no asustarlo ni incomodarlo, lo que no me esperé fue que tomara mi mentó y me besara en los labios, en ese momento me dejé llevar, y terminamos en la cama, besándonos como él siempre lo deseo hacer, pero no pude llegar muy lejos, lo detuve porque, porque ¿qué le podía ofrecer?. Besé sus labios, y le susurré al oído que no podía haber nada entre los dos, no porque no quisiera, sino porque no se lo merecía, porque yo era otro ser y que él merecía ser un humano normal, encontrar alguien a quien amar, alguien con quién estar. Carlos comprendió y me abrazó esa noche, hasta que se durmió, yo debí dejarlo antes de que amaneciera, y a la noche anterior me dijo que me seguiría a donde deseara ir, que ayudaría, ahí le contamos parte de los planes y que sucedía, él comprendió y deseo ayudar, así nos mudamos todos a Buenos Aires, y Carlos montó una oficina de abogados, Alfredo y él trabajaron por dos años, mientras yo estudiaba, paralelamente a que entrenaba, así no me costó mucho convalidar mi título y sin más armamos un estudio de abogados prestigioso, sumando al profesor Barros, un gran acierto. A mis padres les dije que trabajaba en la embajada en Chile, y así lo he mantenido durante este largo tiempo.

Carlos se casaría a los tres años después, lástima que duró ese matrimonio poco, aquella mujer era una odiosa, y no me soportaba, al final lo dejó por su profesor de yoga, aunque ya tenían dos niños, la adoración de Carlos, y él siempre me dice que agradece lo que hice años atrás, pero aun me quería. Lástima que mi corazón ya no late con fuerza por nadie, mi estado actual prescinde de las necesidades de afecto de los humanos, a veces lo extraño, pero la mayoría del tiempo solo puedo pensar en otras cosas, en Chile, en mi misión, en como poder controlarme, Alfredo ha intentado orientarme, pero mis odios siguen presentes, por eso digo que la meditación me ha ayudado y también la compañía de Alfredo en estas noches de mi no vida. Siempre supe que para él no era una chiquilla común, siempre lo sentí y supe, él me protege y una noche conversando y estudiando terminó por finiquitar lo que deseaba, besó mis labios y me llevó hacia una de la paredes en donde sujetó mi cuello, no hubieron palabras que intercambiar, ¿pasión? quizás, no sé, pero sentí necesario, y me entregué, desde ahí hemos estado juntos, pero de una manera muy recatada, ya han pasado algunos años y nadie se ha enterado, o por lo menos, no lo han mencionado. 

Ahora miro mi copa de sangre, tengo dos libros a medio leer sobre mi escritorio, tres documentos que redactar, y pasado mañana me iré con los anarquista a entrenar, debo terminar y seguir escribiendo. 

En estos años como vampiresa he tenido que aprender sobre la naturaleza de los mismos, sobre mi nueva naturaleza, lo que no fue tan complejo la verdad, puesto que poco era lo que conocía de la naturaleza de los humanos, pero las lógicas eran distintas, las emociones también, e incluso los sentimientos, los vampiros, eran una exageración de la misma naturaleza de un humano, o por lo menos así me he logrado explicar lo que soy y lo que son el resto de mi "pueblo".

Antonia Yuste

Libre pensadora, fuerte y temible, por lo menos así la he visto, demasiado semejante a Alfredo, de ahí creo que nos hemos llevado bien, no cercanas, pero si bien, por lo menos no fue tan desastroso como el primogénito de Santa Fe, eso fue un verdadero desastre aunque no me arrepiento de nada, quizás solo de haber accedido a su juego macabro.

Antonia es preciosa, me asombra su belleza, y no puedo negar que me hace sentir a gusto su encantadora forma de ser, me ha contado que fue arpía y le dije que me gustaría tomar ese puesto, ella se rió, dijo que era demasiado pequeña para eso, y de eso han pasado ya cinco años, pero en estos cinco años, mi trabajo con ella ha aumentado, tanto en el manejo de sus asuntos legales - un vampiro no deja de ser necesariamente un ciudadano o "persona civil"- como tardes de conversaciones incluso no estando Alfredo. Deseo dese puesto, y pronto se lo volveré a mencionar....

Ella en cierta forma me ha apadrinado, seguramente me ve como ella cuando era una neonata como yo misma, porque a pesar de estos años, sigo siendo una chiquilla, algo que nadie hace que lo olvide, ni tampoco como no pude proteger el teatro, pero Antonia me comprende, cuando era más joven entre los vampiros, su sire la dejó a cargo de una caravana que debía llevar obras valiosas al príncipe, pero fue asaltada por independientes, todos murieron y ella sólo se salvó porque se ocultó, de lo contrario, su vida no hubiera sido tan larga como hasta ahora.

Debo reconocer que admiro a esta mujer, ella fue abrazada por su impactante belleza, y fue usada así por largo tiempo, ella me ha contado aquello, como fue reducida a una cosa y anulada en sus pensamientos e incluso sentimientos, porque aunque vampiros seamos, de todas formas sentimos, sino, seríamos bestias. Pero luego de que su sire desapareció, ella tomó control sobre su vida, aunque estaba sola, en eso nos diferenciamos, soy afortunada de tener aliados y amigos, y creo que ella desea evitar que pase por esa misma soledad. Me gusta acompañarla y jugar ajedrez, me recuerda  a mi madre por la claridad de su mente y por la tranquilidad que transmite, es como Alfredo, y sinceramente un ejemplo al que seguir.

