Partida Rol por web

Bien. Ya visualizo la marcha del nuevo día que nos alejará de aquí. Esperando también que el camino nos sea propicio y encaremos el buen destino.
- Allá voy. Echaré un vistazo. No os entretengáis.
Me dirijo por donde he visto pasar los jinetes con la intención de determinar si fueron sólo los tres que vi. Y si se veía algún tipo de rastro como jirones de ropa rasgados en las puntas de las ramas que más se adentrasen al camino. A esa velocidad que iban bien fuera posible que rozaran con la vegetación de los márgenes.

     -- Mientras termino de preparar las cosas para ponernos en camino lo antes posible espero con nerviosismo lo que diga Rothrim, ya que espero que encuentre huellas y rastros fisicos de los jinetes que todos hemos visto y no se confirmen mis mas oscuras sospechas...

Te acercas al Gran Camino de Este, por donde vistes pasar los tres jinetes corriendo. Una vez allí, ves que el camino, como es normal es muy transitado, por lo que hay miles de pisadas dibujadas en él. Pero has tenido suerte, la lluvia de la noche no sólo no ha borrado las pisadas de los jinetes, sino que las ha resaltado con respecto a las demás. Ves claramente que sólo había 3 caballos en la comitiva. 

Me pongo en marcha junto a Rothim a ver qué podemos observar en lo que nuestros compañeros acaban de prepararse y recoger para salir en camino.
Espera Rothim, voy contigo

Te acercas al Gran Camino de Este, por donde vistes pasar los tres jinetes corriendo. Una vez allí, ves que el camino, como es normal es muy transitado, por lo que hay miles de pisadas dibujadas en él. Pero has tenido suerte, la lluvia de la noche no sólo no ha borrado las pisadas de los jinetes, sino que las ha resaltado con respecto a las demás. Pero no consigues averiguar si son 3 o 5 jinetes  los que han pasado.

Observo, me detengo, ando unos pasos por el margen del camino, levanto la vista hacia la dirección que siguieron los jinetes,... - Thorin, está claro que fueron tres los jinetes, puede que la lluvia se haya llevado algo, pero yo no veo nada más que nos pueda servir de pista para identificarlos. ¿Has visto algo más?

Veo pasos pero no sabría especificar cuantos jinetes habría. Debemos ir con cuidado por si acaso, al menos van dejando rastro

     -- Una vez todos han embalado sus pertenencias y estan preparados para partir, vuelvo a mirar el lugar asegurandome que no olvidamos nada, asi como intento esparcir las brasas de la hoguera, y ocultar en la medida de lo posibles, o dificultar lo mas posible, cuantos eramos lo que acampamos alli.

   -- Espero que vuelvan pronto nuestros compañeros con buenas noticias...   

Vuelvo con nuestros compañeros para comentar lo que descubrimos.
Chicos debemos ir con cuidado, ayer tuvimos visita, tal y como pensábamos pasaron unos jinetes por aquí. Van delante nuestra. No sabría decir cuántos son, Rothim cree que son 3. Vayamos en amerta, si vamos por el camino seremos más fácil de visualizar, no sé si deberíamos adentrarnos un poco entre la maleza y los árboles para ocultarnos un poco. ¿Cómo lo veis?

Tras bajar con los pertrechos y el animal a la salida del viejo enclave nos tropezamos con Thorin que nos sale a la carrera para informarnos de lo acontecido.-¡Mal rayo me pele las barbas!No nos cuentas nada nuevo, ayer mismo en el relevo te dije que fueron tres jinetes, menudos rastreadores de tres al cuarto que estáis hechos. Me da igual que nos vean llegar, no quiero perder más tiempo con todo esto pongámonos en marcha cuanto antes tenemos todo el día por delante, dudo mucho que los caballos se muevan bien por el bosque por donde vamos a pasar. Venga, movámonos quiero poner cuanto más tierra de por medio mejor con este lugar maldito.- pateando una piedra a un lado empezó a caminar con el pony bien sujeto por las riendas a esperar de que el resto le siguieran. Hoy su mal humor era más que fundado por los oscuros sueños que había vivido en aquel lugar.

     -- Pocas cosas nuevas nos cuentas Thorin, pero bueno quiza sea mejor asi, sabeis si los jinetes marcharon en nuestra direccion o tomaron otro camino, pregunto mientras con mi mochila sigo los pasos de mis compañeros, y eso aligeremos el paso, cuanto antes marchemos de este lugar mas tranquilo me sentire...  

Volví junto a los Kramghrat y Bodolf junto a Thorin.
- La lluvia se ha llevado cualquier otro rastro que pudieran haber dejado - me excusé ante las quejas de Kamghrat - y sí, fueron tres jinetes iendo dirección a La Última Posada. Detrás de ellos no parece haber pasado nadie más. Vámonos, yo también tengo ganas de perder de vista este bosque.
Alegre por el comienzo de la marcha, pongo ritmo a mis pies y empiezo a calentar las piernas y con ellas llega el envolviente calor por todo el cuerpo que me produce andar caminos y atravesar bosques y sus distintos paisajes.

El viaje hacia el Páramo Largo sucede de forma tranquila. Atravesáis la parte del bosque saliendo del camino para enganchar con la senda que lleva a Camenth Brin. El Páramo Largo está situado en el extremo suroriental de los Páramos Fríos de Eriador, junto al Bosque de los Trolls y justo al norte del río Bruinen (Sonorona), que habéis cruzado en el único vado del camino. 

