Partida Rol por web

Oh primo! Creo que iré a la posada a comer algo y a reservar unas habitaciones. (Pongo voz fatigada)

Después de asearme un poco iré directamente hacia el manantial y nos encontraremos alli. Te parece bien?

Kellen, Nyx... alguno quereis veniros conmigo?

Miro a Cirthana y con una expresión seria y poniendo varios dedos de una de mis manos sobre las suyas digo.. Pequeña sacerdotisa, estaros segura de que las apariencias engañan y de que solucionaremos lo antes posible nuestro cometido, hicieron bien en enviar a Koya, pues no conozco persona con mas honor y mas dedicada que el a... bueno, a esto de las religiones.

Después de mis palabras, emito una pequeña sonrisillla falsa y me doy suavemente la vuelta para irme por la puerta... y según me voy... Invitare a comer al primero que venga conmigo!

Realmente me voy pensando mmm... Laurel, una herborista... un manantial... quizá nos guarde algo la montaña de donde provenga.

Quizá no deberíamos separarnos... Aunque la invitación a comer suena tentadora... Kellen se dió cuenta en ese momento que no habían comido aún nada.

El comentario de Victoria rompe mi embelesamiento de contemplar el templo.  Me giro rápidamente y sin demora digo -
¿ Cerveza gratis ?.   Un buen comerciarte nunca rechazaría eso. - Alzo la mano con el índice apuntado hacia arriba.

Con pasos largos y decididos me dirijo hacia la salida junto a Victoria, ignorando a Koyaanisqatsi y a la sacerdotisa.
Dejémoslos, que tendrán cosas de que hablar.  Te esperamos en la posada !No te demores o comeremos sin tí.

Hago un gesto distraído de despedida con la mano.  Ya saliendo, me dirigo a Victoria -
Oye, ¿Cómo has llamado al paladín? ¿Koya? ... Umm ... ! Me gusta ! . ¡ Es que tu primo tiene un nombre tan largo !

Puesto que la conversación con la sacerdotisa se ha descoordinado, aún cuando el encuentro hubiera dado para más, será mejor descartar la persuasión y cerrar la "escena" para no liarlo mas.

Arrrggg (digo refunfuñando) estaaa bieen!

Me paro al escuchar el comentario de Kellen, doy media vuelta, me agacho un poco y le doy un beso en la mejilla.

Eres un chico listo y tienes toda la razón! Os esperare en las puertas del templo.

Y me voy pensando ... ¿sera un niño o sera un hombre ya?

Entonces marchemonos!

Aunque este saliendo ya de la sala hacia la salida del templo, levanto la mano en gesto de despedida.

Cuando Nyx este cerca mia le comento...

Sí, Koya es un formidable paladín, lo único es que el pobre esta muy estresado porque quiere dejar siempre una buena impresión. ¿Que te parece si por ahora evitamos tomar cualquier tipo de agua? Aunque sea de vagabundos quizá deberíamos tomar por un par de días raciones de viajes secadas y algo de vino o cerveza, puede que "la Laurel" esa tenga algo de razón.

Y en mi cabeza... mas tarde pensare si esto es contagioso y debemos sacrificar todo el pueblo.

¿Tu también andas buscando a alguien como Kellen?

Mientras vamos andando pregunto por la posada mas cercana a el templo al primer viandante que encuentre.

Me temo señor Koyaanisqatsi que probablemente no les dejen acercarse al manantial de Brookman, la guardia del pueblo está ahora más preocupada de evitar la aparición de nuevos casos, que de curar a las personas que aún quedan enfermas.

Cirthana pone una cara bastante extraña mientras habláis de ir a la posada a comer, asearos y descansar.

Cuando dices esas palabras Victoria, Cirthana recupera su expresión y te dice - Muchas gracias Victoria, gracias por vuestra ayuda, realmente disponemos de poco tiempo si queremos salvar a aquellos que aún están enfermos.

Muchas gracias Nyx, efectamente no es como la había planeado, se hicieron demasiadas preguntas y acciones de golpe, sin demasiada coordinación y he apañado la escena como buenamente he podido. Espero que no vuelva a pasar.

Siento si no has podido interpretar las cosas como te habría gustado.

⁽¹⁾ Alzo la cabeza, con una renovada energía, apremiando a mis compañeros -
Bueno, nos encontraremos en el manantial ... o cerca de él - digo, recordando lo de los guardias en el manantial.

Ya de camino hacia la posada, contestando a Victoria sobre lo de comer raciones de viaje, digo -
Sniff, supongo que tenéis razón:  será no abusar de la comida y el agua del lugar -
con actitud apesadumbrada, relajando los hombros y expulsando un leve suspiro.

Finalmente, con la mirada fija al frente y sin esperar respuesta, comento -
Mientras él va a hablar con Lauriel puede que consigamos algo más de información de los lugareños si tienen con una jarra de cerveza en la mano.

Después de averiguar donde se puede encontrar a Laurel, Koyaanisqatsi va hacia ese rumbo...

Hablo con Koyaanisqatsi y decido acompañarle hasta donde se encuentre Laurel.

Conozco algo de herbalismo y medicina, me gustaría ver que puede contarnos esa herbalista... dice Kellen a Lady Cirthana antes de salir detrás de Koyaanisqatsi.

Nos vemos luego, le dice a sus compañeras.

Cuando nos alejamos por el camino, Kellen le dice a Koyaanisqatsi , ¿Te has dado cuenta de que es posible que la clérigo no crea mucho a esa herbalista?

Son dos religiones diferentes Kellen, -le explicó- por eso luego no se entienden unos y otros.  Yo la tengo fácil, pues Eldath es diosa y naturaleza.  Ellas no.  Pero, bueno, como finalmente a ambas mujeres les interesa el bien del pueblo, confiemos en que cuando se necesite, actuarán juntas.  Vamos.

Después de un rato de caminar y pensar en lo que había dicho el gnomo, le dijo:   Y si, vamos por dos cosas: causa y remedio.  El remedio podrá estar en alguna hierba o poción, pero la causa, como bien sospechan tu y mi prima, debe poderse ver en el manantial.  Eldath dice que el estado del agua de un manantial o un río es el espejo de todo lo bueno, o malo, que pasa a su alrededor.  Si jalamos de ese hilo, de agua, encontraremos seguramente quien, o qué, está causando esto...  Tenemos que visitar ese lugar de agua, más pronto que tarde.

Salís del templo mientras Koyaanisqatsi y Kellen terminan de despedirse, y acordáis quedar con ellos en el manantial. Volvéis a estar en la avenida principal, por lo que pudisteis comprobar mientras veníais a lo largo de la propia avenida podéis encontrar tabernas y posadas, según cuales sean vuestras necesidades.

Según avanzáis veis algo más de movimiento de gente por las calles, la hora de la comida ha pasado ya y todo el mundo vuelve a sus labores de nuevo.

Desde el punto donde os encontráis podéis ver una posada, que identificáis por un enorme letrero de madera en el que pone "La Posada de Brande" y una taberna con un pequeño letrero llamada "El Venado Azul". A estas horas del día veis algó más de ajetreo en la taberna que en la posada, pero ninguno de los dos establecimientos parece tener mucho ajetreo.