Partida Rol por web

El ayuntamiento parece una casa destartalada que parece haber sido ampliada varias veces a lo largo de su historia. Dentro hay un desorden de estanterías y mesas todas llenas de pilas de libros y papeles. Podéis entrar forzando la puerta o intentando pasar por la ventana.

"Ya sean puertas o ventanas, estaran bien atascadas. Sera necesario un poco de fuerza, digo yo"

Doy unos segundos por si alguien tiene una idea mejor, y si nadie se opone, voy a forzar la puerta. Si fuerzo una ventana, hay posibilidades de acabar en el dormitorio de alguien (y dar la alarna) si forzamos la puerta, no tentamos tanto a la suerte

Los ágiles andares del brujo iban acompañados, en ocasiones, con el tintineo de los dos cascabeles que colgaban de la única rasta de su melena negra como el alma de los condenados, haciendo que sus forma de caminar resultara de lo más teatral, pero con una extraña solemnidad. No fue hasta que hubieron llegado al ayuntamiento que su extraña melodía rítmica calló.

Frunciendo el ceño, se rascó su rala perilla con espectacion, después miro a sus compañeros para que le dieran un momento para para echar un rápido vistazo a las inmediaciones de la decrépita finca.. pues el giamarga sabía que, a veces, no todas las opciones estaban a simple vista..

El dracónido sorprendre a los demás al forzar una puerta cuál ladrón. ¿De dónde habrá aprendido eso? Una vez dentro veis que todo está manga por hombro: hay centenares de libros, rollos... Tirad inteligencia para ver qué descubrís.

Con precaución, me dedico a mirar los documentos y los papeles alrededor.

Sabiamos a lo que vinimos: A buscar informacion sobre el nombre verdadero de Jack, y su caso. Y eso tiene que estar en algún lado. Así que continuo mirando y rebuscando.

"Tenemos que usar la 'hinteligencia' en esta parte de la misión" os susurro

Yinhe se sorprendió por las capacidades del dracónido.

- Sorprendente, amigo. No esperaba que alguien tan "chapado" a la antigua fuese capaz de tanta discreción. -

A continuación, puso su atención en los objetos que había en el suelo. Yinhe estaba acostumbrada a moverse entre libros antiguos y un ligero desorden, dado que sus antiguos maestros prestaban poca atención al orden, y mucho al conocimiento. Sabía desenvolverse en esos ambientes, y se notaba.

Empezó a rebuscar con cuidado entre las pilas de documentación, buscando la información que casase con los desvaríos de los pequeños espíritus burlones.

- Tratad de no hacer mucho ruido. Entiendo que los locales estarán poco atentos a los ruidos esta noche, pero no queremos sorpresas... -.

El carismático giamarga entró en la estancia y dibujo una sonrisa por la cantidad de libros, legajos y demás papeluchos que había por investigar. De esta manera el brujo eligió una pila de libros por la que empezar a buscar algo sobre el origen y sobretodo el nombre del jinete sin cabeza..

Algo tan destacado como esta maldición tiene que tener antecedentes o causas pretéritas escritas.. fijaos bien y no os dejéis nada.. 

El dracónido comienza a buscar y encuentra varios contratos hechos por el alcalde del pueblo para tratar de matar al Jinete Sin Cabeza. Pese a ello, parece que ninguno de los mercenarios los haya cobrado, es decir, nadie volvió con vida para cobrarlos.

Yinhe encuentra un documento de un tal Sir Baltus Brom, ejecutado por mantener relaciones con un ser feérico. ¡Bingo! Ese debe ser el nombre del jinete! Ahora solo os hace falta encontrar el paradero de la cabeza y llevarlos junto al portal.

Pese a ello Taar lee un manuscrito equivocado y los pergaminos parecen coger forma. En la biblioteca veis como numerosos rollos y papeles esparcidos por todos lados comienzan a unirse, creando una aberración de dos metros y medio de altura.

- Bueno chicos, creo que tengo algo...- dijo Yinhe guardándose el pergamino con el nombre.

Cuando se giraba, vio a sus compañeros buscar entre las cosas y escuchó al brujo leer... Algo extraño. Si voz sonaba... Mágica. Aquello no era buena señal.

