Partida Rol por web

Por fin parece que Malkar vera cumplido su sueño, la cofradía de La Daga Sangrante le a dado la oportunidad de probar su valía en un ritual de iniciación que de ser superado por el mago prácticamente asegurará su entrada en el selecto grupo de Dagaconjuros.

El joven parece reunir los votos necesarios y no pocos confían en que logrará regresar con su meta cumplida...

Todos los miembros mas prominentes de la Daga Sangrante se encontraban reunidos cuando Malkar partía rumbo a los picos de Trueno en busca de... ¿Como le habían llamado? una extraña gema... Con nada mas que esa parca descripción el aspirante a dagaconjuro había partido ante la mirada escrutadora de sus superiores. Malkar sabia muy bien que de lograr su cometido se convertiría en el mas joven en ser llamado un Dagaconjuro, sin embargo aún así no lograba explicarse el por que de tanta atención hacia su persona, mucho menos cuando el consideraba que había muchos otros miembros mucho mas capaces que habían sido dejados de lado por darle esta oportunidad a él.

Durante los días que tardo en escalar los Picos de Trueno, Malkar medito en muchas ocasiones que haría una vez que lograse entrar en la cofradía, los extensos volúmenes de conocimientos guardados en la biblioteca llenaban su mente de mil y un imágenes increíbles en las que era capas de realizar prodigios que ningún otro pícaro seria capaz.

Malkar había partido justo el día 18 de aquel mes, recordaba haber visto desaparecer los rostros de sus superiores entre las borrascosas nubes de una potente tormenta eléctrica que le obligo a perder todo un día refugiado entre las pequeñas cuevas de la montaña, ahora tres días después por fin alcanzaba la cúspide, emocionado el joven corrió como loco a ver que era lo que le esperaba en aquel solitario lugar.... La emoción paso pronto, una choza si acaso lo suficientemente grande para albergar a una persona era lo único que destacaba entre un par de enormes casadas que caían desde las cumbres y hasta el pequeño valle debajo. Claro desde esa altura era imposible ver el fin de la cascada pero no era necesario, mas abajo se encontraba una ruta comercial muy transitada que atravesaba los picos rumbo a Sembia.

Decepcionado y dado que era la única estructura visible el joven se acerco a la desvencijada puerta de la choza dispuesto a no dejarse decepcionar por tan triste inicio...

La indescriptible emoción, producto de la escalada, parecía ya cosa del pasado.
Sensaciones vertiginosas de haber alcanzado la cumbre se disipaban ante la decrepita imagen que Malkar tenia ante sí.
Los picos del trueno habían sido un noble oponente, sin duda. Un oponente mas digno de respeto y cuidado que el mayor monstruo que el joven haya enfrentado en su vida. Sin embargo, la escena de una deteriorada choza no era lo que uno hubiera esperado como corona de oro al final de su rito de iniciación.

Malkar, girando sobre si mismo para vislumbrar una ves más el imponente espectáculo de las cascadas y de la cordillera que lo rodeaba, apretó sus numerosas cintas de cuero ajustándolas bien fijas al cuerpo y arqueando la columna y rodillas hasta parecerse a un mediano comenzó a acercarse a la construcción dando un rodeo y evitando avanzar a la vista de cualquier abertura que pudiera delatar su intrusión en este virgen lugar.

El joven rodea la construcción intentando examinarle desde todos los ángulos posibles, en mas de una ocasión intenta otear por alguna rendija en el contenido del interior de la humilde choza sin embargo las únicas dos ventanas de la pequeña construcción se encuentran tapiadas. Por otra parte el estruendoso ruido provocado por las cascadas te impiden escuchar nada más.

El joven rodea la construcción intentando examinarle desde todos los ángulos posibles, en mas de una ocasión intenta otear por alguna rendija en el contenido del interior de la humilde choza sin embargo las únicas dos ventanas de la pequeña construcción se encuentran tapiadas. Por otra parte el estruendoso ruido provocado por las cascadas le impiden escuchar nada más.

