Partida Rol por web

Mei estaba practicante metida entre el motor cuando escucha pasos detrás suyo, no les hace mucho caso porque estaba concentrada cuando se da cuenta de que no iba a poder arreglarlo desde allí, chasquea la lengua y sale encontrando se a Ash que le pregunta si necesita ayuda, Mei tenía sangre en la cabeza aunque no demasiada, como de haberse dado un golpe y haberse hecho un corte, la chica se queda unos segundos pensando y se pone de pie mientras camina hacia donde están las herramientas que va a necesitar y dice:

- Si, me vendría bien ayuda... tengo que salir... algo nos ha golpeado y estropeado los rotores de los propulsores y para arreglarlo tengo que salir...

Mientras hablaba no dejaba de moverse de un lado a otro, coge las herramientas y el traje espacial mientras dice:

- Ayúdame a ponérmelo que me cuesta mucho... y encárgate tu de las compuertas y de informar a la cabina, Qǐng. (Por favor)

Decía mientras se iba colocando las cosas y preparando para salir

La respuesta de Mei hace que asienta mientras la miro a los ojos. Si se que esta sangrando, pero sino se queja es porque no es importante. Porque estrellarse con esta nave de esta forma es morir si o si, asi que cualquier otro tipo de herida es secundaria. Aun asi cuando termina de hablar no puedo quitar mis ojos de encima suya. ¿Quiere salir?¿En serio?¿Esta chica esta loca? - A ver si lo he entendido bien, hay algo jodido fuera y la unica forma de hacerlo es saliendo al exterior. - La miro esperando alguna respuesta antes de continuar.

¿En serio crees poder agarrarte a lo que sea que necesites agarrarte ahi fuera, con la forma en la que esta girando este trasto? - No estoy intentando humillarla pero joder con esos bracitos espera poder aguantar contra este giro loco. Joder montar a un puto toro bravo es mas facil, que subirse sobre esta nave en plena caida a donde coño nos dirijamos. No soy un heroe, ni mucho menos un caballero pero esta tripulacion es... bueno mi tripulacion en cierta forma y joder no pienso dejar salir a esta chica a lo loco. - Si lo que tengas que hacer no es muy dificil yo mismo puedo intentarlo. - Se que mis habilidades no son las suyas pero esto es una situacion chunga, si ella sale volando nos quedamos sin mecanico y palmamos todos... si o si.

Espero a su contestacion si ciertamente, solo ella esta capacitada... pues habra que joderse. Le ayudare a ponerse el traje y tras ello la cogere de los hombros y le mirare a los ojos. - Me da igual lo que pase ahi fuera. Vuelves... si o si... o ire a cualesquiera que sea tu mundo de los muertos y te hare vovler. ¿Queda claro? - Si, no se me da bien expresar ciertas cosas. Espero que haya entendido que tiene que volver. Punto. Joder, por primera vez es casi como si tuviera un grupo de gente con el que sentirme a gusto, una familia quizas... paso de perderlos porque se les vaya la olla. Al unico que se le puede ir es a mi.

El tema de que va a atarse para arreglarlo no lo pillo del todo, pero oye, yo no soy el lumbrearas aqui. Si la ingeniera dice que atandose es la mejor solucion, ella sabra lo que se hace. Aunque lo que es ami me prece mas un suicidio que otra cosa. Aun asi la chica no para ahi y sigue contestando a cada una de mis palabras. Su logica, no tiene sentido para mi, es decir, si ella palma nosotros palmamos tambien. Pero sin duda la idea es clara, hay que apostarlo todo al rojo... el negro es demasiado rollo de luto.

 A tomar por culo, si no hay otra opcion pues hay que jugarsela. No valen faroles. Rapidamente me dirijo al comunicador para decir unas cuantas cosas por el, antes de mirar a Mei y asentir. - Entendido. Me encanrgo de las compuertas. - Ya no hace falta decir mucho mas.