Ramiro "yum" Galan y Ernesto "Che" Quesada

Cuando Alfredo me dijo que entrenaría con otros miembros del clan, debo reconocer que tuve mis reparos, no quería una situación como con el primogénito de Santa Fe, una experiencia que aún me persigue, pero luego de conocer a las dos personas que se encargarían de mi entrenamiento no hubo más reparos en mí, y disfruté y disfruto mi relación con ellos. Al principio no niego que el "Che" me resultó una mala caricatura de Guevara, y me tuve que comer muchos comentarios mordaces sobre ese punto, pero a medida que lo iba conociendo, me fue resultando más y más agradable, aunque nuestras posturas políticas estuvieras diametralmente opuestas, Él consideraba legítimo el uso de la fuerza para modificar el curso de los hechos, ante todo evento, y yo, lo considero la ultima ratio, él se reía, decía que las leyes me habían consumido el cerebro y yo le decía que las detonaciones de las balas lo habían dejado sordo y ciego. No es una relación tranquila, debo reconocerlo, pero es de aliados,  cercanos y me ha intentado invitar a sus movimientos, pero he tenido que declinar de la propuesta, aunque nunca le he revelado del todo mis planes.

Sin embargo esta relación tormentosa no es la misma con Yum, al contrario, he encontrado en él una verdadera alma gemela. Ramiro es todo lo contrario a Ernesto, es centrado, cree en otras salidas fuera de la violencia, aunque comparte la impresión que la camadilla más parece un mundillo monarquico en donde los neonatos como yo no somos más que carne de cañón y es verdad, yo lo fui, yo lo viví. Con él me he abierto más,  entrenando, hemos quedado mirando el cielo y hemos comenzado a filosofar sobre la muerte, sobre nuestra condición y le he contado sobre mi vida en Chile, lo que era antes, mis ideas sobre lo que vivir, y él ha compartido sus experiencia y sus consejos. Lo aprecio, en la medida que puedo apreciar ahora.

Ulises también me ha buscado, antes de empezar "algo" con Alfredo, hubo cercanía con este vampiro, pero nunca cuajó, la distancia y las ideas contrarias no lo permitieron, o mejor dicho, yo misma, estaba mentalizada en otras materias y él no fue más que un episodio, un agradable episodio que no mermó en nada nuestra relación, aunque a veces me da la impresión que me queda mirando de una manera extraña, como nostálgica. Me hace recordar a Sebastian y a Carlos....

Princesa  Alexandria

Esta es la figura más misteriosa de mi existencia, nunca la he visto, pero he escuchado de ella más que de otra persona. Ella es la reina de Buenos Aires, su poder es temido incluso por los del Sabatt y nada escapa de su implacable mirada, de sus pensamientos. Me hace pensar en Catalina la Grande o Elizabeth I, y seguramente las conoció porque según Alfredo y Antonia es muy antigua, más que cualquier otro vampiro conocido en latinoamérica. Me da temor, escuchar su nombre me hace sentir insignificante, como si estos 15 años no hubieran pasado, pero no puedo comportarme de esta manera si mi intensión es ser Arpía, debo hacerme conocida, ya sea por mi retórica como por mi encanto que es el que más he trabajado bajo la vigilancia de Antonia, ella misma también quiere personas de confianza en la telaraña de la camadilla. Y yo, no pretendo ser una mosca atrapada en la telaraña, sino la que maneja sus hilos...

Argentina 2000-2013.

Luego que Menem fuese derrotado en las elecciones por las constantes acusaciones de corrupción e imposibilidad de controlar y gobernar a un país que se moría de hambre, sería el  Frente Grande, Socialista Popular, Socialista Democrático, Intransigente y Demócrata Cristiano. En 1997 se concretó esa unidad mediante la creación de la "Alianza para el Trabajo, la Justicia y la Educación", más conocida como "Alianza", la llamada a "cambiar al país", yo presencié e inicio del gobierno de La Rúa, y debo decir que no esperaba mucho, en poco tiempo me di cuenta de la inoperancia de sus gobernantes porque el país se sumía en una cesantía del 15%.

Las revueltas se suscitaron una tras otra, la gente despertaba furiosa ante las medidas que no aplacaban la cesantía ni la inflación que día con día aumentaba. ¿ Qué pasó con este país pujante? ¿con este país en vías del desarrollo, incluso antes que muchos  países de la región?.No sé, incluso me da la idea de hablar con la "Reina" porque algo de incidencia debía tener en las políticas del gobierno, más cuando las protestas trajeron muertos, algo que no había visto en Chile democrático, por lo menos no tan evidentes como en Argentina.  El día 20 de diciembre se produjeron nuevos enfrentamientos entre la policía y los manifestantes reunidos en la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, y en otros puntos del país. Esta vez, se calcularon en 30 los muertos por los diferentes enfrentamientos. A las 4 de la tarde, visiblemente debilitado, el presidente pronunció un discurso por televisión convocando a la "unidad nacional" y ofreciendo aljusticialismo cogobernar el país. Ante los disturbios y el enérgico rechazo popular, el presidente abandona la casa de gobierno en helicóptero.Fernando de la Rúa presentó su renuncia.

Pero su renuncia no sirvió, le sucedería otro presidente que no duraría mucho en el cargo intentando enfrentar la crisis, manteniendo el corralito de La Rúa y modificando el tipo de cambio, pero la gente no aceptaba ni aprobaba el nuevo gobierno, y el presidente Adolfo Rodríguez Saá renunciaría dando paso a Eduardo Camaño, otro incompetente que no sabría como enfrentar lo que estaba pasando,  ni detener el desfile de ministros que por las carteras se presentaron.

