Partida Rol por web

Tu madre te calla tapando tu boca con uno de sus dedos. En el fondo, sientes como si sonriera.

Ahora, con su brazo, señala hacia el pie de la montaña. Al mirar, ves a miles de humanos todos mirando hacia vosotras. También sin rostro.

Las nubes empiezan a brillar por los relámpagos de la tormenta.

¿Tú también nos vas a abandonar? retumban en tus oídos miles de voces de seres humanos.

Antes de poder responder, un rayo atraviesa el cielo e impacta directamente sobre ellos. No caen ni son mutilados, pero rápidamente un fuego comienza a consumirles.

Un mar de llamas hace que esos humanos empiecen a agonizar consumidos por el dolor

¡Ayúdanos!

No consigues olfatear a nadie. De hecho, ese niño parece que tampoco tiene olor.

Las nubes empiezan a brillar por los relámpagos de la tormenta. El niño se levanta y da un paso atrás

¿Tú también nos vas a abandonar? retumban en tus oídos miles de voces de seres humanos.

Antes de poder responder, un rayo atraviesa el cielo e impacta directamente sobre el niño. No cae ni es mutilado, pero rápidamente un fuego comienza a consumirle.

Tras él, aparece la figura de cientos de humanos en un mar de llamas, consumidos por el dolor

¡Ayúdanos!

El niño se llevó las manos a la cabeza y gritó. El grito estaba lleno de desesperación y de dolor, algo que os llegó a vuestros corazones enamorados y os dolió como si fuera vuestro el sufrimiento.

Se alejó un paso de vosotros

¿Vosotros también nos vais a abandonar? retumban en vuestros oídos miles de voces de seres humanos.

Antes de poder responder, un rayo atraviesa el cielo e impacta directamente sobre el niño. No cae ni es mutilado, pero rápidamente un fuego comienza a consumirle.

Tras él, aparece la figura de cientos de humanos en un mar de llamas, consumidos por el dolor

¡Ayúdanos!

El sufrimiento de aquel niño me hería por dentro... las voces y lamentos de los humanos no paraban de resonar en mi cabeza...

Miré a Selene y le dije:

Debemos de ayudarlos... no podemos cruzar los brazos ante esta situación...

Señalé al niño que se consumía y le dije: No me imagino si este chiquillo fuera nuestro que atrocidades pensaria mi mente atormentada por el dolor...

Pero sé que ahora cubierta por la lucidez puedo decir... Coge mi mano y avancemos juntos para ayudarlos...

Lentamente, comienzo a avanzar hacia lo humanos. Veo su sufrimiento. Sus gritos de auxilio. Los dioses me fallaron a mi. ¿Como puedo yo fallar a esa gente? Los dioses deberían ayudar a los demás, no deberían fallarles. Deberían mostrarse comprensivos y conciliadores, no arrogantes y caprichosos. ¿Por que pensaba todo esto? No lo sabia. Pero mientras me acerco a los agonizantes humanos, mi ritmo acelera más, movida por la angustia, hasta el punto de casi correr hacia ellos. ¡Deseo ayudaros!- grito. ¿Pero como puedo hacerlo? ¡Yo no os abandonaré! ¿No lo haras?- pregunta una voz en mi cabeza. Sólo son insignificantes humanos. Cierro los ojos para ignorar esa voz, y sigo avanzando. ¿Cómo puedo ayudaros?

Esto no es reallll.....

Pensó Hecate mientras se acercaba al pobre niño consumido por el rayo sin poder emitir palabra alguna.

Lugo miro al ondo aquellos humanos que pedían su ayuda, eran tannnnn débiles. Y las llamas comenzaban a exterminarlos.

la diosa extendió la mano hacia ellos. Y dijo

no sois merecedores de una muerte así, vuestra existencia me da vida y poder, no os abandonare a vuestra suerte.....

ny trato de apagar el fuego aun a sabiendas de ue era al imaginario

Sin duda es obra de el! furiosa me vuelvo a transformar en mi forma humanoide y sin prestarle atencion a los humanos alzo mi rostros al cielo y grito ZEUS! Que esta pasando aqui? pregunto pero no espero respuesta, me vuelvo hacia los humano Que paso? Que han hecho ahora para merecer la ira del Rey de los Dioses? Que han hecho para que el Padre de los Dioses y de los humanos desate toda su furia de esta manera!? 