Una vez allí observáis el bello paisaje. Su diseño utiliza características naturales para crear un efecto de maravilla y grandeza, enfatizando el hecho de que las creaciones fantásticas más efectivas son, a menudo simples modificaciones de los dones de la naturaleza. Una enorme escarpadura de granito gris domina el río Bruinen en su terminación en forma de lago. Es una elevación imponente. Lo que parece ser un risco de cien metros de altura culminando en la cima de un saliente llamado la Frnete del Páramo.

El paisaje esta acompañado de grupos de árboles sueltos, alejados de las espesuras de los bosques que habéis atravesado, con una vegetación verde imponente y hermosa. Un olor a fresco y húmedo agradable. La aguas del lago son inmensas y cristalinas. El tiempo a acompañado a reflejar la belleza del lugar, con restos de nubes de la noche anterior, dejando ver un cielo azul claro e intenso. 

     -- Una vez nos alejamos de la torre, creo que se nos esta pasando el desasosiego de la noche, y quiza con un poco de mejor humos que a primera hora de la mañana, una vez que acampemos a comer algo, pregunto:

   -- Y bien Kramghrat, este es el camino que debíamos seguir según tus cálculos, espero que si, por ahora hemos tenido suerte pero no creo que debamos bajar la guardia, parece que para ser un bosque esto esta muy transitado.

Cuando llegaron al Páramo Largo Kramghrat buscó un sitio donde poder descansar y comer mientras desplegaba el mapa tras limpiar una piedra comentando las nuevas con sus compañeros.- Bien muchachos, recordáis el túnel junto al arrolló ¿verdad? esa era la salida del camino bajo. El cual viene por el noreste hasta acabar aquí, al ser un acueducto construido por las técnicas de nuestro pueblo el patrón de tallado de la roca no puede desviarse mucho en este tipo de construcciones siendo la linea recta la mejor solución pero no siempre es posible por los imprevistos que pueda haber.-calculó algo mentalmente y saco un pequeño compás para medir algo sobre el mapa- Sabemos el final y sabemos que el río debe nutrirse de las aguas de este lago que tenemos frente a nosotros, pongamos un generoso margen de desviación de cinco kilómetros y ya tenemos lo que buscábamos. Tan solo debemos seguir el macizo de granito hasta encontrar el punto por donde el lago canaliza sus aguas hacia el acueducto, es más fácil de decir que de hacer pero sino nos ponemos manos a la obra no lo conseguiremos jamás. En circunstancias normales diría de separarnos pero vista la presencia de los jinetes, los Cultirith y dado que la vieja podría haber contratado mercenarios prefiero que nos mantengamos los cuatro junto, si os parece bien después de comer remontaremos el Páramo hacia el norte unos cinco kilómetros buscando una posible entrada oculta en la roca. En algún lado tiene que haber una escalera que comunique con el camino bajo, al anochecer acamparemos, al día siguiente volveremos a bajar y ampliaremos la búsqueda hacia el sur. Debemos tener en cuanta que para volver a la posada tardaremos dos día de marca, ya hemos viajado dos, por tanto aún tenemos tres días para poder buscar a fondo esa maldita entrada. Estamos cerca, algo me lo dice en mis viejos huesos, tan cerca y tan lejos pero con esfuerzo seguro que daremos con el tesoro como naugrims que somos.¡Barud Khazad, hermanos!-la certeza de sus cálculos y la seguridad en sus habilidades reforzaban sus creencias y esperanzas, eso y haberse alejado del bosque Yfel.

Durante todo el recorrido has permanecido con los ojos bien abiertos, por si veías alguna planta con propiedades, tanto para bien, como para mal. Pero a pesar de que el terreno es propicio para que crezcan, no has encontrado gran cosa. Quizás sea porque no hay, o porque no has podido dedicarle el suficiente tiempo que necesitas para buscarlas en condiciones.

     -- Durante nuestra parada para desayunar, he intentado localizar algunas hierbas que nos ayuden, espero que mas adelante si tenemos tiempo poder investigar otra vez, mientras tanto indicame compañero Kramghrat, si puedo ayudarte en algo o debemos seguir tus indicaciones, ya que eres el mas ducho de nosotros para localizar nuestro camino...

   -- Comento mientras termino de desayunar y comienzo a empaquetar las cosas para seguir por donde me indiquen.

Escucho los comentarios de Kramghat y sus explicaciones de que dirección y caminos debemos tomar. Es el más intelectual en momentos como estos.
Tienes razón Bodolf, Kramghat es el más idóneo para guiarnos en el camino. Di que posiciones tomamos cada uno y hagámoslo sin sufrir percances.

Escuchaba los pronósicos de Kamghrat y los reducía a las acciones que deberíamos tomar.
Yo también olía el hallazgo. Tendríamos acierto, lo presentía.
Y dispuesto a seguir los planes retomé el camino junto mis compañeros.

Cómo una única persona empezaron la marcha, avanzaban los cuatro pegados al macizo. Kramghrat iba en el centro buscando oquedades, puertas ocultas o salsos cambios de material cambios sutiles de los que solo un naugrim podría darse cuenta usando a veces su martillo para comprobar el grosor de la pared. Delante del grupo marchaba Thorin dispuesto para la guerra y dando buena cuenta de los molestos matojos que pudieran ser un obstáculo para el avance. Bodolf y Rothrim tenían unas posiciones más informales pues su labor era permanecer con los ojos bien abiertos ante posibles emboscadas de aquellos malditos jinetes Cultirith.

Entre todos se orientaban sin mucha posibilidad de perdida con el macizo como guía, así pues en aquella larga jornada harían las primer pasada, de cinco kilómetros arriba para luego recorrer diez hacia abajo. Un buen ritmo, fácil de llevar para los infatigables naugrims.