Nada detenía ni disminuía la crisis que se vía, Alfredo me decía que debía calmarme, pero yo insistía en que era una locura, que había que hacer algo, pero no podía, no era nada. Luego sucedería el asesinato de Avellanera, creo que fue el Sabatt, ya ni sé si es la suerte de los humanos o que en verdad  los vampiros no tienen el poder suficiente para cambiar nada. La reina Alexandria apenas puede controlar lo que sucede en este país.

de ahí vinieron las primeras elecciones, y trajeron a Kirchner al poder, luego de irse a segunda vuelta con Menem, el desgraciado tuvo el valor de volverse a lanzar a la presidencia.  Kirchner llevó adelante una activa política para promover los derechos humanos, incorporando a su gobierno a reconocidos integrantes de organizaciones de derechos humanos. Además, impulsó el enjuciamiento a los responsables por crímenes de lesa humanidad ocurridos durante los años 70, realizados por la Triple A y por el gobierno del Proceso de Reorganización Nacional. Para conseguirlo, fueron anuladas las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, las cuales mantenían frenados dichos juicios desde el gobierno de Raúl Alfonsín.

Kirchner  fue un alivio para muchos, pudo poner algo de control a la situación, por lo menos la gente no se moría de hambre ni siguieron las matanzas.Debo decir que el "trucha", hizo un buen trabajo, porque era difícil hacerlo peor, pero su política siempre estuvo en rivalidad con las garantías constitucionales como la libertad de expresión, pero esto se agudizó con el gobierno de su mujer. La señora K no es más que una irrisoria forma en que los argentinos comprenden la política, está bien, en Chile Bachellet fue escogida por su carisma, pero esta señora es una verdadera señora de elite que hace trabajo social. 

Este gobierno no me agrada, pero es lo que hay, insisto que Alexandria debería tener mayor control, pero no entiendo al manera de manejar el poder. Cada vez pienso más que estos vampiros no son más que una pantomima de un poder que intentan mantener.

Chile 2000-2013.

Las noticias de mi país han llegado a través de estos años, tanto por mis lecturas de los periódicos nacionales, como  con lo que me contaban mis padres, y debo reconocer que han habido cosas que me ha llenado de alegría, y a Alfredo también. Lentamente las cosas se están organizando y empiezan a mermar esta institucionalidad del Sabatt.

Todo comenzó en 1998 con la detención del dictador en Londrés, Chile se puso de cabeza, y las manifestaciones públicas comenzarón a cundir, antes, con el asesino en el senado como senador vitalicio mantenía la idea de dictadura sobre las personas, que ni la Concertacíón con su pantomima de transición jamás pudo superar, y de hecho no superó, porque debió ser Baltaza Garzón quién ordenara la extradición a España de Pinochet por la desaparición y muerte de ciudadanos españoles. Freí en el gobierno tuvo una tibia reacción y claro, nunca fue lo que todas las víctimas de la dictadura esperaban, pero debo recordar que aún 10 años después del cambio de mano, no se hablaba de Dictadura, sino de pronunciamiento militar, que no era más que un eufemismo de la violencia de este gobierno.

Con Pinochet detenido, y el ascenso del poder de Lagos, las cosas siguieron su camino, el Sabatt no podía manejar a su principal pieza del terror,  pero al final ganaron el combate, y trajeron luego de un año y medio al dictador de vuelta a nuestro país. El desgraciado  apenas pisó tierra chilena,  se levanto de su silla de ruedas y entró como cual triunfador,  lo que despertó el repudio en muchos de los sectores más cuando se había enviado de vuelta a Chile para ser juzgado en consideración de su situación de salud.

Lagos en el gobierno se sintió más los cambios, pero Pinochet seguía siendo una mella, un escollo que nadie quería hacerse cargo, además, sería desaforado de su calidad de senador para ser juzgado por sus crímenes de guerra,  pero no sería sin por sus delitos de robo y evasión de impuestos que lo llevarían a tribunales. Pero la historia y la suerte es mezquina a veces, y Pinochet moriría antes de ser juzgado. Chile nunca antes estuvo más separado que ese día, porque mientras un grupo  de babosos lloraban la muerte del dictador, el resto celebraba en las calles. Las Alamedas se abrían como lo presagió Allende antes de morir.

La historia siguió, Lagos reformó la Constitución, una creada en la Dictadura, era un nuevo maquillaje para la misma mierda, pero hay que reconocer que alcanzar esos quorum ya era mucho pedir. Chile iba distanciándose de la figura del Dictador, cada vez menos fuerte era destuída y como Al Capone, no "pagó" por sus asesinatos, sino por haber robado. Chile siguió su curso, y la sociedad pareció despertar de su adormecimiento, cada vez tenía fuerza la sociedad civil y serian las nuevas generaciones las que harían despertar esto, chicos de no más de 14 años marchando por las calles, paralizando a un sistema que parecía incorruptible, pero no, los "pingüinos" dieron muestra de un valor que sólo se vio a medidos de los 80' cuando las calles exigían que la dictadura terminara. Mi corazón latía, lo sentía y no pude dejar de emocionarme, y seguir esas noticias, leyendo cuanto pude, el internet agilizaba mucho la información, incluso pedía información a la FECH, porque los universitarios se sumaron con fuerza a las protestas de los estudiantes que duraron más de seis meses. La ONU puso observadores de DDHH por la violencia que imponía el gobierno.

Así fue hasta que el segundo gobierno de la derecha desde los 50, asumió el poder,  la represión del estado aumentó, pero las protestas sociales también, protestas de grupos sociales, espontáneas, todo, Chile iba cambiando, y por medio del grito ciudadano parecía poder hacerse cambiar la realidad. Los medios sociales ayudaban a propagar la información que los medios de comunicación negaban al pertenecer a las mismas familias que poseían y manejaban el gobierno.  El Sabatt y la Camadilla se enfrentaban a algo superior a ellos, a algo sin precedentes, el conocimiento.

