Partida Rol por web

Cragmaw consiste en una tribu de goblins,hobgobllins y bugbears,su líder es King Grol.
El castillo no es una contrucción hecha por goblins,fué contruida por humanos.La fortaleza consiste en 7 torres,aunque los niveles más altos estan colapsados,sigue siente habitable en la primera planta del casillo.

Para llegar al casillo habéis de tomar el sendero de Triboar.Para transportaros utilizais el carro tirado por dos bueyes, aexcepción de Ivellios que utiliza su yegua blanca como una nube.

Antes de llegar a vuestro destino,observáis que un grupo de stirges se dirije hacia vuestra posición.

Con el sol y la musica de Ingeir infundandoles valor y energia avanzaron tranquilamente por los senderos que el pequeño goblin les guiaba. Tanto el cielo como el camino estaban despejados y no se encontraron con los Redbran que habían enviado al castillo por el momento.

Pasadas unas horas divisaron a lo lejos un grupo de monstruos horrendos que les impedian el paso, por lo que no les quedó más remedio que parar el carro, dejar protegido al pequeño Goblin y avanzar hacia aquellas criaturas. Les superaban en numero y corrían el peligro de retrasarse demasiado o acabar heridos. No le gustaba la idea de desprenderse de mucha energía arcana, pero miró a sus compañeros y prefirió usarlo en vez de verles heridos, si reducia su numero a la mitad para un combate activo mejoraría las posibilidades de que no perdieran muchas energías. En un acto de pura velocidad desencadeno su potencial mágico apuntando al centro del grupo de monstruos.

Tras la marcha de Evyth, nuestro grupo había quedado un poco mermado, pero de todas formas nos dirigimos hacia el Castillo de Cragmaw. La travesía estaba siendo bastante tranquila, mientras nos concentrábamos en el inminente combate que tendríamos que entablar al llegar. Goblins, hobgoblins y bugbears nos esperaban allí. Sería duro, pero hasta ahora habíamos conseguido mantenernos con vida y esperaba que nuestra suerte continuara.

Un graznido lejano nos sobresaltó.

¡Preparaos! ¡Stirges!

Y desenfundé mi arma. La horda pasó por sobre d enuestras cabezas y lancé una estocada, con la esperanza de tocar a alguno de ellos.

Las criaturas caen como inconscientes,tras el hechizo de Ingeir.Trake se aprovecha de la situación y se deshace de una de ellas sin mayores problemas.

Una vez os desahecéis de las stirges,continuais el camino hasta llegar al bosque de Neverwinter.Desde este punto Ivellios y el goblin son capaces de guiaros,sin mayores problemas, hasta que podéis ver desde el horizonte el Castillo.
Está anocheciendo...

El encuentro con las stirges había sido testimonial gracias a Ingeir, ya que al quedar dormidos, la propia inercia de su vuelo les hizo estrellarse contra el suelo, haciendo su caída letal. Él se acercó simplemente a rematar la faena y a comprobar que no quedaba ninguna con vida. 

Salvo aquel incidente, y a pesar de no encontrar mayores contratiempos, había sido una jornada muy larga. Salieron al amanecer y ya estaba anocheciendo cuando divisaron el castillo. Aquello, junto con el hecho de que sus enemigos veían por la noche, aconsejaba descansar, al menos para neutralizar aquella ventaja táctica.

Las estriges cayeron todas al unisono e Ingeir se quedó con la boca abierta sorprendida, para nada esperaba que su conjuro hubiese sido tan efectivo. Perpleja como estaba por lo ocurrido, observó como el resto de sus compañeros acababan el trabajo. Se encogió de hombros como si no hubiera pasado nada y se volvió hacia la carreta. - Pequeñin, no te asustes, ya está el camino despejado, ¿Ves? Eran unos monstruos muy feos pero ya no nos molestaran. dijo sonriéndole para que siguiera adelante con ellos. - En marcha. dijo poniéndose la flauta en la boca y continuando la canción que había estado tocando antes de detenerse. 

