Partida Rol por web

Tomas se queda perplejo ante la escena que se dibuja en la habitación. Casi no percibe la aproximación de la hermosa joven, solo una imagen centra su atención. Esos zapatos a salvo de un mar de sangre.

...no puede ser, Jackson no...

Sale de su trance y entra en el cuarto de baño esperando que un milagro haya cambiado el cuerpo de un extraño por el de su viejo amigo.

El barbudo se aproxima hasta el borde de la bañera. Según avanza el ánuglo le va permitiendo ver cada vez mas partes del cuerpo de...

Jackson

Elías.

Numerosas heridas de arma blanca han destrozado su cuerpo. Profundos cortes hechos quizás con machetes han cortado su piel en su pecho, manos (posiblemente trataba de protegerse del filo asesino) y abdomen.

Sus ojos quedan abiertos reflejando una expresión de mied y dolor.

Y en su frente hay otras heridas, pero realizadas con otro filo, posiblemente de menor tamaño. Y no parecen haber acuchillado su frente al azar, sino conformando un extraño símbolo: un semicírculo hecho con dos lineas horizontales, dos oblícuas y una vertical de pequeño tamaño y otros 4 cortes verticales en la base y todo rodeado por un par de medias lunas.

No ha sido una pérdida muy lesiva de cordura. un puntillo cada uno: Marrow queda a 62 y Goldberg a 64

Tomas al descubrir lo que su presagios auguraban se queda paralizado.

...Jackson... ¿pero por qué, quien haría esto, quien y por qué?...

No era el primer cadaver que veía de personas proximas a él. Pero ninguno había sido asesinado de esta forma. Rápidamente sale en dirección hacia la ventana, más por salir de aquella escena dantesca que por encontrar al agresor. Se encarama a ella y busca desesperadamente a alguien o algo relevante.

Por el contrario, Lindsey se queda donde está, apartando la vista de tan dantesca imagen y observando los movimientos de Tomas sin decir nada.

Su rostro palidece aún más.

Dios mío, policía. ¡POLICÍA! dice el conserje apresurándose rápidamente hacia las escaleras y casi chocándose con un par de mirones curiosos que en ese momento se aproximaban hacia la puerta de la habitación, uno de ellos incluso cámara en mano.

La ventana desemboca directamente en una escalera de incendios de hierro fundido, que desemboca en un sucio y oscuro callejón, mal iluminado, que desemboca en la adyacente fashion Avenue.

El callejón se encuentra completamente vacío hasta donde alcanzas a ver desde tu posición, salvo por un par de cubos de basura metálicos.

Tras buscar sin exito al homicida, Tomas se separa de la ventana. Está sudando a pesar del frío que entra desde el exterior.
Cierra la ventana y se sienta en un sillón. Derrotado, cubre su rostro con sus manos.

-Jackson...

Lindsey vislumbra de reojo a sus compañeros, y se gira ante estos sobrecogida, con un notable temblor en sus ojos. Su cuerpo, contradiciendo a su mirada, permanece impasible y quieto.

Paul lee la tragedia en los ojos de Lindsey, aunque se siente alarmado hay una cierta satisfacción al saber que su compañera está bien. El gordo anticuario vestido con un traje de pana oscuro, camisa blanca almidonada y corbata negra, entra en la habitación mirando alrededor para ver que ha sucedido.

¿Están todos bien?

Tomas retira sus manos de la cara y dice:

-Jackson no está bien, pero juro que el que le hizo esto estará peor.-Su promesa de venganza es solo formulada a causa de su dolor, el nunca sería capaz de semejante atrocidad. Al fijarse en los dos individuos pregunta.-¿Quienes son ustedes, le conocían?

Lindsey reacciona, y se adelanta - Elías era un buen amigo y compañero

Su mano, que baja desde la boca hasta el cuello, se queda allí, en una pose femenina. Cruza el umbral del crimen sin volver a mirar, con rapidez, y se sienta desplomada en la esquina de la cama.

Paul observa de arriba abajo al hombre barbudo, luego a Lindsey y por un momento trata de ver el interior del aseo, vencido por el morbo de ver al tal Elías, muerto.