Viendo que resulta imposible descubrir que oculta la choza en su interior, me acerco a la puerta y sacando un juego de ganzúas comunes me dispongo a abrir la puerta.

El hábil ladronzuelo apenas inicia la manipulación cuando la puerta ya se encuentra abierta, al parecer el cerrojo era igual al que pudiese encontrar cualquiera en una choza semejante...

Aun con una rodilla apoyada en el suelo, guardo con cuidado las ganzúas y permaneciendo en cuclillas abro la puerta.
Una extraña gema...pienso. No encontraré algo así en este lugar...

Una vez que ingresas a la choza tu sorpresa y decepción no hace sino incrementarse, por un segundo llegas incluso a pensar que te haz equivocado de lugar ya que la choza no guarda mas que polvo, telarañas e insectos en su interior, la luz que aún entra por la puerta no deja lugar a dudas. La pequeña choza no tiene mas que una habitación de 10 por 15 pies y en ella nada relevante.

Esto es inaudito...
Me han hecho escalar los Picos del Trueno para nada???

Recorro con cuidado la construcción, a la espera de encontrar alguna sorpresa oculta.
Luego de revisar todo y concluir que no hay nada que pueda hallar en esta choza me acerco a las ventanas tapiadas y las reviso con la intención de verificar si han sido selladas recientemente.

Es extraño este lugar, y aun más raro es que no haya nada, ninguna pista, que me indique porque me han enviado hasta aquí...

Quizás?susurra para si mismo...Malkar comienza a girar, mirando el lugar con una sospecha en su mente...Luego de recorrer la construcción con la mirada, murmura unas arcanas palabras y vuelve a mirar todo más detenidamente

Decepcionado ante la humilde apariencia de la choza estas apunto de retirarte, pero solo por no dejar cabos sueltos utilizas uno de tus conjuros mas simples y comunes (Detectar magia), desesperanzado observas sin esperanza la habitación y para tu sorpresa observas una pequeña aura mágica justo en el centro de la habitación, ante tus ojos comienzan a dibujarse una serie de símbolos arcanos que terminan formando un cuadrado de aproximadamente 5 pies....

Zas! Sabia que algo me habían preparado en este lugar!... pienso en un susurro incluso para mi mente. Me siento tranquilo, alerta sin embargo, pero confiado en que no me han hecho llegar hasta tan lejos solo para demostrar que soy capaz de obedecer una orden sin chistar. Sin embargo, la seguridad de que este lugar ha sido debidamente preparado para mi visita, mantiene mi mente en una constante corriente de paranoia y temor.
Con sumo cuidado me acerco a la trampilla, sabedor de que la magia me ha detectado...;antes de llegar, me concentro unos instantes, tratando de percibir que tipo de aura emite el lugar...confiado en que no hallare ninguna aura de evocación, pero atento sin embargo ante cualquier sorpresa.

Luego de concentrarme unos segundos, me acerco al fin a la trampilla y la examino buscando una forma de abrirla....una forma que no requiera de la palanca de mis dagas.

Después de cerca de 10 minutos de atento estudio el joven mago descubre rápidamente que su tarea no es difícil, lo único que ha de hacer es recitar los versículos reflejados en la trampilla mágica para que esta se abra ante él. Sin mayor dilación y seguro que ha dado en el blanco el joven prospecto inicia la recitación de las palabras arcanas que han de franquearle la entrada a la mágica trampilla, buscando dar la inflexión correcta a cada palabra y silaba toca con sus hábiles manos cada una de las runas que cierran mágicamente la entrada, cuando apenas a concluido con la ultima runa la madera desaparece y deja paso a una larga y oscura escalinata que aguarda a que el joven prospecto se interne en ella...

Luego de revisar todas mis pertenencias, ajustando cada correa para evitar ruidos que me delaten, saco una de mis dos dagas, murmuro un sortilegio, extraigo la otra daga, y comienzo a descender con sumo cuidado.