PRIMERA HISTORIA

No hay mucho que contar sobre mí, no hay algo particular en mi historia, algo que la distinga de otras personas y sus particulares historias, pero sólo para contar puedo empezar con el día que nací, un 28 de febrero, mi madre tuvo una baja de presión que perdió el conocimiento antes de que me viera salir, y los médicos debieron sacarme con forsex, estaba estaba demorando mucho en salir, y me estaba ahogando. Esa fue la primera vez en que tuve un encuentro con la muerte, pero por obvias razones no lo recuerdo, creo que está bien, no se debe recordar todo en esta vida y lo que se recuerda se suele maquillar con imaginación, con sueños con expectativas para poder sobrevivir.

Pues bien, nací en Santiago de Chile, en una familia de clase media, media en todo, ni pobre, ni rico, ni demasiado instruidos, pero con educación, nada en particular, si no fuera que mi padre era un partidario de la izquierda  en medio de una dictadura facistoide, no militaba, pero en pleno 87, era peligroso, la milicia no temía en llenarte de plomo si hablabas demasiado de libertad y democracia, pero mi siquiera mi padre recordaba mucho lo que era democracia, era un niño cuando fue el golpe, sólo conocía el dolor y la violencia de la dictadura y como los carabineros acribillaron a unos sindicalistas de “la Papelera”, En su mente, hasta ahora, un uniformado es sinónimo de muerte y represión y yo, como su hija, soy heredera de ese odio jurado.

Para seguir con la historia, estudie  y me eduqué, Chile habia cambiado, ahora era una democracia, pero cementada en la dictadura y sus monolitos que no serán cambiados simplemente. En la escuela, fue destacada en mis estudios, pero no fui feliz, y no hablaré más sobre eso, sólo que disfruté cuando salí de mi educación básica y entré a la Universidad. Derecho, eso escogí, por un sentido social y casi reivindicatorio, era de clase media, de esa clase que tenía dinero para alimentar a los miembros de la familia, pero no de acceder a la justicia en un mundo donde un abogado era un mal necesario.,   Vendí un poco de mi inocencia al entrar a la más prestigiosa de las Universidades, La Universidad de Chile, a estudiar a la mítica Facultad de Derecho de Andrés Bello, de la cual habían salido dieciséis presidentes de la república y un tanto más de diputados y senadores. Un gran logro para una persona promedio.

Cinco años, sin mayores sobre saltos ni contratiempos más allá de los que todos estudiantes universitarios. Terminé mis estudios mientras trabajaba, pero fue feliz, fueron grandes momentos, en donde conocí de amor y de desamor, de alcohol y sexo, sobre las oscuras sombras de la noche y sus preciosos matices. Fui feliz, por lo menos es lo que creí, pero para una persona que se enfoca en sus estudios, y que siempre tuvo problemas para relacionarse con otros, es difícil encontrar a una persona con toda la paciencia para escudriñar y abrir a una almeja cerrada por completo, pero siempre hay almas caritativas, o simples curiosos que encadilados por una chica brillante, intentaban llegar a tocar alguna fibra interior.

Una de estas personas fue Sebastián compañero de universidad, que intentó quedarse conmigo, lo quise, y me quiso, y lo hice feliz, pero no era suficiente para él, así me sentía, era atractivo, inteligente, atento,amable, en cambio yo, era demasiado distante, apartada, había olvidado como tratar a las personas, o quizás nunca supe hacerlo, y terminé con él un poco antes de dar el examen de grado, pero siempre volvemos, una y otra vez, una y otra vez, pero sé que no es amor, es sólo necesidad.

Luego de titularme me encontré ejerciendo mi amada carrera, luchando por causas perdidas, Sebastián continuaba en mi vida, pero cada vez más alejado, imagino que se ha cansado, además, tiene una novia, creo que se casaran. Un buen día, mi jefe me ofreció ir a un seminario a Santa Fe, sería dos semanas en aquella ciudad,  y yo no dudé en tomar la oportunidad, deseaba mejorar mi retorica en las audiencias, en donde me había destacado por una agresiva postura, no es fácil ser mujer en este mundo de hombres. La noche antes de irme, Sebastián fue a buscarme a casa, e hicimos el amor una vez más, no sentía culpa como otras veces, al contrario, me dio un anillo, quería casarse conmigo, y debía responderle al volver.

Nadie más me va a aguantar como él, y podría ser mi única posibilidad cierta de casarme y tener familia, no es que algo que me importe de veras, pero mis padres desean tener nietos, y creen que verme casada y con familia es una forma de ser feliz, y para ellos, es la única. No sé que diré al volver, al sentirlo dentro de mí aquella noche, sentí algo distinto…

Entrenamientos con los anarquistas:

Intimidación:

Un día apareció Ramiro y me tomó de los hombros jalándome fuera de la cabaña, esa vez estábamos lejos de Buenos Aires, y llevaba ya un tiempo con ellos. Me dijo que era hora de mejorar mis atributos de pelea y yo le dije: "me estás webiando", él se rió y le jaló de una mano con fuerza, apretándome, jalándome contra su cuerpo, casi no presenté resistencia, pero levanté la cabeza con mis ojos rojos y los colmillos sobresalientes, pero él se rió, y pasó su naríz por mi mejilla, oliéndome. A veces se comportaba así, como si de pronto se acordara de mí, creo que la luna lo influenciaba.