Y justo mientras terminaba, sus sensaciones parecieron cobrar vida, convirtiéndose en algo...malvado. Maldición. Aquel pueblo no iba a ser su tumba, y menos aún, en una biblioteca.

Cargó, lanza en mano, y la hundió en el Golem de pergaminos. En cuanto la lanza se hubo asentado, la utilizó como apoyo para descargar una auténtica descarga de patadas, feroces y bien apuntadas. Parecía que la monje estaba descargando su furia...

Me quedo mirando al Golem de pergamino durante unos segundos

"Taar ¿Pero que narices has hecho?" digo con cara de fastidio. Más molestia que otra cosa. Así que extraigo mi arma, esa especie de sable con dientes aserrados, y me enfrento al inefable ser, mientras -musito, que hay gente durmiendo- el grito de guerra de la Orden a la que aspiro a unirme:

"Rip and Tear!"
Normalmente, sería un daño del que estar orgulloso ¡Pero el poder de Yinhe es simplemente abrumador ¡Menuda guerrera!

El brujo se zambulló en un mar de pergaminos y legajos, de tal forma que perdió la noción de lo que iba leyendo según iba desechando documentos.. hasta que los papeles comenzaron a conjugarse hasta forma un enorme golem de papel.. 

Dando unos cuantos pasos hacía atrás, Zildjian conjuró su rayo de hechicería* para luego sacar un pequeño talisman vistani para lanzarle un maleficio** al constructo.

Destruís el golem que vigilaba el ayuntamiento con pasmosa facilidad. Una maraña de papeles rotos se esparce por todo el lugar. Al no haber usado fuego, no habéis prendido el edificio y podéis salir sin tener que pasar por entre las llamas, ¡bien hecho!

Tenéis el nombre: Sir Baltus Brom. Ahora solo os falta encontrar su cabeza y reniros con los demás para llevarlo al portal, invocarlo y echarlo de este plano por siempre jamás.

"Bien hecho, compañeros! Yinhe... tienes que enseñarme a hacer eso ¡Menudo golpe!" digo recordando lo que ha hecho, y tratando de iniciar el movimiento.
Un movimiento magistral de hecho

Luego tomo una ramita y la lanzo al suelo, para que indique a donde ir. Y los hados me indican de ir al Aserradero. Un lugar donde el poder del Métal se impone a la madera.

"¡Por el Mëtal!"

El brujo sonrió satisfecho por haber vencido al extraño golem de papel. La actuación de sus compañeros había sido soberbia y aunque él había colaborado, lo que realmente le gustó fue que funcionaran como un reloj engrasado y puesto a punto.. de modo que todos resultaron intactos..

Muy buen trabajo, gente.. y si, impresionante técnica.. dijo apostillando lo que el paladín draconiano había dicho sobre Yinhe.. ya tenemos un nombre: Sir Baltus Brom.. dijo apuntandolo en su libreta.. ahora vayamos a ese aserradero a ver que podemos encontrar..

El sudor recorría la espalda de la monje.

Puede que para sus compañeros hubiese sido algo sencillo, pero ella había echado todo lo que tenía en aquel ataque. Por suerte, había sido efectivo.

- Dejadme... recuperar el aliento un segundo. Os sigo. -

De camino al aserradero, los tres vais vigilando que no se acerque ninguna bestia del averno. Pese a ser gente ya habituada al combate, os da cierta sensación de inseguridad el andar por estas calles malditas. De pronto, la jack O'lantern de Yinnhe se apaga. Luego la de Quatian. Os giráis, ¿qué diablos habrá pasado? No hay viento...

Dos de vosotros tres estáis a merced de Jack ahora si no le ponéis remedio. ¿Qué hacéis, qué habrá sido?

Sin dudarlo mucho, intento encender mi Jack'O Lantern con mi yesquero, mientras agilizamos el paso

"Shit, oShit-oShit-oShit-oShit-oShit"

Cuando las calabazas quedaron sin lumbre, el brujo se apresuró a realizar el cantrip de prestidigitación que permitiera volver a encender las llamas..

-Mierda, Taar, puedes iluminar la mía? No quiero perder la cabeza, aún. Y no hay viento... ¿es demasiada casualidad que las tres calabazas se hayan apagado a la vez. Alguna idea?