Mi nombre es Paul Bauberg y este es el Jean-Philippe Vinacci. Somos amigos de la Srta. Marrow.

El anticuario deja unos segundos para que el hombre asimile que están con la mujer.

Sigo sin entender que ha ocurrido, ¿puedo ayudar en algo?

Ese vistazo rápido desde el umbral no te deja ver mas que un rastro de sangre en el baño. Y en el borde de la bañera hay unos zapatos. Unidos a unas piernas que se pierden en el inerior de la bañera ocultando la visión del resto del cuerpo de vuestra mirada. Y sangre, más sangre. Sangre... fresca.

Vinnacci, un tipo de estatura mediana, constitución delgada, calvo y vestido de traje con una estupenda cámara al cuello saluda al hombre que se encuentra en la habitación con un leve gesto de su cabeza. Su rictus es serio, parece que su cabeza va a cien por hora.

Que diablos ha pasado aquí? - Dice mientras se acerca a Lindsey para transmitirle su ánimo depositando su mano en el hombro de la señorita - Lo siento Lindsey, llegaremos al fondo de esto.

Una vez dicho esto toma su cámara y empieza a encaminarse hacia el cuarto de baño. Sus intenciones son claras a ojos de los demás.

Un vistazo rápido desde el umbral no te deja ver mas que un rastro de sangre en el baño. Y en el borde de la bañera hay unos zapatos. Unidos a unas piernas que se pierden en el inerior de la bañera ocultando la visión del resto del cuerpo de vuestra mirada. Y sangre, más sangre. Sangre... fresca.

Según te vas aproximando hacia la bañera, mas partes del cuerpo de ¿JacksonElías, posiblemente? se van haciendo visibles.

Numerosas heridas de arma blanca han destrozado su cuerpo. Profundos cortes hechos quizás con machetes han cortado su piel en su pecho, manos (posiblemente trataba de protegerse del filo asesino) y abdomen.

Sus ojos quedan abiertos reflejando una expresión de miedo y dolor.

Y en su frente hay otras heridas, pero realizadas con otro filo, posiblemente de menor tamaño. Y no parecen haber acuchillado su frente al azar, sino conformando un extraño símbolo: un semicírculo hecho con dos lineas horizontales, dos oblícuas y una vertical de pequeño tamaño y otros 4 cortes verticales en la base y todo rodeado por un par de medias lunas.

Vinnacci se lleva las manos a la boca para no vomitar, realmente no esperaba esta carnicería.... Se apoya contra la pared del cuarto de baño, sin apartar la vista del cadaver.

En que diablos andaría metido el señor Elías para terminar así? Obviamente esto no es un robo, la habitación no parecía alborotada ni nada por el estilo, y esos símbolos grabados en su frente... Dos medias lunas, Egipto, la mente del fotógrafo no para de relacionar cosas sin sentido hasta que un ruido en la habitación contigua le saca de su asombro y le devuelve a la realidad

Jean Paul toma su cámara y empieza a fotografíar el cadaver con la esperanza de vender las instantáneas a un periódico local y así sacar algo de dinero extra.

Que significarán los símbolos? Igual Bauberg sabe algo...

Bauberg camina un par de pasos por detrás del fotógrafo, entrando en la habitación atestada de gente. El hedor dulzón de la sangre penetra en las fosas nasales del anticuario, que no puede reprimir una mueca de asco.

Según te vas aproximando hacia la bañera, mas partes del cuerpo de ¿JacksonElías, posiblemente? se van haciendo visibles.

Numerosas heridas de arma blanca han destrozado su cuerpo. Profundos cortes hechos quizás con machetes han cortado su piel en su pecho, manos (posiblemente trataba de protegerse del filo asesino) y abdomen.

Sus ojos quedan abiertos reflejando una expresión de miedo y dolor.

Y en su frente hay otras heridas, pero realizadas con otro filo, posiblemente de menor tamaño. Y no parecen haber acuchillado su frente al azar, sino conformando un extraño símbolo: un semicírculo hecho con dos lineas horizontales, dos oblícuas y una vertical de pequeño tamaño y otros 4 cortes verticales en la base y todo rodeado por un par de medias lunas.