Ramiro me soltó empujándome, yo di unos pasos hacia atrás demasiado molesta y moví los brazos: "¿que xuxa te pasa?" le pregunté, y él se cruzó de brazos, mirándome con fiereza. Me dijo que nada, que era una torpe que creía que conseguiría algo distinto, que cambiaría las cosas siendo un títere de la camadilla, de Alfredo. Mis labios se fruncieron y me giré para irme no tenía ganas de escuchar sus tonterías, pero ahí de nuevo me sujetó de los hombros y me lanzó por los aires, debí girar mi cuerpo para caer sobre mis pies e inclinándome hacia abajo.

- idiota! - exclamé y me lancé contra él para golpearlo, pero él esquivaba mis golpes y seguía poniéndome en cuestionando mis habilidades, mi rabia comenzó a aumentar más y más, debo reconocer que me hizo perder el control, hasta que lo sujeté de las ropas y lo empujé contra uno de los árboles, presionando su cuerpo contra el mío y alzándolo. Mis ojos  rojos, sentía la fuerza y la rabia, y las ganas de matarlo y él río de nuevo.

Lo que me soltó me dejó asombrada: Eso es, eso es intímidante, ahora intenta no ser tan obvia, conserva esa emoción y serena el resto. Eso me dejó sin defensa alguna, y lo solté, no sin antes darle un golpe de puño en el estómago -imbécil...-

Ahí me siguió enseñado la habilidad de intimidad, antes de eso no me había sentido capacitada para producir miedo, por lo menos no consciente, pero ahí me enseñó a intimidar, aunque siempre me decía que más parecía un cachorrito dulce.

Uso de armas y potencia:

EL entrenamiento ha sido arduo, los periodos con los anarquistas me han golpeado, disparado y vuelto a disparar, Ernesto no pierde las esperanzas de que recapacite y me una a ellos, yo tampoco, pero antes de eso necesito resolver lo de Chile, no puedo comprometerme a ninguna cruzada si no antes finiquito mis propios asuntos.

Con el tiempo logré mejorar mi fuerza, mi rapidez, y Ernesto me ha enseñado a usar mejor las armas de fuego, ya no quiero más volver a que se me trabe un arma en medio del combate...

Hoy ves la noche de Buenos Aires y todavía, sigue sin ser tuya la ciudad. Es de los argentinos. Pero de alguna forma, poco a poco, cobijada entre el abrazo de manos amigas, donde la menor sin duda no es Alfredo, poco a poco se va haciendo también un lugar donde vos podes ser… En estos años, haz crecido en lo profesional, como mujer y como vampira… y no en poca medida, se lo debes a esta inmensa metrópolis de luces doradas y sombras profundas.

Sobre la mesa descansa la correspondencia. Entre las habituales formalidades del trabajo, destaca sin duda un sobre de blanca pureza, sin remitente, que supo estar sellado con lacre a la antigua. Adentro, una tarjeta elaborada con tinta china y pluma sin duda, expresa.

“Estimada Amiga.

                               Espero que las noches te estén sonriendo. Lamento que mis ocupaciones no nos permitan ver tanto como desearía, pero esta breve misiva es con el fin de subsanar esa situación… a la par que una oportunidad. Es posible que requiera de tus servicios.

                               Por favor, libera tus asuntos por algunas horas, y encuéntrame en el hotel Ayres de Recoleta, en calle Guido 1980. Te estaré esperando.

                                                                                                                                             Afectuosamente, Antonia.

PD: Trae un traje de baño.”

El aire formal de la nota es extraño, aunque el detalle final si es propio de la imprevisible primogénita. Pero lo que en si transmite… La necesita. Le quiere ofrecer una oportunidad.

Los recuerdos de hace muchos años regresan. El viejo y sabio profesor, el cual también le dijo palabras parecidas una vez, sin siquiera permitirle atisbar lo que vendría. La joven que era entonces, dudosa de todo, a quien casi hubo de empujar a… a algo que cambiaría de manera tan drástica, su forma de ver la vida y el mundo. El mundo gira en círculos. Todo lo que fue, vuelve a suceder. ¿A donde conduce este giro?

Llegar a a oficina para trabajar se había vuelto su religión, llegaba a primera hora - en el sentido vampírico - a revisar demandas, escritos y escrituras, el bufé iba muy bien, los abogados en ese país eran bien pagados, si eran buenos, y ella mantenía una ética que la mantenía alejada de las malas prácticas, pero había aprendido a contrarrestar a esos tinterillos que creen que con fraudes pueden ganar juicios.

Javiera revisó la correspondencia, pensando que extrañaba litigar, era lo único que su condición vampírica no le permitía, sería delicioso ponerse ante un tribunal y defender algo que crees justo o por lo menos, quieres hacer creer a otros que es justo. Paso sus dedos por las cartas hasta que dio con una en particular...

- Antonía...- susurró, conocía su estilo, su particular forma de ser, a veces había despertado admiración en Javiera, otras, un deseo algo más carnal, pero siempre recatada, aun no dejaba escapar esas emociones, además, su pacto con Alfonso se mantenía, a su lado, se sentía segura.

- así que traje de baño...- levantó una ceja, observando ese último mensaje, ¿que querrá con un traje de baño?, imagino que habría una piscina, pero ella iría, no sólo por el aprecio por Antonia - en la no vida, los amigos y aliados son escasos - sino porque su fin es ser arpía. Javiera llevó su mano a su cabello, y lo soltó de la coleta que traía. tendría que ir por su traje de baño, y luego a casa de Antonia.

Alfredo no esta en la ciudad para pedirle que se encargue del estudio, lo cual es una pena. Pero ultimamente viaja con frecuencia a Santa Fe y Entre Rios. Por lo que te ha comentado, la situacion sigue igual de tensa, si no es que mucho peor, entre la faccion del principe y la del Hector. Es muy dificil lograr un acuerdo, cuando ambas partes se desprecian con tantas ganas. En varias ocasiones ha bromeado que lo tendria mas facil negociando bajo el sol del Sinai entre judios e islamicos...