Comenzaban a llegar al bosque de Neverwinter cuando el sol comenzó a tornarse rojizo mostrandoles un bello atardecer. El grupo estuvo de acuerdo en parar a descansar por lo que Ingeir, con el conocimiento adquirido durante su exilio buscó en el bosque un lugar donde estuvieran ocultos. - Aquí parece un buen sitio. Comentó a sus compañeros que no tardaron en trasladarse al lugar para descansar.

Acampáis y descansáis sin ningún problema.Una vez amanece os preparáis y avanzáis guiados por Ivellios y,en cuanto estáis a una distancia considerable del castillo véis a seis rufianes ,pertenecientes a la banda de Redbrand,deambulando alrededor del casillo.Según Ivellios están justo haciendo guardia en la entrada principal(oeste) y en la entrada secreta(sur). Sin embargo,el goblin os dice: Yo conozco otra entrada,al norte...

El descanso había sido plácido e Ingerir durmió tranquila rodeada de sus amigos. Cuando se despertó canturreo alegre mientras se preparaban para seguir el camino. Una vez se pusieron en marcha cesó su melodía y estuvo atenta al camino, estaban demasiado cerca como para montar alboroto.

Como se temía los redbrand están allí y eso suponía que tres bugbears más se habían añadido a las filas de los defensores del lugar. Ingerir se arrepintió de su decisión pero en aquel momento no vió otra salida. Se autoanimo viendo a sus compañeros. Hasta ahora habían sido imparables, seguro que rescataban a Gundrem sin problemas.

Cuando el pequeñin habló se le lleno la cara con una sonrisa y abrazó al pequeño. - Hasta ahora nos ha ido bien el ir sin llamar la atención les dijo a sus compañeros contenta de poder evitar combates innecesarios antes de encontrar al enano.

Aunque descansados, no estábamos en condiciones numéricas de afrontar varios combates para entrar a la fuerza. Lo mejor sería actuar como una especie de guerrilla. Infiltración, actuación y salida. No tenía demasiado claro el fiarme del goblin, pero de la que si que me fiaba era de Ingeir y de su criterio y si ella consideraba que el pequeño nos podría ayudar, bienvenido fuera.

Confío en tus decisiones Ingeir. Si crees que podemos fiarnos del verde, adelante. Llévanos a esa entrada secreta que conoces.

El goblin os guia hasta la entrada norte del castillo y,una vez estáis ubicados,la criatura verdosa se aleja de vosotros,escondiéndose entre la maleza. La torre que tenéis enfrente está totalment colapsada,aunque entre los escombros hay un hueco que invita a entrar...

- Esperanos aquí pequeñin, buen trabajo. le susurró Ingeir al Goblin al ver que se escondía.
- Ya estamos aquí chicos, intentemos liberar al enano sin que nos descubran. les dijo a sus amigos.

En la entrada norte, debíamos ser rápidos o nos verían.

Vamos, chicos. Adelante. No podemos quedarnos a la vista más tiempo o nos verán.

Me dirigí a la entrada para comprobar que estuviera abierta o estuviera protegida con algún tipo de trampa.

Tras la inspección de Trake, y una vez que este comentó que no había trampas aparentes, Roderic escudo y javalina en mano se adentró por la oquedad.

Ahora que Clare había abandonado el grupo la disposición táctica debería ser un poco diferente. Él en vanguardia, seguido de Trake para que este pudiera anticiparse en la detección de trampas. Después Ingeir y cerrando el grupo Ivellios.

Cajas maltrechas y barriles podridos por el tiempo muestra que hubo provisiones almenazados en la sala en la que habéis entrado sin problemas.

Una cortina bloquea el paso hacia el sur,y una puerta de madera os dirige hacia el este del Castillo...

Podéis percibir voces,procedentes de varias partes del Castillo,tanto del este como del oeste y el sur,y debido al tono,casi inaudible de las voces,podéis decir que no están cerca.

No se separó de la espalda de Roderick en ningún momento y asomaba la cabeza con curiosidad para ver que había más adelante, oía voces en la lejanía pero nada cerca de ellos. Lo mejor era que no se confiaran por lo que afinó el oido y su vista para que no fueran sorprendidos.