La cuenca vacía de los ojos del niño parecen miraros.

El fuego robaron y nos ofrecieron.

Ahora, todos moriremos

Todas las llamas se funden en una sola. Los humanos desaparecen entre ellas, pero sus gritos de dolor siguen resonando en vuestros oídos

Pero, de pronto, el fuego desaparece. Ya no hay nada, ni una huella de las llamas.

Con un poderoso trueno, la oscuridad se hace total a vuestro alrededor. No veis nada, salvo a vosotros mismos

Y, en el lugar donde estaba el niño, aparece alguien. Le reconocéis perfectamente. Es la diosa Atenea.

La cuenca vacía de los ojos del niño parecen mirarte.

El fuego robaron y nos ofrecieron.

Ahora, todos moriremos

Todas las llamas se funden en una sola. Los humanos desaparecen entre ellas, pero sus gritos de dolor siguen resonando en tus oídos.

Pero, de pronto, el fuego desaparece. Ya no hay nada, ni una huella de las llamas.

Con un poderoso trueno, la oscuridad se hace total a vuestro alrededor. No ves nada, sólo a ti misma

Y, en el lugar donde estaba el niño, aparece alguien. Le reconoces perfectamente. Es la diosa Atenea.

La cuenca vacía de los ojos de los humanos parecen mirarte.

El fuego robaron y nos ofrecieron.

Ahora, todos moriremos.

Todas las llamas se funden en una sola. Los humanos desaparecen entre ellas, pero sus gritos de dolor siguen resonando en tus oídos.

Pero, de pronto, el fuego desaparece. Ya no hay nada, ni una huella de las llamas.

Con un poderoso trueno, la oscuridad se hace total a vuestro alrededor. No ves nada, sólo a ti misma

Y, en el lugar donde estaban ellos, aparece alguien. Le reconoces perfectamente. Es la diosa Atenea.

La cuenca vacía de los ojos del niño parecen mirarte.

El fuego robaron y nos ofrecieron.

Ahora, todos moriremos

Todas las llamas se funden en una sola. Los humanos desaparecen entre ellas, pero sus gritos de dolor siguen resonando en tus oídos.

Pero, de pronto, el fuego desaparece. Ya no hay nada, ni una huella de las llamas.

Con un poderoso trueno, la oscuridad se hace total a vuestro alrededor. No ves nada, sólo a ti misma

Y, en el lugar donde estaba el niño, aparece alguien. Le reconoces perfectamente. Es la diosa Atenea.

Hecate no deja de salir de su asombro....que demonios significaba aquello? Solo lo sabría de una sola manera, preguntándole. La diosa de la sabiduría.

Atenea!? Tu aqui?

Dime....que es todo esto? Que sucede?

tan solo esperaba que Atenea le aclarase las dudas

Selene no pudo evitar taparse los oídos. Estaba sintiendo el dolor de toda la humanidad. Se sentían abandonados. Algo estaba sucediendo. Actos terribles. ¿Pero por quién?

Los relámpagos la daban una ligera idea, pero ¿quién les había abandonado?

Amado Helios, no podemos abandonarlos nosotros también. Somos dos de los dioses más importantes del mundo. Sin nosotros los humanos desaparecerían. Se desharían como lo si el propio Hades le arrebatase la vida.

Tenemos que ayudarles.

Además esta oscuridad no me gusta. Mira allá.

Dice Selene señalando los extraños ojos. No te resulta familiar esa imagen. Es la hija de Zeus, es Atenea. 

Tomo la mano de Helios y le llevo ante ella. Dinos, eres realmente tú, qué ha sucedido. ¿Sabes algo?

Veo como Atenea se acerca a nosotros y le digo:

Supongo que vienes por lo que está sucediendo a los hombre... Eres la diosa de la Sabiduría... Nada escapa a tu conocimiento... dinos Atenea... ¿Qué debemos hacer?.

¿Debemos de cruzar los brazos y seguir observando su desdicha?... ¿Debemos de mirar hacía otro lado y esperar a tiempos mejores?... ¿O debemos de ayudarles?...