No tardas demasiado en cerrar y emprender el regreso a casa, bajo la calida noche porteña. Es buena cosa no ser humana, puesto que los calores son sentidos todavia, y seria un asco andar vestida elegante con las temperaturas actuales, si todavia transpiraras. Lo cual no impide disfrutar del placer de un buen chapuzon si tienes donde, por supuesto. O quizas simplemente Antonia quiere verte en bikini, con esos ojos azules tan traviesos e intensos... Ninguna de las dos opciones es del todo mala, pero es bastante seguro que se trate de algo mas.

Una vez recogido el traje de baño y algun otro arreglillo, es hora de encarar al lugar de encuentro. Ayres del Recoleta se encuentra en el barrio del mismo nombre, muy cerca del Cementerio. ¿Coincidencia?¿O acaso algun presagio de que la muerte siempre ronda a los vastagos? Una reflexion oscura, que mejor ignorar. Despues de todo, la oportunidad te espera.

Al llegar, un educado mozo te lleva a la parte posterior del lugar. Tal como esperabas, es un elegante hotel, y cuenta con una piscina interna climatizada, aunque a estas horas no hay muchos huespedes disfrutandola. Solo una figura, de hecho. 

La hermosa primogenita, con una bata rosa y delicada, se encuentra recostada en una de las varias reposeras, con una copa roja a su lado, cuyo contenido no resulta dificil de adivinar a tu olfato. Se sienta a medias cuando llegas, mirandote con una leve sonrisa.

-Buenas noches, querida Javiera. Me alegro muchisimo de que hallas podido venir.

Como era de esperarse, a recepción sería fantástica, pero Javiera con el tiempo había aprendido a obviar esos detalles tan exquisitos  de sus hermanso vampiros, ella, aun no podía alcanzar aquello, pero debía reconocer que entre todas, Antonía tenía un exquisito sentido de la estética que a Javiera traía encandilada. La joven bajo de su automóvil, y arreglo su vestido negro de gaza y chifon, había aprendido a vestirse con igual elegancia que su amiga. Su cuerpo menudo estaba cubierto por aquel vestido con un escote completo hasta la mitad de su pecho, y la espalda se perdía hasta las últimas vertebras de su espalda de marfil.

Vio a su amiga al final, caminó lentamente, el vestido se abría y mostraba sus piernas largas, pero caminaba con seguridad, sonriendo con gracia, había disfrutado malsanamente las caras de los humanos, acalorados por esas temperaturas horribles. El infierno se ha congelado, y se ha venido a Argentina,  pensó mientras llegaba donde Antonia a la que tomó de las manos, y besó sus dos mejillas, rozando su piel con la de sus labios, Estaba tibia, procuraba siempre estarlo.

- la curiosidad es uno de mis mayores pecados, y lo sabes, amiga mía...- murmuró cerca de ella, mirándola - y bueno, deseo saber cual era la urgencia, como dicen, me tienes en tus manos .- apretó sus manos, mirándola con complicidad.

Las manos frias de Antonia contrastan drasticamente con tu tacto tibio, pero no se siente asi la forma en que te devuelve los besos, el ultimo casi rozandote los labios al retirarlo. Ese toque sensual que sabe poner en cada gesto que desea. Como eso, o la mirada aprobadora e intensa que dedica a tu vestido... o quizas a ti misma. 

-Esa, seria una idea muy interesante para discutir...+responde suavemente, deslizando los dedos por tu antebrazo, mientras te invita a sentarte en la reposera adjunta.+ Podemos hacerlo junto a los negocios... Placer y tratos, ambos no tienen que ir necesariamente separados..

Sonrie de forma traviesa, mordiendo levemente su labio inferior, para luego volver a acomodarse semi-recostada, mirandote.

-Puedes cambiarte aquí. Los empleados no molestaran, ya esta reservada la piscina solo para nosotras. Y, mientras te quitas ese delicioso vestido, cuentame como han estado tus cosas. ¿Alguna novedad en las cortes?.

Deja correr las palabras en tono leve y frivolo, mientras entreabre su bata, dejando entrever un leve conjuntito de intenso celeste, que resalta sus rasgos infantiles e inocentes. Justo lo que ella desea mostrar, a quienes no la conocen.

Javiera siente que Antonia juega con ella como si de un gatito con su ratón se tratase, pero ella se deja, de momento, no deseaba comersela, y le sigue el juego, - lo que no significa que no exista un dejo de placer en aquel cometido- Se lamería los labios tras ese beso fugaz, y se quedó de pie, de todas formas no le importaba mucho que vieran su cuerpo desnudo, el vampirismo dejaba atrás muchas de las trancas humanas, en ella ellas, el pudor por la desnudez...

Los dedos delgado de la mujer fueron al lazo que sostenía su vestido sobre su cadera, y lo desató, el satin se deslizó entre sus dedos, hasta que el vestido quedó abierto, dejando ver un triquini muy sensual, color negro, que subía desde su cuello y bajaba en una sola línea de tela desde sus pechos hasta su cintura, uniéndose por pequeñas piedras de bisutería,  sólo en la línea de su cadera comienza  el calzón pequeño que cubría sus caderas y su sexo. Se sentó, quedando con las sandalias negras y de fiesta, y el elegante vestido quedó reposando sobre la  silla.