No recuerdo que tuvieras ninguna queja de como chupo, pero tranquila que tu tambien te cansaras de darle a la lengua. - Mis primeras palabras son para contestar las suyas de hace un rato. - Lo de ponerte a cuatro patas y gemir mas tarde, ahora mismo Mei va a salir fuera a encargarse de los rotores. Si, has oido bien. Me encargare de las compuertas. - Ya estaba dicho, la pequeñaja estaba loca. La piloto tenia un polvo del demonio y la muy zorra lo sabia... joder recordar lo de follarmela me habia puesto duro, sobretodo al saber que estaba mojada. Sera perra.

Pero, ¿qué cojones...? Me pregunto al escuchar la explosión en la sala de máquinas. El mensaje de Mirage sólo había confirmado lo que ya había logrado ver por la ventanilla, que nos precipitamos sobre un planeta sin control en la nave. Pero lo que no tengo claro aún es por qué. ¿Acaso hemos sido atacados? ¿O es sencillamente una avería o un impacto con algún meteorito?

Ash se suelta de su sujección y se dirige a la sala de máquinas. - Xiǎo xīn ^{_{[ten cuidado]}} - le digo no sin cierta preocupación. Yo misma suelto el cinturón y me desplazo al otro lado del pasillo, en el giro de la escalera desde donde puedo ver tanto la bodega de carga como el pasillo principal de la Libélula, que va desde el puente de mando a la sala de máquinas. Si esa explosión la ha causado alguien tratando de abordarnos, desde esta posición puedo llegar rápidamente a cualquier sitio.

Vuelvo a colocar el cinturón y compruebo que mi pistola sigue segura en su funda. En otras circunstancias tal vez la cogería, pero no quiero arriesgarme a soltarla si la nave da un nuevo bandazo.

En cuanto pones un pie fuera de la enfermería, todavía agarrándote donde puedes, te paras un segundo a escuchar. No parece que haya nadie por aquí cerca, pero algo te dice que las cosas en la sala de máquinas no van tan bien.  Vas en camino hacia allí cuando al pasar cerca de la cabina oyes las voces del capitán, Melina y Mirage. Se les nota muy alterados, ¿habrá pasado algo más?

 Decido ir primero a la sala de máquinas, para ver si lo que ocurre en ellas es más urgente y se necesita mi atención inmediata. Si luego resulta que no es así, volveré y me acercaré a la cabina, para tratar de averiguar lo que les preocupa tanto a Sebastian, Melina y Mirage...

-Uooo uooo chica. Conten la locura para los momentos mas algidos- Sebastian se pone en los terminales auxiliares dejando paso a Melina para que su ubique a la vera de la piloto. En la cabina empieza a escucharse un tecleo endemoniado mientras el mismo comprueba la situación.

-¡Mierda! ¡Lo que intenta Mei es muy peligroso! Mirage necesito que intentes compensar la aceleración para que le des a Mei una ventana temporal suficiente para recuperar los rotores. Pero sin abusar del giro por que la desorientarás. ¿Podrás hacerlo? ¡Claro que puedes hacerlo!- dice desde detrás de la piloto mientras le suelta un beso en la coronilla.

-Necesito estar allí abajo, si algo sale mal tendremos que rescatarla.

Comunicador. Ash, Mei, voy de camino. Esta fuera de serie va a darte el tiempo que necesitas para hagas un apaño ahí afuera, pero tendrás que ser rápida. No quiero tener que buscar otro mecánico MEI, si la cosa se pone chunga te quiero de vuelta.

Intento ponerme en contacto por comunicador con quien sea. Si no consigo respuesta me voy el puente de mando

Enciendes el comunicador que hay en tu habitación, que da a la cabina del piloto. Escuchas el típico ruido estático al otro lado, y de vez en cuando una voy entrecortada. Parece que los sistemas no están en plena forma. EL bamboleo de la nave sigue, pero parece que no habéis recibido ningún impacto más.

