Partida Rol por web

Tras un par de días de intensa actividad en vuestros quehaceres, os queda un buen sabor de boca. Aleena encontró fácilmente a su marido y sus hijos, pues Jonny había seguido al pie de la letra sus instrucciones. Queda un poco abrumado ante la perspectiva de lo que se le pide, nada más y nada menos que dirigir el negocio del Trasgo Dorado, pero reacciona rápido y toma las riendas.

Reabris el Trasgo y obtenéis un gran éxito... dadas las circunstancias. La ciudad está lejos de recuperarse de la catástrofe de la caída del meteorito, pero la gente acude para intentar ahogar sus penas en el alcohol, otros para probar suerte e intentar salir de la miseria, y otros simplemente a observar los acontecimientos. Pero ni mucho menos el salón se llena, eso está claro. Eso sí: en boca de todos está el tema de moda, la estrella caída y las oportunidades que pueda ofrecer lo que haya traído consigo. Se habla de metal estelar, quizá hubiera caído adamantita alí, o quizá otros metales tan raros como ese.

Al día siguiente de la reapertura del Trasgo, Kwava aparece.

Hola a todos. Traigo noticias de mis superiores. En primer lugar quieren daros las gracias por acabar con la amenaza, y por guardar el secreto. Confían en que siga siedo así. Pero me han indicado que tienen problemas para enviar más agentes a PuertoEnigma, y que lo harán en cuanto les sea posible. Mientras tanto os piden que nos ayudéis a investigar más en profundidad la presencia de drows aqui, y temen que hubiera más en la isla. Por supuesto, se os recompensará por ello.

A pesar de las dificultades de la ciudad para proporcionar transporte, hemos conseguido que una nave os pueda llevar a la isla. Un navío llamado La Nube Voladora ha arribado hace poco al puerto, y está en perfecto estado para navegar.

¿Qué os parece? ¿Nos echaréis una mano?

- ¿Toda la ayuda que nos vais a dar es pasaje en un barco? Perdona pero nosotros no somos miembros de tu organización para que nos ninguneen de esa forma, contesta Eleâmail decepcionado por la situación.

El-Rohir, sin embargo, ya se esperaba lo dicho por Kwava, después de todo, una organización que está a varios días de camino, en dos días poco puede hacer, y menos si calla la presencia de malvados elfos drow a sus agentes y les envía a la muerte.

-Tranquilos amigos, en cuanto acabemos con la amenaza de los Drow seguro que nos dan una medalla. De esas de latón. -susurra.

-De todas maneras... ¡Seguro que nos esperan grandes riquezas venidas del cielo, y gracias a la Señora!. ¡Dejemos las últimas cosas listas y al barco!

La perspectiva de un viaje siempre le animaba.

Yo... yo lo más que puedo hacer es acompañaros... No se me ocurre otra cosa. Debería quedarme aqui para contactar con mis superiores y por si consiguiera llegar más ayuda, pero... podría ir con vosotros, si queréis.

- Dejalo Kawa. Nos bastaremos solos... Ya habeis oido a El-Rohir, empaquetad vuestras cosas. Que alguien se encargue de coger viandas, elementos de acampada y cuerdas y garfios de escalada. Conviene estar prevenido. Si os parece dedicamos el dia de mañana a organizar todo, a rezar a nuestros dioses y pasado mañana, al alba, partimos.

Bien, como queráis. En ese caso intentaré que envien agentes lo antes posible. Avisaré al capitán de vuestro planes para que esté preparado. Si me disculpáis - dice levantándose - tengo obligaciones que atender.

Dicho esto, Kwava se retira y os deja solos.

- En fin, lo que ya sabíamos...estamos solos - dice Eleânail colocando la copa apurada sobre la mesa. No olvidemos llevarnos bebida, es probable que haga frío y es la mejor forma de entrar en calor.

-Yo te sugiero una manta o una elfa de buen ver.-Comentó El-Rohir.- En mi amplia experiencia cualquiera de esas dos alternativas es mejor que la bebida.-A pesar de lo que dice no rechaza la cerveza que le pasa Aleena.

- Es mejor así, nosotros nos conocemos, nos compenetramos bien, y sabemos cuidar de nosotros mismos. La ayuda nunca está de más, pero se por experiencia que las unidades que se unen más tarde a un pelotón que funciona de manera autónoma suelen dar más problemas de los que ayudan a resolver. Y si tienes frío Eleânail, unos ejercicios con la espada suelen ayudar a entrar en calor. Y si no, haz caso a El-Rohir. La bebida es como una amante: te da calor al acostarte, pero se marcha temprano, y cuando te despiertas estás helado hasta los huesos.

- Acabas de describir mi vida Erion, ¿acaso nos conocemos de antes y no lo recuerdo? - pregunta divertido el elfo por el doble sentido de la pregunta

- No sabría decirte, amigo. Antes de consagrarme a Iomedae di varios tumbos como soldado por ahí, así que es posible que coincidiéramos en alguna parte, - ahogo una carcajada al comprender la pregunta - pero desde luego, no de "esa" forma.