- pues no muchas novedades, sólo... la ola de calor que tiene a los humanos algo vueltos locos y los juegos de Fernandez... ¿hasta cuando se tolerará su incompetencia? - no ocultaba nunca su desagrado por la presidenta, a la que calificaba de incompetente e inútil - pero querida amiga...- la quedó mirando, era realmente hermosa - no he has citado.. para hablar de las cortes, amiga mía, ¿en que puedo ayudarte?

-Puede acabar teniendo que ver una cosa con otra...-responde suavemente, mientras toma la botella con la siniestra, y sirve en una copa vacia el rojo vitae. Aunque embotellado nunca sabe tan bien como "del paquete", resulta mucho mas conveniente para la Mascarada. A cualquier ojo distraido le pasara por alto como vino. -La temperatura no afecta solo a los humanos, al parecer.

Te tiende la copa, mientras deja el recipiente de nuevo en la mesa y se acomoda. Sus ojos claros se oscurecen levemente, al tiempo que las palabras abandona sus labios. 

-Hace algun tiempo, estamos recibiendo informes... extraños. Algunos vampiros han desaparecido, en la zona del Chaco y de Entre Rios. Si solo se tratase de algun neonato que no soporta la no-vida, lo dejariamos pasar. Tu misma conoces bien el profundo pesar que puede causar el Abrazo, y no todos tienen lo que se necesita para continuar luego del mismo. Pero han sido varios, y no pocos ancillae, gente con varias decadas de experiencia. Hector de Parana, me ha informado que en dos casos al menos, hay fuertes indicios de lucha. No se cansaron... los destruyeron.

Deja correr unos instantes para que medites sobre ello, mientras bebe su copa.

-Entonces llego este mensaje, de un chiquillo Gangrel. Nos contacto a traves de un antiguo anarquista, venido hace poco. Supuestamente sabe lo que esta sucediendo, y desea entregarnos esa informacion. Pero quiere todas las garantias de que su no-vida sera respetada, asi como recursos para abandonar el pais. La Princesa Alexandria me ha solicitado hacerme cargo del asunto con discrecion, dado mis buenas relaciones con esa faccion, y yo, te pido ayuda a ti para lograrlo. 

La mención de las desapariciones la dejó meditabunda, y cuando Antonia mencionó los problemas de la aceptación del abrazo, ella apenas asintió, aun no estaba del todo convencida, tenía una misión, y en esos 15 años no la había cumplido, para ella, había más una idea de resignación que de aceptación de su condición. Javiera siguió con atención sus palabras, la mención del grange le produjo un escalofrío en la nuca, no había quedado atrás el recuerdo de aquella estúpida grange que no se resignaba a su condición y que por poco la mata, pero los anarquistas eran sus amigos, o por lo menos aliados, y ahora comprendía el interés de Antonía de encomendarle a ella esa misión.

Javiera arregló  su cabello en un displicente gesto, aunque era obvio por sus ojos verdes como estaba interesada en la información, luego se puso de pie, y se cambió de asiento para quedar al lado de su amiga.

- algo debe mantener asustado a ese grangel al punto que decida hablar y escapar - acarició su barbilla - acepto, amiga pero...imagino que puede ser el Sabbat de nuevo operativo... dime Antonia, cual es tú apreciación de este asunto.. como amiga - inquirió, buscando su mirada, era obvio que aceptaría, pero quería saber las impresiones de Antonia, que a veces podían ser mas confiables que la información oficial, más de una vampiresa tan experimentada como Antonia.

Deja caer la bata hacia atras sobre la reposera, y con gracia se quita las mangas, quedando solo en bikini.

-Por supuesto, es la inmediata apreciacion que cabe esperarse... y el motivo por el cual la princesa desea que sea discreto. Si este rumor circulara, muchos podrian ponerse nerviosos. Todos recordamos la ultima inesperada incursion en Santa Fe. Cabe pensar si esta no sera el preludio de otra similar. O quizas sea justo lo contrario... un intento de agitar las aguas innecesariamente, para tantear nuestra fuerza. 

Se sienta en la reposera, mirandote fijamente.

-Cualquiera sea la verdad, es lo que debemos descubrir. No te dire que me fio completamente de mis propias habilidades en esta situacion. Por lo mismo, es que no deseo ir sola. Ademas, si resulta ser verdad lo de la informacion, sera mejor que alguien como tu,  quien no tan expuesta a la mira publica del Eliseo, se encargue de los preparativos del pago. Un favor para agradecer...+añade, en tono levemente insinuante sobre las posibilidades que ese favor implica, mientras adelanta los dedos para acariciar tu pierna desde la rodilla.

Sus labios se fruncieron, y luego sus manos fueron a los hombros de Antonia, deslizando sus suaves manos desde ahí hasta sus codos, recorriendo la aterciopelada piel de la cual era dueña su amiga, y en sus ojos, se hundió hasta que al fin sus labios soltaron aquella frase que Antonia requería saber.

- está bien, haré todo lo que me pidas - sonríe de medio lado, y ahora su mano va hacia uno de los mechones de su claro cabello, y lo apartó de su escote, arreglándolo detrás de su oreja, - si, nadie quiere que ese caos se repita, ni yo... un calofrío me recorre de pensar en esa noche - se encoge de hombros, y luego apoya su cabeza en las piernas de su amiga, apoyando también sus manos, su mente le daba vueltas a lo que le decía en parte quería saber si era una prueba para transformarse en arpía o más bien, para enseñarle más cosas, de cualquiera manera, era agradable saber que confiaba así en ella, para algo tan complicado - ¿irás conmigo o no? - preguntó al fina.

Sus dedos recorren tu cuello y cabellera, mientras acaricia tu cabecita. Es un tacto curioso, casi maternal, salvo la forma en que las puntas te rozan, estremecedoramente tierna.