No creo que podamos tener mayor consejo que el tuyo... Guiaremos el poder del sol y de la luna bajo tu mirada... pero dinos lo que debemos hacer... y dinos tambien ¿Quien era ese pequeño que rodea su cuerpo entre nubes?.

Eran unas cuantas preguntas pero no demasiadas para la Diosa del intelecto...

¡¿Que clase de locura es esta?!- grito al aire, desesperada. Fuego, miedo, oscuridad, destrucción... Las imágenes pasan demasiado rápidas, y parecen totalmente inconexas. Parece que tratan de advertirme algo, pero... ¿quién? ¿Y por qué?

Entre tanto caos, es todo un alivio reconocer la familiar silueta de Atenea. Me acerco rápidamente a la diosa virgen.

¡Atenea!- grito. ¿Qué está corriendo? ¡Todo esto no tiene el más mínimo sentido!

La diosa Atenea se acerca hasta ti y posa una mano en tu hombro. Con una sonrisa cálida te mira y hace que camines a su lado

Esto no es real. Pero puede serlo.

Su rostro cambió a la preocupación. Una vena cruzó su frente y su mirada se entristeció

Tengo luchar por la humanidad, y tu debes ayudarme. Mira allí

En la dirección  que te indica, ves el templo de Atenea en Atenas, tan espléndido como siempre… Pero un rayo parte el cielo y el fuego consume el templo poco a poco

Ven a buscarme a mi templo de la Isla de Naxos. Si así lo deseas, podremos hablar…

Poco a poco, su cuerpo se va convirtiendo en humo. Lo último que puedes ver son sus ojos llenos de ternura, contemplándote.

La diosa Atenea se acerca hasta ti y posa una mano en tu hombro. Con una sonrisa cálida te mira y hace que camines a su lado

Esto no es real. Pero puede serlo.

Su rostro cambió a la preocupación. Una vena cruzó su frente y su mirada se entristeció

Tengo luchar por la humanidad, y tu debes ayudarme. Mira allí

En la dirección  que te indica, ves el templo de Atenea en Atenas, tan espléndido como siempre… Pero un rayo parte el cielo y el fuego consume el templo poco a poco

Ven a buscarme a mi templo de la Isla de Naxos. Si así lo deseas, podremos hablar…

Poco a poco, su cuerpo se va convirtiendo en humo. Lo último que puedes ver son sus ojos llenos de ternura, contemplándote.

La diosa Atenea se acerca hasta vosotros y posa una mano en el hombro de Selene. Con una sonrisa cálida os mira y hace que caminéis a su lado

Esto no es real. Pero puede serlo.

Su rostro cambió a la preocupación. Una vena cruzó su frente y su mirada se entristeció

Tengo luchar por la humanidad, y tu debes ayudarme. Mira allí

En la dirección que os indica, veis el templo de Atenea en Atenas, tan espléndido como siempre… Pero un rayo parte el cielo y el fuego consume el templo poco a poco

Ven a buscarme a mi templo de la Isla de Naxos. Si así lo deseas, podremos hablar…

Poco a poco, su cuerpo se va convirtiendo en humo. Lo último que podéis ver son sus ojos llenos de ternura, contemplándoos. 

Atenea que esta pasando? Que es todo esto? le pregunto, pero luego de pensarlo un poco prefiero repreguntar Que lo ha crispado a Zeus? 

La diosa Atenea se acerca hasta ti y posa una mano en tu hombro. Con una sonrisa cálida te mira y hace que camines a su lado

Esto no es real. Pero puede serlo.

Su rostro cambió a la preocupación. Una vena cruzó su frente y su mirada se entristeció

Tengo luchar por la humanidad, y tu debes ayudarme. Mira allí

En la dirección  que te indica, ves el templo de Atenea en Atenas, tan espléndido como siempre… Pero un rayo parte el cielo y el fuego consume el templo poco a poco

Ven a buscarme a mi templo de la Isla de Naxos. Si así lo deseas, podremos hablar…

Poco a poco, su cuerpo se va convirtiendo en humo. Lo último que puedes ver son sus ojos llenos de ternura, contemplándote.