A cada paso que doy, reviso todo mi alrededor en busca de posibles trampas...un lugar flojo o suelto en el suelo, un hueco en la pared dispuesto a lanzar una saeta contra mi, o cualquier cosa que me inspire desconfianza. Internamente supongo que no corro peligro en este lugar, pero aun así, se que tengo todo el tiempo del mundo dado que muchas horas he invertido en ascender hasta tan alto en la cordillera.

El joven mago avanza cauteloso por la escalinata sin embargo en su precipitación olvida hacer luz en la estrecha escalinata y cuando apenas a avanzado algunos escalones resbala y cae algunos peldaños mas abajo, maldiciendo en su caída el mago se incorpora tan rápido como puede sintiendo una multitud de magulladuras en su cuerpo, corrigiendo su desatención inicial, el joven enciende su antorcha y comienza el descenso a través de la larga escalinata sin encontrar otro obstáculo que la extraordinaria longitud de la escalinata, tanto así que por momento le parece estar descendiendo hasta las entrañas mismas del averno, pero no tarda en recordarse que lo que debe estar haciendo es decender entre las entrañas de los Picos de Prueno, donde haciendo algo de memoria le parece recordar se encuentra lo que hace algún tiempo fue la guarida de un poderoso dragón llamado Sharcrailar, perdido así en sus divagaciones el mago desciende por la escalinata durante lo que le parece una eternidad, la marcha se prolonga de tal modo que el mago se ve en la necesidad de descansar después de lo que le parece un descenso de mas de un día...

Mientras el mago descansa sentado en una de las escalinatas, observa con cuidado el estrecho corredor por el que ha estado descendiendo y le parece que la escalera va prolongándose de forma que su descenso no es vertical sino una especie de espiral....

Sharcrailar...murmura para sus adentros, y el murmuro es tan suave en su mente, tan imperceptible, que incluso a un illicido le costaría trabajo alcanzar a "oír" dicha palabra.
Malkar permanecé casi una hora sentado. Descansa, pero solo una parte de el, ya que sus dos dagas de adamantita una y de meteórico metal la otra, extensiones naturales de su cuerpo, no tienen descanso alguno en las apretadas manos del joven.
Si las dagas no reposan en sus fundas, no se puede afirmar que Malkar este en reposo completamente.

Despues de una hora, el joven se levanta menos exausto. Su mente sin embargo no ha hecho otra cosa que rememorar historias pasadas. Cuentos que hablan de las entrañas de los Picos de Prueno, historias del dragon Sharcrailar, leyendas antiguas como antiguo es incluso su recuerdo.

El joven mago no puede estar seguro del tiempo que a pasado, solo puede estar consciente que a caminado mucho, sus pies comienzan a molestar y por el dolor es evidente que algunas ampollas han ya estallado en ellos dado el ardor en sus yagas, se hace evidente la imposibilidad de continuar dado su cansancio y sin embargo sus ojos no observan otra cosa en el pasillo que la interminable escalinata....

Esto es inaudito, que estaban pensando???! piensa indignado Malkar.
Viendo que no podrá seguir mucho más tiempo sin caer dormido, busca entre sus pertenencias un saco oscuro y comienza a preparar su "campamento"
Ocultando y preparado unos abrojos en las escalinatas, varios metros sobre el lugar escogido, luego sube aun más, unos cuantos metros y repite el proceso...
Por ultimo, realiza la misma tarea pero hacia abajo de su refugio, y diez metros aún más abajo vuelve a realizar la tarea.

Ya conforme con las trampas preparadas, regresa al medio de los cuatro sectores con abrojos, y ocultándose con la capa se prepara para descansar...

El joven mago decide por fin descansar de su periplo, aunque no sin antes tomar sus debidas precauciones. Mientras prepara sus conjuros el mago observa la roca y puede darse cuenta sin demasiado estudio, que la pared del angosto corredor, lo mismo que las escaleras, se encuentran tallados en la mismísima montaña. Por un segundo piensa que un trabajo tan perfecto solo puede haber sido creado por alguna familia muy especial de enanos, sin embargo una extraña sensación permea en el corredor, ya que tanto la pared, como las rocas de las escaleras, como incluso el mismo aire, le parecen imbuidos de propiedades especiales, mágicas diría...