-Desde luego. Tratare de conseguir algunos ayudantes mas, por si acaso la labor requiere... ya sabes, algo mas de fisico. Desgraciadamente, no tengo la clase de ghouls que Hector, asi que debere recurrir a algun favor. Eso es lo de menos. Lo importante es completar la tarea. Cualquier pequeño costo sera compensado por la princesa... o en tu caso, por mi.

Se inclina al decir esto, y sientes sus labios rosados besandote en el lobulo de la orejita. El calor esta regresando a su piel, cosa que tambien notas en sus piernas. Pero es dificil concentrarse en esos detalles con la sensual caricia que te brinda, cuando sus labios estimulan los nervios de esa zona tan sensible.

-Ahora, demonos un chapuzon, si te parece...+susurra a tu oido+ Seguro sera mas placentero aqui que si nos toca dar uno en el Delta. Ademas de mucho mas intimo...

Ese estremecimiento de sentir unas caricias que le habían recordar su existencia como humana perturbaban a la vampiresa, si bien quería a Alfredo, - aunque su relación permanecía en secreto - aquello era más bien un pacto de compañía en la otra vida que un amor, en el sentido pálido que los vampiros pueden comprender lo que es el amor. Pero con Antonia es distinto, había algo mucho más intenso y animal, algo que en ese punto atemorizó a Javiera,  pero se quedó en sobre sus piernas, sintiendo sus dedos en su oreja, su piel mas cálida. Era preciosa...

- Don Héctor tiene muchos recursos, deberíamos hablar con Alfredo para que intente persuadirlo para darnos a los matones que tiene, yo no podría, mi relación  con él es tensa y distante - no había que recordar las razones de que esa relación fuese así. Javiera se levantó lentamente y su claro rostro quedó a la misma altura del bello rostro de la blonda.

- está bien, al agua - le guiña un ojo y sonríe de medio lado, poniéndose de pie, su cuerpo delgado se había tornado más hermoso, a no vida le había dado un halo sublime, intrigante, caminó unos pasos, y se giró hacia la vampiresa de  tanga aguamarina -¿vamos?- dicho esto, avanzó al borde de la piscina, y se tiró en un perfecto piqueto, con sus brazos hacia delante para cortar el agua.

Te observa lentamente, estudiando tu figura, mientras saltas. Cuando vuelves a emerger, ella esta en el borde ya, estirandose, mientras mira pensativa a lo alto.

-Hector los necesita mas ahora... no va a aceptar.+comenta, con un deje extraño. Es probable que ella sepa cosas que quizas vos no, de la situacion en Entre Rios, y no seria raro, dado tu poca conexión con los Brujah militares de esa zona. Que sepas, de hecho, Alfredo es la unica excepción entre los fachos.+ No, querida, vamos a arreglarnos con algo mas local. A lo mejor Gregorio o Enrique tengan gente de la cual prescindir. 

Los nombres te suenan. Son otros dos primogenitos, de los clanes Toreador y Ventrue respectivamente. Dado los ambientes refinados de ambos, no seria raro que tengan guardias privados. Deberles un pequeño favor a ellos, a cambio de uno grande de Alexandria, suena justo. Pero mientras consideras esto desde el agua, ella da un gran salto en el aire. En vez de una gracil pirueta, no obstante, se sujeta las rodillas y cae como una bomba, cual niña pequeña, salpicando para todos lados...

Sale a la superficie sonriendose, con la lengua asomada entre sus labios, divertida por su travesura. Rapidamente da un par de brazadas hasta ti, y sientes sus manos rodeandote al apegarse. A pesar de la fresca agua, su cuerpo tibio se siente muy bien...

-Me encargare de eso. Igual no es tan importante. Con quien mas cuento, es contigo...+susurra, quedando muy cerca de tu rostro, mientras las gotitas se le escurren por la cara y los labios rosa. El agua les llega al cuello, las dos hacen pie bien. Pero por algun motivo, su pierna derecha se entrelaza con la tuya izquierda, apegandose mas....

Javiera debe reconocer que sus pudores salieron a la luz, esa fase de experimentación sexual había quedado atrás, entre los años, los "pitos" y esa locura adolescente y no tan adolescente, pero a esta altura de su vida, - no vida para ser exactos - la sensación de cosquilleo en el vientre se hizo más presente, una especia de miedo e intriga por saber que tanto de gata tenía Antonia y tanto de ratón tenía ella. Cerró los ojos y su frente se apoyó en el hombro de Antonia, sentía su cuerpo contra el de ella, su pierna contra su piel, si tuviera un corazón,este estaríaa mil, pero de eso, años habían pasado. Apoyó su frente y no supo la razón, pero Alfredo vino a su mente, ambos tenían un pacto de compañerismo, ¿había fidelidad?. Ahora, más su mente trabajaba que sus deseos, estos eran mucho más sencillos controlar en ese estado, es así que, Javiera, eludiendo su innegable atracción y sensualidad, e intentando hacer prevalecer "otros intereses", la rodeo con los brazos por la cintura y la acogió en su regazo, contra su cuerpo, contra sus pechos que ahora se presionaban contra los pechos de ella. Mojó sus labios, y su mano fue hacia los cabellos rubios de la traviesa vampiresa, y la juntó al hueco de su hombro, ahí, sus brazos la inmovilizaron más y más.

- espero no decepcionarte... pondré mi vida en tus manos, mi alma, si es que aún tengo una - era un susurro suave, tierno, y al mismo tiempo atractivo y embriagante. Besó su sien, sus cabellos que a pesar del agua de la piscina, estaban perfumados. Delicioso aroma - me encargaré de que... todo salga bien- se mordió el labio inferior sin que ella se diera cuenta, y la siguió abrazando de manera protectora.