En aquel momento, con la adrenalina, la ansiedad, la completa incomprensión de qué demonios estaba pasando, lo que Melina hizo fue enfadarse. ¿Cómo le hablaba así Mirage? ¿Cómo podían estar ella y Ash discutiendo sobre ponerse a cuatro patas? Las alarmas estaban sonando como locas, y en cambio allí estaban esos dos, charlando tranquilamente sobre darle a la lengua. Aunque a ella le parecía que tenía razones para enfadarse, quizás no era más que un mecanismo para enfrentarse al miedo. De alguna manera funcionó, aunque seguía sintiendo cierto pánico aferrándole el corazón.

- ¡Estáis todos más locos que una cabra! - Sonaba enfadada. Con un movimiento brusco se colocó junto a Mirage y comenzó a inspeccionar los controles -. Como intentes una locura que nos mate a todos… Lo último que vas a ver antes de que nos estrellemos va a ser mi puño rompiéndote la nariz. ¿Qué demonios ha pasado, nos ha dado algo? 

No era la mejor amenaza del mundo, pero Melina en aquel momento no daba para más. Su mirada saltaba de control a control, a los radares  - volvió a mirar los radares una segunda vez -, a Mirage haciendo fuerza para corregir el rumbo. Inmediatamente tomó su lugar y se dispuso a ayudarla para intentar corregir el rumbo.

- Estoy para lo que me mandes. Vamos a salvar esta puta nave, ¿no? - se permitió una risita, que sonó entre nerviosa y sarcástica. De golpe la chaqueta de cuero le pesaba más de lo habitual.

-¡Oooohh vamos chicas!- dice desde detrás Sebastian sin perder ni por un momento su habitual jovialidad. Se acerca entre ambos asientos de las pilotos, con una mano en cada uno de los espaldares mirando avidamente los controles y los sensores estallar en caos.

-Haced que papi este orgulloso de vosotros- guiña un ojo aunque ninguna de las dos podrá verlo y da una palmada a cada uno de los culos de los asientos de las pilotos, demasiado gruesos para que siquiera se inmuten... y no obstante ambas son plenamente consientes de lo que ha hecho.

-En la sala de máquinas me necesitan, tendremos que ingeniárnoslas para devolver a Mei a la nave una vez haya terminado con la reparación- dice dirigiéndose a la puerta -Cuando os de luz verde la nave es toda vuestra para que la recuperéis el control total hasta ese momento... estabilizarla lo mejor que podáis.

Y se dirige afuera, hacia la sala de máquinas.

Pues con mucho cuidado salgo de la habitación y me dirijo al puente de mando. Siempre con el arma lista e intentando ser silencioso

Gritos ahogados se escuhan en casi todas las direcciones, te agarras como puedes a las paredes del pasillo. Tu brazo, con mucha mas fuerza que el de verdad, te permite llegar a la cabina más o menos. Cuando vas a entrar, sale Sebastian corriendo, gritando "estabilizarla como podáis!". Dentro de la sala están Melina y Mirage, intentando controlar la nave.

Llegas corriendo a la sala de máquinas. Huele extraño.. como a metal quemado. Una pequeña niebla enturbia la habitación, pero no tanto como para que no puedas ver qué está pasando dentro. Ash está ayudando a Mei a ponerse el traje necesario para salir al exterior, es bastante pesado y ella sola no puede. Te acercas a ellos, cuando vas a abrir la boca para preguntar que cojones está pasando, ves que Mei tiene un hilillo de sangre que le resbala por un lado de la cara

Llegas corriendo a la sala de máquinas. Huele extraño.. como a metal quemado. Una pequeña niebla enturbia la habitación, pero no tanto como para que no puedas ver qué está pasando dentro. Ash está ayudando a Mei a ponerse el traje necesario para salir al exterior, es bastante pesado y ella sola no puede. Te acercas a ellos, Sebastian entra un segundo después que tú,y ves que Mei tiene un hilillo de sangre que le resbala por un lado de la cara...

Cuando estáis con lo del traje, entran casi simultáneamente Sebastian y Beowulf a la sala. Un desagradable olor a quemado está presente en la habitación, y una sutil neblina hace que todo se enturbie.